Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Una nueva oportunidad. por Ameno

[Reviews - 23]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Descargo de responsabilidad: Los personajes no me pertencen son de Masaki Kishimoto, mía sólo esta hisoria... ¡¿Pero dios, que ha echo con ellos?!

Notas del capitulo:

Contiene algunos spoiler del manga final de Naruto.

Un idiota  él podía considerarse a sí mismo un idiota, todo lo que hizo todo lo que safrifico en aras de un ideal fue nada más polvo que se lleva viento y su último acto el cual esperaba redimiera sus errores, fue incapaz de cumplirlo a su cabalidad ¿Qué fue lo que le dio el derecho a vivir después de  asesinar a tantas personas? ¿Acaso  tenía tanto miedo a morir nuevamente?  ¿O temía recibir el castigo merecido por los crímenes cometidos? No, era la duda sobre si se habia equivocado, quizas esa fue la razón por la que el edo tensei no se disipo al final y el motivo por el cual no podía estar tranquilo e irse al más allá para pagar sus pecados, camino por las calles guiado más por su instinto ninja que por sus ojos y memoria Konohama habia cambiado en esos años y mucho.

Pasos  silenciosos y ligeros, sordos para el mundo como los de un gato  se detuvieron en el antiguo distrito Uchiha del cual no quedaba nada, sus manos se tensaron viendo el recordatorio (ahora borrado) de lo que fue su mayor crimen. Esperando cómo siempre lo hacía, a dos chicos de ocho años, para ayudarlos a entrenar. Las suplicas y la confianza de los niños era abrumadora; más abrumadora que la obsesión del hombre extraño quien lo  persiguio por años a travez de varias aldeas cazando rumores y sombras en busca del estuche sin vida que albergaba el alma rota del cuervo, persiguiendolo con una obstinacion que parecia alimentada por un deseo febril y una admiración malsana (casi sexual) hacia su persona. Por temor a que éste  pudiera volverse un peligro para la aldea más tarde, se dejó atrapar y así termino de nuevo con un cuerpo de carne y hueso…y más muertes añadidas a su espalda. Él era  demasiado bueno en el engaño para que Shin  pudiera descubrir sus verdaderas intenciones, tolerando con paciencia los toques del  hombre ansioso que más parecían las caricias desesperadas, que un amanera de comprobar su salud.

 Dejo pasar un tiempo y luego se marchó decidiendo que el hombre demente aunque era un peligro y podría matarlo ahí mismo pero no era una amenaza que el legado del cuarto y el último Uchiha no pudieran remediar fácilmente, un par de figuritas saltando de edificio en edificio llamaron su atención soltando de las consabidas palabras.

— ¡Aniki, aniki!

El aludido  suspiro ante las palabras del chico, sería más exacto decir tío o algo diferente ¿Pero hermano?

— ¡Ni-san!

Y ahí estaban  otra vez con el honorífico de hermano frunció las cejas ante la vista de los dos niños Sasuke se había propuesto reconstruir su clan ¿Pero cómo pensaba hacerle con una sola hija? Necesitaba cuatro bebes más por lo menos y por la edad de la pequeña eso no estaba ocurriendo. En cuanto a lo de irse a una misión por tiempo indefinido …él no era quién para reclamar…pero francamente había esperado más de su hermano luego de todo lo que sufrieron, sin embargo no podía decir que era inesperado del todo o que estaba decepcionado, sino más bien un poco triste. Un hondo suspiro escapo de su garganta al ver al hijo de Naruto ¿Qué había pasado con el chico huérfano cuyo gran deseo era tener una familia? ¿En qué momento esa familia tan anhelada por él  se volvió menos importantes que el trabajo? Con voz suave intento por enésima vez hacer entrar en razón a los niños tercos y  les dijo:

— ¿Por qué mejor en lugar de llamarme ni -san o aniki no me llaman Oji-san?

—No, mi papa se ve más viejo que tu así que debes ser mi hermano.

—No tiene sentido, nunca he visto a mi padre desde que yo era bebé, pero imagino debe verse mayor que tú.

