_Bardock... Llego otra carta_
Desde el otro lado de la puerta de mi habitacion, podia escuchar el leve sonido de unos cortos y fragiles sollozos, los cuales no tenia que ser adivino para saber a quien le pertenecian. Con el simple hecho de escuchar a mi madre llorar, sentia la necesidad de correr hasta donde estaba ella y abrazarla, para poder calmarla aunque fuese un poco. Sin embargo, no podia hacer nada para intentar acercarme, ni siquiera podia moverme de donde estaba, quedandome quieto, sin poder hacer algo al respecto. Porque yo lo sabia. Mi madre estaba sufriendo por mi culpa.
_No hay de otra, Gine_La voz siempre firme e inmutable de mi padre llego hasta mis oidos, erizando mi piel ante cada palabra que salia de sus labios. _No podemos hacer nada, no importa cuanto tratemos de esconderlo, ellos lo encontraran tarde o temprano, debemos de ceder por esta vez_
El llanto que, de pronto, habia llenado la habitacion, se vio interrumpido por leves susurros. Susurros que llegaban hasta mis oidos, logrando captar lo que decia mi madre. No era mucho lo que salia de su debil garganta, solo eran disculpas y mi nombre, el cual era dicho con tanto dolor y sufrimiento que, incluso yo, sentia como iba a romper en llanto en poco tiempo.
_Mi Goku... Mi pobre Goku_Desde el pequeño espacio que se habia formado entre mi perta y el marco de esta misma, pude ver como mi padre abrazaba a mi madre con fuerza, acariciando su espalda y su cabello con cariño. Un gesto demasiado raro de ver en alguien tan frio como mi progenitor. Ese asunto debia ser de suma importancia, o al menos eso pense al verlos abrazarse mutuamente con fuerza. Al mismo tiempo que de las manos de mi madre, una delgada hoja de papel, caia directamente al suelo. Quise ver que decia, pero lo unico que lograba ver desde mi posicion, eran unas letras recalcadas en tinta roja y un logo que, seguramente, debia pertenecer a una institucion...
_No te preocupes, cariño... Todo va a estar bien_Vi como se separaban, solo para poder observarse a los ojos detenidamente. _Ya hemos mandado ahi a sus otros hermanos, y nunca ha pasado algo peor, ¿Cierto?_Con su mano acaricio la mejilla de mi madre. Y, ella, solo respondio a eso con su cabeza agachada, asintiendo levemente con esta misma, para despues aferrarse a las ropas de mi padre.
Escuchar lo ultimo me habia desconcertado de sobre manera. ¿Otros hermanos? Yo nunca habia tenido otros hermanos, ademas de mi hermanito menor Goten... A caso, ¿Mis padres me estaban ocultando algo mas? Esa simple duda hacia que sintiera mi corazon dolido. El pensar que mis padres no me tenian la confianza suficiente para contarme todo lo que estaba pasando, me dolia. Me hacia sentir debil, inutil, patetico, inservible... Simplemente me hacia sentir como un torpe pedazo de algo que no se podia calificar como "humano". Cerre mis ojos con fuerza, al mismo tiempo que cerraba mi puerta, en la cual me recargue, undiendo mi rostro entre mis rodillas, mientras trataba de impedir que el creciente llanto de mi madre me afectara mas...
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_¡Te rompere todos tus inutiles huesos con mis propias manos, maldito idiota!_Las tipicas frases que utilizaban para provocarme me parecian estupidas. Ni siquiera llegaban a irritarme un poco. Lo unico que de verdad me aturdia, eran los fuertes gritos "provocativos" de quienes nos estaban rodeando. Solo eran un monton de adolescentes sin cerebro que adoraban las peleas... Bueno, al menos algo de parecido tenian conmigo.
