Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Πάτερ por Whitekaat

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este fic es una locura lo sé.

Aclaraciones:

  • Es un conjunto de 17 Drabbles que iré subiendo de a dos o tres, dependiendo de su extensión.

  • No habrá shota, no se asuten.

  • Πάτερ (según mis investigaciones significa padre).

  • Es el tercer fic donde Crono mete sus manos, es un villano recurrente, de seguro en algún momento juntaré a todos los Sagas y Aioria que han sido perjudicados/beneficiados por el titán ajjaja.

  • Advertencias: Incesto piscológico/simbólico/mental como quieran llamarle

 

 

Notas del capitulo:

Espero les guste esta locura.

28 AÑOS

#432

Una oleada de cosmos empujó a todos los que aún quedaban en pie lejos de donde estaban, algunos dorados rodaron por las escaleras, otros chocaron sus cuerpos contra los pilares y paredes, pero aquel hombre no lo hizo, aquel santo, se mantuvo erguido frente al dios. Los pies de Saga no flaquearon, había utilizado su propio cosmos para detener la fuerza que Crono ejercía contra él.

Sus cabellos azules alborotados por la lucha, su piel blanca manchada en rastros de su propia sangre, parte de la armadura de géminis resquebrajada por completo pero el gemelo se mantenía en pie, separando al titán del “Megas Drepanon”, el santo de géminis sintió el poder del dios calarle los huesos su obscuro cosmos alzarse para segundos después ver como la estatua de Athenea se resquebraja por completo dejando libre aquella poderosa arma que se dirigía por si sola a la mano alzada d su amo.

Con aquella arma Cronos sería invencible, con aquella arma el titán podría deshacerse de su diosa sin problema alguno, Saga no lo permitiría, porque bajo su manga él tenía su propio As para ganar la batalla.

El griego corrió con toda lo que sus pies le dieron, aprovechando aquellos segundos de confianza del titán, acercándose lo suficiente hasta estar frente a él, Crono sólo alcanzó a ver un destello y un filo color oro para después sentir como una daga brillante y dorada atravesaba su cuello; aquella daga que él mismo le había entregado una vez al caballero de géminis para acabar con Athena ahora ponía el fin a su vida.

Al retirar la Daga de aquel blanquecino cuello, parte de la sustancia rojiza brotó como un río manchando al dueño y el suelo donde estaba parado. La sangre de los dioses siempre fue preciada y dotada de poderes, cuando Crono castró a su padre de ese líquido nacieron los gigantes, Erinas y Melíades, pero no existía precedentes que era lo que podía causar la sangre de un titán en un humano, lo que aquellas simples gotas que llegaron a dar a la boca de Saga podrían causarle.

La sangre se evaporaba y el cuerpo del titán se desvanecía con en el aire, la daga manchada en sangre calló al suelo al igual que el santo dorado de la tercera casa, Saga sintió un dolor a través de todo su cuerpo y gritó cuando sintió sus huesos romperse en mil pedazos, lo último que alcanzó a ver fue como el suelo estaba más cercano a su rostro y como hasta el último vestigio del dios en la tierra se desvanecía.

 

 

 

 

 

 

 

2 AÑO

#393

El primero de los caballeros en despertar fue Aioria, apenas podía mover su cuerpo a causa de los golpes, sus ojos se abrieron lentamente, divisó que su hermano estaba tirado junto a él y que al parecer aun respiraba, el caballero de leo escuchó un llanto, que venía desde donde se suponía debía estar Crono, pero no había rastro del cosmos del dios, ni ningún otro santo, sólo aquel estruendoso llanto.

El castaño se levantó a duras penas, desando desde el fondo de su alama que el dios no hubiese logrado su cometido, que alguno de los otros santos haya sido capaz de hacer afrenta al dios del tiempo, pero aquel sonido lo desconcertaba, no era algo que pudiese esperar.

Subió las escaleras por donde había sido arrojado sintiendo sus músculos arder con cada paso que daba, era un caballero dorado, pero aún era un joven de tan sólo diecinueve años, sin la sabiduría ni la experiencia para ser el rival de un dios y su cuerpo había pagado el precio de su valentía y su deber como santo.

Aioria apresuró su paso cuando notó que la imponente estatua de Athena no aparecía en su rango de visión, el llanto no cesaba y mientras más cercano se encontraba una fuerte migraña se posaba en su cabeza, un dolor que se acrecentó cuando su verdosa mirada visualizó el escenario frente a él.

Los escombros de lo que alguna vez fue la imagen de Athena repartidos por el suelo, restos de lo que alguna vez fue una armadura dorada en las mismas condiciones que había quedado la estatua, pero eso no era lo más inverosímil de todo, no, aquello era el pequeño niño de cabellera azulada que lloraba a todo pulmón con los ojos cerrados, manchado con restos de sangre, sentado junto a aquel brillo dorado de una armadura, al brillo dorado de una daga y la obscura arma del dios del tiempo.

El caballero de leo avanzó hasta estar cerca del niño, aun con la confusión y un dolor de cabeza aferrados a él, cuando estuvo a su lado sus manos se guiaron solas hasta a tomar ese pequeño cuerpo desprovisto de cualquier prenda en aquella obscura noche y lo llevó protectoramente hasta su pecho y acarició aquellos sedosos cabellos añiles sintiendo como poco a poco el llanto disminuía, pero no así su migraña.

 

 

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).