—…No pudo opinar nada de tu padre Boruto (en realidad se ve y se comporta diferente a lo que  esperaba) pero estoy seguro que quiere pasar más tiempo juntos a ustedes.

— ¿Entonces, porque  no pasa más tiempo con mi hermanita y conmigo en lugar de permanecer en el trabajo todo el día? ¿Y manda a algunos clones de sombra a hacer parte de las tareas para pasar más tiempo con nosotros?

— ¿¡Y porque si mi papá nos quiere a mí mamá y a mí porque ha estado fuera por tantos años?!

—Quisiera tener respuesta para sus preguntas… ¿Por qué son idiotas?

Los chicos rieron fuertemente ante lo dicho por el hombre extraño y notaron que miraba distraído hacia un lado.

— ¿Qué pasa aniki?

—Tu padre está preocupado,  ha mandado a por lo menos tres clones de sombra a buscarte… ¿No se fugaron de la escuela verdad?

— ¡La escuela es aburrida no me explican bien, aprendo más contigo que con ese instructor idiota de Konohamaru, o los maestro de la escuela!

— ¿Sarada?

—Alguien hizo una broma pesada y los maestros están tratando de limpiar el desastre creado por lunas bombas de pintura así que nos enviaron fuera antes de tiempo, no quiero volver con mi mamá ahora porque me aburre solo verla limpiando la casa y hablando de lo grandioso que es mi padre.

—Ya veo… déjenme recordarle no estoy creando maleantes a espaldas de sus padres, así que si me están mintiendo cancelaremos el entrenamiento, ya les dije que sólo los ayudaría si iban bien en la escuela, eso incluye soltar bombas de pintura para escapar de clases Boruto.

Señalo el peli-largo dándose vuelta dio unos pasos cuando sintió las manos de los niños agarrando las suyas.

— ¡Esta bien lo prometo!...de todos modos no es como si a mi papá le importara.

El azabache froto la cabeza del niño rubio, no era quien para hablar pero el descuido del niño del Kyubi hacia su propia progenie parecía estar siendo cobrado de forma  muy temprana  menoscabando de a poco el amor y la confianza del pequeño en sus padre.

—No es que no le importen tu mamá tu hermanito y tu es que los adultos muchas veces olvidamos lo importante y le damos prioridad al trabajo, sin darnos cuenta que dejamos lo  más valioso detrás, como nuestra familia o seres queridos.

— ¿Por eso es que mi padre no ha venido a vernos nunca a mamá y a mí?

—No puedo asegurarlo, pero  es una posibilidad.

—…Oye ni-san... ¿Tú crees que mi mamá sea verdaderamente mi madre?

— ¿Hm?

—Es que.

— ¿Es que?—alentó el Uchiha mayor a la niña.

—Es que ni mi papá ni ella usan anteojos y  me estaba preguntando el porqué.

—Bueno  tal vez eso es mi culpa, siempre he sido un poco corto de vista, pero como heredero de los Uchiha mi padre dejo muy claro que no podía tener defectos;  así que se los oculte a todos y desarrolle y agudice mis otros sentidos para que nadie se enterara de mi problema…gracias a eso puedo percibir cosas que la mayoría no son capaces…se podría  decir que mi cuerpo es como un gran ojo. Además Sasuke no es un hombre que vaya tras las faldas de todo lo que se cruce en su camino.

Apunto sin querer Itachi dándose cuenta que había bajado la guardia muy tarde y les había revelado más información de la debida a los  dos pequeños demasiado inteligentes e inquietos  para su propio bien.

— ¡Lo sabía, lo sabía, sabía que eras un Uchiha! Te vez igual de pálido y estirado que Sarada! ¡Lo vez nuestras sospechas eran ciertas!

