El cielo despejado sin nubes alrededor puedo ver el cielo azul las aves de igual forma las puedo ver volando sin rumbo aparente, me pregunto ¿que estará pasando allá fuera de este salón? ¿Habrá alguien haciendo lo mismo que yo? ¿Hará alguien haciendo algo común de la vida cotidiana? ¿Hará peligro en algún lugar? ¿Cómo será el peligro? ¿Habrá alguien en peligro? ¿Podrá o podrán escapar? ¿Estará o estarán a salvo? ¿En dónde será? Siempre existirá movimiento en el mundo lo más probable es que todo lo que esté pensando sea real, no sé dónde, ni quién, ni quiénes incluso, pero sé que está pasando, ¿Y yo que estoy haciendo? Estoy sentado en una banca, en una escuela, mirando por la ventana hacia las grandes edificaciones que hay alrededor pensando en el mundo y lo que probablemente esté pasando en algún lugar recóndito de donde estoy.
−Joven Tsukumo ¿Podría leer la continuación de la página por favor? – dijo mi maestra algo molesta.
− ¿Eh? Oh, si claro espere déjeme ver – dije cogiendo el libro y poniéndome de pie.
“En la vocación está la curiosidad y el placer por la realización de la tarea misma y no solo por sus logros (satisfacción); se te ocurren cosas nuevas o puntos de vistas diferentes a los ya existentes en esto, te animas a especular, a hacer hipótesis, sientes una seguridad intuitiva que de alguna manera saldrás adelante con esto y quisieras hacerlo a tu manera (aptitud). Sientes que esto es muy necesario para los demás o para ti o para la misma vida (entrega). “
−Suficiente, gracias señor Tsukumo. Ahora ¿Quién seguirá? Oh Ya se, señor Dennis ¿nos hace los honores por favor?
− ¡Claro Maestra! – dijo con un tono animado.
−Aaaah – suspire mientras me sentaba.
Regresé a mirar por la ventana y ¿Cómo pude leer la parte siguiente? Muy fácil, solo presté atención en la última palabra que mi compañero dijo y al encontrarla solo seguí donde el termino. En serio a veces la vida de un estudiante normal se me hace algo aburrida y monótona que a veces pienso si existe algo por lo cual la gente vive e incluyéndome. Y pueden existir muchas razones, pero esas razones siento que son un concepto creado por la sociedad, ¿A caso la sociedad lo es todo? ¿A caso no podemos romper nosotros con los paradigmas que esta se crea? Me canso de solo pensar el motivo, pero creo que ahora lo que impulsa a seguir con vida son las personas a las que son de mi agrado, que comparten similitudes a mis gustos u otras cosas, también porque estar solo provoca muchas irregularidades en tu personalidad y eso no lo quiero desarrollar. Otras razones son por alcanzar lo que sería un sueño para mí cuando pasen los años y tenga los conocimientos necesarios para ejercerlo, por último, mis últimas razones son mi familia y la persona a la que me tiene como estúpido, siempre pensando en aquel personaje, su silueta, su forma de caminar, sus pocas expresiones que he logrado ver.
La campanilla sonó y me saco de mis profundos pensamientos, la maestra se retiró y todos nos paramos haciendo reverencia hacia ella. Luego comenzamos a guardar nuestras cosas ya que las clases habían terminado por el día de hoy. Al caminar hacia la puerta y deslizarla enfrente mío estaba Yusaku Fujiki, es chico atractivo según varias chicas, tiene los ojos color verde, su cabello es azul, con un fleco sobresaliente en su frente con rayos rosados y un tono de azul más claro que el cabello de su nuca, también tiene 2 mechones rosados sobresalientes a un costado. Ha sido mi amigo desde que estoy en primaria, desde entonces él y yo hemos sido inseparables a tal grado de conocernos completamente. Aunque a veces siento que Yusaku necesita congeniar más con otras personas porque su habilidad social no es la mejor que digamos, es muy serio en clase, conmigo parece ser otra persona, ya que, aunque sea poco sonríe, es muy atento y suele preocuparse mucho por mí.
− ¡Oh¡Yusaku me asustaste ¿Qué ocurre?
