Mi Secreto
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EL APUESTO DURMIENTE
- ¡Vamos Naru-chan, ya no la hagas de emoción! - Temari se encontraba del otro lado del vestidor en el que me encontraba yo...arrepintiendome de haber aceptado la idea del trabajo
Me miraba en el gran espejo frente a mí, nunca podré escapar de usar falda al parecer...
- No Temari...me da...vergüenza - y no es mentira...
Una mini falda color negro con bordes de tela blanca, una blusa blanca con botones y manga corta, mayas blancas un poco más arriba de la rodilla, una diadema negra muy "adornada" y...¿CÓMO SE PIENSAN QUE VOY A USAR...PATINES?.
Salgo del vestidor casi cayéndome directo al suelo, lo bueno que Temari me detuvo justo a tiempo.
- ¡KYAAAAAAAAAAAA! - Temari pegó un grito tan estremecedor que me pegó un buen susto - ¡Naru-chan!, te ves encantadora... - con una sonrisa maliciosa - Si te viera Sasuke-kun estoy segura de que tendría problemas para dormir tranquilo en la noche
No pude evitar un sonrojo en mi cara al haberme imaginado la escena.
- ¡BAKA!...¡NO DIGAS INCOHERENCIAS!
- Jeje, lo siento, pero... - observa mis pies - Por lo que veo, no sabes andar en patines ¿cierto?
- Hmp... - creo que era más que obvio - No realmente, apenas y sé utilizar la bicicleta
- Bueno, después practicaremos, ahora andando que debemos abrir o mi padre se molestará
Así las dos vestidas como meseras (de película play boy), comenzamos a trabajar. Dedicado a limpiar las mesas mientras Temari daba unas cuantas ordenes a sus hermanos.
- Naru
- ¿Sí? - respondí aun limpiando las mesas bien sujeto a la misma... ah pero como odio los patines
Unos momentos después volteo, observando a un Gaara con traje de mesero.
- Te ves... encantadora - la expresión de Gaara notaba gran sorpresa o asombro, lo cual me hizo sentir un poco incomodo
- Em... gracias - sonreí sacando la lengua un poco apenado
- ¡Gaara!...no molestes a Naru-chan y ven a la cocina, ayuda un poco a Mizuki a preparar los postres - cuando Temari está al mando...realmente asusta
- Sí, sí, ya voy... - y con algo de pereza el pelirrojo fue a cumplir la orden
Momentos después el café comenzaba a tener clientela. Avergonzándome de cada paso que daba, comencé con el oficio.
- ¿Qué va a... - detuve las palabras al darme cuenta de quien tenía ante mis ojos
Ante el silencio de mi pausa, Sakura e Ino me observaban sentadas en aquella pequeña mesa.
- Linda vestimenta Naru-plana - rompiendo aquel silencio Ino hizo su primer comentario...el cual no me sorprendió en lo absoluto
Sin remedio, me hice el sordo.
- ¿Qué van a pedir? - una falsa sonrisa de mi parte
- No lo sé, Sakura, ¿tú qué pedirás?
- Pues... - me mira fijamente - No estaría mal pedir una rebanada de pastel de fresas con un delicioso Sasuke-kun dentro
Las dos comenzaron a reir.
- Pastel de fresa... - sin hacerle caso al comentario repetí "la orden" mientras anotaba en la libreta
- Déjate de juegos Naru - con un tono frío Sakura se levantó de la su asiento y me miró fijamente a los ojos - Creí que habías prometido conseguirme una cita con Sasuke-kun
- Yo también quiero una - respondió entrometidamente Ino burlándose
Increíble que Sakura estuviera actuando de esta forma... cada vez me sentía más presionado.
- Hablé con él, pero se negó y...
Antes de poder terminar la frase Sakura pegó su frente a la mía de una forma retadora.
- Escucha - susurró - Si no me consigues la cita, le diré a toda la escuela que eres una sucia lesbiana y que me pediste que te hiciera cosas indecorosas las cuales rechacé y... - sonríe con malicia - Veremos como te trata la escuela después de eso
- ¡Iuk!...que asco me das Naru-plana
Era imposible que tuviera esta suerte de perro... sakura me esta amenazando, con algo que podría volver a dejarme en problemas, quizá peores que los que tuve en mi infancia.
- ¡Pero Sakura!... - intenté decir algo, pero no me lo permitió
- Sólo a eso vinimos, tienes de aquí a que termine la semana - apartándose de la mesa y seguida por Ino salieron del lugar
Después de que se alejaron, quedé demasiado conmocionado como para pensar en lo que tenía que hacer ahora.
