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Buttontale. La historia de las almas por Lubay Nue

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Notas del fanfic:

Comenzaré diciendo… ¡hoi! Ok No, no es cierto XD… comencemos por decir:

 

*Este fic “al igual que este AU” es una especie de tributo y combinación de Underswap, Undertale y Underfell con el “mundo/película/trama” de Coraline y la puerta secreta

*Este fic hablará pero de las almas que estuvieron antes de Blueberry, así que veremos cosas que no tienen sentido. Como esto es “el pasado” a antes de la trama original de “Coraline” lo visto aquí no es “oficial” es únicamente algo que me he imaginado, nada tiene que ver

*ham… advertencia de historias depres… Gaster de Undertale sigue vivo y es padre de Sans y Papyrus… ham… no daré más spoilers…

Notas del capitulo:

Irónicamente, yo tampoco fui muy inteligente con esto de los títulos… dios XD ya me siento Asgore y sus brillantes nombres hahaha

Ahora, en el orden que han visto los AU aparecer, será como aparezcan en este fic… (Chara y Frisk serán de Undertale) además, trataré de explicar unas que otras cosas que quedan en “misterio” en la película de Coraline, ahora… como dije al principio, este fic puede que no tenga sentido, muchas cosas “estoy casi segura” no tendrán nada que ver con la historia real, esto lo hago estrictamente bajo mi idea y mi imaginación… están advertidos que será diferente a la película y a lo que hayan visto sobre Buttontale… pero no importa…

 

Créditos al creador de Buttontale (o creadora, nunca se distinguir géneros en tumblr) y bueno… ¡Que comience lo bueno!

 

¡A leer!

 

Arco 1

~El chico sin salud~

 

1 - El “nuevo” hogar

 

Era un día lluvioso cuando ellos llegaron, incluso parecía que no había vida a sus alrededores… abrió la puerta de atrás y aun sabiendo que junto a la lluvia que parecía querer volverse un diluvio en cualquier momento, su padre le ha amenazado con no mojarse más de lo debido, Sans ha salido, ignorando olímpicamente la mirada llena de reproche que le entrega su padre, no le interesa. Camina tranquilo, rodea desinteresado los alrededores de la casa, de la gran mansión que ahora se debe de volver su nuevo hogar… un nuevo intento por salir adelante… un nuevo futuro para ellos… suelta un suspiro amargo, lleno de incomodidad mientras escudriña de pies a cabeza el montón de tablas, ladrillos, ventanas y pintura que le parece descolorida aun cuando no hace mucho ha sido pintada de vivos colores… para Sans, no parece siquiera ser algo que tenga una pizca de vida…

 

*el sueño de mamá y Papyrus*  se dice decaído, observando cada uno de sus detalles, sus puertas, los adornos en estas, las ventanas decoradas con los marcos, los espacios que hay estrictamente para las futuras macetas con plantas medicinales que ambos portan en el carro y con ayuda de las mudanzas especiales… su mente se detiene al igual que su caminar, un nudo se forma en su garganta mientras observa la casa con detenimiento desde sus espaldas… alguna vez se llego a imaginar en esa hermosa y grande casa, en esa muy segura enorme mansión que iba a ser solo para ellos 3…

 

-creí haberte dicho que no te mojaras Sans-  el gruñir de la voz de quien mejor conoce lo hace salir por un momento de su propia ensoñación… Sans reacciona a su nombre con enfado, girando su mirada solo en ese momento para ver que su padre Gaster le mira con las manos en la cadera en clara señal de enfado, su rostro casi siempre apacible junto a las marcas que siempre le ha conocido arriba y debajo de sus ojos parecen hacerlo ver más aterrador aun cuando sabe que la criatura sea… no alguien combatiente… y sin embargo, Sans no se toma ni siquiera la molestia de ocultar su enfado apenas se ven

 

-he, no es como que un poco de agua empeore mi salud… más de lo que ya esta-  masculló mordaz encogiéndose de hombros y caminando hacia él para acto seguido, comenzar a caminar juntos, rodeando de vuelta la casa y así poder llegar a la entrada donde una vez dentro le ha sido tirada una toalla; su padre Gaster ya sabía de antemano que su único hijo se mojaría así que ha preparado una toalla

 

Aunque es bien sabido por el mayor que esta no es la primera vez que Sans desobedece deliberadamente una de sus ordenes para hacer lo que le plazca, de hecho, sería más extraño que de un momento a otro comience a obedecer, que lo ve tan poco probable como que… … … como que ellos regresen a la vida

 

