Last Dance
Nunca antes me había enamorado, hasta que conocí a Yuuri.
Mi primera impresión de él es que era un enclenque inepto, y bueno ahora enclenque es solo un apodo cariñoso, aunque no lo aparente. Nos comprometimos pocas horas después de nuestro primer encuentro e inesperadamente con el tiempo me enamore sin remedio.
Siempre creí que cuando me enamorara sería para siempre, ya que soy un Mazoku el amor es un tema delicado, no quiero sufrir como lo ha hecho mi madre, por eso sentía repulsión por la raza humana, tienen una vida tan corta, por lo que incluso si se arrepienten o cometen errores no importa ya que no cargarán con ello por tanto tiempo como nosotros los mazoku.
Me dije a mi mismo que no debía enamorarme tan a la ligera y aun así caí rendido ante Yuuri. Un doloroso amor que después de cinco años parece no progresar y sigue siendo no correspondido, pensé que si fuera perseverante y esperaba pacientemente Yuuri al fin me aceptaría, pero parece que simplemente nuestra relación se marchita cada vez más.
Harto de esto miro al rededor, las cosas han cambiado con el paso de los años. Somos adultos ahora, Yuuri ha comenzado a actuar como un verdadero Rey. Greta se ha marchado a su pueblo para educarse como futura reina. Gwendal se ha marchado a las tierras Voltaire con Anissina quien se ha comprometido con él, ellos vienen un par de semanas cada mes para ver como lo está haciendo Yuuri y luego se marchan. Mi madre se ha casado con Fanfan y permanece de viaje durante periodos largos de tiempo para disfrutar de su matrimonio El gran sabio no ha cambiado tanto, sigue pasando más tiempo en el templo de Shinou. En cuanto a Gunter ahora es más cercano a Yuuri, después de todo es el consejero real, y a Conrad es común verlo ir de misión con Josak, al parecer están en una relación.
En cuanto a mi... Suelo ir de misión con mi tropa, ya no me entrometo tanto en las decisiones de su majestad y a decir verdad pronto me iré a las tierras Bielefeld. Lo he estado pensando y es hora de tomar mis responsabilidades como cabeza de una de las diez familias nobles, mi tío Waltorana se pondrá feliz con mi decisión.
Y aunque ya tengo mi decisión tomada y romperé el compromiso con Yuuri durante el baile anual de Shin Makoku no dejo de preocuparme por él... ¿Lo hará bien sin mí?
Aún el amor que pensé duraría para siempre, se desvanece.
Ahora, incluso aquellos amigos en común se están yendo.
Mientras crecemos supongo que nos volvemos adultos.
¿Por qué estoy tan preocupado?
Por supuesto que lo hará bien sin mí, lo hizo bien mientras yo estaba muerto y también después de que volví a la vida. Lo hizo bien cada que iba a patrullar a la frontera y cuando se iba con Conrad al territorio humano sin decirme nada.
Lo ha hecho bien los últimos cinco años y mi ausencia no cambiará ese hecho.
Sé que aún hay gente que sigue llamándome Lord mocoso, que siguen creyendo que soy engreído y que odio a la gente que no es de familia noble. Si te dejo libre al fin podrás buscar a una chica linda que se vea bien a tu lado y que sea una buena esposa frente a tu reino, no a un mocoso inmaduro que no hace más que celarte y hartarte con mis reclamos.
Al fin acabaremos con esta relación marchita, terminaré mi absurdo amor no correspondido. Acabaré con mi tonto capricho de esperar que te enamores de mí...
Hoy también la gente se queda en el pasado.
El mundo gira bien sin mí.
Creo que soy inmaduro porque soy joven.
¿Porque soy tan tonto?
Mañana es el baile, había pensado el sacar mis cosas personales de la habitación de Yuuri, pero mientras más lo pienso menos valor tengo de hacerlo, aún muy dentro de mi tengo la esperanza de que Yuuri diga que me quiere…
Después de pensarlo por horas al fin llegó la noche, y había terminado por no sacar nada. Al terminar la cena decidí salir a caminar, tome un poco de aire y cuando me sentía un poco mejor, regresé al castillo. Mientras caminaba por los pasillos me encontré a Yuuri, caminamos en silencio hasta la habitación y yo me dirigí al guardarropa para encontrar mi pijama rosa. A mis espaldas Yuuri se cambiaba silenciosamente y luego se recostaba en la cama.
“Nee Wolfram…” me llamó y yo regresé la mirada a él “¿Pasa algo Yuuri?” pregunté y el me miró “¿No vas a cambiarte? Se hace tarde, date prisa y ven a la cama…” entonces me di cuenta que seguía vistiendo el uniforme militar y la pijama tenía ya diez minutos en mis manos, asentí y puse el biombo para cambiarme.
Miré a Yuuri y mis ojos se encontraron con los suyos, él sonrió y dio una pequeña palmada a su lado, desvié la mirada indiferente como siempre y subí a la cama. “Descansa” me dijo y cerró los ojos mientras yo solo le miraba.
Esta será la última vez que te vea tan de cerca y la ultima en la que compartiré lecho contigo, quisiera que este momento durara para siempre, pero sé que es imposible.
“Nee Yuuri, extrañaras esto tanto como yo?”
Vuelvo a ti mientras canto esta canción.