Idiota lo vas a espantar, tanto que nos costó convencerlo para que nos entrenara… ¿Espera dijo su culpa?… Aunque sea un Uchiha la única manera de que yo pudiera sacar un defecto de él es que fuera un pariente, pero eso es imposible.— La niña se ajustó los anteojos viendo al hombre joven y bastante guapo que no regalaba nada de la inquietud que sentía por dentro por el desliz de la lengua, estaba descartado que fuera su padre; bromas aparte su sensei estaba el inquietante grupo de esos varones que son más bonitos que una mujer y en definitiva lo era más que su madre…aunque por supuesto él era  el único que había visto con esas características.

— ¡Boruto! ¡Espera hermano!

El rubio se tensó al escuchar la voz de su hermanita y viendo desvanecerse a su maestro. Amaba a Himawari pero justamente en estos momentos la niña era una molestia, le resultaba muy difícil conseguir entrenar con el azabache que estaba un día sí y otro  en el lugar que designaron para encontrarse, a veces pasaba dos semanas sin presentarse, por lo cual le fastidio mucho el ver pérdida  su oportunidad para entrenar con el peli-negro.

— ¡¿Qué quieres Himawari, no tienes a otro a quién molestar!?

— ¡Que malo eres! ¡Sólo quería estar contigo ni-san! ¿Además quién era ese hombre con el que estabas y porque se fue?

—No es de tu incumbencia y si le mencionas a  alguien su presencia de te dejaré de hablar para siempre.

— ¿A quién no  debe mencionarme  tu hermana y porque la estás haciendo llorar Boruto?

—…Nada que te importe clon—Indico el niño empuñando las manos al ver  a la ilusión que tomo en brazos a la pequeña Uzumaki ¿No podía su padre buscarlo en persona tan siquiera una vez?

—Boruto—Reprendió severamente la sombra a su díscolo muchacho, cuando fue interrumpido por Sarada quien dijo:

—Era un vendedor ambulante que no ofreció sus fusilerías, como lo espante porque no queríamos comprarle nada se fue molesto, dio la casualidad que Himawari llego en ese momento.

—… ¿Es así?

—Si—Replico la niña sosteniendo firmemente la mirada al Hokage. A Sarada no le gustaba mentir, pero había una cosa más importante en ese momento que la estúpida seguridad de la aldea,  ya que estaba segura que ese sería el sermón que les soltaría el rubio a ella y a Boruto  de descubrir que estaba entrenando a escondidas con un ninja extranjero…y era descubrir si ese hombre era un pariente cercano…el menciono que lo llamaran oji- san ¿Tal vez…no era tan sólo un apelativo cariñoso y su padre tuviera un hermano menor perdido? Después de todo nunca le mencionaron como desaprecio el clan. La Uchiha acomodo sus lentes en un intento de calmar su corazón desbocado, no conocía a su progenitor pero si tuviera la oportunidad de tener un tío… ¿Tal vez debería preguntarle a su madre?

La chiquilla emocionada tomo a su amigo rubio de la mano y empezó a correr, mientras Naruto los veía confundido luego vio al mismo hombre de negro parado en una azotea viéndolos, se paró con decisión frente a él para interrogarlo y se llevó una sorpresa al ver  caer  el enge y ver a un niño de caballos grises sonriendo.

— ¿Mitsuki, que haces aquí?

—Creo que debería ser evidente Hokage sama, estamos entrenando ya que las clases se interrumpieron  para ver cuánto tardaba en encontrarnos.

— ¿O sea que estaban jugando?

—Sí.

— ¿Y porque Sarada me dijo esa mentira?

— ¿Por qué un ninja no revela su entrenamiento a otros ninja?

—…Mira niño olvídalo no quiero saber, parece que has heredado el humor negro de Orochimaru y un poco de su mente retorcida y me es difícil lidiar con eso.

—Mi papá es complicado para las mentes simples Hokage sama.

—…Eeeeh bien, por favor ve donde los chicos y dile que dejen de estar jugando, Sakura está muy preocupado y Hinata también…adviértele también a mi hijo que esta es la última vez que dejo pasar lo de los ataques con pintura.

—Lo hare señor pero dudo mucho que le importe.

