Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Can I be happy? por Neko Emilya

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Primeramente el aclarar que esta es una version nuev y mejorada de Nothing is Impossible, (para aquellas que leyeron el fic y que me mandaron reviews). y pues declarar que este seria mi primer fic sin considerar Nothing is Impossible, pues este a sido eliminado.

Notas del capitulo:

Todos los personajes de Naruto no me pertenecen, son del gran Masashi Kishimoto-sensei.

Oo.oOo.oOo.oOo.oO


En el gran mundo ninja existen cinco países, dentro de cada país se encontraban las distintas aldeas, cada una con muy capaces ninjas, pero siempre en cada país hay una más fuerte que las otras y que tomaba el control de las demás.


El país del fuego era muy reconocido por el poder que tenía y por los muy capaces ciudadanos que protegían su hogar. Este país contaba con un extenso grupo de shinobis, que se clasificaban por niveles, empezando de los principiantes, los que salían de la academia, conocidos como gennin. Seguido de los chounnin y jounnin hasta llegar a la clasificación AMBU, cada grupo poderoso a su manera.


La aldea oculta entre las hojas era una de estas. A la aldea llegaban distintas peticiones, desde cuidar perros o limpiar una casa hasta pelear contra bandas criminales muy poderosas. Estos trabajos se clasificaban depende a la capacidad de lucha, estrategia de los equipos y de los niveles correspondientes.


Pero, a pesar de mantener aquella tranquilidad, la aldea de Konoha había tunido sus disturbios como cualquier otra. Su mayor conflicto fue el ataque del más poderoso de  los bijuus, el demonio conocido como Kyuubi el cual atacó sin razón aparente destruyendo una gran parte de la aldea, muchas personas murieron ese día y la pérdida más grande fue de una de las personas que más respetaban.


El cuarto hokage fue una persona muy reconocida y querida por todos, un líder nato; su amabilidad y buenas acciones lo hicieron merecedor de toda la admiración de su gente. El día del ataque, después de mucho esfuerzo, sello al zorro de las nueve colas dentro de un bebe recién nacido y que había quedado huérfano, gastó todo su chakra para sellar al Kyuubi; aquel día terminó muriendo como el héroe que todos conocían. Pero los aldeanos nunca quisieron saber del niño que había servido de contenedor para el demonio, en vez de tratarlo como un héroe por mantener el zorro encerrado en su interior, fue repudiado de su gente, pues para todos los demás, él era el zorro de las nueve colas, él era el mismísimo demonio.


El niño creció cargando en sus hombros el odio de todos los ciudadanos y cuando cumplió cinco años le otorgaron un pequeño apartamento para que viviese, cortesía del tercer hokage: Sarutobi. Nadie se hizo cargo de él, nadie se preocupó por él a nadie le interesaba siquiera el conocerlo. Aquel niño que creció entre el odio de todos era un completo ángel que no entendía él porque del desprecio de los demás y factura pagaba su pobre cuerpo y esa piel acanelada pues cada día se marcaba con una nueva cicatriz causada por piedrazos y golpes de todos, su rubia cabellera siempre terminaba sucia o con sangre y sus ojos tan azules iban perdiendo su brillo. Ese niño era Naruto Uzumaki, oficialmente alguien desamparado, sin embargo todo eso puede cambiar.


