El humano es alguien muy agradable Nyehehehehe, es amable, divertido y le encanta mi espagueti ¡Es el mejor amigo que alguien tan genial y grande como yo pudiera tener! Nyehehehehehe. Aunque… es una desgracia que no haya podido corresponder a sus sentimientos cuando me pidió aquella cita tan linda
Claro, también fue la primera vez que tuve una y gracias a la guía que había tomado, ¡Fue lo mejor del mundo! Por desgracia, mis sentimientos ya iban dirigidos a alguien en particular. Sans es mi hermano, el mejor hermano del mundo; aunque es un vago huesos flojos que siempre se la pasa dormido, es lindo ver sus sonrisas, escuchar sus malos chistes que crean sonrisas inconscientes en mi, su voz tersa y dulce, esa amabilidad con la que únicamente a mi me trata
La seriedad con la que se toma algunas cosas que son importantes para mí… incluso aquello que siempre se guarda para que yo no me entere y me siga protegiendo… él cree proteger mi inocencia, ojala pudiera decirle que la he perdido en su mayoría con la aparición de Gaster…
Ha… Gaster… como olvidar ese tan “Significativo” nombre que aun resuena muy de vez en cuando en mis memorias… después de todo ¿Cómo olvidar realmente a nuestro “Padre”? aquel monstruo que nos dio la vida a ambos y me permitió conocer a lo más perfecto de este mundo confuso. Es agradable recordar los primeros días cuando nos conocimos realmente Sans y yo, recordar los buenos momentos que desde siempre hemos tenido. Nosotros somos las partes de un mismo ser, tan rotos y separados que se terminan volviendo algo entero y al final han olvidado que alguna vez fueron uno mismo, pero aun así, obligados a permanecer juntos por siempre por el simple hecho de que alguna vez fuimos uno con el ser que nos creó
No negare que nuestro padre fue alguien curioso y confuso, amante de la ciencia y alguien que de buena manera siempre trato de ayudar al subsuelo, a todos los monstruos en su haber. El quería liberarlos a todos de la barrera, aun si para eso, debía de lastimar a ambos. Sin lugar a dudas algo admirable; cruel pero admirable debía de aceptarlo, pero… no era suficiente ¿Cierto querido padre?
Después de todo, también hubo un momento en que intento algo más que experimentación con nosotros… Sans se negó aquella vez, el recuerdo más traumático que de algún modo no existe más en su mente y por lo que doy gracias, pero… también la razón por la que nuestro “querido padre” haya caído “Accidentalmente” en su propia creación…
Pero bueno, ya no tiene importancia recordar, aun cuando me da risa recordar su mirada sorprendida, el aun seguía insistiendo que no podía ser cierto que alguien como yo me revelara por algo así, el seguía debatiéndose en voz alta que no era factible que yo “atacara” y que intentara lo que hice, pero nha, no es de importancia ahora. Aun cuando tengo agradables sueños donde recuerdo su “accidente” aquel momento donde aunque salí herido, el “cayó” en su creación desapareciendo por siempre, viéndome con sorpresa, con la confusión de la situación… claro, no había sido para menos
-mi hermano, me pertenece… solo… a… mi- recuerdo que le dije antes de lanzarle el ataque de aquel gaster blaster y un hueso que lo atravesó en su alma, lanzándolo directamente al núcleo. Fue divertido escuchar como preguntaba por mi hermano, aunque yo siempre me quede con una simple pregunta. Antes de caer al núcleo ¿El habría comprendido mis palabras o se desintegró sin comprender mis palabras? Me pregunto seguido, aunque realmente ya no importa. El no volverá a ponerle un dedo encima a mi hermano
-heya bro- escuché desde mis espaldas, al girar sonrío contento
-hola hermano- sonreí al verlo pasar a la cocina y sacar una botella de kétchup, hice un pequeño gesto de molestia que él no notó pero de todos modos, seguí preparando mi espagueti
-¿Cómo está el humano?- pregunte viendo a mi hermano quien sonreía tranquilo
-está pasando por Waterfall- dijo él de un modo tranquilo, recostándose en la mesa y suspirando cansado, sonreí al verlo como de costumbre, como un costal de huesos flojos que era
-tú también has tomado mucho interés en el humano ¿no esa así hermano?- pregunte sirviéndole un plato de espagueti, el lo miro y sonriendo tomo un tenedor y comenzó a comer
-solo estoy ayudando a alguien que me pidió un favor- me dijo, enarque molesto un ojo, después de todo, ya me había contado de la voz de una mujer que muy “gustosa” le pidió un favor que el ahora cumplía, aun cuando no me había dicho de que trataba, al ver que trataba con el humano, pude comprender en qué dirección iría aquello, así que
Si quería que el humano no viera a MI Sans, tenía que actuar, atraer su atención al gran Papyrus y así deje de lado a MI amado hermano. Había dado resultado… el humano estaba interesado en mi y no en Sans… más le valía al humano si deseaba seguir convida
*Pero de igual modo tenía que ver a mi Sans* gruñí mentalmente apretando el mango de la cuchara que tenía en ese momento, al haber visto el interés en ese humano por mi hermano me hizo enfadar más de lo que debería, escuche de nuevo la voz de mi hermano y sonreí tranquilo, sentándome para comer a su lado un poco de espagueti, el sonrió he hizo sus malos chistes que al final me terminaban haciendo sonreír y en ocasiones hasta reír
-bueno, es hora de que regrese al trabajo- se levanto y despidió de mi con su mano
-por cierto, gran comida bro, mejoras considerablemente cada día que pasa- sentí como mis mejillas se coloreaban de naranja mientras veía que el partía lejos, asentí contento aun cuando ya no estaba y casi estallo en alegría cuando él estuvo fuera de mi visión… a Sans le había gustado aun mas mi comida e incluso me había elogiado más que de costumbre… hoy era tan feliz que me sentía a morir
Riinnggg Riinngg
-hu?- escuche el sonar del teléfono, al buscar por el lugar pude darme cuenta que era el teléfono de Sans, así que lo tome
-¿hola? Al habla Papyrus- dije viendo al techo, pues el número que marcaba era desconocido
-ho! ¡hola cariño! Perdona ¿está tu hermano? Quería hablar con él sobre el trabajo- escuche la voz de alguien famosa
-¡ho, hola Mettaton!- sonreí mientras cerraba mis ojos, el respondió a mi saludo una vez más, preguntando de paso por mi hermano, aquello me hizo enfadar, ahora recordaba que… el… el también era un peligro para mi hermano… para MI propiedad
-bueno, mi hermano ha olvidado su celular, pero si quieres, puedo ir yo en su lugar para que me des el recado a mi- dije tranquilo, jugando con el plato de mi hermano, observando que no había dejado nada más que las manchas de kétchup, sonreí de un modo enamorado al ver que había comido con avidez y me sentí realmente feliz
-ho no cariño, no podría hacerte esto… ¿Qué te parece una cita rápida?- pregunto él desde el otro lado de la línea
-¿Una cita rápida?- pregunte dejando de lado el plato de mi hermano y sonriendo de medio lado con superioridad
-si, por qué no?... wowie, me encantaría una comida contigo Mettaton- sonreí, tratando de mostrarme lo mas “normal” que podía, era una desgracia que tratándose de mi Sans era algo mas difícil mantenerme “tranquilo y amigable”. Escuche la risita de Mettaton contento del otro lado y asintió
-nos vemos en un par de horas entonces cariño, ya sabes, en el restaurante de MTT, hasta entonces corazón- me dijo y colgó, yo suspire y sonreí de medio lado…
-sí, hasta entonces Mettaton- suspire guardando el teléfono de mi hermano entre mis ropas y observando una última vez el plato de mi hermano
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(N/A: sé que esto no se debe pero lo siguiente lo saque del comic que vi, solo que lo cambiare un poco… perdón por la interrupción, pero quería aclarar esto pronto)
Habíamos llegado ambos puntuales a la cita, el sonrió tranquilo mientras me llevaba en dirección del restaurante, agradecí mentalmente que no hubiera casi nadie en ese momento pues si las cosas iban como yo deseaba iba a ser seguro que haríamos algo más que “ruido”. De todos modos me mostré lo más tranquilo que se podía en aquella situación. Incluso mis ropas, aquellas que Sans había hecho especialmente para mi esta vez habían sido cambiadas… no era una cita especial así que solo lleve un suéter naranja a rayas y un pantalón café oscuro y algo ceñido, el me veía con sorpresa pero no me intereso mucho