—Desafortunadamente yo también lo creo—Asintió el rubio marchándose con su hija en brazos. Mientras el peli celeste sonreía, dirigiéndose de inmediato hacia donde vio desviarse a los chicos, a los cuales encontró jadeando fuertemente por falta de aire  y discutiendo entre ellos a una distancia muy considerable   su shakra totalmente suprimido para hacerlos indetectable (volviendo imposible el encontrarlos por alguien menos diestro como ninja)—Así que eso es una de las cosas que les ha enseñado ese sujeto, la manipulación perfecta del shakra, con razón a podido permanecer oculto—pensó para sí mismo el muchacho saltando aun lado de los chicos demasiado entretenidos en su discusión para notarlo.

— ¿Por qué hiciste eso está loca Sarada?

—Y tú eres un tonto casi pones en peligro la existencia de mi tío.

— ¡No es tu tío es mi ni-san!

— ¿Y por qué asumes que puede ser tu tío sólo porque es un Uchiha? ¡Podría ser  cualquier otro Uchiha!

— ¿Disculpen de que hablan?

— ¡Mitsuki!

Exclamaron los niños al unisonó, el Uzumaki se adelantó apartándolo a un lado y observando por todo los lugares a ver si no era seguido el chico sonrió con condescendencia cuando le pregunto.

— ¿Nadie te siguió verdad?

—Y nadie lo hará, le hice creer al Hokage Sama que yo soy el ninja con el que se encuentran a escondidas cada vez que se fugan.

— ¡Eres listo Mitsuki me alegra tenerte de amigo!

— ¿Ahora podrían decirme quien es el hombre por el cual arriesgue la piel? Si resulta ser un peligro para Konohama, tu papá me expulsará de la aldea.

— ¡Esa excusa de un padre que nunca esta,  no hará nada, no lo permitiré!

Afirmo los ojos azules haciendo sonreír al peli-gris por la calidez de la afirmación del Uzumaki que no dejaba lugar a dudas, luego se sentó con sus amigos a escuchar lo que estos le contaban bastante sorprendido al escuchar el relato. Al parecer el hombre en cuestión había aparecido de la nada en Konohama hace casi dos años, sin que nadie se diera cuenta de su presencia o notara nada sospechoso se instaló en algún lugar cerca de los alrededores de la aldea. Boruto tampoco lo hubiera notado de no ser porque le dio unos consejos al verlo lanzando kunais, mientras él  se quejaba de que el idiota de su padre no está nunca para ayudarlo a entrenar  y por eso fallo en el lanzamiento de shurikens en la escuela y luego de soltarle unas frases extrañas sobre qué: “ la constancia hace al maestro” “ y que no se trata de lanzar mal mil golpes a la vez sino golpear una sola vez  pero luego de que te haya salido bien mil veces” el desconocido  sonrió al ver la mirada del niño ante esa frase confusa y explicó que simplemente tenía que practicar bien un movimiento: cuando lo hiciera bien su cuerpo lo ejecutaría de memoria y podría hacerlo infinidad de veces sin fallar…pero eso se aplicaba también si lo hacían mal y es lo que sucedía con sus lanzamientos, después de eso le enseño como hacerlo y se marchó diciendo que era un alumno rápido y con talento solo carecía de motivación desde ese momento el rubio decidió que lo quería como su maestro.

—… ¡Guau!... ¿Y han estado entrenando alrededor de una año con él?

—Sí y no sabes lo difícil que fue conseguirlo, me pase los primeros  meses tratando de convencerlo, lo hubiera hecho antes si Sarada no hubiera intervenido.

—Lo conseguiste gracias a mí.

—Llorar no es una habilidad.

—Pero fingir que lo haces para engañar a tu oponente, si, además mi oji- san  es un  caballero y no puede soportar ver llorar a una mujer.

—Deja de llamarle así ni sabemos a qué rama de los Uchiha pertenece. Además creo que a ti es la única que no puede ver llorar ¿No te acuerdas que cuando dio una breve salida por los alrededores de la aldea sin su disfraz? Paso de largo cuando aquella señora intento agárralo del brazo mientras insistía llorando que se había lastimado un tobillo y necesitaba que lo revisaran mientras le mostraba la pierna.