−No me digas que no sabes, vine por ti
−Pues no es muy necesario, siempre vamos al mismo lugar la mayoría de las veces – dije algo molesto
−Está bien, no lo volveré hacer si tú me lo dices ¿Y ahora que lo dices porque siempre vamos al Club de Teatro? – pregunto Yusaku crédulo.
−Aahaa – suspire – Es porque Yuya está en él, porque es nuestro amigo y porque le prometimos siempre esperarlo hasta que él terminara con sus actividades
−Oh claro, Yuya, como olvidarlo – dijo con un tono sarcástico – ¿No crees que sería mejor esperarlo en tu salón de clases?
-Yusaku, ya te he dicho que Yuya espera siempre que vayamos a verlo y no podemos fallarle, además Yusaku ¿Por qué no puedes ser honesto contigo en admitir que te gusta ver a Yuya mientras actúa? ¿Eh? – dije con una sonrisa en mi rostro mientras lo veía.
Hay ocasiones en las que pienso que Yusaku y Yuya no se llevan muy bien, pero luego veo que se llevan bien y ese pensamiento se me olvida. Caminamos hasta el Club de teatro y al entrar saludamos a la presidenta del Club
− ¡Buenas tardes! Rei, lamento la interrupción ¿está bien que nos quedemos de nuevo? – dije sonriendo.
− ¡Oh! Son ustedes, claro pueden quedarse allí sentados, mientras no estorben mejor – dijo con total seriedad.
−Puedes contar con ello – dije con una sonrisa y mi pulgar de la mano izquierda alzado.
Mientras Rei estaba parada con un libreto en sus manos viendo como los demás miembros del Club preparaban el foro, ella les gritaba que movieran más la utilería para varias direcciones, así como regañaba a varios miembros por ser algo descuidados o por descansar. Hasta que por fin dejaron todo arreglado y empezaron a ensayar con las luces del foro.
− ¡Bien atención todo el mundo vamos a empezar con el ensayo de nuestra siguiente obra! Todos guarden silencio y escriban sus notas en una libreta. ¿Entendieron? Si es así bien empecemos.
Las luces se apagaron hasta que una chica entro a escena a decir sus líneas con el libreto en mano, haciendo expresiones que normalmente no se harían en una plática normal. Ella tenía el cabello suelto, era rosado, sus ojos eran azules como el cielo mismo; también se podría escuchar perfectamente lo que estaba diciendo y me hizo pensar que tienen que practicar mucho su voz y modulación para poder hacerlo bien. Me quede contemplando la escena hasta que por fin nuestro amigo Yuya salió a escena, al verlo me siempre me hace pensar en su antigua actitud, así como a recordar en el tiempo que hemos llevado juntos.
Nos conocimos en el kínder, desde entonces hemos estado juntos, él siempre era muy cambiante y algo peculiar en cuanto a su carácter, según también varias chicas Yuya es un chico apuesto, tiene el cabello de dos colores, verde y carmesí, de longitud media del que sobresalen puntas alrededor de su cabeza y una corta punta apuntando hacia arriba de color verde, tiene ojos carmesíes, iguales a los míos, solo con la diferencia que sus ojos son un poco más claros que los míos.
En fin, volteé a ver la cara de Yusaku y él estaba pasmado viendo a Yuya, me di algo de risa ya que sabía que a él le gustaba Yuya cuando está actuando en un escenario. Según parece ser la historia de una princesa y sus fieles caballeros que cada uno da la vida para protegerla de un rey malvado que quiere quitarle el reino, pero ellos con su honorable sacrificio logran evitarlo y al final ellos mueren, sin embargo, el reino siempre los recordara como unos héroes.
El elenco está conformado por Judai Yuki un chico de segundo año, tenía el papel del caballero en jefe, Dennis Macfield mi compañero de clase tiene el papel del caballero subjefe, Fubuki Tenjoin un chico de tercer año que tiene el papel del tercer caballero y por último Yuya el caballero más joven y antiguo acompañante de la princesa hasta que las clases de la princesa comenzaron a capturar todo su tiempo y él empezaba a convertirse en un caballero completo.
− ¡Bien, terminemos la practica por hoy! Pueden retirarse, gran trabajo el de todos. – dijo Rei aplaudiendo y sonriendo.
Los actores se fueron a cambiar a los vestidores el resto se reunían intercambiaban varías palabras, tomaron sus mochilas y se retiraban del foro; después de un rato Yuya regreso, camino hasta llegar conmigo y Yusaku con una gran sonrisa.
