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Death and Revenge por Mariela

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Notas del fanfic:

Los personajes de este fics no me pertenecen, son de Masami Kurumada y esta hecho sin fines de lucro.

DEATH AND REVENGE

 

Eran las 11:30 de la noche, cuando lo despertaron unos pasos provenientes de la sala. Se levantó, creyendo que se trataba de sus amigos, y salió de su habitación para bajar a decirles que lo dejaran dormir.

 

“Seguro se trata de los imbéciles de Saga y Kanon, ese par de idiotas no conocen el significado de “descansar”-pensó con molestia. Estaba a la mitad de las escaleras cuando un grito desgarrador se dejó oír en todo el lugar.

 

-¡¡AAARRGG!!

 

Detuvo su descenso. Todo su cuerpo tembló y sus ojos se abrieron  con miedo ante lo que había oído. Ese era Kanon. ¡¿Qué demonios le había sucedido?! Su respiración empezó a hacerse agitada, el terror se apoderaba lentamente de su cuerpo, y sin darse cuenta, siguió avanzando guiado por su curiosidad.

 

“Tal vez es una broma de esos idiotas”-trato de convencerse. Los conocía, sus bromas solían ser pesadas, y de verdad deseaba que esa lo fuera.

 

Bajo el último escalón, para luego dirigirse al umbral de la sala, y lo que vio lo dejo paralizado. Los cuerpos de sus mejores amigos estaban en el suelo completamente cubiertos de sangre, con los estómagos abiertos mostrando sus órganos, y un hombre vestido de camisa blanca con pantalones negros, se encontraba sobre Saga cortando sus labios y embozando una sonrisa sádica, diabólica, psicópata, una sonrisa que materializaba el terror mismo.

 

Por si fuera poco, el rostro de ese hombre estaba completamente quemado con apenas unos mechones azules en su cabeza.

 

Las lágrimas se  desbordaron de sus ojos  y unas intensas  ganas de vomitar lo obligaron a arrodillarse para soltar todo lo que había comido ese día, lo cual alerto al asesino de su presencia.

 

-Hola.

 

Su corazón latió con fuerza, acelerado, enviando una señal de alerta a todo su cuerpo. Le entro pánico e intento escapar de ahí, pero el hombre le salto encima comenzando  así un forcejeo.

 

-¡¡NOO!! ¡SUELTAME! ¡AUXILIO!-gritaba, aun cuando sabía que nadie lo ayudaría.

 

Estaba solo ese día, en la casa de campo que sus padres le habían dejado y sus únicos acompañantes ya estaban muertos.

 

-Jajajaja-su risa le erizo la piel-¿Por qué gritas? ¿Acaso tienes miedo?

 

-¡¡ALEJATE DE MI!!-contesto, deteniendo el brazo con el cuchillo.

 

-Tranquilízate. Esto será rápido e indoloro.

 

Soltó su agarre e intento atacarlo, pero el castaño lo pateo y se levantó para correr a la salida, sin embargo,  apenas toco el picaporte un agudo dolor en su pierna lo hizo caer.

 

-¡¡AH!!

 

Se retorció sujetando la zona donde el dolor tenía origen, dándose cuenta que el sujeto se acercaba a él con el revolver en su mano.

 

-¡¡Maldito!!

 

-Jajaja-rio divertido-Que valiente eres, pero yo te quitaré esa valentía.

 

-¡¿Quién demonios eres tú?!

 

El hombre se inclinó a su altura para susurrar le con un tono escalofriante.

 

-Soy Death Mask-y lo pateo con fuerza, haciendo que cayera inconsciente.

 

“¡Death Mask!”-Ese nombre desato una nube de recuerdos en su memoria, recuerdos que había preferido olvidar y que ahora lo envolvían mientras se sumergía en la oscuridad.

 

“-¡¡Doctor, doctor!! ¡¿Cómo está mi hijo?! ¡¿Qué le paso?! ¡Quiero verlo!

 

-Cálmese señora Sagitario, por favor.

 

-¡¿Cómo me dice que me calme?!-exclamo la mujer que llevaba a un pequeño de siete años tomado de su mano-¡Mi hijo fue atacado por un asesino! ¡¿Cómo se atreve a decirme que me calme?!”

