Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Depravity por Friday

[Reviews - 126]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Se que esperaban que aclarara cosas y en realidad no hice nada (?) Pero he decidido tomarme todo el tiempo del mundo (osea, el proximo capítulo) para eso.

Desde ahora y hasta que salga de vacaciones actualizare semanalmente.

 



Desde que tenía uso de razón Peter había vivido en la Torre con sus padres. No eran la familia más convencional del mundo pero a él le gustaba, incluso cuando iban al parque y los niños le preguntaban por su mamá. Pet siempre apuntaba a Tony o a Steve aunque ellos no fueran sus verdaderos padres porque Jarvis  le enseñó que habían distintos tipos de familias  y ninguna era mejor que otra, faltara una mamá, un papá  o un hijo. A veces las familias tenían perros y eso también estaba bien.


Peter era feliz con ambos hasta que decidieron divorciarse. En medio del trámite de divorcio unos hombres se lo habían llevado lejos porque odiaban a Tony y querían lastimarlo utilizando a su familia. Aun ahora que han pasado algunos años Peter tiene pesadillas sobre eso y evita inconscientemente los lugares oscuros y pequeños.


Finalmente y gracias a que sus padres decidieron seguir adelante y solucionar sus problemas Peter volvió con ellos sano y salvo. Y la felicidad regresó por unos días hasta que sus padres decidieron también adoptar a  Johnny. Apenas había cruzado la puerta de la Torre Peter se había aferrado a Tony con uñas y dientes, porque era evidente que Steve era el dueño de la idea original de traer al otro niño. Para su vergüenza, siendo ahora un adolescente, había intentado ignorarlo por unas semanas hasta que comprendió que ninguno de sus dos padres iba a dejar de quererlo por tener un hermano menor.  Así que desde el momento que incendiaron a medias el taller de Tony ambos se hicieron cercanos, y para alivio de ambos héroes, los mejores hermanos.


Eso no implicaba que no se metieran en problemas la mayor parte del tiempo.


-Peter espero que no hayas terminado ese traje tuyo para salir a saltar por las paredes porque desde este momento estas castigado- El castaño saltó sobre su asiento  en el taller y se volteó a ver a Tony. No esperaba que su padre bajara tan temprano en la mañana.


-Pero papá…


-Nada de peros, sabes que no tienes mi permiso  ni el de Steve para bajar aquí sin supervisión. Apenas tienes 14 años.


-Y tú a mi edad ya habías construido algo más que una tostadora. ¿Cómo voy a inventar algo sino me dejan entrar?


-Eso no-


-Además, papá tampoco te deja bajar tan temprano al taller.


Peter 1, Tony 0


- ….


-Aja, pero si tú no dices nada, entonces yo tampoco. Seré una tumba. Por favor- Y el mayor de los Stark en realidad no tenía ninguna moral para impedírselo y secretamente estaba muy satisfecho de que su hijo mayor amara de la misma forma que el la tecnología y la ciencia.
Suspiró dramáticamente, dejando su taza de café a un lado de su Tablet.


-De acuerdo pero nada de tu música cuando estés aquí.


-¡Si!


-Y en cuanto a esa idea de salir por las calles colgando de tus telarañas… –Peter se movió hacia la izquierda para que Tony se sentara a su lado, sabiendo lo que le diría su padre. No querían admitirlo en los vengadores porque era muy joven aun y blablabla, la escuela iba primero, mas blabla… - Aun no estás listo. Quizás cuando comiences la universidad.


-Para eso aún faltan años- Se quejó tomando algunas herramientas– Seré un anciano cuando me dejen salir de la Torre.


-Exacto. Tu padre comenzó a ser un vengador cuando tenía 97.


-¡Pero es el Capitán América!


-Y tu mi hijo. Lamentablemente Pet harás lo que creamos seguro para ti hasta que seas mayor.


Peter 1, Tony 1.


No podía creer que luego de aprender a utilizar sus habilidades sus padres se negaran a dejarles usarlas. Es cierto que la Tierra se mantenía en una relativa paz y que Los Vengadores no necesitaban estar al pendiente de todo, todo el tiempo. Pero Nueva York no era precisamente una ciudad tranquila y había mucho delito menor que él podía ayudar a resolver.
Para su mala suerte Tony Stark era un padre que si bien se mantenía ocupado con su trabajo en Industrias Stark y en los Vengadores, contaba no solo con una Inteligencia Artificial como ayudante sino que con dos. Y Friday y Jarvis eran demasiado leales a su creador para siquiera pensar en la idea de sobornarlos.