La posicion de pelea de aquel tipo imbecil me daba gracia. Podria derrumbarlo en un abrir y cerrar de ojos, y terminar tirandole algunos dientes con el puño cerrado. Muy sencillo. Sin embargo, habia un pequeño detalle que al parecer todos los presentes habian olvidado por completo; Seguiamos en la escuela. En cualquier momento, alguna autoridad o maestro nos podria llamar la atencion, y con eso vendria un fuerte castigo que seria acompañado de palabras hirientes a nuestra persona. Y, siendo franco, yo ya no tenia ganas de recibir otra llamada de atencion, ni mucho menos de desepcionar aun mas a mis padres, quienes seguramente ya tenia suficiente de mi. Si, la unica razon que tenia para esconder mis manos en el bolsillo de mi chamarra naranja eran ellos. Baje la cabeza, en un gesto de rechazo hacia los pateticos insultos que venian dirigidos hacia mi, y me dispuse a irme de ahi. No valia la pena, y lo sabia muy bien. Despues de todo, no ganaria nada, solo derrotaria a otro tonto mas y mis padres me mirarian con desaprovacion...
_¡Oye, vuelve aqui bastardo y pelea si tantos huevos tienes!_Lo escuche gritar con coraje a mis espaldas, su tono estaba bañado en coraje, y sus palabras estaban siendo abrazadas por una capa venenosa de enojo. En ese estado tan colerico le seria imposible siquiera poder darme un buen golpe, no le favorecia en nada. Lo ignore y continue caminando. Mientras intentaba mantener mis ojos fuera del camino lleno de chicos y chicas que solo me llamaban con mas insultos, con los cuales buscaban llenarme de motivacion. Sin embargo, mi atencion que solo se la daba al suelo donde estaba pisando, fue desviada con violencia, por un fuerte golpe que no logre siquiera esquivar, y que me habia derrumbado sin dificultad. El sabor metalico de la sangre que escurria por mi nariz fue a dar a mi boca, la escupi, aunque fue mas un simple reflejo que un acto de asco. El gustar la sangre era a algo a lo que me habia acostumbrado, asi que saborear un poco de ella no me haria daño. Pero, por desgracia, no pude continuar degustando del poco agradable sabor de mi derrota, cuando una mano se aferro a mi chamarra y jalando de ella me levanto con violencia. Cuando mi vista se levanto, no me sorprendi de ver unos ojos molestos mirandome con coraje. El agarre se mantenia fuerte sobre mi pecho. _Escuchame muy bien, Son, no me importa si eres alguien fuerte y si todo el mundo te tiene miedo por tus habilidades a la hora de pelear_Escupio con veneno aquellas palabras sobre mi rostro. _Eso no te da derecho a intentar ganarte a MI novia_Y, dicho esto, termino la distancia que habia entre su puño y mi rostro...
Todos estaban completamente seguros de que el me habia roto la cara con aquel fuerte impacto. Pero, y con el perdon de quienes habian ido ahi con el unico proposito de verme perder, yo logre tomar su mano con la mia, evitando que esta me terminara de romper la nariz. Seguramente el tipo se habia sorprendido, pues sus ojos se abrieron como platos al ver como habia detenido su ataque. Aprete los labios, regresandole una mirada amenazadora, mientras recordaba sus estupidas palabras. _Yo no hice tal cosa con tu novia, imbecil_Hable, con el tono mas frio que mi garganta podia hacer. _Lo unico que si hice con ella, fue darle un apoyo, escucharla cuando tu te comportabas como todo un patan con otras chicas_Mi coraje incrementaba, al mismo tiempo que sentia correr por todo mi cuerpo una especie de adrenalina que hacia ir mas rapido mi corazon... _Yo le di respeto, y fui un buen amigo con ella_Sentia mi alrededor brillar, mientras que el silencio era roto por el unico sonido que parecia provenir de mi cuerpo. Todos nos miraban espantados, o mas bien, a mi me miraban espantados. Ignore ese pequeño detalle, no me importaba si me tenian miedo. Lo acerque a mi rostro, mirandolo directamente a los ojos, notando lo aterrado que se encontraba... Fue entonces que me detuve. Lo solte y deje que cayera de lleno contra el suelo, apartandose rapidamente apenas habia tocado la fria superficie del pavimento. Volvi a guardar mis manos en mis bolsillos. La energia que habia adquirido se habia ido, y yo regresaba a mi modo tranquilo y para nada conflictivo. Suspire, para despues darle la espalda y continuar caminando. Quiza en momento asi es cuando deberia decir alguna frase genial o advertirle que me dejara en paz. Pero no esperaba nada de personas como el, sabia que si decia algo amenazante solo lo estaria motivando a que continuara siendo un idiota e intentara enfrentarme de nuevo. Por eso, lo mejor que podia hacer, era retirarme de ahi lo antes posible.