− ¡Yuma! ¿Qué tal? ¿Qué opinas de nuestro ensayo? ¿Estuvo bien? O ¿Mas que bien estuvo excelente? – dijo con total seguridad
−La segunda, estuviste genial allá arriba y Yusaku también lo piensa ¿verdad? – dije volteando a verlo, guiñándole el ojo derecho y sacudiendo mi codo derecho en su pecho.
− ¿Eh? Oh si claro, estuvo excelso – dijo cruzando los brazos y apartando su mirada para ver a otro lado.
−Oh, vamos Yusaku ¿No puedes decirle a Yuya lo mucho que te gusto su ensayo? – dije mientras comenzamos a caminar hacia las puertas de salida.
−Yo ya dije que estuvo bien ¿Qué más quieres que diga? ¿Acaso quieres que opine sobre su actuación, sobre los cambios de escena, sobre la iluminación o que? ¿Qué quieres?
−Ahaa – suspire – ¿que todo te lo tienes que tomar tan en serio? Solo quiero que alagues un poco más a Yuya, es un gran actor, es popular con las chicas y en su Club es uno de los mejores que haya tenido.
−Lo ves, es por eso que no lo hago, tú lo haces por mí eso es algo.
−Pero así no reflejas abiertamente lo que sentiste al verlo. – dije replicando.
−Muy bien, muy bien, agradezco que quieras hacer eso por mi Yuma, pero creo que estas exagerando un poco no es solo mi actuación perfecta, también mis demás compañeros del Club, cada uno aporta para que la obra salga estupenda, así que, con que a Yusaku le haya gustado con eso me conformo. – dijo Yuya con mucha seriedad.
− Si perdona Yuya, es que Yusaku a veces puede ser muy inexpresivo y frio.
−No tienes porque, lo conocemos desde pequeños y sabemos que él siempre ha sido así – dijo pasando su brazo sobre mis hombros para acercarme hacia él.
− ¿Quieren dejar de hablar de mi como si no estuviera aquí? Y creo que Yuya tiene un gran punto, no solo es su actuación también es el de sus compañeros. – dijo mostrando una cara de disgusto.
Nosotros seguimos caminando hasta llegar a las puertas de salida de la escuela, deteniéndonos en los cajones de zapatos para retirarnos los blancos que teníamos para ponernos unos cafés. De nuevo caminamos juntos hasta la reja principal de la escuela, donde Yuya se despidió de Yusaku y de mí, para que Yusaku y yo continuemos nuestro camino para nuestras casas, ya que Yusaku y somos vecinos.
−Dime Yuma, ¿Cómo están tus padres? ¿Les va bien?
− ¿Eh? Oh, si a veces mi hermana me llama para que hablemos con ellos en una video llamada.
− Y ¿Haz echo algo interesante recientemente?
−No, nada ¿y tú?
−Pues que me aburrí en clase y pensé en muchas cosas estábamos en clase de literatura, y como no estaba prestando atención solo me concentre en la última palabra que uno de mis compañeros y mire mi libro busque la palabra, cuando la maestra me llamo para continuar leyendo. – dije riéndome al terminar de hablar.
−hm que lo demás digan lo que sea, pero no eres tan tonto como piensan – dijo sonriéndome.
Sonreí al principio, pero después me confundí no sabía si me alago o dijo algo que me molestara, pero lo ignore. Seguimos caminando uno junto al otro sin nada más que decir.
−bueno Yuzaku, te veo mañana – dije estando parado enfrente de la reja principal de mi casa.
−Claro Yuma, hasta mañana – dijo quitando el seguro del portón.
Camine por el pasillo, llegue a la puerta, saque mis llaves de mi mochila, abrí la cerradura, hasta abrir la puerta.
−Ya llegué – dije quitándome los zapatos y dejándolos enfrente de la puerta.
−bienvenido de vuelta Yuma – dijo mi hermano Yugi.
− ¡oh! Regresaste temprano, normalmente regresas más tarde ¿no fuiste a tu club? – pregunte
−Si, pero fue corto el tiempo que estuve allí, nuestra hermana Akari me mandó un mensaje diciendo que va llegar tarde así que ya tengo echa la comida preparada, baja en cuanto te hayas cambiado y lavado las manos. – dijo volviendo a la cocina.