—Mamá, cuando cree que no la estoy viendo o escuchando, abraza la foto de mi padre y  llama a ese tipo de mujeres p***s ofrecidas, que tratan de robárselo.

El graznido estridente y escandalizado de un cuervo les llamo la atención, el emplumado  mensajero se posó en la cabeza de la niña y el dio un ligero picotazo  como en reprimenda a la vez que dejo caer un papelito en que se decía que sus sesiones de entrenamiento se pospondrían hasta la próxima semana y  les avisaría cuando por el mismo medio, provocando el enfado de Boruto que estallo.

— ¡Por  eso no quería que Himawari me siguiera, ya lo espanto! ¡Ahora tendré que esperar otra semana para aprender a combinar mis elementos de agua y electricidad!

—… ¿Ya puedes dominar esos dos elementos? ¡Eres sorprendente Boruto!

—Ni tanto aun no es capaz de electrocutarse a sí mismo o a los demás.

— ¡Ya deja de ser pretenciosa Sarada recuerda lo que te dijo!

— ¿Qué fue lo que le dijo?

—Que ser un genio, no sirve de nada si no se entrena y que hasta el mejor ninja pierde la habilidad si esta ocioso.

—Bueno un idiota no es, casi puede ser tan sabio como mi papá—Repuso Mitsuki pensativo.

—Eso ya lo sé no necesitabas repetirlo.

—Sí pero te olvidaste de la otra parte.

— ¿Cuál otra parte?

La niña se sonrojo antes de responderle a su amigo, avergonzándose al pensar que había sido descubierta y regañada posiblemente por su tío.

—Que deje de estar espiando a personas cuándo no me lo asignaron de misión porque  es algo espeluznante.

—Ya veo  te descubrió tratando de espiarlo cuándo tratabas de averiguar donde vive ¿Cuántas veces?

—Todas.

—…

—…

—…Bueno ese señor es todo un personaje ¿Y que  se supone que quieren hacer?

—Averiguar quién es por supuesto ¡Tú y yo entraremos en los archivos anbu y veremos qué información tienen estoy, seguro  aparece ahí! ¡Tú quédate Sarada o te meterás en problemas  tu mama es horrible cuando se enoja!

— ¡Boruto idiota! –Le grito la chica arreglándose los anteojos quedándose pensativa antes de regresar a su casa, donde observó por largo tiempo a su progenitora  esperando el momento adecuado antes de preguntar.

— ¿Mama, mi padre tenía un hermano menor?

La mujer tiro en respuesta el libro que  estaba limpiando y pregunto nerviosa ante la mención de un hermano— ¿Ha que vienes esa pregunta Sarada?

—Sólo tenía curiosidad, es raro que todo el clan haya desaparecido sin dejar un sobreviviente…así que pensé…

— ¡Tu padre no tienes hermanos vivos menos uno menor!

— ¿Pero eso significa que tenía uno? ¿Y porque están tan seguros que está muerto? ¡Podría estar vivo!

— ¡No digas tonterías Sarada Ita…No hay otro Uchiha aparte de tu padre y nosotras!—Señalo la mujer rompiendo el plumero  al apretarlo con demasiada fuerza, ese nombre era tabú en esa casa Sasuke no lo mencionaba a pesar de  que curiosamente  era el único miembro de su familia que verdaderamente extrañaba, ni su madre ni su padre significaron una perdida tan real para el Uchiha que como la del ninja renegado.

— ¡ibas a decir el nombre de alguien verdad! ¡¿Entonces en verdad tengo un tío?!

— ¡Ya basta Sarada en verdad no tienes ningún pariente vivo! ¡Todos los Uchiha aparte de tu padre y nosotras están muertos!—Replico la mujer golpeando la pared destrozándola  lo cual provoco que mirara  horrorizada el agujero del muro causada, exclamando— ¡No por favor, no de nuevo, acabamos  de mudarnos de casa la semana pasada!