Y eso hice. Muchos me llamarian cobarde por huir antes de terminar la pelea, pero a mi me daba exactamente lo mismo lo que ellos pensaran o dijeran de mi. Si me ganaba enemigos, amigos, admiradores, etc, me daba igual. Las unicas personas que, creia yo, valian la pena eran aquellas que siquiera se tomaban la pequeña molestia de conocerme mejor. Por eso ni siquiera preste atencion a los insultos que me estaban gritando enojados algunos de los cabezas huecas que ahi se encontraban. Solo bufe algo estresado, ya me estaban hartando las multiples situaciones que se parecian en demasia a la que acababa de suceder hace tan solo unos minutos atras. No valian la pena recordarlas, por eso ni me esforzaba por recordarlas el resto de mi dia. Claro, no valian la pena, de eso estaba seguro. Por eso, colocaba mi completa atencion en lo primero que se me cruzara en frente, que en este caso habia sido una bonita nuve esponjosa que se encontraba cubriendo el sol. Me detuve unos segundos a contemplarla como un completo estupido sin razonamiento. Incluso yo me creia un demente al disfrutar de observar cosas como aquella nuve. Sonrei para mi mismo, sintiendome avergonzado de mis propios gustos tontos y sencillos.
Simplemente ignore el hecho de que yo era un demente y continue caminando. Ya era hora de ir a casa, tenia ganas de jugar un poco con Goten y de poder ver como nuestros padres se reian de nosotros por cada tonteria que haciamos, solo para despues ser llamadas, con clara burla, por nuestro padre: "Par de bebes". Un gesto bastante gracioso, considerando que yo ya era un "adolescente responsable". O si, una tarde que seguramente habria sido perfecta... Pero, si tan siquiera hubiera alcanzado a llegar al otro lado de la calle, quiza mis planes seguirian de pie, pero una mano, la cual llevaba consigo algo humedo, me detuvo de manera violenta. Alguien me habia metido un fuerte manotazo en la boca, y no conforme con eso, ni con la cosa humeda, que pronto comprendi que era un trapo, el cual cubria mi nariz y boca, me dieron otro golpe en mis piernas, haciendo que perdiera total equilibrio de mi cuerpo y que este terminara estampandose contra el suelo. _¿Son Kakarotto?_Una tetrica y gruesa voz de hombre habia resonado en mis oidos. Alguien estaba preguntando por mi. Y, aunque yo tuviese la respuesta que buscaban, ya no podia siquiera abrir la boca, mis manos se habian aferrado al pavimento que se hallaba debajo de mi, arañandolo, dejando una larga marca de uñas por lo fuerte que las habia encajado. Algo que me dio gracia y me hizo pensar que, efectivamente, era un animal.
Sin embargo, no tuve tiempo de poder reirme de mi mismo en ese momento, pues mi cerebro se estaba quedando dormido. Sentia como mis parpados ya no me estaban haciendo ni un poco de caso, solamente se abrian de momentos y se cerraban durante largos periodos de tiempo, provocando que sintiera como si todo pasara en camara super lenta. Ya estaba completamente drogado, y estaba siendo llevado en contra de mi voluntad hacia lo que parecia era una larga y muy lujosa camioneta de tonos negros y grises. "Ah, s aun pudiera gritar, lo haria" Incluso dentro de mis pensamientos se escuchaba un tono arrastrado e incoherente. Abri uno de mis ojos y, agradeciendo el que no me pusieran alguna venda que me impidiera ver lo que pasaba, pude notar que en el interior del vehiculo, se encontraban 3 hombres, elegantemente vestidos y, a mi parecer, lo bastante fuertes como para matarme en caso de que les causara problemas de algun tipo. Pelear no era lo conveniente, eso estaba mas que claro, pero entonces, ¿Que debia hacer?. Me lo pregunte durante un buen rato, hasta que una cruel y desesperada respuesta llego a mi en forma del mismo trapo humedo que hace tan solo unos minutos atras me habian restregado en el rostro.