Yo subí las escaleras que estaban a un costado del pasillo, abrí la puerta de mi cuarto, deje mi mochila en la cama, comencé a desabotonarme la camisa; quitándomela, luego mi cinturón lo desabroche, lo enrolle y lo puse en un cajón, seguido de mi pantalón. Al quedarme en ropa interior busque entre mis cajones un short azul rey, una playera naranja con mangas cortas y un chaleco negro, luego pase al baño, me lave las manos y luego me las seque con la toalla a un costado del lavabo, para bajar con mi hermano, camine hasta la cocina donde ya tenía todo en la mesa.
−Toma asiento, en lo que termino de lavar los trastes que utilice. – dijo volteándome a ver con una sonrisa.
Yugi finalmente acabo con los platos, se secó las manos en la toalla que estaba colgando de un arillo que estaba a bajo de él, después camino hasta llegar del otro lado de la mesa sentándose y mirándome, mandándome la señal de que ya empecemos. Juntamos nuestras manos, agradecimos por la comida, agarramos los palillos y finalmente degustamos la comida. Terminando nos paramos, dejamos los utensilios en el lavabo, los mojamos con agua, luego nos sentamos en los sillones de la sala, yo prendí la televisión con el control; apretando el botón para cambiar de canales.
−Yuma ¿Cómo te va en la escuela? – dijo Yugi.
−¿eh? Bien supongo – dijo con indiferencia.
−que bien y dime ¿no has pensado en unirte a algún Club aún?
− ¿Qué? ¿Aun sigues insistiéndome a que me una a uno? – dije algo molesto
− ¿Por qué no quieres unirte a uno? Es una actividad que podría a desarrollar mejor tus habilidades, esas habilidades se convertirán en una capacidad y esa capacidad pueden convertirse en destreza. Puede que te guste – dijo con pasión en su tono.
−porque no soy muy bueno en muchas cosas y algunos clubes me parecen aburridos. – dije quejándome.
−claro que, si eres bueno, solo que tienes un complejo de inferioridad eso es todo, si te atreves a hacer algo y eres perseverante tendrás resultados. – dijo con mucha franqueza y seguridad.
−pero cuando ingresé a la escuela yo probé la mayoría de ellos, solo veía como mis dos amigos Yusaku y Yuya encontraron uno al que les quedo bien, Yusaku prefirió estar a mi lado antes que estar en un club, seguramente lo hizo para animarme y ¿Yuya? Bueno él también quería estar conmigo, pero yo lo convencí de que entrara al club al que ahora pertenece porque realmente tenía y aún tiene madera para ello. No soy bueno en los deportes, me esfuerzo mucho para no reprobar esa clase, no me gusta mucho leer, dibujar o pintar no es lo mío, no se tocar un instrumento, no puedo cantar, bailar o actuar; en verdad no tengo algo que me apasione por ahora. – dije desanimado y cerrando los ojos.
Yugi me miro con la mirada seria y luego se paró del sillón, caminando hasta la cocina hasta llegar al lavabo.
−Si no tienes algo, búscalo, encuentra tu propio club, no dejes que todo termine así, tú tienes algo en lo que eres bueno, pero aún no te das cuenta de eso. – dijo volteándome a ver con una sonrisa.
− ¿eh? ¿Yo tengo algo en lo que soy bueno? – dije sorprendido y confundido.
−Si, y no me preguntes qué es, ese es un viaje en el cual tú debes emprender, conocer, mirar, asombrarte con cada cosa que te pase y que encuentres. Pero si te digo todo eso se desvanecerá en el aire.
− ¿Qué? ¿Hermano? Yugi, solo dame una pista solo una ¡¿SÍ?! – dije insistente
−De acuerdo, pero no te diré nada más la clave está en “conversar” – dijo cortadamente y regresando a lavar los platos.
− ¿Qué? ¿Conversar? – dije confundido
−Si, eso mismo nada más y nada menos – dijo sonrientemente.
−¿Eso a que me va llevar? Es algo ¿no se? Simple – dije con obviedad.
−Parece simple pero no lo es, cuando seas mayor lo entenderás con el tiempo, pero ahora sería un gran momento para que aprendas por ti mismo a descubrir de lo que te estoy hablando
−¡Genial! Eso fue de gran ayuda, gracias – dije con sarcasmo.