- Naru-chan - toca mi hombro Temari preocupada por no verme reaccionar - ¿Sucedió algo?...¿te dijeron algo ese par de arrastradas?
- ¿Eh?... - sonrío forzosamente - No, en realidad cuando vieron que yo era la mesera se fueron así como así... ya sabes como son
- ¡Ja!, mejor para nosotras, mira que tener como clientas a ese par de locas no es algo agradable - dándome ánimos con una sonrisa sincera - Mejor ve con la siguiente mesa y olvídate de esas retrasadas
- Sí...
Pero sería demasiado bueno para ser cierto. Toda la tarde estuve pensando en aquello que me dijo Sakura, metido aun en más problemas que antes. No podía decirle a Sasuke que le pedía el favor por una amenaza que me hicieron, no sé de que sería capaz; y en realidad no quiero que le haga daño a Sakura...
Miles de suspiros salían de mis labios sin poder contener la preocupación, estaba claro que estaba en un lío bastante difícil y no tenía ni siquiera apoyo moral. Decirle a Temari lo que me dijeron es en pocas palabras decirle que soy "lesbiana" cuando no es verdad... en realidad soy un chico y tampoco puedo decirle eso a Temari, me da miedo su reacción.
- Odio mi vida... - susurré en voz baja hacia mí mismo abrazando una bandeja de plata
- Naru-chan - aparece repentinamente Temari de tras de mí - Ya vamos a cerrar, mis hermanos se encargaran de limpiar, así que vete a tu casa antes de que se oscurezca y me preocupe del que te pase algo en el camino
- Sí, Gracias Temari
Fui a los vestidores y me quité el traje de mesera, colocándome de nuevo el uniforme de la escuela.
- Todos los días saliendo de la escuela, tener que trabajar de mesera... - un corto y nuevo suspiro - Todo sea por ayudar a mi padre
Camino a la casa volví a pensar en lo que me dijo Sakura... pero... ¿cómo haré para que Sasuke acepte salir con ella?. Además... en realidad no quisiera verlos juntos, yo...
- ¡Hey Naru-chan!
- ¿Eh? - volteo a mis espaldas y observo como Kiba, un compañero de salón venía corriendo desde la esquina hacia mí
- Al fin te encontré... - respira agitado
- Kiba, que sorpresa, ¿qué sucede?
Después de hacerle la pregunta el rostro de Kiba se puso muy serio.
- Es urgente Naru-chan... se trata de Sasuke
- ¿Qué?... ¿Sasuke?
Un rato después Kiba y yo llegamos frente a una disco juvenil.
- Sasuke entró por una apuesta que le hizo Lee, se embriagó y ahora él está... - realizó una larga pausa
- ¡¿Está?! - sus pausas realmente me ponían de nervios
- Está siendo acosado por varias chicas
Es curioso, pero creí que sería un asunto más grave, de todos modos... lo que dijo no me hizo sentir muy contento.
- Oh vaya... ¿y qué quieres que yo haga?
- Bueno eres la novia de Sasuke, pensé que te interesaría saberlo
Me sonrojé tanto que podía confundirme con un jitomate.
- ¡¿PERO QUIÉN DEMONIOS TE DIJO QUE YO ERA LA "NOVIA" DE SASUKE?!, eso es...¡es una vil mentira!
- ¿En serio?...vaya, yo creía que sí
- Ush... imbésil... - miré hacia la entrada de la disco y suspiré - Ni hablar, Sasuke es mi amigo y no quiero que después termine embarcado por una borrachera
Ya decidido entré al lugar y sin pedir permiso quité a la bola de chicas locas sobre el baka embriagado.
- Sasuke, vámonos, no puedes seguir aquí
- Naruto... - susurró mirándome fijamente a los ojos
¡El estúpido realmente estaba muy borracho!...lo tomé del brazo y lo jalé con la fuerza que pude sacándolo del lugar a una velocidad de ultra luz y lo boté dentro de mi casa.
- ¡BAKA, BAKA, BAKA! - lo senté sobre el sofá y zarandeándolo de la ropa comencé a reclamarle - ¡SI NO HUBIERA SIDO POR QUE LA MÚSICA ESTABA A TODO VOLUMEN HUBIERAS TIRADO TODA MI VIDA A LA BASURA!
- Hmmm... - apenas me escuchaba quedándose dormido en mis brazos
- ...
Suspiro por milésima vez y me siento a su lado.
- ¿Qué se supone que hacías allí dentro Sasuke?
Sin responderme colocó su cabeza sobre mis piernas el muy conchudo, a lo que volví a sonrojarme.
- ¡¿Me ves cara de almohada o qué?!
Pero no obtuve respuesta, él realmente estaba muy ebrio.