 

“-Su estado es delicado.

 

-¿Qué le paso…?-pregunto el hombre, cargando a su hijo en brazos.

 

-Le arrojaron ácido sulfúrico en el rostro y en algunas partes del cuerpo. Además de que fue golpeado brutalmente con un bate, su brazo y pierna izquierda están fracturados.

 

-¿Se recuperara?

 

-Si…claro que si-dijo con pena, bajando la vista al suelo-Sin embargo, a mí me preocupa  más su estado mental.

 

-¿A qué se refiere?

 

-Las heridas causadas por el ácido sulfúrico corroen la piel hasta dejar los músculos, y lamentablemente dichas heridas no tienen remedio”.

 

“-¡¿Cómo que se escapó?! ¡¿Es que acaso este hospital no tiene seguridad?!

 

-¡¿Dónde está mi hijo, Doctor?! ¡¿Dónde está mi hijo?!

 

-Por favor cálmese, señores. No sabemos dónde está, ya lo hemos buscado  por todo el edificio, pero no aparece. Desconocemos la forma en que escapo.”

 

“-Mama-la mujer desvió su mirada llorosa de la ventana, y la poso en su hijo-¿Dónde está mi hermano?!

 

-No lo sé, hijo.  No lo sé.-se dio la vuelta para marcharse, dejando al pequeño solo como siempre.”

 

“-¡¡Mama, mama!!-decía, tratando de despertarla.

 

-¡Aioria! ¿Qué ocurre hijo?-pregunto el mayor, llegando a la escena.

 

-¡Papa! ¡Mama no despierta, ayúdala!

 

-Oh Dios, cielo, ¿Qué hiciste?-exclamo al ver a su esposa con los ojos en blanco, espuma en la boca, y un frasco vacío de pastillas en su mano.”

 

“-Mi madre se suicidó a dos meses de la desaparición de mi hermano mayor.

 

-¿Y tu padre? ¿Qué paso con él?

 

-Murió por la depresión, Saga-respondió con ira-No podía contra el hecho de haber perdido a su esposa y a su hijo, pero él se olvidó  de que tenía otro hijo que lo necesitaba con vida.

 

-¿Lo odias por eso?

 

-Por supuesto. Me dejo solo a los 1 años, no esperas que le aplauda, ¿o sí?

 

-Pero era tu padre.

 

-Y yo su hijo. A él no le importó, a mí tampoco. Lo único que hizo bien fue no dejarme en la calle.”

 

“-Death Mask, Mascara de la Muerte. Veintidós años, Italiano.  Fue quien ataco a tu hermano. Es un asesino en serie, sanguinario, despiadado, con tendencias caníbales. La policía lo ha buscado por años, pero siempre se escabulle, es muy astuto. Creemos que es el único sobreviviente del incendio del hospital psiquiátrico de hace tres años, lo  cual explica el demencial estado mental en el que se encuentra.

 

-No me interesa.

 

-Escuche Sagitario, creo que…

 

-Leo. Mi apellido es Leo, no Sagitario.

 

-Esta bien. Escuche Leo, creo que su hermano  estuvo involucrado sentimentalmente con este hombre, y si es así, si sabe algo que…

 

-No sé nada.

 

-¿Estás seguro?

 

-Sí. Ahora lárguese.

-Pero…

 

-Haber, Detective Dohko, no me interesa quién diablos sea Death Mask ni si me hermano tuvo algo que ver con él, yo hace mucho que lo olvide, y si está vivo o no, ya me es indiferente.  No quiero saber nada que tenga que ver con Aioros, ahora váyase o llamare a la policía-dijo con furia.

 

-¿Podría pensarlo al menos? Piense que aun si lo odia, el merece justicia por lo que le hicieron.”

 

-¡¡AH!!

 

Despertó de golpe. Estaba atado a una silla en medio de la sala y la herida en su pierna, seguía sangrando. Paseo su vista por el lugar y se encontró con el hombre que había asesinado a sus amigos parado en el umbral con una mueca sádica en su rostro, y una botella de ácido en su mano.