Desde la muerte de su hermano menor Papyrus, el más joven de todos los integrantes de la que alguna vez pudo llegar a ser una familia; Sans se ha vuelto más agresivo, delictivo, desobediente, casi se le podría decir que amargado y sin ánimos de seguir “adelante”… no es que pueda molestarse realmente con él… podía comprenderlo, aun cuando no mentía en decir que no hay momento en que no mantenga una guerra contra su propio padre Gaster, al igual que no hay momento en que no le recuerde al mayor de la muerte de su joven y amado único hermano menor

 

Papyrus alguna vez fue, de la familia de apenas tres miembros, el más joven de ellos, aun cuando la pequeña familia ahora solo conste de dos únicos integrantes. La cena consta únicamente en una pizza que han mandado a pedir… Papyrus solía cocinar sus famosos espaguetis para todos, aun cuando la verdad es que fueran incomibles, nadie se negaba a su sabor y al amor que el más joven les regalaba con su comida… ahora Gaster revisaba los últimos resultados que tenía en un grupo bastante grueso de papeles al lado de su plato, cuidando que no se ensuciaran con la comida poco nutritiva que tenía en la otra mano, mucho más interesado que en su hijo ahora único que se encontraba recordando de un modo amargo su propio pasado, olvidando incluso que tiene frente suyo una botella de su amada Kétchup; desde hacia tiempo Gaster dejaba que Sans comiera eso sin interesarle lo demás… a ninguno ya le interesaba el comer pero lo hacían de un modo más mecanizado… solo porque era su deber comer para seguir su día a día sin flaquear

 

Su familia había comenzado en ese entonces como cualquiera; W.D Gaster era un científico de renombre, un monstruo muy famoso en todo el mundo, todo aquel que fuera o que quisiera se científico sabia sobre este hombre, era la meta de muchos jóvenes monstruos y de otros ya no tan jóvenes. El hombre era amable dentro de lo que se podía decir, y estaba perdidamente enamorado de una hermosa mujer que de igual modo, lo amaba con locura y fervor… casados felizmente, la familia esperaba por un siguiente miembro, su primer hijo. Gaster había mandado entonces a crear algo parecido a un hermoso palacio de cuento de hadas solo para su amada familia… una casa amplia donde tendrían una gran familia, ambos lo habían planeado así; era el sueño de los dos

 

Desgraciadamente, con la llegada del segundo hijo de la pareja, su madre había muerto en el parto… quedando así, solo ellos tres. Gaster, Sans y Papyrus

 

Las cosas parecen empeorar para la pequeña y rota familia cuando un día, mientras que Gaster regresaba a su laboratorio en la parte donde tenía a sus dos pequeños hijos, los encuentra a ambos tirados en el suelo inconscientes, suponiendo que duermen, los intenta despertar y al no ver resultado, alarmado comienza a buscar por ayuda. Varios años después de la muerte de su esposa y madre de ambos niños… la verdad es clara

 

Los estudios fueron rápidos, las múltiples pruebas de todo a todo… la verdad llego como un cruel golpe al corazón de toda la familia… ambos niños tenían una muy rara enfermedad que de no ser tratada cuanto antes los terminaría matando antes de siguiera poder llegar a ser adultos. Al ser un caso único entre los suyos no hay medicina, no hay tratamientos… no hay esperanzas

 

Y aun así, Gaster se negó a perder lo que le quedaba de familia… y al negarse, comenzó el infierno de los más pequeños que ignoraban su propia situación

 

La ciencia tenía sus puntos tenebrosos, los mas lúgubres que la gente prefería no ver aun cuando supieran de su realidad. Para llegar a un resultado correcto, para poder descubrir algo que nunca ha sido descubierto; era oficial que debían de haber fallas, debían de haber errores y equivocaciones que jueguen con la mano de dios y llegue a tocar la mano del diablo… para poder encontrar la salvación de sus hijos, Gaster debe hacer algo que jamás imagino y que jamás deseo hacer…

 

La enfermedad de sus hijos no podía vivir fuera de sus cuerpos, así que solo podía experimentar en ellos, usarlos como los conejillos de indias que sabía, no eran… ¡Ellos eran sus hijos! ¡Lo último que le quedaba a Gaster en su vida! jamás les haría daño, jamás los lastimaría… pero de igual modo, no se puede permitir perderlos como ocurrió con su amada esposa, tiene el deber de elegir… ¿La vida de sus hijos o sus principios moralistas? Desgraciadamente… se rompe al elegir la primera opción…

 