Oo.oOo.oOo.oOo.oO


Era un día tranquilo en Konoha, ya era de mañana y los vendedores comenzaban a poner sus tiendas y comenzar su nuevo día, poco a poco la gente comenzó a aparecer para realizar las compras, los niños corriendo de un lado para el otro las madres persiguiendo a sus hijos para que no hagan daño o mirando enternecidas a sus hijos, los vendedores sonreían amablemente a la gente para que esta les comprasen algo, si, ese día procuraba ser bueno para todo el mundo, claro hasta que se comenzaron a quedar parados viendo a una figura en general. Aquella silueta solo podía pertenecerle a alguien, aunque muchos quisieron ignorarlo y pasar de largo optaron por otra alternativa: simplemente se quedaron parados observando aquella figura sin hacer absolutamente nada. Tirado en el piso se encontraba aquel niño rubio, al que todos consideraban un demonio, no era ni más ni menos que Naruto Uzumaki, el niño se encontraba boca abajo reposando en un charco de sangre, todos pensaron que era una jugarreta de aquel niño, una jugarreta de las tantas que hacía para llamar la atención. Sin embargo se dieron cuenta de  su error, el niño mostraba su pierna izquierda muy hinchada y amoratada, “una fractura” pensó la mayoría; su ropa estaba en su mayoría rota y con pequeñas gotas de sangre y se quedaron aún más impactados al ver como lentamente el niño se paraba, su mirada estaba totalmente opaca, y en un costado tenía un kunai enterrado, muy a pesar de ver esto nadie corrió a auxiliarle, todos se quedaron impactados y comenzaron las miradas de lastima.


Naruto a duras penas logro ponerse de pie y quitarse el kunai, cuando hizo aquello todos los que le miraban le dirigieron una mirada de miedo, “Ni que los fuese a atacar” pensó el niño. Lentamente comenzó la marcha a pesar de todas las miradas clavadas en su figura, pero termino trastabillando, por suerte logró agarrarse a un muro de una tienda, mas el vendedor no parecía contento con esto y temeroso cogió una piedra y duramente se la arrojó al niño. El rubio inmediatamente sintió el dolor en la parte posterior de su cabeza, temblorosamente llevó una de sus manos a su cabeza pues sentía un líquido caliente caer, sus sospechas fueron acertadas, aquel golpe le había causado una nueva herida, ya un poco cansado de esto, sin importarle el dolor de su cuerpo, corrió como pudo y a todo lo que sus pequeñas piernas le permitían, estuvo a punto de caer varias veces. Naruto termino escondiéndose en un callejón y al cabo de un rato término cayendo dormido sin saber que todo aquello había sido visto por dos pares de ojos ónix muy preocupados.


Los colores del atardecer ya se habían acentuado, la mayoría regresaba a sus casas después de un día espléndido, claro, espléndido para ellos más no para aquel niño rubio. A pesar de estar dormido, el dolor, tanto físico como emocional, lo atormentaba en sus sueños. Naruto nunca había hecho algo tan malo como para que todos los aldeanos lo odiaran a morir, la noche anterior el solo quería estar solo, y ese había sido su error.


FLASH BACK


Un niño rubio se encontraba muy cansado, había corrido por las calles para encontrar su apartamento más al ser un niño de cinco años y no poder recordar muy bien las cosas, se le hacía sumamente difícil el no perderse. Siguió corriendo por horas y aún seguía perdido, estaba cada vez más lejos del centro y ya era muy de noche. Al doblar una calle se encontró con unos niños mayores que él, al parecer eran niños de la academia, se acercó lentamente puesto que parecía que tramaban algo malo, pero Naruto no contó con que lo notaran tan rápidamente y que lo atacaran, intento correr pero uno de ellos lo agarró por su delgada pierna y lo jaló hacia ellos, siguió en su intento de huir pero uno de los niños se le ocurrió una idea para que no huyera


-Si le rompemos las piernas no huira.


Esas palabras cambiaron todo, eran seis de ellos no podría evitar que le hiciesen eso. Negó fuertemente, Naruto ese día rogó, rogó para que no le hiciesen daño y, a la vez, se dio cuenta de quienes eran los verdaderos demonios en ese momento. Cada uno de ellos agarró una extremidad, los dos que quedaban se miraron cómplices, entonces uno de ellos se agacho buscando algo para luego pasárselo al otro niño, luego a paso tranquilo el último de los niños se posiciono encima de Naruto y el rubio pudo ver como en las manos del niño había una piedra de considerable tamaño, “Tengo miedo” fue lo único que llegó a pensar puesto que la voz del niño lo distrajo y, aquellas las palabras le atormentaron aún más.