 

-Hola, me alegra que despertaras. No es divertido si no estás consciente.

 

-¡Maldito bastardo!

 

-Oh, pero que palabras más crueles, jejeje. Me rompes el corazón.

 

-¡Cállate! Tú fuiste, ¿verdad? Tú fuiste quien ataco a mi hermano.

 

-¿Tu hermano? No sé de quién hablas, he matado a muchas personas-sonrió-Aunque tú me recuerdas mucho a alguien, te pareces demasiado a esa persona.

 

-¡¿Qué?!

 

-Tal vez, él sea el hermano del que hablas-razono, acariciando su mentón.

 

-¿Te refieres a Aioros?

 

-Bueno, no importa-dijo acercándose, destapando la botella de ácido-Desgraciadamente he perdido mucho tiempo aquí, y ya tengo que irme, así que acabemos pronto.

 

-¿Qué-Que vas a ha-hacerme?-trago saliva con horror.

 

-Planeaba sacarte los órganos para tragarlos como lo hice con tus amigos, pero dado que eres  tan  jodidamente parecido a ese imbécil, tomare otras medidas contigo-levanto  la botellas sobre la cabeza del castaño-Tendrás el mismo destino que la mierda de Aioros de Sagitario.

 

-¡¡NO!! ¡¡No lo hagas!!-decía, removiéndose desesperado por soltarse.

 

-JAJAJA. Vamos, que esto es tu culpa. ¡Tú odioso parecido con él, me fastidia, me jode, y tendré que borrar ese parecido a como dé lugar!

 

-¡¡DESGRACIADO!! ¡ME LAS PAGARAS! ¡ERES UN MONSTRUO!

 

-Y tú lo serás también - empezó a  inclinar la botella.

 

-¡¡NOOO!!-apretó los ojos y espero el líquido, mas este nunca llego.

 

-¡¡DETENTE!!-se escuchó decir a alguien, seguido por una bala de goma que lanzo la botella de ácido lejos de la manos del italiano.

 

Ambos hombres abrieron los ojos por completo, y los posaron en el nuevo intruso. Aioria sintió su corazón detenerse ante aquella persona. No podía creerlo, de verdad era el, su hermano mayor estaba vivo, y había llegado justo a tiempo para ayudarle.

 

-Aioros…

 

-Tchs- Angelo saco su cuchillo y miro al castaño con rabia, para luego sonreír con diversión.

 

-Death Mask.

 

-Death Killer.

 

A continuación se desataron minutos de silencio total, minutos en los que ambos caballeros se dedicaban a mirar con sus penetrantes ojos al contrario, intentando de esa forma intimidarlo.

 

Aioria observo a cada uno con detalle, comparando sus características destacables con el otro. Su hermano ya no era el mismo, ni física ni mentalmente. Eso era claro. El mayor de los Sagitario tenía todo el rostro quemado, pero a diferencia de Death Mask, sus quemaduras eran por ácido sulfúrico. Su cabello estaba intacto, vestía lo mismo que su atacante con la diferencia de que también portaba guantes negros, llevaba un cuchillo, y de su ropa saco una máscara para ponérsela en la cara, aparentemente, para cubrir su rostro.

 

Pero la mayor diferencia entre ellos era sin duda, la expresión que tenían en ese momento. Ángelo sonreía con locura, demencia, sadismo, con sed de sangre y dolor, una sonrisa digna de la misma muerte. Mientras Aioros sonreía con ira, rabia, odio, con una sed insaciable de venganza y tortura, una sonrisa digna de quien quiere justicia de la manera más retorcida y egoísta posible, de quien ha muerto en vida, y solo sigue para hacer pagar a quien provoco su ruina.

 

Asesino y víctima.

Locura y rabia.

Muerte y venganza.

 

Y Aioria pensó que Ángelo era capaz de asesinar la existencia entera de una persona, eso había hecho con su hermano, desquebrajo tanto su corazón como su alma, y por eso, era quien era ahora.

 

Por eso Aioros había cambiado su personalidad bondadosa para exponer su personalidad de oscuridad y justicias retorcida.