Al no encontrar nada bueno en la televisión me fui a mi cuarto, me senté en mi silla, saque mis cuadernos para comenzar a hacer mi tarea, encendí mi lampara, pero mi celular sonó de repente, era un mensaje de Yusaku.
Yusaku: ¿cómo estás?
Yo: bien, gracias
Yusaku: ¿tuviste una charla incomoda con tu hermano de nuevo?
Yo: si lo había tenido, pero hoy fue diferente ya que él me dijo algo que realmente despertó mi interés.
Yusaku: ¿Qué te dijo?
Yo: mi hermano sabe o tiene una idea para lo que soy bueno, sin embargo, no me dijo que era sino más bien me dio una clave para descubrirlo.
Yusaku: interesante, ¿Cuál es la clave? ¿Te la dijo?
Yo: si, me dijo que era “conversar”.
Yusaku: me parece muy simplista y algo tonto.
Yo: lo mismo pensé, solo que no le dije lo que pensé por miedo a que se sintiera mal mi hermano o se enojara, solo le dije que me parecía simple, sin embargo, el me contesto que en más adelante lo descubriré.
Yusaku: creo que debes creer en tu hermano ya que por ser tu familia debe haber tenido una buena razón para decírtelo.
Yo: está bien, oye ya me voy a desconectar tengo que hacer mi tarea y luego me voy a duchar.
Yusaku: muy bien, buenas noches Yuma.
Yo: buenas noches Yusaku.
Con lo último dejamos de conversar, mientras yo continuaba haciendo mi tarea paso vario tiempo hasta que por fin acabe, me estire juntando mis manos y haciéndolas hacía arriba, sin embargo, un sonido en mi puerta me distrajo de mi estiramiento.
−pase – dije con tono alto
−Oh, Yuma ya está listo el baño por si quieres pasar o ¿prefieres que yo lo tome primero? – pregunto mi hermano
−No, está bien yo lo tomare primero – dije poniéndome de pie y avanzando hasta mi closet.
Del closet tome mi toalla y una canasta con mis cosas para el baño, camine dirigiéndome hasta el, abrí la puerta, me desnude, deje mi ropa en el cesto que se encontraba a un costado de la lavadora, abrí la puerta de la bañera y me adentre, primero me di una ducha, poniéndome shampoo en mi cabello, luego con un bodywash lo unte sobre mi sácate, comenzando a tallarme, terminando me enjuague mi cabello y mi cuerpo, para continuar entrando en la bañera. Me sentí muy bien adentro, pasé varios minutos hasta que salí de la bañera, me puse mi toalla alrededor de mi cintura, tome mi ropa del cesto, poniendo mi ropa interior en el cesto, el resto me lo lleve conmigo, con otra toalla me la puse en mi cabello saliendo del baño.
− ¡Yugi ya terminé! – dije llamando a mi hermano gritando.
− ¡De acuerdo! – respondiéndome de la misma manera.
Entre a mi cuarto, doble mi ropa, la deje en un cajón, y me empecé a secar mi cabello, lo sacudí, luego me puse mi pijama, cuando estuve todo vestido me fui a mi escritorio, me senté en mi silla, encendí mi laptop, y comencé a escribir en mi computadora, era como un diario, solo lo hacía cada vez que me pasaba algo que realmente quiero recordar. Terminando de escribir vi la hora, apagué mi laptop, deshice mi cama, me cubrí con mis cobijas y finalmente caí en un profundo sueño.
Al día siguiente mi alarma sonó, bostece, me estire, me vestí con mi uniforme, baje y el desayuno ya estaba en la mesa, mi hermano Yugi me lo había dejado, él ya se había adelantado. Yo comí rápido, dejé los platos en el lavabo, los moje con agua, fui arriba a recoger mi mochila y salí de mi casa. Me encontré a Yusaku en mi portón, la abrí, nos sonreímos y juntos nos fuimos a la escuela; al llegar nos encontramos con Yuya, quien nos hizo un saludo con su mano derecha, sonrientemente, caminamos juntos hasta el cajón de los zapatos, justo en ese instante apareció esa persona, me puse algo ruborizado, sentí que mi corazón empezó a palpitar con gran velocidad, me sentía algo emocionado, pero no podía dejar que mis amigos me vieran así, aún no les decía nada y tampoco quiero que levanten sospechas, respire hondo y exhale, me puse los zapatos de mi cajón y me fui a mi salón.