-Me das lastima, pequeña escoria, ¿sabes?, lo único que hacíamos aquí era esperar a alguien para jugar, más específicamente te esperábamos, dentro de poco nos graduaremos de la academia y queríamos experimentar un poco de todo, te seguimos durante unas cuantas horas hasta que llegaste aquí, a nadie le importará si te dañamos un poco ¿verdad, chicos?- Naruto no pudo evitar sentir mucho miedo, puesto que todos ellos reían de manera macabra, a él no le parecía gracioso, el último de los niños le amarró un pedazo de tela en su boca y comenzó la tortura. El rubio vio en cámara lenta como es que, el niño castaño frente a él, levantaba la piedra y con toda su fuerza la dejaba caer en una de sus piernecitas, inmediatamente sintió el dolor carcomerlo, el mismo proceso fue repetido un infinidad de veces hasta que pudieron escuchar el tronar de un hueso, todos sus gritos fueron acallados por aquel pedazo de tela, de aquellos pedazos de cielo empezaron a caer gotas salinas. Naruto a pesar de sus tiernos cinco años experimentaba por primera vez un dolor tan fuerte como ese. Tomando valor y mucha fuerza se deshizo de aquellos niños y empezó a correr, pero una de sus piernas no se encontraba en el mejor estado, aparte el dolor era inmenso y fue rápidamente capturado por uno de ellos, luego de eso solo recuerda mucho dolor, le empezaron a golpear por todo su cuerpo en su piel se deslumbraba millones de nuevos cortes y muchos golpes que dejarían moretones, su ropa estaba destrozada. Por ultimo le dejaron ir, fue un simple “Ya no es divertido, mejor lárgate”, de verdad, Naruto pensó que ya habían terminado, pero uno de ellos se apareció rápidamente enfrente suyo y le clavó un kunai.


- No te atrevas a contárselo a nadie, si no quieres que lo que pasó hoy se repita.- después de eso sus ojos fueron cerrándose de a poco hasta caer en la inconciencia.


FIN FLASH BACK


Oo.oOo.oOo.oOo.oO


El clan Uchiha es uno de los clanes más poderosos de Konoha, poseen el Sharingan, una poderosa herencia genética. El cabeza de este clan se llama Fugaku Uchiha, persona de carácter fuerte y de demostrar muy poco sus emociones; tiene como esposa a Mikoto Uchiha, una mujer hermosa dedicada al hogar. Este matrimonio tuvo sus frutos, uno de ellos Itachi Uchiha, orgullo de sus padres, este chico tiene 12, de cabello largo atado en una cola baja, de rostro fino en donde se puede observar unas ojeras que lleva desde pequeño, de carácter maduro y dedicado a su hermano; por otra parte esta Sasuke Uchiha  de cinco años, un niño adorable y deseoso del cariño de sus padres que quiere ser igual a su hermano mayor, de cabello corto que desafiaba a la gravedad y de piel lechosa. Una característica de esta familia, por no decir de la mayoría del clan,  era que todos ellos poseían su cabello color azabache y ojos tan negros y profundos como la noche más oscura.


En ese preciso momento ambos hermanos se encontraban paseando tranquilamente por las calles de Konoha mientras que la mayoría de los aldeanos se les quedaban viendo, todos sabían quiénes eran, del mayor se esperaba grandes cosas puesto que, se rumoreaba, era el mejor de su generación. Por otra parte se esperaba lo mismo o incluso más del pequeño Sasuke. Ambos azabaches iban caminando muy tranquilamente, el menor tomando la mano de mayor, hasta que, en una calle, se encontraba mucha gente viendo un punto en específico, Sasuke que era mucho más pequeño que su hermano no podía ver nada por lo que le pidió a su hermano que le alzara para poder ver. Cuando Itachi lo hizo Sasuke pudo ver claramente todo y sus ojos se llenaron de preocupación. Itachi se encontraba un poco confundido por la actitud de su hermanito, pues este, al momento de ver lo que pasaba, se le borro la sonrisa  y le pidió que lo bajara.