Busca por la solución haciendo cosas inhumanas en ellos y ambos habían aceptado, mientras se tuvieran el uno al otro, mientras su padre pudiera salvar la vida de su otro hermano, lo demás pasaba a ser secundario en la pequeña vida complicada que poseían todos… incluso su propio dolor pasa a ser secundario si con eso pueden salvarse la vida… todos están conscientes de eso y lo aceptan con tranquilidad aun cuando en su interior duela más que las heridas que ellos mismos se crean

 

-termina de comer y vete a dormir ya Sans, mañana comenzaremos con las nuevas pruebas-  ordena Gaster aun leyendo sus notas y sacando al joven de su ensoñación, haciendo que su simple voz le haga enfadar y que su magia borbotee como la lava caliente de un volcán activo… Sans lo recuerda perfectamente, esa imagen se niega a desaparecer de su propia mente… aquella vez, cuando su padre experimentaba un nuevo químico en su hermano Papyrus, siendo únicamente para él, hubo algo, debió de haber una falla que nadie más notó. Era claro que algo no había salido nada bien

 

Nunca pudieron averiguar, nunca pudieron saber que había pasado, solo supieron que hubo una explosión en donde Papyrus se encontraba… el único consuelo que pudo encontrar Gaster fue saber que su hijo había muerto al instante, sin dolor, sin sufrimiento mas allá del que el mismo le creaba con sus experimentos por salvarlo… sin embargo, saber algo así… para Sans fue…

 

-deja de verme como si hubiera hecho el accidente a propósito, tu sabes que nunca fue mi intención que estallaran las maquinas-  acota secamente, molesto y muy internamente dolido… sabe que Sans lo culpa por la muerte de su hermano, Sans lo ha dicho, en susurros, en gritos ahogados de ira y cólera, a sus espaldas y de frente, principalmente de frente, sabe de igual modo, que nunca lo va a perdonar por este accidente que el aferra como culpa suya, pero lo que Sans no sabe, es que el tampoco se podrá perdonar jamás por haber perdido a su amado hijo, a lo último que le queda en la vida y en esta tierra…

 

-he… no pensé que te fuera a importar tanto… Papá-  sus cuencas negras como el abismo y su sonrisa vacía y perdida lo hacen ver realmente aterrador para todo aquel que no lo conozca y lo mire por primera vez, aun cuando Gaster no se amedrenta con algo así, sabe de antemano que su hijo esta mas que molesto; con un nudo en su alma que amenaza con asfixiarlo y matarlo de culpa, Gaster manda una última vez a Sans a su habitación. El esqueleto más bajo se levanta arrastrando su silla de paso y sin decir más se marcha del lugar dejando a Gaster en silencio y con un profundo cargo de consciencia calando en todo su ser hasta el punto de querer volverlo loco

 

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Era molesto, frustrante para todo el mundo… Sans sabía que su padre estaba arrepentido de corazón y que sufría día y noche al igual que él, la pérdida de su hermano Papyrus y el realmente no quería seguir torturándolo de ese modo, pero simplemente, como lo era verlo todos los días, Sans no podía mentirle, no podía mentirse a si mismo diciéndose que “todo estaba bien”… realmente lo culpaba, aun cuando no quisiera hacerlo, lo odiaba por no haber sido más precavido… su hermano había muerto y ninguno de los dos había podido hacer nada para ayudarlo, para salvarlo o siquiera para prevenirlo… solo pudieron observar el momento en que todo pasaba, frente de sus ojos, frente de su conmoción y desconcierto… no es algo que un joven de apenas 13 deba de ver o tan siquiera de vivir

 

Sans llega a su habitación, encontrando en su cama lo último que le queda de su hermano; un peluche pequeño con forma de conejo, blanco con ojos naranja brillante, con el fondo de sus orejas del mismo color naranja, el color favorito de su hermano y una pañoleta roja a juego acomodado cuidadosamente en su cuello formando un moño adorable. El conejito es el peluche favorito de su hermano y todo lo que a Sans le puede quedar del mismo junto a sus memorias del pasado; mira el muñeco y sus cuencas se pierden en la negrura del abismo que ahora parece habitar en su lastimado y frágil corazón, sus cuencas llenas de lagrimas que de un modo lento aparecen y comienzan a caer fluidamente, abraza el muñeco contra su pecho, se suelta a llorar desolado mientras se recuesta en la cama con desesperación de no poder hacer nada

 

-lo siento Paps, te falle, te prometí que nunca te dejaría solo, nunca permitirá que nada te dañara y yo rompí nuestra promesa-  llora desconsolado, aferrándose al peluche y ahogando sus llantos en la almohada para no ser escuchado, se ahoga en su propio dolor y se pierde en el abismo de la soledad mientras cae de un modo lento en el sueño que no desea encontrar, sus lagrimas fluyen aun cuando él ha caído dormido después de varias horas llorando por quien ya no está más ahí