 

Por eso, aquel que le había ayudado, aunque le doliera, no era más su hermano.

 

-No creí volver a verte, mi querido Aioros-dijo el italiano, rompiendo el silencio-Pero debo admitir que ya te extrañaba, jejeje.

 

-¿En serio me extrañabas?-se acercó, apretando el mango del cuchillo-Bueno, no creo que me vayas a extrañar tanto luego de asesinarte, maldito perro.

 

-Pero que cruel, amor mío. No te recordaba así.

 

-¡¡CALLATE!! ¡No me llames “amor mío”!-le apuntó con el arma-¡Jamás!

 

-Tranquila, no tienes que enojarte, cariñito-tomo por el cuello a Aioria-Ahora, si esperas unos segundos, te atenderé como te mereces, ¿de acuerdo?  Solo déjame acabar con esta copia de imbécil y tendrás toda mi atención-y dirigió el cuchillo al pecho del castaño, pero una mano lo detuvo antes de que pudiera alcanzarlo.

 

-¡¡No te atrevas a lastimas a mi hermano!!-grito Aioros, para luego empujarlo lejos del león.

 

-¿Aioros…?

 

-Jajaja-rio Death Mask-Así que  ese tipo de verdad es tu hermanito menor, ¿eh? Interesante, ahora entiendo porque se parecían tanto, jajaja. En tal caso, me dio gusto conocerte, cuñadito jajaja.

 

-¡Cierra la boca, Ángelo!

 

-Cálmate Aioros, pero que temperamental eres, solo quería ser amable con mi cuñado antes de asesinarlo, eso no es malo, ¿o sí?

 

-¡Maldito! ¡No te dejare ponerle un solo dedo encima a Aioria!

 

-Si interfieres te matare, Death Killer.

 

-Al contrario, Death Mask.

 

Ambos se miraron por unos instantes que parecieron eternos para el menor de los Sagitario, la tensión podía cortarse con una espada, y trago saliva al ver como la pelea de las mascara y el asesino daba inicio.

 

Aioros fue el primero en atacar, pero fue esquivado por Ángelo, quien a su vez, intento herirlo, consiguiendo el mismo resultado. La batalla continuo, chocando en muchas ocasiones las hojas de sus cuchillos y sus puños. Tenían la misma fuerza, la misma habilidad, la misma determinación, pero sus miradas eran distintas.

 

Uno quería muerte. El otro quería venganzas. El resultado era incierto.

 

Y mientras Aioros era derribado, y Ángelo herido, los recuerdos de su pasado se apoderaron de sus mentes, reviviendo aquellos tiempos que no volverían nunca.

 

Si, el pasado. Cuando el de Sagitario era ingenuo, noble e inocente, tan inocente que se enamoró de un asesino serial después de que este lo salvara de caer de las escaleras. Fue en uno de sus múltiples asesinatos, donde su víctima, en su intento de huir, casi empujo al castaño por dichas escaleras.

 

El griego lo recordaba. Recordaba que se enamoró perdidamente de él, que no le importó como se veía, que ingenuamente creyó que este podía amarlo, recordaba que le creyó cuando dijo que nunca lo lastimaría, que lo protegería, y que se redimiría para ser digno de él. Si, recordaba  perfectamente lo estúpido que había sido al enamorarse de un asesino con tendencias caníbales.

 

Pues, después de haberle entregado su virginidad, Ángelo lo traiciono. Le destruyo la vida arrojándole acido a la cara y al cuerpo, mientras dormía desnudo  en su lecho.

 

Despertó siendo un monstruo, y se llenó de odio contra él. Tomo un cuchillo, una máscara para esconder su estupidez de los demás, y se escapó del hospital jurando venganza contra Death Mask, llamándose a sí mismo; Death Killer, porque asesinaría a la muerte.

 

-¡¡AARRGG!!-grito con rabia desbordada.

 

Empujo al italiano y avanzo hacia él, moviendo el arma de un lado a otro, tratando se herirlo, mientras este lo esquivaba riéndose de su ira.