Estuvimos en silencio algo pesado por un rato, al menos en lo que traían la comida, fue entonces que sonreí al ver la ligera incomodidad que se negaba a ser evidente en Mettaton, es una desgracia que yo pudiera aprender a leerlo sin tanto problemas, me causaba cierta gracia
-ho Mettaton no sabes lo afortunado que me siento de estar en una cita contigo- sonreí al ver su ego incrementándose de ese modo por unas simples palabras, quería reír de verdad, pero debía de seguir con mi actuación, después de todo, no quería que descubriera aun mis verdaderas intenciones
-después de todo soy un gran fan tuyo- sonreí realmente interesado… si tan solo no estuvieras interesado en mi hermano podrías ser de verdad alguien a quien deseas… es una lástima que te hayas interesado por la única criatura del subsuelo al que nunca debiste de ver realmente…
-ho cariño, realmente no es problema, después de todo me gusta tu compañía- ronroneo mientras entrelazaba sus robóticos dedos y apoyaba sus codos en la mesa, el me ha sonreído interesado pero con cierta amabilidad que me hizo sentir algo mal… Mettaton ¿Por qué te has tenido que fijar en mi hermano? Pudimos haber sido los más grandes amigos después de todo… es una lastima
De todos modos, he seguido con mi actuación, sonriendo suavemente, de ese modo gentil que siempre me ha caracterizado, con algo de emoción ante sus palabras, rasco un poco mi mejilla, bueno, no esperaba tan alegadoras palabras de la brillante estrella del subsuelo, supuse que no sería la gran cosa, pero también eran agradables sus muy factibles mentiras… digamos… que me ha hecho “sonrojar” aunque, si mi hermano las hubiese dicho, otra cosa muy diferente hubiera sido claro esta
-wowie Mettaton, debo admitir que me siento realmente alagado por tus elegantes palabras- menciono rascando con algo de nervios mi mejilla y una sonrisa algo tímida, puedo ver que el me sonríe contento, el ambiente es bastante agradable entre ambos, me gusta eso… aunque la emoción quiere apoderarse de mi…
-aunque… supongo que gustarías mas la compañía de MI hermano Sans mas que de la mía ¿O me equivoco?- mencioné guiñando un ojo, después de todo, el es MI hermano… no lo daría a nadie… ni siquiera a la estrella del subsuelo…
-haa!- gimió mientras su rostro demostraba la sorpresa por mi forma tan directa de ir con respecto a mi Sans, el se mostro preocupado y se inclino hacia delante levemente, era divertido hasta algo tierno verlo de ese modo tan nervioso… la estrella del subsuelo, aquella que nunca se cohibía y que siempre lograba amedrentar a su competencia, aquel robot carismático que siempre estaba en boca de todos ahora se mostraba tímido y algo más que avergonzado, con un rosa por sonrojo, dios, realmente era lindo de ese modo
-ho por… Papy… yo, yo realmente no quería… es solo... ¿Tu hermano ya lo sabe?... ¿Acaso soy muy vidente?- pregunta cada vez mas y mas nervioso, no puedo evitar que pequeñas risitas salgan de mi, aun cuando cubro mi boca para no ser tan evidente… Mettaton realmente se ve lindo cuando se muestra nervioso. Cuando por fin me he tranquilizado le guiño un ojo
-no, no en realidad- el parece tranquilizarse con mis palabras, ahora ha regresado a su lugar soltando un respiro de alivio y tratando de sonreírme abiertamente como hasta hace poco
-a decir verdad, si me lo permite la súper estrella; me gustaría darte un pequeño consejo sobre mi amado y preciado hermano, claro, si tú me lo permites- respondí tranquilo, guiñándole nuevamente mi ojo, el pareció emocionarse con mis palabras más de lo que yo tal vez y pude imaginar
-ho cariño, ¿Harías eso por mi? Realmente eres muy ama- sus palabras han sido cortadas de golpe, claro, igual que ha sido cortado el…
-wops… no quería crear desastre- dije parándome de mi lugar y observando el desastre que en mi rabieta había creado sin quererlo así
-bueno, ni que hacerle Nyehehe- dije dando algunos pasos hacia Mettaton quien aun por la sorpresa parecía no poder moverse y me miraba con una hermosa mescla entre el miedo y la confusión. Aquella mirada en el solo me hizo sentir el correr de la adrenalina en mí ser mientras era consciente de que yo era lo único que él veía
Camine hasta por fin quedar encima suyo ya que, por aquel golpe Mettaton había quedado en el suelo con la silla destruida debajo suyo y él clavado por uno de mis huesos azules justo en medio del corazón que llevaba en la zona de su estomago, razón por la que ahora no podía moverse, no si sabía lo que le convenía, el verdadero poder de los huesos azules es cuando hay movimiento, su ataque es mortal y si Mettaton (persona que conoce de nuestras habilidades) quería salir vivo de ahí, debía de mantenerse quieto… como una señal de stop… aun así, haciendo otro poco más a un lado la mesa que estaba tirada cercas suyo, observe con la sonrisa mas tranquila y confortable que tenia a mi ahora presa expuesta
-mi querido y gran amigo Mettaton- susurre mientras escuchaba que tímidamente el por fin avocaba a mi nombre con temor
-sin lugar a dudas la mas flamante estrella del subsuelo- sentencie mientras chasqueaba mis dedos de nuevo y creaba un hueso más del mismo color azul, ahora alojándolo con velocidad en su brazo derecho, claro, un pequeño gemido de dolor le invadió a mi presa mientras sus hp eran disminuidos por mi ataque
-tan atractivo como carismático… realmente un premio “gordo” en este lugar- enfatice cada palabra y mientras hablaba creaba otro hueso que sin piedad a atrapado su brazo izquierdo en esta ocasión. El suelta gemidos de dolor, la situación se vuelve excitante y antes de que el contrario pueda hacer algo, yo ya le he clavado sus hermosas piernas, ahora, le quedan no más de 10 hp… valla, es increíble ver el poder que puede tener un alma de color azul… y sin lugar a dudas, es cierto que aun con la situación, es hermoso ver a Mettaton en algo así
-pues aun y en tu situación te muestras tan perfecto y lleno de glamur- mencione desapareciendo por piedad los huesos que lo apresaban, después de todo, no creo que se vaya a mover si ha comprendido el concepto, además, preferiría que me prestara atención a mí y no al dolor que lo ahogaba, claro, no deje de lado mi idea de intimidación y cree un hueso que tranquilamente reposaba en mi mano, apuntando un extremo filoso hacia la garganta de la estrella
-que me dejas sin aliento belleza- susurre divertido, era cierto que la emoción me dejaba sin aliento mientras la punta del hueso azul se clavaba con lentitud en su cuello, el suelta gemidos ahogados y sus ojos ahora asustados me miran fijamente sin perder ni un solo movimiento
-tan perfecto y carismático, no es problema para ti tener a quien desees en tus redes, pero… solo te diré algo- susurre libreándolo por fin del hueso y subiendo su barbilla con el mismo, por supuesto, la sonrisa nunca desapareció de mi
-no me importa a quien quieras conquistas, pero a MI hermano Sans… no te permito que te le acerques- sentencio por fin mostrando una sonrisa prepotente y superior a quien me sigue con la mirada y una gran sorpresa
-¿te ha quedado claro… cariño?- pregunte divertido, notando en sus nervioso el asentir asustado aun, sonreí contento de que nos hayamos comprendido tan bien y estire mi mano. Era de esperarse que Mettaton desconfiara de mi después de lo ocurrido hace cosa de nada, pero de todos modos le ayude a ponerse de pie y le encamine con cuidado a la salida
-me alegra que hayamos podido pasar tiempo juntos, realmente el tiempo vuela con amigos ¿no es cierto?- el no me dijo nada, así que me despedí de él con la mano y recordé al humano… creo saber qué hacer con el…
Otro intruso que desea robarme a MI Sans…
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No ocurrieron más incidentes con Sans después de todo… el humano al que ahora conocemos por el nombre de Frisk nos libero destruyendo la barrera y siendo amigo de todos, wowie, me alegra haber sido su amigo, gracias a eso pudimos escapar… además, no tuvo tiempo de verse con mi hermano mientras viajaba por su aventura por todo Underground, eso me agrado.