_No te preocupes, nosotros no te haremos ningun daño_Escuche muy apenas una fina y para nada gruesa voz de hombre, que me hablaba en un tono calmado, al mismo tiempo que una mano se abria paso por mi cabello, acariciandolo suavemente, relajandome poco a poco, terminando de dormirme por completo. Lo ultimo que mis oidos alcanzaron a detectar, fueron unas distorcionadas palabras que me causaron una especie de escalofrio. _Es tan tierno..._
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El como habia terminado en aquella camioneta, me parecia una historia comica que contaria a mis padres en cuanto llegara a casa... Aunque, para mi desgracia, esta "pequeña historia para hacer reir" tendria que esperar para poder ser contada a alguien mas.
Las horas habian pasado increiblemente rapido, o eso sentia yo. Porque, en un abrir y cerrar de ojo (Literalmente) El sol se encontraba en lo mas alto, y todo a mi alrededor me estaba indicando que ya era de mañana. ¿Habria dormido solo un par de horas o dias completos? No estaba seguro, solo podia sentir mi cuerpo pesado y mi estomago vacio. "Ahora que lo pienso, no he comido nada en todo el dia" Pense de la nada, mientras mi mirada se perdia en el cielo. Ese bonito pedazo gigante de color azul brillante, decorado por unas cuantas nubes blancas, de algun modo me calmaba. Tambien el leve sonido que creaba la brisa al mover con delicadeza las grandes hojas de los arboles que me rodeaban... Incluso el ruido de las olas era gratificante... Y el olor del mar...
_¡¿Donde diablos estoy?!_De un solo brinco me puse de pie. Observando, alterado, a mi alrededor, notando una espesa capa de selva en donde reinaba el color verde, y al otro lado, el mar, tan grande y con ese hermoso tono de azul cristalino. Aunque, no me detuve a apreciar la belleza del paisaje, aunque queria hacerlo. Sacudi un poco mi ropa. Estaba lleno de arena, incluso tenia un poco en el cabello y en mi rostro. _Ok... Supongo que no podre pedir un taxi e irme a mi hogar_Vaya, incluso en momentos asi se me daba bien el pensar despreocupadamente. Me rei de mi mismo, al mismo tiempo que me giraba y observaba detenidamente la selva. ¿De verdad era algo prudente entrar? No lo sabia. Pero no tenia ninguna opcion. O, bueno, si tenia, pero eran limitadas; Podia quedarme ahi y no hacer nada, con el riesgo de quemarme y de morirme de hambre. O tambien podria adentrarme a la selva y buscar alguna forma de vida inteligente... Con algo de suerte, podria encontrarme con alguien mas que estubiera perdido y solo.
Bien, lo habia decidido. Estire un poco mi cuerpo, alzando mis brazos hacia el cielo, antes de comenzar a caminar hacia el interior de la abundante selva, pisando la gran cantidad de pasto que ahi habia, y sintiendo los distintos sonidos que en ella habitaban rodeandome lentamente. Sinceramente no me sorprenderia que una serpiente se me apareciera y terminara por morderme... "No, Son Goku, solo manten la calma, pronto todo esto terminara y te daras cuenta de que es solo un mal sueño, el cual seguramente sera un mal resultado de una gran cantidad de azucar" Comence a decirme a mi mismo, con la esperanza de calmarme un poco, y de poder creer en mis palabras.
Sin embargo, la calma no me habia durado mucho. El camino parecia no aparecer en frente de mi y nada me daba señales de que me faltara poco para poder salir de esa selva. Parecia infinita. Y eso me desesperaba un poco. Claro que no iba a perder la cabeza, pues yo ya sabia lo malo que era cuando se terminaba mi paciencia. Todo terminaba mal y yo solo podia agachar la cabeza, intentando excusarme con mi version real de la historia. Aunque, y lo admito con rabia, nadie podria creer mis palabras. Digo, ¿Quien creeria una historia en donde un chico, por la furia, literalmente estallo lastimando gente y destruyendo parte de una construccion? Absolutamente nadie. Por eso, preferia mantener mi furia escondida, calmandome al momento de que me provocaran o insultaran, ignorando sus palabras, y asi logrando mantenerme concentrado en otra cosa.