 

-Jajaja. Que salvaje eres bombón, jajaja

 

Esto solo aumento la furia del de Sagitario. ¡Como odiaba a ese hombre! Lo odiaba por aprovecharse de el, por pisotear su amor, por destruir su vida, lo odiaba por convertirlo en lo que era ahora, solo un ser sediento de venganza.

 

-¡¡Morirás Death Mask!!

 

-¡No lo creo, amor!-respondió, atrapando el brazo de Aioros antes de que lo hiriera con su cuchillo, y lo jalo hacia él, para golpearlo fuertemente en el estómago.

 

-¡AH!

 

-¡Aioros!-grito Aioria, preocupado al ver como el italiano golpeaba nuevamente a su hermano para arrojarlo al suelo-¡¡Déjalo!!

 

Death Mask ignoró a Aioria  y se montó sobre el enmascarado, sosteniendo con una mano sus muñecas y aplicando una fuerza brutal para evitar que lo atacara, aunque eso no impidió que se removiera desesperado.

 

-¡¡Maldito!! ¡Suéltame!

 

-Shhh-se acercó hasta su rostro cubierto por la máscara-No grites, no estoy sordo amorcito.

 

-¡¡DESGRACIADO!!

 

-Oh, pero que cruel. Antes era más dulce.

 

-¡¡Jodete!!

 

De verdad que ese hombre se empeñaba en cabrearlo más, odiaba recordar esos días, aquellos en los que no eran Muerte y Venganza, sino Muerte y Amor.

 

Porque hubo un tiempo en que si fue feliz a su lado, sin importar lo que fuera o lo que hiciera, él era feliz en esa bella ilusión, y lo amaba a pesar de todo. Se entregó completamente a Death Mask, tanto así  que si él era la Muerte, entonces Aioros era el Amor.

 

 

Pero, ¿Qué pasa cuando se abrazan el amor y la muerte? ¿Se muere el amor? ¿O se enamorara la muerte? La respuesta que habían recibido era la del fin.

 

Porque Ángelo asesino su corazón, destrozo sus sentimientos, su alma, su vida, rompió su espíritu por completo, y por tanto, podría decirse que Aioros de Sagitario de verdad estaba muerto. Quien ahora ocupaba su lugar era Death Killer, la venganza personificada.

 

Y la venganza quería hacer acto de presencia a toda costa.

 

-¡Eres patético, Aioros! ¡¿De verdad pensaste que podías detenerme?!  ¡Que imbécil!-decía tomando su máscara para retirarla-Antes de que te mate, ¿Por qué no me muestras tu rostro? ¿Eh? Me gustaría verlo por última vez.

 

-¡¡No te atrevas bastardo de mierda!!-se retorció, pero fue inútil, el italiano logro retirar la máscara, y lo observo con una sonrisa-¡Maldito!

 

-Veo que mi creación quedo hermosa, jajaja. Estoy satisfecho con el resultado.

 

-Grrr.

 

-Hablo en serio, Aioros. Ahora eres más hermoso de lo que ya eras.

 

-¡¿COMO PUEDES DECIR ESO?! ¡SOY UN MONSTRUO IGUAL QUE TU!

 

-Por eso somos el uno para el otro-dijo, y sin más, capturo sus labios en un profundo beso.

 

-¡mng!

 

Aioros trato de resistirse, pero fue imposible. Algo, enterrado en los pedazos de su corazón, despertó en una explosión de placer, necesidad, y desesperación por el calor ajeno, y ese algo no podía ser otra cosa que el amor.

 

“¡No! ¡No de nuevo, por favor!”-suplico en su mente. Para cuando el castaño se dio cuenta, ya estaba correspondiendo al beso, y sus manos ahora libres, lo estrechaban con fuerza.

 

Se amaban, era cierto y mutuo. Se amaban a pesar de todo, pero a la vez se odiaban. Una hermosa mescla que hacía que sus cuerpos se encendieran y buscaran algo más que unas simples caricias, sin embargo, la lujuria no tenía cavidad en ese momento. Al menos, no todavía al estar  el castaño herido irremediablemente en su zona intima, una equivocación cometida por su pareja, pero eso ya no importaba. No podía arreglarse, así que aprenderían a vivir con ello, como aprendieron a vivir en guerra contra el otro.