El tiempo pasó rápido. Con ayuda de Frisk comenzamos a asentarnos a las afueras del monte Ebott, no me agrado que Sans charlara mucho con la reina o con Frisk, pero no podía hacer nada, el tenia su propia vida a la cual yo no podía entrar del todo… después de todo, el espacio personal era importante para él y no lo iba a arruinar… solo, habría que ser cuidadosos con las acciones a tomar
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Era un día como otro, el sol brillaba, Frisk estaba contento charlando de lo lindo con su madre adoptiva Toriel y con Asgore, intentando volver a unirlos en pareja, y al parecer le estaba funcionando pues la hermosa mujer cabra estaba sonriendo divertida de los diálogos del pequeño y el rey se veía aun bastante enamorado de la mujer que no parecía darse cuenta de la situación
-ho cariño~ para sorpresa de los presentes y de Sans que veía desde la distancia la reacción de la pequeña familia, la voz de Mettaton lo saco de su agradable concentración, viéndolo con algo de enfado y disconformidad, colocó sus manos dentro de los bolsillos de su chaqueta maldiciendo con pereza
-Mettaton ¿A que debemos tu visita hoy?- pregunto algo molesto Sans notando la radiante sonrisa en el monstruo que se contoneaba como a un felino. Desde que había salido del subsuelo había dejado de usar la apariencia de caja y ahora solo ocupaba su forma humanoide, sin embargo, esta vez Mettaton había visto la situación familiar y sabiendo de los esfuerzos del ex rey, no le iba a arruinar el momento, razón por la que se fue directamente con el esqueleto más bajo a observar aun las risas y diálogos familiares
-que grosero de tu parte corazón… yo solo venia a saludarlos- le guiño un ojo, ganando que Sans girara sus ojos con fastidio
-si buscas a Papyrus esta fuera, dijo que iría a dar un recorrido en el Underground junto a Undyne y la guarida real para cuidar que no vuelvan a caer humanos- explico Sans, aunque pudo ver que Mettaton sonreía aun mas cuando le dio aquella información, llenándolo de desconfianza al ver sus acciones
-¿Sabes cariño? Tu hermano realmente es un terrón de azúcar andante- le dijo guiñándole el ojo, Sans lo miro un momento desconfiado, pero asintiendo a su comentario, su hermano era genial, pero también era cierto que era muy “dulce”
-pero es mi amigo, ya sabes, tengo otro tipo de gustos- le volvió a decir, esta vez con una voz más sedosa e interesada hacia algo mas, Sans lo miro confuso, el no era tan inocente como su hermano, de igual modo, no quería comprender “cosas que no eran” así que solo desvió la mirada desinteresado, volviendo a ver a la familia que ahora marchaba lejos entre risas y platicas
-bueno, mientras no lastimes a mi hermano supongo que no importa lo demás- dijo aburrido mientras comenzaba a caminar, claro que su intento de seguir a la familia fue abruptamente borrado cuando sintió los brazos metálicos y flexibles del robot envolverse en su cuerpo y cargarlo, apegándolo rápidamente al pecho del mismo y siendo llevado “¡Prácticamente secuestrado!” por el glamuroso robot en dirección contraria al de la familia
-ho cariño… entonces deduzco bien si no te importa que te arrastre conmigo?- pregunto juguetonamente mientras se dirigían hacia la limusina que Mettaton ya había comprado pues, como a la espuma, había subido hasta las nubes su fama y bueno… dinero era lo que menos le faltaba, sin mencionar que Frisk iba haciendo un excelente trabajo con los humanos… realmente, precia como si la guerra de antaño nunca hubiera existido
Sans no dijo nada mas, aun cuando le dijera que no, Mettaton no escucharía, así que solo se dejo guiar aburrido, ahora recordaba que mientras estuvo en el subsuelo tuvo que trabajar como su guardaespaldas, aunque era un trabajo poco movido, de hecho, solo era quedarse en camerinos de cierta hora a cierta hora para esperarlo con ciertas cosas… de hecho, ni siquiera era un trabajo y ganaba bastante bien. Después de haber salido ya casi no había habido necesidad de verse, además de que Mettaton se centro tanto en su trabajo que realmente ni tenían tiempo de verse, así que… ¿Por qué no ir con tu ex jefe quien también es un intento de amigo? Simple… Mettaton parecía tener cierto interés para su hermano menor Papyrus y no le agradaba pues sabia los “gustos” que el robot tenia y muy posiblemente lo ocuparía como un desfogue o algo peor y, conociendo a su hermano tan amble, gentil y lleno de inocencia sin lugar a dudas lo último que sería recomendable es que esos 2 estuvieran juntos, en especial si por juntos uno se refiere a una “relación”
-ho corazón… hoy nos la pasaremos juntos un muy buen rato- sonrió Mettaton luego de que la limusina arrancara y Sans viera directo al robot que sonreía alegremente para el
-muy bien Mettaton, veamos que tan “buen rato” pasamos juntos- sonrió de medio lado Sans siguiéndole la corriente
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RIIINNNGGG RIIIINNGGG
-ho, hola, al habla Papyrus- sonrió mientras colocaba el teléfono en su cráneo por donde deberían de estar las orejas humanas, viendo a sus alrededores, se detuvo un momento para ver que se encontraba en medio de Waterfall justo donde estaban las flores echo sonando insistentes con unas cuantas alegrías, callando casi al instante de escuchar una nueva conversación ser sonada
-Papyrus, al habla Undyne, ya acabamos el recorrido por el día de hoy, vamos, es hora de volver a casa- dijo la capitana, Papyrus asintió contento
-enseguida Undyne, ya estoy por Waterfall, si quieres vallan adelantándose yo los alcanzo pronto- dijo comenzando a caminar
-muy bien, no demores mucho Papyrus- después de eso, la chica pez colgó dejando a Papyrus solo con sus pensamientos, el esqueleto sonrió y aun cuando su amiga ya había colgado, el se despidió en un suave susurro, siguiendo su camino con tranquilidad, hasta que ha pasado por un pasillo algo tranquilo, observando una puerta que muy raras veces debía de verse, justo después de haber pasado por una mesa donde había un queso…sonrió de medio lado, no necesitaba abrir la puerta para saber que o quien se encontraba ahí, solo siguió caminando y sonrió de un modo oscuro
-ahora que lo recuerdo… no hemos continuado con nuestro último experimento… papá- susurro divertido, apurando el paso para volver a su lado, aun había algo que necesitaba comprobar
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Eran pasadas de las 6 de la tarde, el crepúsculo aun se mostraba y Sans por fin era liberado de las garras de Mettaton, saliendo de la limusina frente de la casa de los hermanos, se vieron una última vez, Mettaton realmente parecía contento, con un leve rosa en sus mejillas y despidiéndose con la mano de un Sans que tranquilamente bebía de una botella de Ketchup y que por fin se despedía igualmente del robot
-me divertí mucho hoy cariño, ojala volvamos a tener otra cita así- le guiño el ojo, notando como Sans solo reía suavemente
-seguro, en otra ocasión será- le dio la espalda y se dispuso a entrar a la casa a paso lento, Mettaton se quedo observando hasta que el esqueleto entro en su hogar y cerró la puerta, partiendo de inmediato y soltando un respiro lleno de amor, pasando su mano por la zona del “estomago”, el lugar donde se encontraba la mayor parte de su alma y magia, sintiendo como palpitaba desenfrenadamente llena de diversión y alegría por lo que había vivido ese día con el esqueleto más bajo
Sans tal vez fuera un vago perezoso como lo describía su hermano, pero la verdad, es que era alguien completamente diferente, era divertido, caballeroso aun cuando sabia que el también era un varón, amable como nadie, uno no podía aburrirse con alguien como él, muy culto e inteligente, alguien que sin lugar a dudas sabia llevar una muy interesante conversación mas allá de los chistes o de los juegos de palabras. Por un momento, mientras el auto giraba en una esquina, Mettaton se pregunto si Papyrus se habría dado cuenta de esas cualidades de su hermano, además de siempre llamarlo huesos flojos o alguien que decía pésimos chistes
*supongo que no… Sans es reservado con sus cosas* pensó para sí, recargándose en el respaldo de la limusina, después de todo, eso era muy cierto, poder acercarse a Sans como un amigo y que este soltara todo su conocimiento mas allá de los chistes superfluos era todo un verdadero desafío, pero valía la pena si te encontrabas con el verdadero, algo que sin lugar a dudas Mettaton encontraba encantador… Sans no solo era alguien divertido, sino alguien con tantos misterios que se volvía seductor tratar de encontrarlos todos y más poder llegar a esa ruda y a la vez frágil existencia suya…
Pero mientras Mettaton fantaseaba desde el modo más inocente hasta el más oscuro y perverso con el esqueleto mayor de los hermanos; Papyrus, quien había llegado desde hacía varias horas de la patrulla que se hacia una vez a la semana en el Underground veía con molestia como salía su hermano de la limusina, chirriando sus dientes se preguntaba si no había dejado bastante claro aquella vez que le amenazo para que no volviera a acercarse a su hermano… pero eso ya no importaba, solo ver como Sans caminaba en dirección a la casa; así que corrió a la cocina donde anteriormente había estado haciendo su famoso espagueti
-estoy en casa- escucho la canturreante voz tranquila de su hermano y sin poder evitarlo salió casi corriendo para recibirlo con una sonrisa
-¡Sans! ¿Dónde estabas? Creí que estarías con la reina y Frisk- trato de hacerle charla, el esqueleto más bajo solo asintió tranquilo y fue en dirección al sofá a sentarse para estirar sus huesos con cansancio
-sep… pero llego Mettaton y me secuestro- dijo como si nada, y Papyrus dio gracias de que Sans no lo estuviera viendo pues pudo sentir claramente como su sonrisa desaparecía para dar paso a un rostro sombrío y siniestro, lleno de ira y molestia mientras sentía deseos incontrolables de asesinar a Mettaton… un momento ¿Por qué solo pensarlo?