— ¡Es mentira, sé que mientes, tengo un tío y averiguare porque tratas de ocultármelo— grito la chiquilla saliendo de la casa enojada y asustada por el arranque de ira de su ´madre y creyendo que la habían engañado.

—Entre tanto Mitsuki  y Boruto ojeaban el libro anbu, luego de haber engañado a estos ignorando el pergamino de los mil jutsus de pronto un  grito de triunfo escapo de la boca del chico.

— ¡Aquí esta Uchiha Itachi! ¡¿Eh?! Edad 21, tipo de sangre AB, Criminal rango S, muerto,  estatus de criminal removido, después de su muerte al descubrirse que era  un ninja encubierto que siguió las órdenes de la aldea…único pariente vivo  su hermano menor Sasuke Uchiha?!...Aniki  es hermano del rival de papá… ¡Grandioso!

—Creo que nos saltamos  la parte de que si es mayor que el papa de Sarada por su edad seria tu padre no tu hermano… ¡Mira aquí sale papá!

— ¡Qué más da a lo sumo será un año, además se ve menos acabado que mi viejo!... ¿Y ese es tu papá…que se supone que es tu padre o tu madre?

—No me importa.

—…Yo creo que ni tú lo sabes.

El muchacho se encogió de hombros y miro la foto, preguntándole a su amigo— ¿Quieres que le pregunte a papá sobre él?

— ¡Si buena idea tu papá es una momia, debe conocer mucha gente vieja con su edad!

—Papa no es ninguna momia.

—Si lo es, mira la edad que sale ahí.

—63…supongo que igual que el tío de Sarada es tan poderoso que no se ve tan mayor a pesar del paso del tiempo… ¿Cuánto crees que sea la edad de Uchiha Itachi?

—Si lo comparamos con la de papá… probablemente 29.

—Entonces no es tan sorprendente como el mío ¡Mi papa tiene 63 y se ve de 30 en cambio él tiene 29 y se mira de 20!

Los chicos escucharon un ruido que los sobresalto y Boruto apunto inquieto— ¡Mira eso no importa, mejor vámonos de aquí! O los anbu se darán cuenta que nos colamos a escondidas.

El ojos dorados asintió y se marcharon rápidamente, dejando en su prisa abierto el libro bingo en la foto del cuervo cuando estaban lejos se escucharon unos pasos resonar y una persona salió de las sombras diciendo.

—Ma, por lo visto Naruto y su hijo son más parecidos de lo que creen siempre buscando problemas y haciendo travesuras, por un minuto creí que buscaría el pergamino de los mil jutsus  y trataría de aprender algún jutsu prohibido en su lugar tomaron el libro bingo… ¿Y que se supone que estaba buscando pequeños?... ¿Itachi Uchiha...qué interés puede tener el hijo de Naruto en un ninja ya fallecido?

Repuso el enmascarado pensativo, depositando el libro en su lugar hacia meses que llevaba advirtiéndole al séptimo que algo raro pasaba con el niño, tan buen comportamiento en un chico tan hiperactivo  travieso ( y necesitado de atención) no era normal, hoy por fin volvió a actuar como de costumbre…pero le pareció más sospechoso todavía, dejo caer los hombros con resignación pero de nada servía  decírselo, el muchacho era tan denso como de costumbre y creía que era debido a que Boruto había madurado. Entorno los ojos, el rubio más grande aun no lo lograba y eso que era Hokage ¿Cómo esperaba que un niño de ocho pudiera hacerlo? Él no era el mejor de los ejemplos engordar el trasero sentado tras un escritorio no volvía más sabio a nadie. Encogiéndose de hombros desapareció en un torbellino, no era su asunto por el momento trataría de resolver el misterio que envolvía al Uchiha el desafortunado protagonista de una de las historias más infames y desafortunadas de Konohama

Notas finales:

Actualizare esta historia cada miércoles¡Dejenme saber que les ha parecido!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).