Y Steve Rogers los conocía a los tres como la palma de su mano y adivinaba sus movimientos mucho antes de hacerlos sin necesidad de una Inteligncia Artificial.  Además mientras no estuviera en una misión como comandante de S.H.I.E.LD  pasaba más tiempo en casa lo que significaba que nunca estaban solos. Y que fuera más comprensivo tampoco importaba a esas alturas pues una vez que sus padres llegaban a un acuerdo, nada ni nadie sobre la faz de la Tierra era capaz de hacerlo cambiar de opinión.


Así que Peter se había  conformado con ser un buen hijo, hermano y alumno todos esos años en la escuela, terminando en secreto su propio traje. Tenía pensado su nombre y sus habilidades siempre estaban en constante entrenamiento gracias a la Viuda Negra y al ex Soldado del Invierno por lo que sus padres sabían que la idea no había desaparecido para nada de su cabeza.


Incluso ambos espías habían intentado interferir pero la respuesta de sus padres siempre fue un no hasta que cumplió 16 años  y ya no pudo simplemente hacer oídos sordos  a su vocación como superhéroe. Una tarde luego de la escuela una patrulla había pasado frente a sus ojos siguiendo a un auto a toda velocidad. Peter no tardo en colocarse la máscara que siempre llevaba en la mochila para al menos no ser identificado fácilmente y entonces, como llevaba haciendo desde los cinco años se columpio por los edificios de Nueva York, siguiendo por aire al sujeto que ahora disparaba hacia la policía, logrando darle al vidrio delantero.


Sin pensarlo y agradeciéndole internamente al tio Clint por las clases de puntería, logro detener la patrulla disparando varias veces sus telarañas entre el semáforo y la esquina de una de las tiendas, creando una red para cuando los oficiales perdieron el control total del vehículo. En el último segundo se dio cuenta de la niña que había salido por la puerta delantera y la que por poco colisiona la patrulla sino fuera por la telaraña que logró dejarla unos metros más allá.


Aliviado al verlos a todos a salvo se dejó caer como si nada sobre el auto del delincuente, sacándolo del asiento del chofer. El automóvil derrapo unos metros antes de colisionar con un poste unos segundos después de que el saltara a la calle.


-Maldito-El delincuente estuvo a poco de lastimarlo pero logró envolverlo en telarañas antes de que las otras patrullas llegaran al lugar.


Satisfecho se columpió a casa. Se intentaría escabullir por las ventanas del Penthouse pero no contaba con que estarían cerradas herméticamente. Ni siquiera su habitación era accesible por ese lado de la Torre, no había forma de entrar sino era por el ascensor.
Maldiciendo su suerte Peter bajo hasta el primer piso y tomó el ascensor directo al Penthouse. Sus padres de brazos cruzados lo esperaban ya en el recibidor y supo que no había forma de librarse esta vez.


-Papá…


-Pensé que estaba claro que no tenías permiso para hacer lo que hiciste hoy en el centro Peter. Ese hombre podría haberte disparado y no tienes una armadura para defenderte de ese tipo de cosas.


-Si me hicieras una quizás no tendrías que preocuparte por eso- Y se maldijo internamente por responder.


-No es eso a lo que Tony se refiere Peter. Eres un niño…


-¡No! Ese es el problema papá, ya no lo soy ¿Y no eres tu quien me dijo una vez que si tenía en mis manos la posibilidad de defender a los demás…? ¿Si las cosas malas ocurren y tengo la posibilidad de impedirlo, no es mi culpa entonces que sucedan?


Peter 1 Steve 0


-No Peter. Y es nuestra última palabra, ¿Verdad Steve? - Tony espero la respuesta firme de su esposo pero Steve no perdía aún el duelo de miradas con su hijo mayor. - ¿Steve?


-Quizás podríamos pensarlo.


El genio de Industrias Stark lo miró prácticamente ofendido. Años habían pasado desde que tenían opiniones diferentes. Muchos más desde que era con algo relacionado a sus hijos.


-Bien -Tony se fue de la sala dejando a padre e hijo a solas. El rubio lo dejó partir sin poder evitar el suspiro cansado.


-Vete a tu cuarto. Que esté pensándome esto no significa que no estés castigado.