Pasaron la primera, segunda y tercera lección, fueron muy aburridas y tediosas, pero sonó la campana del almuerzo, como era usual nosotros nos reuníamos en el patio trasero de la escuela, nos sentamos con nuestros bentos.
−Oigan les tengo que decir algo importante, ¿pueden venir a mi casa? – pregunte algo nervioso.
−Bueno como yo soy tu vecino no tengo problema – dijo Yusaku comiendo una salchicha en forma de pulpo.
−Mmm Yo no estoy seguro, será un placer ir, pero… - hizo pausa y se puso su mano derecha en su barbilla − ¿Cómo cuánto tiempo calculas que estaremos allá? – pregunto Yuya.
− ¿Por qué tienes algo importante que hacer? – pregunte intrigado.
−No tanto, solo no quiero irme tan tarde porque se está acercando un tifón y no quiero que me agarre la lluvia.
−¡Oh ya! Pues bien, no calculo más de 2 horas ¿está bien? – dije pensando y respondiéndole con una sonrisa.
−Si, perfecto – respondiendo con la misma sonrisa
No mire muy bien, pero sentí como Yusaku miro a Yuya con una sonrisa algo malévola y Yuya enojándose con el como si fuera otra persona. Terminando nuestros almuerzos y sonado la campana de regreso, nos separamos para ir a nuestras respectivas clases, finalmente acabando estas, junto con Yusaku fuimos al club de teatro para ver a Yuya y sus compañeros practicar nuevamente, actuaban tan bien que parecía como si fuera la actuación real, sin darme cuenta cada escena parecía como si tuvieran sus trajes puestos y se convirtieran en el personaje que interpretaban; terminando el ensayo, nosotros nos fuimos caminando hasta la salida.
−Yuya de nuevo tú y tus compañeros estuvieron increíbles, me imagine todo su ensayo como si ustedes fueran los mismísimos personajes, con vestuario y todo, en serio me encanto – dije emocionado.
−Si, estuvieron bien – dijo Yusaku haciendo una pequeña sonrisa.
−Gracias, de echo nuestro vestuario pronto estará listo e incluso los del club de arte están pensando en hacernos un poster para promocionar nuestra obra en el festival escolar. – dijo sonrientemente.
− ¿En serio? ¿Entonces una vez que estén listos sus trajes van a ir con los del club de arte para que los pinten? Y ¿también ya van a empezar a actuar con ellos? – pregunte emocionado.
−Si y algo así, los del club de arte nos dibujaran y harán el poster, pero en cuanto a ensayar con los vestuarios es un poco incierto, no ensayaremos con ellos hasta la última semana antes del festival, sin embargo, no te equivocas con lo de ensayar con ellos. – dijo guiñándome el ojo y sonriéndome.
Llegamos de nuevo al cajón de zapatos, nos quitamos los blancos que teníamos para ponernos los que dejamos, después de eso, nos fuimos yendo a mi casa, en el recorrido Yuya y Yusaku usaron un poco el celular, luego lo guardaban en sus bolsillos, hasta que llegamos a mi casa, abrí el portón y luego la puerta de mi casa.
− ¡Ya llegué! – dije, pero no hubo respuesta – hm parece que todavía mi hermana no llega y mi hermano se quedó hasta tarde en su club. – dije al caminar hacia la sala.
− ¡Con permiso! – dijeron al unísono Yusaku y Yuya.
Se quitaron los zapatos en la entrada entrando y caminaron hasta llegar conmigo.
−Tomen asiento en un momento preparo el té – dije señalándoles con mis manos extendidas el sillón.
− ¿Te ayudo? – expreso Yusaku.
−¿eh? No está bien, siéntanse cómodos – dije nervioso.