-y… ¿No te negaste?- trato de volver a sonar confuso y no tan neutral y frio como había sonado, por suerte, Sans no había prestado atención a eso
-nha… ya sabes cómo es cuando se le mete algo a la cabeza… era más fácil decir que si a un no y tenerlo pegado todo el día pidiendo con rostro de cachorro por lo que pide- dijo recostándose en el sofá y prontamente quedando dormido
*pudiste haberlo matado entonces* pensó con molestia volviendo a la cocina y viendo la olla aun hirviendo con los espaguetis dentro, sintió su ira nacer, agito con más agresividad que de costumbre los espaguetis y desbordo en ellos y su creación toda la energía que sorpresivamente tenia, sopesando sus pensamientos, tratando de comprender varias cosas más, hasta que, en su rabieta cayó en cuenta de una MUY buena idea que sin lugar a dudas llevaría a cabo de inmediato
Acabo y sirvió los platos para ambos, se encamino a despertar a su hermano que aun dormía como una piedra en el sofá, al verlo así, durmiendo tranquilo, olvido incluso lo que estaba haciendo, solo observando su rostro tranquilo, recordó que cuando trabajaba para Mettaton, su hermano solía llegar realmente muerto del trabajo, aun cuando el mismo dijera que no hacía nada, recordaba que dormía mucho más que en ocasiones anteriores, por suerte, los trabajos que Mettaton le pedía eran tan esporádicos que no era seguido verlo así de cansado
Suspiro algo molesto, no le agradaba que Mettaton pidiera tanto tiempo a su hermano, se supone que por eso le había dado la advertencia, pero parecía realmente que el robot no valoraba su vida, así que no podía hacer nada en ese sentido, solo cumplir con su amenaza… aunque, por ahora, lo único que le importaba era ver el tranquilo rostro de su hermano mientras dormía, saboreando mentalmente como seria poder probar su cuello en ese momento, saber cómo reaccionaría ahora que estaba todavía más expuesto que nunca, poder escuchar sus dulces gemidos mientras lo llamaba de ese modo necesitado con el cual siempre fantaseaba… negó con la cabeza, tratando de no lanzársele encima, tosió lo mas que pudo, carraspeando su voz y por fin moviendo con suavidad a su hermano en sus hombros
-Sans… hey Sans… despierta ya, ya está la comida hermano- pidió suavemente, Sans se removió un poco girando y gruñendo levemente soñoliento, Papyrus tuvo que seguir tratando otro poco mas hasta poder despertarlo
-vamos huesos flojos, ya está el espagueti- dijo sonriente, cargando a su hermano con cuidado y llevándolo hasta la cocina, sentándolo en la mesa en su lugar correspondiente y seguidamente tomar el también su lugar
-el Gran Papyrus ha hecho la mejor comida del mundo para el mejor hermano del mundo- sonrió superior colocando su puño en su pecho, Sans sonrió dando las gracias
La comida fue tranquila, Papyrus contaba un poco de lo que había hecho junto con Undyne y el grupo de expedición y finalmente, acabando la comida, ambos fueron a sus respectivas habitaciones, ambos estaban realmente agotados ese día…
O eso creyó Sans…
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Era tarde… ¿Tal vez la una de la madrugada? Eso no parecía serle de importancia realmente, solo el haber logrado con ayuda de la comida sedar perfectamente a su hermano. Salió de su habitación, caminando holgadamente por esta, entrando a la habitación de SU Sans, lo mira dormir tan perezoso como siempre, lo arropa con cuidado y lo mira dormir otro momento más, no aguantando mas, se sienta en la orilla de su cama y acaricia con amor su cráneo, viendo que tan dormido se encuentra que no despertara hasta la mañana…
*los sedantes funcionan bien* se dijo luego de observarlo otro poco he irlo moviendo lentamente, negando un poco se inclina y acomodando un poco el rostro de Sans, en la oscuridad y el silencio de la habitación se escucha apenas a la lejanía un pequeño “Clank” Papyrus ha cumplido su deseo de besarse con su hermano, aun cuando desea que aquel beso sea más intimo, un nuevo “Clank” suena, esta vez, le ha besado en la frente para no insistir mas
*quiero comerlo ahora* se dijo impaciente, acercándose para poder olfatear su aroma, pero regresando a su posición original y levantándose casi de inmediato de la cama
-no debo… tengo cosas que hacer hoy- se dijo, cerrando los ojos y desviando su mirada del cuerpo de su hermano, lo mira una última vez con una suave sonrisa tierna y asiente
-no te preocupes Sans, me asegurare que nadie interfiera entre nosotros jamás- le sonríe con todo el amor que le tiene, despidiéndose con un nuevo “Clank” entre los dientes de ambos, Papyrus sale de la habitación de Sans y por fin se encamina con paso decidido a su objetivo…
La noche es fresca, cala los huesos pero eso poco le importa al más alto, solo observa la oscuridad, hoy no hay luna, eso le parece aun más perfecto a Papyrus, recuerda los entrenamientos a oscuras que había tenido con su amiga Undyne y sonríe tenebrosamente…
-hoy es una noche perfecta para ir de caza- susurra sonriente
… … …
Habían pasado horas desde que Mettaton había acabado por ese día con su apretada agenda de estrellato, no le molestaba en absoluto, pero era cierto que por el amor a su carrera no había podido atender correctamente a su “otro” amor… El esqueleto más bajo de entre los hermanos era algo que se volvía una obsesión adorable para poder tenerlo… Mettaton seguía fantaseando con poder tenerlo en su cama, el era versátil, le daba igual quien fuera el activo en ese tipo de situaciones, pero solo deseaba poder estar en ese tipo de “intimidades” con el contrario
De tan solo pensarlo su alma se emocionaba y su cuerpo robótico no servía para lograr apaciguar la pación que nacía en él… pero había logrado aprender con el tiempo a calmar su agitado ser, ahora, se encontraba durmiendo plácidamente, soñando con un día tener algo más que una relación con el esqueleto más bajo, tenerlo en su vida mas allá de su cama, poder ¿Quién sabe? Tal vez ¿Hasta tener una familia con él? Le parecía la idea más encantadora, tener uno o ¡tres! Tres hermosos hijos del esqueleto, sería perfecto para todos, para el mundo… para él…
-mmmm… Sans…- susurro aun entre sueños, completamente ajeno a saber que Papyrus, su posesivo y sobreprotector hermano menor lo observaba con un rostro lleno de asco
No se lo pensó demasiado, solo activo su ojo derecho en un color naranja, un hueso atravesó el hombro de un Mettaton EX (quien en su agotamiento, incluso había olvidado salir de su traje robótico). Un gemido de dolor ahogo el ambiente, Mettaton había despertado con el dolor y el miedo recorriendo su ser entero
Le demoro un par de minutos para poder acostumbrar su cansada mirada a la oscuridad que le rodea, buscando con la mirada logra encontrar un resplandor naranjo que brilla tenuemente entre la oscuridad de su habitación, escucha pasos y una suave risa nasal que no reconoce, ha caído de su cama pero puede sentir la penetrante mirada sobre su ser
-¡¿Quién eres?! ¡¿Qué haces en mi casa?!- pregunta asustado y tratando de levantarse, luchando tanto como le es posible de poder mostrarse molesto y superior, pero en su lugar, por fin escucha una risa suave y divertida que reconoce perfectamente al instante
-ho Mettaton, has sido un chico más que malo ¿Cierto basura?- pregunta divertido mientras crea huesos azules que se entierran de nuevo en el cuerpo de la estrella aferrándola sin problemas al suelo de su habitación, Mettaton mira asustado al frente, Papyrus ha tomado la oportunidad para prender la luz de la habitación, una habitación rosa pero llena de glamur después de todo, sin embargo, era lo de menos, Mettaton podía ver la mirada fría y perdida del esqueleto más alto que, con paso tranquilo se acercaba sin problemas frente suyo
-P-Papyrus- susurra aterrado de verlo en su habitación y en especial con un hueso largo con el que esta apuntándole directo a su cuello, Mettaton traga duro, asustado de lo que ve, supone bien que el esqueleto ha venido por una única razón…
-Mettaton… creí haberte dicho que no quería que te acercaras a mi hermano Sans- masculló molesto mientras un nuevo hueso aparecía y se clavaba como a una filosa daga en su cuello, creándole más heridas, Mettaton soltó gemidos ahogados mientras veía al contrario apuntarle con la punta afilada de uno de sus huesos, este, de color naranja
-te lo dije… Sans es solo mío…- masculló, desapareciendo su hueso para transformarlo con ayuda de varios huesos mas en lo que suponía un tipo de guadaña bastante afilada. Mettaton trato de hacerse hacia atrás, logrando quitarse de encima los huesos de Papyrus a salido corriendo, lo más lejos, saliendo por la ventana, Papyrus bufa con enfado, rodando sus ojos pasa por la misma ventana y salta, encontrando rápidamente al fantasma asustado que pese a todo trata de dar batalla sin lograr mucho