Peter asintió bajando la mirada. Iba por el quinto escalón cuando Steve lo detuvo una última vez.


-La niña de la tienda... ¿Está bien?


-Si papá. -El Capitán asintió orgullosamente. A Peter le bastó eso para sentirse el mismo en paz. Estaba haciendo lo correcto.



                                  ****


Habían tres cosas de las que Steve no se arrepentía jamás.


La primera era de la elección de ser el Capitán América. De pasar del debilucho Steve Rogers a el hombre que logro liberar a Estados Unidos de Hydra por unos años había mucha diferencia.


La segunda era haberse casado con Tony. Podían haber pasado terribles peleas entre ellos, un casi divorcio cuando Pet tenía apenas cinco años pero aún en los peores días, jamás se había arrepentido. Era definitivamente el hombre de su vida.


Y la tercera decisión habían sido sus hijos. Peter era sumamente brillante pero de perfil más bien bajo mientras Johnny se caracterizaba por atraer miradas gracias a su personalidad. No que no fuera tan inteligente como Tony o Pet, pero el rubio no sentía la necesidad de desarrollar aún más su potencial.


Eran sin duda las mejores elecciones de su vida y estaba dispuesto a cuidar de las últimas dos hasta la muerte.


-¿Tony?- al abrir la puerta de su habitación no fue precisamente su esposo quién lo recibió. El pequeño y metálico tsum tsum se refregó inmediatamente en su mejilla, haciéndolo reír. - Así que aquí estabas... Estoy bien, gracias por preocuparte.


En realidad los tsum-tsum tenían un lenguaje incomprensible para ellos pero Steve no tenía demasiados problemas en entender al pequeño que se había encariñado con él desde el principio. Había tomado la forma de Iron Man luego de escapar de la caja donde Los guardianes de la Galaxia los transportaban y parecía seguirlo a él por todos lados, como si también lo quisiera.


-Que el pequeño yo te bese no significa que yo te deje entrar en nuestra cama hoy Steve- Tony con la bata de baño y el cabello húmedo le lanzó una mirada resentida. Steve sabía bien la razón.


-Un día ellos tomaran nuestro lugar Tony. ¿Qué mejor que lo hagan cuando aún podemos guiarlos? - El tsum tsum se acomodó sobre su hombro aún pegándose a la piel de Steve. Su esposo caminó hacia la cama, ignorándolo prácticamente.


-Podríamos haberlo conversado antes de que tomarás la decisión.



-Lo sé cariño, ese ha sido mi error. No quise desautorizarte frente a Peter- Tony no se descruzo de brazos y se sentó en la cama, mostrándole las piernas al dejar la derecha sobre la izquierda. No estaba tan molesto observó el rubio.


-Pero lo hiciste. Quiero saber cómo me vas a compensar.


-Tengo algunas ideas en mente -Admitió desabrochándose la camisa. Tony se levantó sobre la cama, golpeando suavemente al tsum tsum que se echó a volar.


-No puedo creer que todos mis yo te sigan así. Incluso los extraterrestres.


-No te pongas celoso de un tsum-tsum.


-Jum... Ya encontraremos una versión Cap para mí- Steve le desabrochó la bata y sus placas bailaron frente a sus ojos. Se las había dado en su aniversario número 10 y Tony no se las quitaba jamás


-Mientras lo encuentras te puedes conformar conmigo.


Tony se subió en sus caderas, mordiéndole el lóbulo izquierdo.


-Eso es precisamente lo que voy a hacer.     


                                     ****


Finalmente y luego de muchos tira y afloja Tony y Steve le habían dejado ser Spiderman y asistir a una escuela pública como cualquier chico de su edad.


Y allí había empezado el calvario de lo que representaba ser un héroe adolescente.



-Spideyyyyy- Deadpool venía hacia él, brincando prácticamente sobre la azotea. El castaño había estado vigilando hace unos minutos desde esa posición y no evito la mueca molesta. Wade Wilson era algo así como un mercenario antihéroe masoquista con capacidad de regeneración que no perdía la oportunidad de subírsele, literalmente, encima. Por extraño que fuera, su sentido arácnido jamás se disparaba con él.


-Ahora no.


-¡Ahora es el momento adecuado, la noche es joven!- Y ahí estaba abrazándolo como si no le importara su opinión.


-¡Estoy ocupado! Que te invitara a comer un hot dog  no nos hace amigos.