 

… … …

 

-¡¡Papyrus!!!-  como cualquier noche desde el accidente de su pequeño hermano, Sans quien parece haber perdido el don de poder dormir, de esas pocas veces que cree poder descansar del terror del pasado, se encuentra con otra muy vivida pesadilla; esa estricta y detallada pesadilla del momento en que su hermano muere delante de los ojos de ambos seres, delante suyo y de su padre, ambos tomando el vidrio que los separa, gritando el nombre del más joven. Aun cuando siente que su padre corre detrás suyo y lo pasa de lado para ir a salvar a su hermano, Sans puede ver como su hermano se termina volviendo polvo delante de sus ojos… ni siquiera cree realmente que lo haya visto y aun así, es una tortura saber que no pudo hacer nada para salvarlo

 

La pesadilla de siempre lo obliga a hacer las acciones de siempre. Despertar entre gritos de terror, sentándose de golpe en su cama y con su única cuenca brillante en un azul intenso que lo lastima junto a su magia. Mira entre jadeos su habitación aun sin desempacar por completo, las lagrimas vuelven una vez mas mientras se acomoda mejor en la cama, encogiendo sus piernas para pegarlas a su pecho, se abraza a sí mismo y oculta su rostro entre el hueco que queda en sus brazos y piernas, llorando de nuevo, llama suavemente a su difunto hermano, suplicando porque regrese a su lado

 

Cuando cree que se ha calmado lo suficiente como para poder hacer el nuevo intento vago de tratar de dormir (aun cuando sabe que no servirá) se encuentra solo en su cama. Asustado comienza a buscar, quita las cobijas, mueve sus almohadas, se baja de la cama y busca por todos lados de su habitación, y aun cuando parece que ha puesto todo de cabeza no puede encontrar el peluche de su hermano. Asustado sale de su habitación buscando por toda la ahora gigantesca casa; se toma un momento para maldecir que sus padres quisieran una mansión y no una casa pequeña… los lugares para buscar parecen infinitos para alguien tan asustado y en un ataque de nervios como lo era él en ese momento

 

Lleva poco más de la mitad de la casa buscado y comienza a creer que tal vez el muñeco este en su habitación y en su desenfreno no se ha fijado correctamente o que está en algún punto que no ha visto por su ataque de nervios; resignado regresa con un cansado suspiro sobre sus pasos, viendo desoladamente la casa, imaginando como hubiera sido correr por ella junto con su hermano, ocultarse y dormir mientras este le llama huesos flojos y finalmente una vez encontrados, continuar con charlas sin importancia… mientras camina, imaginándose frente de él, la silueta de lo que pudo ser un “hubiera” de ambos juntos, pasa por la sala principal, captando algo su atención. Se frena y regresa casi corriendo en la dirección, encontrando bien oculto el muñeco que tanto había estado buscando con desespero

 

-¡Paps!-  susurra aliviado mientras toma el muñeco y lo estrecha contra su pecho agitado y palpitante de terror, cuando se ha calmado encuentra que en la zona donde se encontraba oculto el peluche hay una puerta diminuta semi abierta, lo mira confuso, incrédulo de lo que mira

*no recuerdo haber visto esto cuando explore la casa*  se dice confuso y de un modo desconfiando, ignorando su sentido común que le dicta que regrese sobre sus pasos para volver a hacer un vago intento por dormir, se encuentra a si mismo abriendo la puerta y encontrando ante su anonadada mirada un túnel que se ilumina en tenues colores que a lo lejos permite ver otra puerta semi abierta

 

Asombrado por lo que observa aferra el peluche contra su pecho, traga duro y de un modo curioso, lleno de intriga comienza a adentrarse al interior del túnel de colores; camina lentamente al solo poder apoyarse con una de sus manos, cuidando de no apoyarse en el peluche que porta en su pecho, observa el lugar por donde pasa, se ve maravillado por los suaves colores que iluminan el camino haciéndolo ver casi mágico, Sans tiene oportunidad de medir el tamaño, supone que incluso su padre Gaster podría entrar sin dificultades si gateara al igual que hace el… aunque bueno, no es como que su padre valla a hacer semejante estupidez, sabe que al ser un “científico” muchas cosas son abandonadas por una manera demasiado “seca” de pensar…

 