Solo habia una cosa que era muy mala, y era que, al contener mi enojo, este trataba de salir a como diera lugar. Provocando en mi fuertes ataques de ira que afectaban mas a mis padres que a mi mismo. Por eso mismo, me habia visto en la necesidad de buscar alguna solucion a mi problema. Y al parecer la habia descubierto. La unica manera que habia encontrado "efectiva" y que en verdad me habia servido durante algun tiempo fue la de golpear los arboles que se encontraban en un parque cercano de mi casa. Desahogar mi ira en cada golpe que daba me relajaba hasta cierto punto. Pero, al pasar el tiempo, eso ya no me calmaba del todo, por lo que me vi obligado a buscar mas formas de controlarme. Al final la unica opcion era tomar pastillas para dormir, pero eso ya era algo punto y aparte.
_Ah, ¿Que no hay ningun otro extraño que haya sido secuestrado por X razon y que ahora se encuentre caminando por esta misma Isla?_Pregunte al aire, sintiendome estupido conmigo mismo por mis palabras. Obviamente no habia nadie mas en ese sitio. Dudaba mucho el que otro chico como yo haya sido raptado solo para despues ser abandonado aqui... Si, lo mas probable es que yo me encontraba completamente solo. Una razon mas por la cual un largo suspiro cansado salio de mis labios. Ya no queria continuar, queria detenerme y buscar algo para comer, quiza pescado o algo de fruta, lo que fuera estaba bien. _Unos pasos mas y me detengo_Me dijo a mi mismo, mientras continuaba caminando. No perdia nada si seguia mi rumbo, ¿Verdad?
...
El ambiente selvatico y humedo que me habia estado rodeando durante casi 2 horas enteras, poco a poco iba desapareciendo, para mi completa sorpresa. Incluso habia descubierto una especie de camino, algo escondido por la gran cantidad de vegetacion que invadia el lugar. Siendo franco no me esperaba eso, y me senti desconfiado de aquel pequeño camino de inmediato, ¿Y si se trataba de una trampa? Podria llevarme a mi segura muerte, y yo aun no tenia ganas de morir... Bueno, al menos no por completo. Aunque, considerando de nuevo mis opciones, solo me quedaba seguir vagando por ahi como un completo imbecil y terminar muriendo. Me encogi de hombros, ¿Que mas me podria pasar el dia de hoy?
Ignorando cualquier señal de advertencia que mi cerebro le mandara a cada fibra de mi cuerpo, segui aquel caminito. El cual, sentia, me estaba llevando en linea recta. Mis pies estaban llegando a un punto en donde los arboles eran menos, el pasto habia desaparecido, y lo que se encontraba en frente de mi era aglo con lo que nunca en mi vida me habia imaginado toparme siquiera; Una enorme construccion, llena de lo que parecian ser mini edificios a su alrededor, con 6 columnas que terminaban en pico rodeando todo el lugar, creando un circulo invisible que, desde mi posicion, se podia ver perfectamente. En lo mas alto de la torre que por su lugar suponia que era la principal se veia un enorme escudo con decoraciones doradas. Para mi desgracia no podia leer lo que decia claramente, asi que mi unica opcion era acercarme...
Mire a mi alrededor una vez mas. No habia nada, solo mas kilometros de selva, y al otro lado, millones y millones de kilometros de puro mas. Regrese mi vista al frente, para despues guardar mis manos en los bolsillos de mi chamarra naranja. Dandome cuenta apenas de que aun la conservaba. _Bueno, suponiendo que no se que mas hacer... Ire a ese sitio sospechosamente bonito_Y, de nuevo, estaba ahi, diciendo cosas estupidas y realizando actos estupidos que, seguramente, terminarian en una sola cosa... Algo estupido.
CONTINUARA...