-Ouch, estas siendo especialmente agresivo conmigo y es mi primera escena contigo- Wade asomó su rostro cubierto por el hombro derecho de Peter para mirar a la banda que estaba vigilando- Ya sé que los chicos malos no te ponen de buenas pero no deberías ser más agradable con tu futuro novio.


Peter casi se resbala de la azotea.


-¿Novio?


-¿Yo? ¿Me lo estas proponiendo Spidey?


-¡Claro que no!


-Que lastima, ya tenía pensado hasta el nombre de nuestro primer hijo ¿Qué piensas de Miles? Deben haber historias sobre nosotros siendo los padres de ese Spiderman de Ultim- ¿Spidey? –Peter se había dejado caer entre los hombres que componían la banda al verlos traficar drogas, esquivando efectivamente las balas y golpes. Wade aún sobre la azotea se sentó a observar, moviendo los pies lentamente.


Desde hace unos meses y solo por una estúpida coincidencia Spiderman y Deadpool habían terminado trabajando juntos para librarse de otro mercenario. Las cosas habían ido bien y Peter solo por esa ocasión había hecho oídos sordos a las recomendaciones de Tony sobre mantenerse alejados de locos psicópatas. Le había invitado un hot dog a Wade Wilson y desde día no podía quitárselo de encima.


-¡Dales duro Spidey!


-¡El próximo serás tú sino te callas!-Escuchó la estridente risa de Deadpool y sonrió el mismo sin darse cuenta.  Quizás hasta podría admitir para él, y solo para él, que las noches patrullando eran un poco más divertidas en compañía del mercenario desde hace unos meses atrás. No que no sintiera enormes ganas de lanzarlo desde la mismísima Torre. Más de una vez le había llenado la boca de telaraña por decir tonterías.


El problema comenzó unas noches más tarde. Había sido un patrullaje tranquilo sin ningún incidente y estaba por volver a casa cuando alcanzó a ver a Deadpool saliendo de un bar. Curioso lo siguió deslizándose por los edificios, perdiéndolo de vista precisamente en la esquina de la quinta avenida.


Peter se dejó caer sobre el pavimento y buscó señales del otro hombre. Unas manos alcanzaron su cuerpo antes de que pudiera notarlo, atrayéndolo hacia un callejón.


-¡Spidey!


-¡Deadpool, me diste un susto de muerte!


-Estabas siguiéndome- La voz del mercenario sonó mucho más profunda que otras veces y Peter supo que esa tenía que haber sido la primera señal. Solo que se la saltó olímpicamente.


-No sé de qué hablas- Pero lo estaba haciendo, era obvio. Se subió la máscara hasta la punta de la nariz, alejándose unos pasos.


¿Era su idea o estaba comenzando a hacer un poco más de calor?


-Por supuesto que lo sé. No cofias en mí y por eso decidiste ver si estaba en malos pasos. Eres muy fácil de leer Baby boy.


-No me llames así, ya te dije que mi nombre es Peter.


-Pete pie.


-¡No! Eres un… -¿Qué estaba sucediendo con él? Comenzó a jadear, fijándose en el cuerpo de Wade frente a él. El mercenario se levantó también la máscara, intentando acercarse cuando las manos del adolescente se lo impidieron.


-¿Spidey?


-No me siento bien- Susurró mirando hacia el cielo buscando una vía de escape aunque su cerebro solo le enviaba imágenes del cuerpo de Deadpool frente a él. Tenía que ser agradable aferrarse a su espalda y rasguñar el latex de su traje rojo… Sí, aún mejor si ese cuerpo estaba apresándolo a él contra una superficie dura.


Abrió los ojos aterrorizado de sus propios pensamientos alzando su mano derecha para lanzar su telaraña y huir siendo detenido por la mano de Wade.



-Creo que yo tampoco me estoy sintiendo bien- La voz profunda le mandó una corriente de placer por toda la espina dorsal-  Más bien lo definiría de otra forma.. –Se acercó hasta su rostro, eliminando la distancia con rapidez, sujetándole los hombros pese a que no había ninguna necesidad.


-Caliente- Terminó la oración el hijo mayor de los Stark antes de lanzarse a besarlo sin importarle nada más.

Notas finales:

Adoro a los tsum tsum asi que queria incluirlos en un fic <3

Gracias por leer y hasta la proxima semana!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).