-¿Qué es lo que pasó, pequeño?- le pregunto a su hermano tratando de que sonriese, pero al escuchar lo que su hermano vio se le borró aquella sonrisa, se levantó rápidamente jalando a su hermano para ver que habría ocurrido ahora, pero lo único que pudo ver fue a un niño de la edad de Sasuke tratar de correr desesperadamente mientras lagrimas se juntaban en sus ojos, quiso seguirlo pero la multitud se dispersó y siguió haciendo sus cosas como si nada hubiera pasado, ese hecho le enfureció, Itachi conocía a ese niño, era el niño del que todos hablaban, era el niño que poseía al zorro de las nueve colas. Cuando la multitud terminó por dispersarse tomo la mano de su pequeño hermano  y emprendió marcha, tenía que  buscar al niño, pues, si lo que Sasuke le había dicho era verdad, significaba que el menor estaba muy mal herido.


Toda la mañana lo buscaron pero no lo encontraban, Itachi y Sasuke buscaron desesperadamente por todos lados pero no encontraban al niño, un poco cansados,  viendo que poco a poco el cielo oscurecía dando pasó a la noche decidieron rendirse, pero cuando pasaban por un callejón pudieron ver un pequeño bulto. Itachi le indicó a su hermano que se quedase detrás de él, por si lo que encontraran fuese una amenaza para el pequeño, pero cuando ambos se hubieron internado totalmente al callejón, encontraron al niño que estaban buscando, ambos se quedaron sin aire al verlo de cerca, puesto que Naruto era muy lindo, de cabello rubio como el sol, piel canela, rostro fino y tres delicadas marquitas en sus mejillas que lo hacían parecer un pequeño kitsune.


Itachi, saliendo de su aturdimiento, se acercó rápidamente al niño, habían pasado horas buscándolo para revisarlo, así que no se echaría para atrás. Levantó delicadamente el cuerpo del niño. El mayor sabía que no podían dejarlo en ese sucio lugar, tenían que llevarlo a un lugar limpio para sanarle, pero no había lugares seguros para el niño, al ser repudiado por toda la gente, nadie querría prestarles su ayuda, pero, había un lugar al que podían llevarlo el problema era que tenían que ser muy discretos. Miro decididamente a su hermano menor, él sabía que Sasuke entendería y le ayudaría.


-Sasuke, por el momento no podemos tenerlo en este lugar, tenemos que llevarlo a un lugar seguro y limpio para sanarlo. Tenemos que llevarlo a casa- dijo seriamente el mayor, Sasuke sabía que su hermano hablaba muy en serio puesto que le había llamado de su nombre cuando siempre le decía ototo.


-Pero, no creo que padre nos lo permita.- Itachi sabía muy bien eso, ambos lo sabían, pero era necesario. Crearon un plan. Lo llevarían directamente al barrio Uchiha y evitarían la mirada chismosa de sus tíos para que Itachi inmediatamente metiera el cuerpo del rubio por la ventana de su habitación de mayor y regresaría a la entrada de su casa para entrar junto a Sasuke.


Los dos hermanos se miraron con determinación, antes de salir de aquel callejón, Itachi decidió que lo mejor era realizar una ilusión, cuando salieron del callejón nadie se dio cuenta del niño rubio que descansaba en la espalda del Uchiha mayor, siguieron caminando tranquilamente hasta que llegaron a las puerta del clan Uchiha, tomaron un respiro hondo, si les descubrían estarían muertos, avanzaron rápidamente entre las calles y saludaron a algunos miembros del clan hasta llegar a su casa, Itachi creo una ilusión más poderosa para que todos vieran que habían entrado a su casa y lo más veloz que pudo entró a su habitación por una de las ventanas y depositó al rubio en su cama para luego taparlo con sus sabanas azul oscuro de seda, acomodo uno de los mechones del menor para luego saltar por la ventana y volver al lado de su hermanito, entraron a su casa y educadamente saludaron a sus padres.

Notas finales:

Bueno hasta aqui el primer capitulo, espero que fuese de su agrado y pues acepto comentarios, consejos,sugerencias, entre otros :D


Aqui una frase:


Lo mas importante nunca se ve...


(El Pricipito)


 


Besos,


Neko Emilya


 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).