 

Cuando se abrazan el amor y la muerte…tal vez muerte moriría enamorada, y amor amaría hasta la muerte.

 

Y aunque ese amor fuera enfermizo, demencial, repugnante, anormal, y prohibido, se entregarían a él como lo habían hecho en el pasado, esta vez, con la ventaja de no poder herirse. Porque el odio los obligaba a pelear, pero el amor les impedía matarse, y contra eso no podían combatir

 

Aioros empezó a llorar. Esto no debería haber sido así, estaba cayendo nuevamente y odiaba ser tan débil. Se suponía que iba a matarlo no a besarlo. ¡¿Qué demonios tenía en la cabeza?!

 

Por su parte, Ángelo solo sonrió plácidamente observando la inocencia que aun prevalecía en su castaño, esa inocencia que, aunque repudiaba, también amaba. Esa inocencia que intento borrar la primera vez, la misma que lo había hecho débil, y lo había llevado a actuar como lo hizo, lastimando a su amado castaño.

 

-Ángelo…

 

-Shh-coloco un dedo en sus labios, escuchando las sirenas de la policía  acercarse al lugar a toda prisa-No digas nada, Aioros. No debe haber más palabras de las necesarias, o separarnos será más difícil de lo que ya es-dijo suavizando su mirada, mostrando por primera vez en mucho tiempo algo de humanidad.

 

-La policía ya viene-dijo Aioria, pero fue ignorado por ambos-¡Oigan!

 

-Ángelo, yo…¡mng!-otro beso aún más intenso lo silencio.

 

-Ahora tendremos que irnos-decía el italiano sin borrar su sonrisa-Cada uno por su lado.

 

-¿Qué?

 

-No podemos estar juntos, Aioros. Yo soy un asesino, tu res un vengador, no hay forma de que vayamos en contra de nuestra propia naturaleza-empezó a repartir besos en su cuello.

 

-Ya veo-suspiro de placer-En tal caso, continuaremos con esta guerra interminable entre nosotros, pero para cuando lleguemos a coincidir nuevamente, como el sol y la luna en el atardecer, seamos uno en este amor enfermizo, ¿está bien?

 

-Bien, amor mío.

 

Se rieron, se besaron, y se separaron. Cada uno escapo por un camino distinto.

 

Aioria jamás volvió a ver a su hermano ni a Ángelo, nunca recibió una explicación clara sobre su decisión de abandonar a su familia, pero siempre lo justifico asegurando que su hermano solo cayo en la locura porque se enamoró, y no deseo saber más de ello.

 

Luego de quedar libre de sospechas sobre el asesinato de sus amigos, inicio su carrera como psiquiatra, y tres años después, se casó con Marín de Águila con quien tuvo a dos hijos.

 

La existencia de Ángelo Death Mask y Aioros, Death Killer, quedo guardada en los archivos secretos de la policía, y pronto se convirtieron en solo leyendas urbanas a las que nunca se les dejo de buscar.

 

Ni sus crímenes dejaron de surgir.

 

 

“Era enfermizo, demente, y repugnante, pero no pude evitarlo. Lo amaba, y el amor puede presentarse hasta en la más inmunda de las personas.”

 

 

Fin.

 

 

Notas finales:

Bueeeno, ya se que es fics taaaaaan raro, por no decir fracasado, pero lo escribi un dia mientras veia una peli de terror, y dije; bueno, puede que sea un fracaso, pero ya lo escribir, y asi decidi subirlo.

pliss, dejen reviews por lo menos para decir lo mucho que lo odiaron o algo asi, jejeje

 

gracias por leer de antemano, y los espero en la proxima actu con SUEÑOS SOBRE HIELO.

Finalmente el esperado encuentro entre Milo y Camus e dara, y se aproxima su primer contacto, esperenlo.

 

Luego la actu de PARECIDO, las dos parejas de dectives se encontraran fretne a frente y llego el momento de mezclar sus casos y trabajar juntos. ¿Que paso entre Kardia y Degel?

 descubranlo.

 

chao, chao


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