La carrera comienza, cada cierto tiempo, aun cuando Mettaton escapara, era no solo encontrado, sino cortado por el mismo Papyrus quien sin piedad continua rebanándolo hasta dejarlo casi inservible. Finalmente llegando a un callejón sin salida bastante deshabitado y lejos de todos los presentes, Mettaton no ha resistido más y ha caído al suelo, su cuerpo robótico se deshace a cada paso, ya no posee un brazo sin mencionar que mira hacia atrás con terror a quien aun continua persiguiéndolo. Papyrus por fin le ha dado alcance aun con su caminar tranquilo y ese hueso a forma de guadaña cargando en un hombro
-¿Sabes? Me agradas mucho Mettaton, pudimos ser muy buenos amigos, tu amistad era genial para mi… pero tenias que meterte con lo único que estaba prohibido en todo el Underground…- le explica de un modo tranquilo, con un intento de sonrisa gentil que rápidamente cambia a un rostro inexpresivo y bastante frio, ajeno al Papyrus que el mundo entero conoce
-te advertí que no te acercaras a mi hermano Sans… te lo dije Mettaton, podías conquistar a cualquier ser vivo en el sub suelo o en la superficie, menos A. MI. HERMANO- masculle comenzando a agitar la guadaña con maestría, creando más y más cortes hasta finalmente dejarlo con un mísero 1 de hp
-Sans es solo mío… y no lo daré a nadie jamás…- masculló por lo bajo, por fin, enterrado la punta del arma en el estomago del robot quien sin poder defenderse termino volviéndose no solo chatarra, sino su alma destruida y al final vuelto únicamente polvo… Papyrus miro la escena y suspiro con fastidio, regresando por fin a casa de un modo lento y tranquilo
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Allá fuera todo era un caos y escándalo… luego de que fuera encontrados los restos de lo que alguna vez fue Mettaton, todo el mundo estaba en un fuerte estado de Shock, por lo que se había visto, en los restos del cuerpo robótico de Mettaton, el mismo había sido cortado como rebanadas de jamón sin piedad, hasta haber acabado con su vida misma, Papyrus parecía también muy consternado, después de todo, el robot estrella era amigo de ambos hermanos, Sans se veía también consternado, pero no tanto, el por en cambio, parecía serio con la situación… solo había una persona que podía haberlo hecho… y esa persona era…
Había aparecido rápidamente frente del humano que se encontraba desaparecido, lo encaro con fiereza, pero apenas lo había girado, encontró su miedo, sus ojos lloraban, su cuerpo temblaba, su ser entero se mostraba asustado, pero lo más importante… su hp y su lv no había subido en absoluto… seguía tal cual
-explícate- ordeno de inmediato, sin embargo, Frisk había negado rápidamente, apareciendo a su costado la flor parlante quien con un mirar fiero defendió al humano
-el no hizo nada, estuvimos juntos toda la noche escapando de sus padres por qué hacían mucho ruido en su habitación… fuimos a la casa de Undyne y Alphys, así que será mejor que no sigas jodiendo- mascullo la flor, Sans se quedo un momento callado, observando, era cierto que las heridas que tenía el cuerpo de su amigo Mettaton eran tan parecidas a las cuchillas y no habían humanos por esas zonas, ellos aun seguían viviendo a las faldas del monte Ebott, aun no habían humanos por los alrededores mas allá de Frisk y ningún monstruo usaba armas filosas como lo eran las cuchillas… así que…
-si no fue Frisk… ¿Quien lo hizo?- se pregunto Sans cruzado de brazos y colocando una de sus manos en su barbilla tratando de recordar a todos los monstruos del subsuelo, pero ni siquiera Frisk sabía nada al respecto, así que solo se encogió soltando lagrimas de tristeza y de impotencia, Sans al notarlo se acerco y palmeo suavemente su cabeza
-tranquilo chico, sé que es duro pero todo estará bien… de algún modo- dijo este, notando como Frisk asentía suavemente y se abrazaba al esqueleto quien, aun con la sorpresa acaricio suavemente sus cabellos
… … …
-tks… así que tenía razón- se dijo suavemente mientras se marchaba del lugar. Papyrus aun tenía muchas cosas que hacer y valla que ya tenía una siguiente presa en su lista, sin embargo, por lo que había visto, ese día Sans no vendría a casa tan pronto, el tenía tiempo de mas para hacer “ciertas cosillas extras”
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Era tarde, el crepúsculo se mostraba lentamente, Sans por fin volvía a casa de ambos hermanos, después de todo se había quedado todo el día con la familia Dremmur y con el humano, pasando el rato y ayudando para que estos se reconciliaran, así como ser cómplice de algunas maldades del humano para que quedasen mas juntos. Pasaron el rato con Undyne y Alphys viendo animes, aun cuando Sans había terminado dormido a los diez minutos de apenas ver el primer capitulo
-ya estoy en casa Paps- dijo al entrar a su casa
-¡Bienvenido hermano! ¿Cómo está Frisk?- salió de la cocina Papyrus observando a su hermano, el mencionado sonrió tranquilamente mientras se iba a sentar al sofá
-algo alterado pero ya mejor… es un chico fuerte- le dijo cerrando sus ojos y prendiendo la televisión, Papyrus lo observo un momento desde la cocina, sonriendo de medio lado con amor asiente y le da la espalda
-seguiré con el espagueti, no me falta mucho- sonrió para luego marchar de vuelta a la cocina, solo recibiendo un asentimiento de parte del esqueleto más bajo. Papyrus continúo en silencio con su obra de arte, observándolo fijamente, sonríe de medio lado yendo directo hacia el refrigerador sacando la última botella de kechup que le quedaba a Sans
Saco de entre sus ropas una pequeña botella que había sacado de aquel laboratorio y con cuidado lo vertió dentro de la botella de kétchup, sonriendo oscuramente cierra la botella y agita vigorosamente hasta cansarse, finalmente dejándola de nuevo donde la había encontrado. Gira con el rostro más normal que tiene y continua preparando su espagueti con una gran sonrisa y lleno de una muy futura tranquilidad, aun cuando en ese momento, lo que siente, es una emoción embriagante, una dosis de adrenalina que le carcome por lo bajo
La cena pasa tranquila para ambos esqueletos, Sans no se ha dado cuenta de la droga somnífera en su platillo, Paps ha sido bastante hábil creándolo insaboro he inholoro, así que carga con el cuerpo durmiente de su hermano, acobijándolo en su cama, besa su frente y baja entre pequeños “Clank” hasta sus dientes donde con más fuerza y repetición se escuchan los “Clank” sonar; Papyrus suelta un suspiro lleno de amor y mira fijamente a su amado hermano, acariciando su cabeza sale por fin de la casa… la noche se cierne nuevamente sobre el monte Ebott y sobre él, hoy, apenas la luna comienza a brotar… no hay problema, es tan mínima su luz, que podrá con su cometido antes de que alguien pueda decir
“espagueti”
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Eran pasadas las 8 de la noche, Frisk había ido a ver a Alphys y Undyne una última vez, después de todo, Undyne le había dado un “entrenamiento especial” para que se cuidara del posible peligro, pues era obvio que no se sabría pronto lo que había pasado con Mettaton, hasta entonces, Shyren y Napstablook eran los encargados de hacerse cargo de su show junto a otros productores mas… aun cuando todos estuvieran en luto por el mismo, pero como bien decía Mettaton “El show debe continuar” y eso harían sus amigos… Frisk aun se encontraba seriamente afectado… Sabía que no había sido el o Chara, lo hubiese notado y aun así, hasta Chara lo había negado… entonces ¿Quién podría ser capaz de algo así para con su gran amigo? Porque era cierto que para Frisk los monstruos no eran solo sus amigos sino su familia…
Tan consternado y en sus pensamientos se encontraba que no había notado que desde hace bastante se había desviado de su camino para volver a casa con sus padres, trago duro cuando se dio cuenta de este hecho; mas de pronto se sintió vigilado. Con un creciente miedo recorriéndolo comenzó a correr tratando de buscar el camión de vuelta a su hogar, pero no importaba que tanto corriera solo lograba perderse más y más
-¡Frisk!- escucho detrás suyo una voz que reconocía bien, al girar su mirada a sus espalda se ha encontrado con Papyrus caminando hacia él con un mirar preocupado, gracias a esto, Frisk a soltado un suspiro lleno de alivio, colocando una mano en su pecho, suelta el aire que inconscientemente había mantenido en su interior y da un paso hacia delante del esqueleto, siendo detenido casi al instante por la voz de Chara
*algo no anda bien aquí… no te le acerques Frisk* escucho desde sus espaldas la voz de Chara y entonces, confuso se quedo en su lugar, tomando sus manos frente de su pecho pegados, tratando de pensar en algo coherente… ¿A quién debía de creerle en ese momento?