- Hmmm...supongo que si te llevo a tu casa así como estás te darán la regañada de tu vida ¿cierto? - en realidad era como darme a mí mismo una opinión ya que sabía que él no me estaba escuchando
No había muchas soluciones, tendría que esperar a que se despertara y se le bajara lo ebrio para poder decidir que hacer. Lo llevé a mi habitación dejándolo sobre mi cama, cerrando la puerta con llave; ya que si mi padre llegaba y veía a un chico ebrio en la casa no sé que podría pensar.
Lo observe por unos momentos, allí dormido de una forma tan tranquila y sin preocupaciones. Que vida, realmente lo envidio.
- Baka... - fue la palabra que salió levemente de mis labios aun sin quitarle la vista de encima
Por alguna extraña razón mis ojos lo miraban por completo, como con ganas de comérselo. Noté al momento que no tenía el uniforme de la escuela, llevaba puesto una chaqueta negra entre abierta, sin playera y un pantalón de mezclilla azul.
Mis labios tambalearon un poco cuando mis ojos se posaron por unos segundos en aquella parte que se encontraba entre sus piernas.
- ¡QUE DIABLOS! - me dirigí al baño de mi habitación apenado por lo que acababa de pasar por mi mente...
Mi corazón estaba agitado, mordí un poco mi labio inferior y comencé a desvestirme para meterme a duchar y sacar cualquier pensamiento imberbe de mi mente.
Ya desnudo dentro de la tina, imaginaba a Sakura en una cita con Sasuke...era algo que me hacía sentir tan...tan molesto.
Hundí la mitad de mi rostro en el agua abrazando mis piernas.
- No quiero que eso suceda, pero si no hago algo...
No tenía muchas opciones, sin más me decidí.
Salí de la tina del baño y colocándome una toalla salí del baño, viendo en mi cuarto al Sasuke aun dormido.
- ¿Cuánto tiempo piensas quedarte dormido? - le miré con ironía
Abrí mi armario y comencé a hurgar entre la ropa, entre tanta ropa de chica, ya no tenía mucho que elegir.
Mi mirada volvió a dar en aquel inconciente sobre mi cama, al haberlo escuchado quejarse un poco, pensé que ya despertaría pero no... sólo volteó la cabeza para el otro lado.
- Falsa alarma
Me acerqué a la cama mirándolo fijamente de nuevo. Con mi mano derecha revolví un poco su cabello.
- Hmmm... que decepción, ni despeinado te ves feo... - nuevamente dije con un tono irónico
En ese momento recordé uno de esos sueños húmedos que tenía casualmente.
Pegué mis piernas avergonzado por esas escenas tan fuertes dentro de mi cabeza, mordí un poco la uña de mi dedo pulgar izquierdo algo sonrojado y con la otra mano continuaba revolviendo el cabello de Sasuke.
- Odio que aparezcas hasta en mis sueños...
Me senté en la orilla de la cama mirando el rostro de Sasuke. Abrí un poco más su chaqueta mirando su pecho desnudo.
- Tiene unas cuantas marcas...¿habrán sido las acosadoras de la disco? - rocé un poco las partes de su pecho con marcas haciendo que él se quejara un poco
El sonrojo en mis mejillas parecía hacerse demasiado común mientras seguía observándolo.
- ¿Te gusta como te toco?... - pregunté en voz baja mientras seguía acariciando su pecho con suavidad
Mis dedos chocaron con uno de los pezones de Sasuke. Trague saliva algo nervioso y con la llema de mi dedo índice comencé a acariciárselo.
Con mi mano suelta apretaba la colcha de la cama con fuerza, tenía mis labios entreabiertos y mis ojos tenían en sí un brillo de gozo. Tenía que admitir que era divertido hacerle travesuras a Sasuke.
- Me pregunto sí... - aun más avergonzado acerqué mi boca a su pecho y sacando un poco mi lengua lamí la punta de su pezón derecho
En unos momentos sus pezones se pusieron duros, no sé que era ya lo que sentía, pensaba que hacerle esto era gracioso, pero... ya no sé si sigo viéndolo de esa forma.
Estaba demasiado adentrado relamiendo el pezón de Sasuke, que de pronto me detuve de golpe.
- Pero...¿qué diablos estoy haciendo? - me aparté de la cama con mi respiración agitada - Estoy... volviéndome loco...
Negando en mi cabeza lo que acababa de hacer me hice hacia atrás hasta tocar pared, recargándome en ella, sin quitarle la vista de encima a Sasuke.
Me tapé la boca con mi mano derecha sin creerme aun.
- ¿Qué es...qué es lo que siento por él?...
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CONTINUARÁ...