Si puedo ver tu belleza una vez más, podremos tener nuestro último baile mientras escuchamos esta canción.
Recuerda este momento para siempre.
Nuestro último baile...
El día del baile llego, necesitaba estar lejos de ti lo más posible para prepararme mentalmente, debía decírtelo durante el baile para poder anunciar a los nobles que nuestro compromiso había acabado, así podrías aprovechar para bailar con las mujeres presentes y podrías encontrar a tu nueva prometida, yo no tendría derecho a celarte y seguirías con tu vida.
Cuando ya no podía seguir huyendo regresé a la habitación real para encontrar mi uniforme de gala. Me di una ducha y me arregle lo más que pude, hoy especialmente quería verme bien, faltaba poco para que comenzaran a llegar los invitados.
Salí del castillo y camine al jardín de mi madre, el sol comenzaba a ocultarse y pronto el cielo estaría lleno de estrellas. Vi un pequeño brote de inocencia de Yuuri y sonreí. “Pronto vas a florecer” susurré. Me puse de pie y mis ojos se fijaron en un hermoso wólfram que crecía fuera de la valla del jardín, por alguna razón me sentí horrible y sin darme cuenta mis ojos se aguaron. Me acerque y la arranque con cuidado, la acerque a mí y cerré los ojos sintiendo su olor.
Me siento tan solo…
Volverse una luz que se desvanece entre las estrellas.
Tú también te vuelves una estrella y una señal.
Como me he vuelto solitario debo verme solo.
¿Por qué sigo llorando?
Me seque los ojos y coloque la flor en mi bolsillo como si fuera un broche. Regrese al salón viendo como los invitados llegaban, un rato después se anunció la presencia de Yuuri y lo vi bajar por las escaleras. Se veía deslumbrante… con ese uniforme negro que había remodelado y ahora se veía más masculino y maduro, la capa real adornaba bellamente sus hombros y espalda. Algo me llamo la atención y baje la vista a su pecho, pude ver que llevaba las alas doradas que le había regalado exactamente hace cinco años durante la coronación, sentí mi pecho oprimirse y salí por el balcón, necesitaba despejarme rápidamente.
“No puedo hacer esto…”
Me dije a mi mismo en voz alta y suspire acomodándome el cabello.
“¿Hacer qué? ¿Wolfram?”
Me sorprendí de escuchar la voz de Yuuri y me gire a verlo, estaba nervioso y comenzaba a dudar el poder romper con él. Realmente deseaba que me diera aunque sea una mínima esperanza para creer que lo nuestro funcionaria.
“Ah… yo… solo quería…”
Yuuri me miro con curiosidad y pareció captar algo, se acercó y me extendió la mano.
“¿Wolf quieres bailar conmigo?”
¿Me invito a bailar? Eso fue inusual… siempre era yo quien le pedía bailar y ahora venía Yuuri y tomaba la iniciativa, pesar de la sorpresa que causaba en mi acepte de inmediato, vamos… un último recuerdo antes de dejar el castillo.
La música sigue sonando.
Dame una oportunidad, estaré aquí esperando.
Por favor solo una vez más.
Lo prometo...
No será por mucho tiempo...
Yuuri me llevo tomado de la mano hasta el salón y comenzamos a bailar. Su mano izquierda sujetaba firmemente mi cintura y la derecha tomaba mi mano entrelazando sus dedos con los míos. Sin darnos cuenta ya habían pasado tres piezas y yo simplemente no quería apartarme.
Yuuri tenía una sonrisa tan resplandeciente que quería mantener esa imagen suficiente tiempo hasta que no pueda olvidarlo. La tercera pieza termino y nos separamos. Estaba sediento así que quise ir por ponche pero Yuuri me detuvo, me pidió esperarlo en el balcón porque quería estar un momento a solas. Le obedecí sin preguntar y suspire recargándome en el barandal.
“Wolf…”
Me llamó y me tendió el vaso con ponche, lo tome y acerque a mis labios, bebí un poco y lego suspire buscando valor.
“Te he notado extraño… ¿Pasa algo?”
“He estado pensando en muchas cosas… y… creo que lo mejor sería irme a Bielefeld”
Mie a Yuuri y le vi sorprendido, el tartamudeo un momento y luego desvió la mirada y bebió ponche.
“Así que terminemos el compromiso…”
Al no escuchar respuesta voltee a verle y lo vi sonriendo tristemente, Yuuri no te entiendo…
“¿Eso es lo que realmente quieres Wolf?”
No dije nada ¿acaso es estúpido? De pronto el comenzó a reír y me miro con una sonrisa resplandeciente, una que nunca antes me había dedicado…
“Por supuesto que no… tu no quieres eso ¿verdad? Entonces… quédate conmigo… intentémoslo a partir de hoy”
Yuri seguía sonriendo de esa forma tan brillante, inconscientemente tome su mano. Me sentía intoxicado y pequeño ante él. Estaba presenciando a un Yuuri que no conocía, acaso ¿eso significaba que me quería?
¿Esta es esa pequeña esperanza que necesitaba para continuar?
“¿Puedo estar a tu lado, Yuuri?”
La última noche cuando bailamos mientras tomaba tu mano.
Tú última, brillante y bella sonrisa.
Rojo, amarillo, naranja y verde, un éxtasis sin diferencia de los colores.
No encaja con el mundo que he visto y sentido.