-Frisk… ya es muy tarde ¿Qué haces por esta zona del bosque, tan lejos de casa?- escucho la pregunta de Papyrus mientras este extendía sus brazos en dirección del humano, claro, su rostro se mostraba preocupado y cambiaba rápidamente a una sonrisa gentil e inocente, como esas que siempre mostraba para su buen amigo
*le dices a Papyrus que te has perdido* el esqueleto más alto sonríe suavemente y asiente al comentario, casi parece divertido… un escalofrió le recorre su espalda mientras observa un mirar extraño en el esqueleto más alto y un sentimiento de peligro se acuna en su pecho
-ya veo… eso es muy bueno- es lo siguiente que escuchan junto al llamativo sonido que se crea al comenzar con una batalla. El lugar en penumbras se vuelve en oscuridad completa y dentro de la caja negra se encuentra encerrada su alma carmesí mientras que delante suyo puede ver a Papyrus quien sonríe de un modo oscuro y que comienza a preocuparle y asustarle
*¡Te dije que algo no iba bien con ese payaso gigante!* le reto y grito alterado Chara, sintiendo Frisk desde su espalda las manos del fantasma tratando de apretar sus hombros y hacerlo hacia atrás para correr o mejor dicho, escapar…
*le preguntas a Papyrus que ocurre…
*no ha pasado nada
-Sans es solo mío… ni Mettaton ni tú me lo van a robar… humano- es la única respuesta que recibe después de un prolongado silencio y junto a ella, así como con Sans; en un repentino primer ataque abrumante del cual de un solo milagro y con ayuda de Chara, han logrado salir apenas con 10 hp de vida, siendo Frisk quien se alegre de salir vivo… pero ahora solo puede ver con miedo y confusión la situación y al esqueleto más alto que lo mira de un modo frio
*le preguntas a Papyrus por sus acciones… pero no recibes respuesta
*¿Aun no entiendes? ¡El mató a Mettaton!* le reclama Chara desde su mente y con nervios, casi podría decir que con miedo o preocupación de mas… Frisk también lo había comprendido desde que el esqueleto contrario había hecho el comentario pero Frisk aun se negaba a creerlo, no podía ser cierto que alguien como Papyrus hiciera algo así, el quería creer que Papyrus se refería a otra cosa… sin embargo con el primer ataque una extraña melodía corrupta parecida a una combinación entre megalovania junto a la canción de Papyrus comienza a sonar ambientando la batalla… tal y como había sucedido con la batalla contra Sans
*le preguntas a Papyrus por sus acciones… el comienza a atacarte
*¡Maldición, Frisk corre!* escucha la voz de Chara gritándole, por una vez el humano está dispuesto a escuchar a Chara pero al ver entre sus opciones, el huir no está disponible… Frisk no puede escapar y al no tener algún tipo de alimento, solo ha podido sobrevivir de milagro, apenas con 2 hp de vida. Respira agitadamente tomándose un brazo con dolor, observando a su amigo Papyrus quien sonríe de medio lado con burla y un mirar de superioridad impropio de él…
-¿sabes…? hay cosas, muchas cosas que Sans no sabe sobre mi- dice divertido, el ambiente negro ha desaparecido dejando ver de nuevo el bosque en completas penumbras, Papyrus comienza a caminar tranquilamente en su dirección, girando un hueso que en su punta se muestra afilada, al estar a un paso de distancia, Papyrus observa a Frisk sonriendo con burla y prepotencia
-hay muchas cosas que también ignora sobre nuestra relación- responde elevando el hueso
*hehehe… entonces ¿Qué harás cuando el sepa que has aumentado tu lv por habernos asesinado esqueleto idiota?* la voz de Chara, saliendo de la voz de Frisk lo hace detenerse un momento y ver con cierta sorpresa y duda a su amigo humano, cambiando su expresión a una sonrisa de completa confianza
-realmente no sabes nada ¿cierto Chara?- la simple mención del nombre de Chara ha sacado a ambos humanos de concentración, para ver con asombro al esqueleto que se ha soltado a reír estrepitosamente con burla maniaca pero elegante de algún modo, haciéndose hacia atrás
-¿Qué? ¿Creías que no sabía nada sobre ti? ¿O que Frisk me mató en una ocasión? No jueguen conmigo ustedes dos- dice divertido, clavando el hueso en el pecho del humano, haciendo que este suelte un fuerte grito de dolor que es callado por los arboles, Papyrus simplemente enterró y saco el hueso, dejando que este comenzara a desangrarse
-no te apures… tus poderes dejaran de servir después de los primeros meses así que ya no podrás resetear y para asegurarme de eso- dijo divertido, usando su magia azul y tomando el alma del humano quien con sus ojos aterrado veía al esqueleto presionar su corazón
-y no te apures… la “persona que habla con las manos”* me hizo un poco más “especial” que mi hermano Sans- sonrió oscuramente dejando ver sus dientes y esas malas intenciones en su ser
-aun cuando te mate millones de veces, mi lv nunca aumentara, mis poderes y resistencia lo harán, pero nadie sospechara porque sigo entrenando con Undyne… así que, no te apures, nada será desperdiciado- le guiño un ojo, clavando por fin un último hueso en el pecho de Frisk, este por fin llega a 0 de vida…
-hay cosas que Sans no sabe sobre mi… y preferiría que siguiera así- escucho una última vez antes de que su alma, para sorpresa incluso suya, no fuera destruida como sucedía normalmente, sino que alcanzo a ver que Papyrus simplemente colocaba su corazón en su boca, masticando con fuerza, al momento de destruirla delante de los ojos de Frisk, brota de ella un brillo rojizo que es tragado sin problemas por Papyrus
Al fin, la vida se ha ido de su ser… y no hay manera de que alguien pueda saberlo… incluso Chara es consciente que de algún modo, Papyrus ha logrado “acabarlos” eternamente…
Frisk ya no puede resetear… no podrá hacerlo jamás
Y como si de un monstruo se tratase, Papyrus puede ver con una sonrisa como el cuerpo del humano desaparece sin dejar una marca de lo que alguna vez llego a ser
-nye… hehe… hehe… Sans… ya no queda nadie que se interponga en nuestro camino- masculle por lo bajo dando vuelta y marchando de vuelta a casa… a su hogar
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Despertó al escuchar el cantar de las aves y el amanecer mostrándose en su ventana, se sintió como nuevo, pero aun antes de salir de la cama observo fijamente su pecho, activando su alma, puede ver que su lv seguía aun en uno, su vida no había cambiado y sus poderes por igual, suspiro aliviado y giro a su costado, en su mesa de noche se ocultaba un diminuto frasco donde se encontraba un alma rojiza mucho más pequeña que las almas comunes… era el alma de la Determinación. Sonrió de medio lado contento y lleno de orgullo, lo guardo en su caja y por fin salió de su cama, después se haría cargo apropiadamente del alma de Frisk*
Salió preparado de su habitación, se encamino a recalentar el espagueti que había sobrado de la noche pasada y un rato más tarde vio entrar a su hermano por la puerta, saludando perezosamente al contrario. Repitiendo la rutina de siempre, Papyrus se hizo el desatendido cuando lo vio sacar del refrigerador la última botella de kétchup que quedaba, suspirando y viéndolo beber
-¡Sans, no comas eso antes del desayuno!- le regaño como de costumbre, escuchando sus pésimos chistes, el desayuno transcurre tranquilo hasta que escuchan la llamada del teléfono de la casa, Sans es quien se encamina a contestar, aunque rápidamente aleja el auricular de su cráneo, incluso Papyrus que se encuentra a la distancia puede escuchar el grito de Undyne llamando por ambos hermanos. Sans asiente y por fin después de un par de minutos termina colgando, soltando por su parte un suspiro de cansancio
-¿Qué ocurre?- pregunta preocupado, el esqueleto mayor lo observa con un mirar preocupado pero finalmente parece responder a su voz
-Frisk desapareció, nos quieren a todos para su búsqueda- dijo. Ahora era que recordaba Papyrus que Sans era un centinela y con ayuda de sus Gasters Blasters tenía una gran ayuda, la única razón del porque solo había un centinela era porque Sans no necesitaba ayuda, era eficiente como ninguno; con sus propias manos, su magia en todo caso, tenían más que suficiente para envolver todo el subsuelo, era un trabajo algo pesado pero era bien sabido que no era que pasara mucho en el subsuelo… y además, a Sans le daban una aun mejor paga que si trabajara con Mettaton, sin embargo, Papyrus debía de actuar de inmediato si no quería crear sospechas en su hermano
-¡¿Frisk desapareció?!- grito alterado, Sans asiente y ambos por fin salen juntos, se miran entre ambos y comienza la búsqueda, Sans chasquea sus dedos apenas sale de la casa y un grupo de 7 gaster blaster aparecen partiendo por todo el bosque, Papyrus se mantiene cercas de su hermano, ha bebido de la botella de kétchup, sabe que no puede dejarlo solo por mucho tiempo ni a una larga distancia… así que lo sigue de cercas. Ambos hermanos pasan la tarde haciendo preguntas, Undyne los arrastra de un lado para el otro buscando, Alphys pide ayuda a las amalgamas y Undyne a toda la guardia real, entre Sans y Papyrus se quedan a buscar por los alrededores, de cuando en cuando Sans trata de mantener consolada a la mujer tratando de aliviarla, contando sus tan malos chistes que a veces, ni siquiera Asgore soporta pero por lo menos parecen tranquilizar a la mujer
El día transcurrió y para sorpresa de todos, ya era pasada del atardecer, Sans y Papyrus se encontraban cercas nuevamente de su hogar, Papyrus vigilaba constantemente a su hermano, era seguro que no faltaría mucho para que la droga hiciera efecto o muy probablemente ya estaría surtiendo efecto, pero, conociendo lo fuerte que era su genial hermano mayor, sabía que soportaría por un muy buen rato “razón por la que había dejado la droga concentrada”
Sans por su parte a cada momento del día se sentía más y más débil, por momentos sentía que perdía la vista, al otro, que sus piernas no lo soportaba, intentaba pasar desapercibido ante la mirada de su hermano, pero había llegado por fin a su límite
Sans cayó al suelo con sus ojos abiertos y sus cuencas oscuras, la sorpresa rondaba en estos, no sabía qué era lo que había pasado, estaba más confundido que nunca y su cuerpo dejaba de funcionar junto a su magia, no podía moverse, temía que fuera a morir
-¡Sans!- a lo lejos escucho el grito de su hermano y como llegaba corriendo hacia él, por desgracia, no solo ha caído de sentón, ahora se encuentra tumbado en el suelo
-¿Estás bien hermano?- escucho la pregunta de Papyrus y Sans quiso contestar pero de su voz no salió nada más que el intento de un gemido afirmativo, Papyrus entonces lo cargo con cuidado y se encaminaron de vuelta hacia casa
-¿sabes? Es bueno que hayas dejado la casa lejos de todos… el silencio es bueno para nosotros- dijo Papyrus de un modo que confundió a Sans considerablemente. Algo no iba bien y eso lo sabia el esqueleto más bajo… pero por alguna razón, no podía moverse, ni activar su propia magia
-P-Paps- por fin y con trabajo había articulado aquella palabra, creando en su hermano un respingo y que lo alejara de sus brazos para verse con sorpresa y una mirada brillante
-wowie Sans… ¿Aun después de eso puedes hablar? ¡Hermano! Sin lugar a dudas eres genial- sonrió contento regresándolo a su anterior pose y seguir caminando, sin embargo, con la felicidad de Papyrus, Sans estaba cada vez mas desconcertado… lo que había dicho su hermano no eran simples palabras vagas… ¿Acaso… acaso su hermano lo dejo en ese estado? ¿Qué le había hecho Papyrus? ¿Ese… realmente era su hermano?