El camión dentro del túnel llama poderosamente su intención, le sorprende y embelesa, imagina que a Papyrus también le hubiera encantado ver algo así dentro de la casa, imagina que de seguir vivo, Gaster les hubiera puesto cosas por el estilo, en especial, sabiendo cuando ama él todo lo relacionado con las estrellas y el espacio exterior… sin embargo, el camino llega a su fin, demasiado rápido, Sans toma un momento aun dentro del túnel para observar que el camino que lucía ser largo realmente no lo era tanto, a sus espaldas se ve el lugar por que ha venido, se pregunta si sería una buena idea regresar sobre sus pasos antes de que su padre se entere y le regañe, pero la simple idea de su padre le hace enfadar, vuelve su vista al frente y con determinación pasa atreves de la puerta entreabierta… encontrándose con la sorpresa de que ha vuelto a la sala de su hogar

 

-¿Pero qué rayos?-  se pregunta con algo de molestia y decepción, el había esperado poder encontrar algo más  que ver, algo igual de sorprendente que el mismo túnel, no la sala de su casa, se siente molesto y decepcionado, aunque después de su molestia inicial ha encontrado extrañado que su hogar esta mas arreglado, curioso examina la sala. Las cajas ya no se encuentran donde estaban, la sala se ve mucho mas arreglada que a como recuerda

-hum… no creo que papá se haya tomado la molestia de arreglar todo durante la noche-  se dice siendo consciente de que aun habían cajas por todos lados cuando fue en busca del peluche que aun aferra contra su pecho, no solo es la primera noche de mudanzas, sino que es consciente de lo que había a sus alrededores y el no ver las cajas y ver los sofás perfectamente acomodados y elegantes le hace pensar que es una mala broma, ni siquiera se tardo dentro del túnel, no había posibilidad de que su padre pudiera arreglar todo tan rápido… aun y con su magia a máximo y todas sus manos mágicas… (Aun cuando debía de admitir que eran de gran ayuda en trabajos variados… después de todo “una mano” siempre era de ayuda)

 

Continua examinando la habitación, buscando inocentemente si su padre ha ocultado las cajas para jugarle una broma, broma que realmente no cree pero que de todos modos sigue buscando por algo que le diga que es una broma o una trampa de su padre. Sin embargo, al no encontrar nada de lo que estaba buscando termina llegando a la cocina y en ella, como si se tratase de una broma de verdadero mal gusto, como si fuera solo una cruel alucinación de su maltrecho cerebro, cree ver lo que él denomina como un fantasma…

De espaldas suyo, se encuentra quien ya no debería de estar ahí, esta anonadado, esta estupefacto y negando con miedo y la sorpresa de lo que se aferra a ver como una alucinación comienza a retroceder tratando de no hacer ruido, aun cuando sus ojos se llenan de lagrimas, no se ha dado cuenta que ha chocado directamente contra la puerta haciendo que esta rechine. Aquel que se encuentra en el interior de la cocina gira y por fin Sans observa lo que él sigue creyendo que es solo una alucinación de su parte, solo un dulce sueño

 

-¿P-Papyrus?

 

Notas finales:

¡Me dolió! Bien, comencemos con las explicaciones… primero, con respecto de su madre (hasta ahora caigo en cuenta que pude poner a Grillby como pareja de Gaster pero ni modo) a la madre/esposa de Sans y Gaster (respectivamente hablando) no diré nada, les dejo a su imaginación a la mujer puesto que yo no la imagine, solo necesitaba poner una fémina que haya tenido a ambos hijos y que no se metiera en la trama más de lo necesario… ahora, Sans y Papyrus tenían desde nacimiento una muy extraña enfermedad única (no, no es sida ni nada de eso) pero vamos… conforme el tiempo, la salud de ambos empeora y morirán sin llegar a la adolescencia, Gaster no quiere esto y por eso experimenta con ellos… ahora

 

Si, con dolor tengo que decir que si, aquí, Papyrus está muerto por culpa de un fallo en las maquinas que estaban a su lado… ni su padre ni Sans pudieron salvarlo, aunque como dice Gaster, lo bueno es que murió sin dolor… tal vez hasta sin darse cuenta… pero de igual modo, Sans no va a perdonar nunca a su padre por lo mismo

 

Ahora, con respecto a “la bruja” que en este caso, ha tomado la forma de Papyrus… no sé por qué o como, pero esta criatura ya estaba desde antes de que se creara la mansión (si, aquí es la mansión y no está pintada de rosa sino de diversos colores) como aquí es donde comienza la historia de las almas, puede que los “métodos” de captura de “la bruja” sean diferentes a los que ocupa cuando llega Blueberry (digo, ya tiene experiencia cuando llega el ultimo esqueleto) en fin… bueno, creo que es todo…

 

¿Les ha gustado?

Que tengan buen día

¡Comenten!

Y prepárense por que este fic será triste y en algunos puntos tierno… estén preparados ¬u¬… DX


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