-tu… lo… pro-bo…- intento articular deseando equivocarse, sin embargo, escucho una pequeña risilla de su parte junto a la puerta de su casa ser abierta sin problemas. Sans se encontró siendo llevado por la casa hasta su propia habitación, Papyrus fue cuidadoso dejándolo encima de su cama y sacando de alguna parte de su traje un diminuto frasco de color violeta grisáceo que destapó casi de inmediato
-Sans huele esto, te ayudara a sentirte mejor- pidió amablemente su hermano acercándole el botecillo al hueco de su nariz, Sans lo olio pero en vez de sentirse mejor, comenzó a sentir sus fuerzas y magia desvanecerse todavía más mientras que su cuerpo entumecido se volvía en escalofríos demasiado sensible a cualquier sensación, incluso la de su propia cama. Un sonrojo azul se apodero de sus mejillas y la mirada entre el miedo y confusión fue dirigida hacia su hermano quien sonreía felizmente guardando el frasquito a un lado de la mesita de noche de Sans
-¿q-que?- lucho por preguntar mientras veía que su hermano le sonreía tranquilo, acercándose a él de un modo bastante peligroso pero sonriéndole con amor… un cierto amor que él nunca había visto en el…
-tranquilo, no te hare daño, solo me voy a asegurar que no seas de nadie más hermano- le sonrió con aquella gentileza que le caracterizaba aunque para Sans eso no era para nada normal
-t-tu no… eres… mi… ¡hermano!- con todas sus fuerzas, activando su ojo izquierdo, Sans ha luchado por alejar al esqueleto más alto, aunque, para su sorpresa, su alma ha sido cambiada a un color azul y empujado directamente hacia la cama negándole el movimiento, Sans está confuso… el único que puede hacer eso además de el mismo es su hermano Papyrus pero…
*pero Paps jamás haría algo así* se dijo sorprendido mientras observaba alternadamente tanto a su hermano como su alma azul
-supongo que con esto será suficiente ara que entiendas que no soy falso- susurro con una repentina voz oscura, fría y seria que le hizo tener miedo a Sans, aun así, observando, sintió como su cuerpo volvía a sentirse débil y pequeños gemidos comenzaron a salir, instintivamente sus piernas se cerraron y contrajeron, intentando dejarlo en un modo fetal que no podía ser completado al ser detenidas por las manos de Papyrus
-te ves lindo así de sonrojado ¿Sabías?- sonrió de nuevo de ese modo amable que justo ahora solo le daba miedo, Sans era consciente de su situación, estaba débil, no podía usar su magia para tele transportarse lejos de lo que pasaba y en especial, el jamás atacaría a su hermano… aunque su hermano estuviera a punto de…
-no dejare que nadie te tenga Sans- sonrió inclinándose para ver únicamente sus piernas, abriéndolas con cuidado, Sans ha soltado varios gemidos ahogados entre el dolor y el placer, el simple hecho de abrir de ese modo sus piernas ha sido dolorosamente placentero para él, con la poca fuerza que le queda ha pasado su mano a su boca para no hacer tan notorios aquellos gemidos, por su parte, Papyrus ha sonreído feliz y gentil
-después de todo, tengo planeado expresarte cuando te amo hermano- dijo acomodándose entre sus piernas y acercando ambos rostros para verse directamente a los ojos. Tomando con todo el cuidado del mundo la mano que intentaba cubrir su boca y dejada de lado, Papyrus abre su boca para sacar una lengua hecha de magia de un color naranja y lamer los dientes de su hermano
-n-no- susurro bajito Sans, ganando un pequeño gemido a forma de risa de parte de su hermano quien dejando de lado su rostro, ha hecho ligeramente a un lado su chaqueta azul junto a su camisa para morder los huesos de sus hombros suavemente, creando una vez más, gemidos de Sans y que sus manos nerviosas y con algo más de fuerza se dirigieran a los brazos de Papyrus intentando vagamente el alejarlo, aunque, podía sentir que ni siquiera tenia las fuerzas para sujetarlo realmente
-me perteneces hermano…- susurro en su cráneo, por el lugar donde debían de estar las inexistentes orejas y restregándose en ese lugar mientras sus manos ya comenzaban a liberar la chaqueta de su cuerpo
-y no te daré jamás a nadie- susurra lamiendo la zona y bajando a su cuello para lamerlo y mordisquearlo suavemente
-mmmgggg- soltó otro gemido por fin, sin poder callarlo demasiado, Papyrus se desprendió para verlo y sonrió divertido al ver lo sonrojado que ya se encontraba su amado hermano
-la droga te hizo más sensible de lo esperado, eso es tan lindo de tu parte- ronronea mientras quita las pantuflas de sus pies, seguido de sus calcetas, lamiendo la planta de sus pies y parte de sus dedos huesudos, puede ver encantando las reacciones de Sans, como se intenta abrazar a sí mismo y un pequeño bulto se forma en sus pantalones, se relame los labios excitado mientras lo observa, por fin quitando la parte inferior de sus ropas y comenzando a lamer las piernas con cuidado, notando los temblores de su cuerpo, Papyrus no aguanta mucho antes de acercarse de nuevo a su rostro, tomándolo por sus mejillas y mostrando su lengua
Sans ha cerrado sus ojos, la mano libre de Papyrus comienza a acariciar la acumulación de magia que tiene en sus caderas, Sans suelta un gemido prolongado que ocupa el menor para introducir su lengua y jugar con la del contrario. Los gemidos ahogados son notorios, Papyrus se entretiene besando a su hermano mientras su mano libre acaricia los huesos y finalmente con cuidado va encontrando la acumulación de magia de su hermano que se ha vuelto a forma de un falo el cual comienza a acariciar con cuidado y suavidad
-P-Paps- gime bajito Sans, pero no le ha dado tiempo a decir más cuando en un sonoro grito se ha corrido por primera vez ensuciando sus ropas y parte de las de Papyrus, el contrario lo observa y sin poder evitarlo, lame el guante que porta, quitando de paso sus guantes, comienza a desvestirse quedando rápidamente desnudo frente de Sans quien aun tiembla considerablemente
-eres realmente hermoso hermano- ronronea después de haberse quitado todas sus ropas y desprendiendo por fin la chamarra y camisa de Sans, lamiendo todos y cada uno de sus huesos incluso los omoplatos, mordisqueando sus huesos y clavículas, pasando por su cuello y bajando, saborea cada costilla, dejando pronunciadas marcas de propiedad que Sans denota con sus gemidos o gritos de dolor. Papyrus debe ser realmente cuidadoso si no quiere matarlo ya que solo posee uno de vida… pero incluso esa parte de él, tan frágil y efímera que es su vida le parece tan encantador que no puede parar incluso ahora…
Continua lamiendo, ahora avocado a su columna, notando como su voz y movimiento por fin van regresando, Sans comienza a suplicar por que se detenga, su cuerpo se contrae y retuerce por las sensaciones que tiene, Papyrus se siente divertido, posiblemente Sans no se dé cuenta a tiempo que la primera droga ya habrá pasando y que podrá usar su magia para escapar, pero… reamente está determinado a marcar a su hermano, así que continua lamiendo hasta llegar una vez más a su cadera, encontrando su falo aun duro y erecto, se inclina para comenzar a lamer e introducirlo a su boca, usando su lengua de magia, lo envuelve y frota a un compas tranquilo, subiendo y bajando, creando en Sans mas gemidos de placer y suplicas por que se detenga
Ignorando aquello, la mano que posee libre se dirige a las caderas de su hermano, pasando cuidadosamente su mano aun por la acumulación de magia, puede ver una pequeña capa azul que sobresale ligeramente y se muestra ligeramente húmeda, sin pensarlo mucho introduce con cuidado un dedo hasta la mitad, notando un gemido aun más fuerte y como su cuerpo se encorva hacia adelante. Papyrus cree tocar el paraíso con tan solo observar esas acciones de su hermano y por fin, no soportando más el dolor en su propia hombría se endereza, colocando las piernas de su hermano a sus costados, sube ligeramente su cadera para tener un buen ángulo
-aquí voy Sans- le susurra una última vez, Sans no ha dicho nada pero, en cuanto Papyrus entra, de un solo golpe, Sans ha soltado otro nuevo grito, entre el dolor y el placer, Sans cierra sus ojos y coloca su brazo izquierdo sobre sus ojos, respirando jadeante. Ante tan escena, Papyrus no puede hacer nada más que cerrar sus ojos y comenzar lentamente a embestir contra su hermano quien ahogadamente gime su nombre
-P-Papy~ susurra Sans, Papyrus solo lo observa, con un sonrojo naranja en sus mejillas y una mirada enamorada, observa como su hermano ha sacado su lengua en señal de placer, pero no parece ser suficiente para Paps pues toma su mano, obligándolo a que lo mire fijamente, se miran entre ambos, Papyrus sonríe y se inclina para estar cercas y poder besarlo, aun y con sus pocas fuerzas de voluntad, Sans ha desviado su mirada un poco, no desea verlo, pero no es de importancia para el más alto quien de todos modos ha besado de nuevo a Sans
El vaivén continua rítmicamente, las piernas de Sans pasan a los hombros de Papyrus mientras este aumenta la velocidad de las embestidas, notando los gemidos más fuertes y ahogados de Sans, comienza a lamer y mordisquear cada hueso que tiene cercas, escuchando un grito más fuerte que los anteriores, Sans se ha corrido de nuevo, eso a Papyrus le parece lo más adorable del mundo
Gira su cuerpo con cuidado, esta vez dejándolo boca abajo, desea que descanse un poco, pero él no se ha corrido en ningún momento, así que lo único que hace es elevar sus caderas para que queden al aire, se relame una vez más y se acerca para lamer su espalda y costillas desde la posición en la que se encuentra, casi recostándose encima suyo, vuelve a penetrarlo con cuidado, notando que se encrespa y vuelve a llamarlo por su nombre
-P-Papyrus… d-detente- suplica con trabajo, pero es imposible al más alto hacerlo, solo se acerca, lamiendo cada hueso que tiene cercas, besando con cuidado, escuchando los seguidos “Clank” que suenan intensos junto a los gemidos de su propio hermano, Papyrus lo abraza protectora y posesivamente, repitiéndose en su mente
*Sans es solo mío, no daré a mi hermano a nadie más*
Degusta el momento, jalando del cuerpo de su hermano, Papyrus se recarga en la pared sentado en la cama, obligando al cuerpo de Sans a subir y bajar de su propia erección, notando sus gemidos ahogados, el solo puede seguir mordiendo los huesos en sus hombros con el deseo de arrancarlos de su lugar, continua moviendo el cuerpo de su hermano, cada vez mas y mas rápido, pasa una de sus manos por el miembro de su hermano apretando tanto como desea, escuchando sus gemidos, sintiendo como se aferra a él desde atrás, escuchando su errática respiración y finalmente, en un último grito de placer, ambos corriéndose con fuerza
Sans no ha aguantado más que eso y ha caído inconsciente en los brazos de su hermano, sabiéndose atrapado, se deja arrastrar por el agotamiento, Papyrus, quien aun respira entrecortadamente observa enamorado a su hermano y los rastros de saliva de lo que fue su momento lleno de pasión. Enamorado, se acerca y besa de nuevo sobre su boca entreabierta, ahora que esta inconsciente es más fácil moverlo
Luego de otro húmedo beso lo deja con cuidado en su cama, notando que la magia ha desaparecido de las caderas de ambos, se permite observar el cuerpo de su hermano, ahora marcado por sus dientes y su magia, de todos modos y con su sonrisa de enamorado, Paps baja de la cama de su hermano y se dirige a la suya, tomando lo último que había sacado, una jeringa con un liquido que lucía pesado de un color morado, lo observo otro poco y concentro toda su magia en el liquido, cambiándolo a un color naranja. Entro de nuevo en la habitación de su hermano y con cuidado saco el alma de dentro de su caja torácica, admirando lo hermosa y perfecta que lucía aun siendo así de blanca y pura
Sonriendo con amor, dirigió la punta afilada de la jeringa hasta el corazón de Sans y siendo lo más cuidadoso del mundo inyecto aquel liquido naranjo en su interior, pudo observar como aun inconsciente Sans se retorcía por un muy posible dolor en su ser, pero eso no le importo a Papyrus, solo inyectar con mucho cuidado y lentitud el liquido, hasta dejar el centro del mismo una mancha de color naranja que rápidamente desapareció del alma, sonrió entonces, tirando la jeringa junto a su ropa y devolviendo con mucho cuidado el alma de Sans a su lugar, no sin antes dar una prolongada lamida en el mismo, sintiendo su sabor y su textura única, le dio un tremendo deseo de volver a tomar a su hermano justo ahora, pero lo amaba demasiado como para obligarlo una vez mas
Así que, luego de dejarlo bien arropado en su habitación el volvió a colocarse sus ropas y salir para preparar la comida… ahora, con esto, Sans seria suyo por la eternidad y nada ni nadie lo arrancaría de su lado… jamás
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El crepúsculo se presenta, no ha habido noticias de Frisk después de todo, pareciera que se lo ha tragado la tierra, el resto de los escuadrones continúan con la búsqueda, pero Papyrus no está preocupado, está seguro que no ha dejado cabos sueltos en ningún lado… ni siquiera en el antiguo Underground…
-hola- escucha el perezoso saludo a sus espaldas, al girar su vista, puede sentir casi que su alma se sale de su pecho al observar el desnudo cuerpo de su hermano caminando lentamente y con cuidado, con mucha torpeza se sujeta de las cosas, por supuesto, Papyrus no ha perdido el tiempo y ha corrido a auxiliarle, el esqueleto más bajo lo mira y sonríe gentilmente, acercando su rostro para crear un nuevo “Clank” que sorprende y enamora aun mas al más alto
-¿Dormí mucho?- pregunta suavemente, Papyrus solo puede negar con la cabeza pues aun cree sentirse en el cielo luego de aquello
-entonces… ¿Qué vamos a comer?- le pregunta guiñándole el ojo, abrazándose a su cuello y comenzando a restregarse suavemente, Papyrus aferra a Sans por sus caderas, haciendo más énfasis en el frote y por fin cargándolo para llevarlo de vuelta a la cama de su habitación
-¿Qué te parece una cena en la cama?- pregunta de un modo pícaro, Sans ríe suavemente asintiendo, acercándose nuevamente para besarse, solo que esta vez, creando ambos hermanos una lengua mágica que rápidamente se envuelve en una danza pasional que domina rápidamente el esqueleto más alto
Si, Papyrus estaba seguro que Sans le pertenecería por la eternidad únicamente a él… después de todo, no es problema alterar el “código” de alguien si sabes a donde debías de ir y en qué puntos “interferir”… debía de darle las gracias a Gaster por los planos, pero él había sido quien investigo en su mayoría, logrando su objetivo. Ahora Sans jamás se alejaría de su lado y sin la intervención de Frisk y sus reseteos, estaba seguro que nadie le arrebataría a su obsesión
“Sans no sabía muchas cosas de Papyrus… y eso tal vez fue lo más peligroso que pudo suceder… no esperar de su parte un ataque de tal magnitud”