En el instante que estaba agarrando las cosas para preparar el té, en mi mente estaba pensando cómo decirles a Yusaku y Yuya que me gustaba una persona de la escuela, es como si me sintiera incomodo por dentro, así como si les dijera eso ambos cuando ellos sienten algo por mi lo cual, no lo creería a menos de que si lo fuera, pero no lo es, ellos son muy amables, gentiles, hospitalarios y nunca me harían nada malo, aunque tengan sus problemas somos amigos desde hace tiempo, esto debería ser sencillo. Me sentí bien conmigo mismo diciéndome estas palabras que pensé por sentirme nervioso. Terminando con el té, en una bandeja puse tres vasos, sirviéndole té encima, agarre el contenedor de azúcar y la taza de leche por si le querían agregar, luego la eleve y la lleve hasta donde ellos estaban la puse en la mesa del centro, repartiendo un vaso para cada uno; Yuya le echo leche al suyo y 2 cubos de azúcar, mientras Yusaku solo le agrego 3 cubos de azúcar, yo le añadí al mío 5 cubos de azúcar.
− ¿No es mucha azúcar Yuma? – dijo Yusaku quejándose
−Es que no preste atención al té y por accidente puse uno no que no me gusta mucho – dije apenado.
−Y ¿bien? ¿De que querías hablarnos? – dijo Yuya con el vaso en sus manos, una en el cuerpo del vaso y la otra debajo de este, dando un sorbo.
− ¡Oh! Si eso, pues para iniciar fue algo que le conté a Yusaku ayer, tuve una plática con mi hermano el cual me dijo que yo tengo una capacidad que desconozco por completo y que “conversando” podía descubrirlo – dije con una sonrisa fingida.
− ¿En serio Yugi digo eso? Vaya debe tener una muy buena visión de ti ¿Y que más?
−No sé, como decir esto, pero ¿me pueden prometer no decirle a nadie, ni a mis familiares? - dije empezando a ponerme sonrojado.
−Por supuesto Yuma, para eso estamos nosotros en las buenas y malas también – dijo Yuya alegre.
−Si, lo prometemos ahora dinos – dijo Yusaku algo ansioso.
−Bueno, hace tiempo que veo mucho a una persona nunca le he hablado, pero algunas veces cuando me he topado con esa persona, puedo sentir que es buena, gentil y es alguien que siento que no puedo alcanzar. Anuqué ayer cuando mi hermano me dijo que soy bueno en algo, sentí que podía alcanzar a esa persona, sin embargo, me da algo de miedo que todos se enteren que la persona que me gusta es un chico y no una chica – dije desanimado – puede ser algo que mi hermana y hermano no acepten o los deje en shock, sin embargo, creo que lo que dijo mi hermano de atreverme a hacer una cosa o algo pueda ser mi primer paso para cámbiame y saber lo que me puede deparar de ahora en adelante. – dije sonriendo de nuevo
−No conoces muy bien a esa persona y aun así te gusta, pero ¿por lo menos conoces su nombre o algo de él? – dijo Yusaku con señales de disgusto en su tono.
−Si, su nombre es Fudo Yusei, va en segundo año y está en el Club de Robótica – dije sonrojado
−Oh, vaya sorpresa Yuma, nunca me imaginé que fuera por esta razón por la que nos invitaste repentinamente a tu casa, me alegro por ti, y ¿qué piensas hacer al respecto? ¿piensas confesarte? – dijo Yuya con una extraña sonrisa y mirada en sus ojos, nunca había visto a Yuya mirarme de esa manera o alguien de esa manera, es como si me estuviera amenazando y al mismo tiempo tratando de intimidar.
−Por el momento intentare acercarme a él y hablarle – dije sintiendo algo de pena.
− ¿Y que harás si él no te hace caso? – dijo Yusaku disgustado.
− ¿Eh? Seguiré intentándolo, pero claramente no quiero volverme una molestia, así que, no lo seguiré todos los días. – dije sonriendo.
La habitación se inundó de mucho silencio hasta que Yuya lo rompió.
− ¿Y era todo lo que tenías que contarnos? – dijo dando su ultimo sorbo al té después de terminárselo.
−Si, perdón si hice mucho suspenso – dijo avergonzado.
−No te preocupes Yuma, al menos tienes esa sensación de alivio que se siente cuando se confiesa algo que se había estado ocultando durante vario tiempo – dijo Yuya mirándome como si sus ojos le faltaran brillo.
Luego de darme cuenta de que Yusaku y Yuya terminaron sus vasos de té me llevé la bandeja hacia la cocina, volteé a mirar a Yusaku y Yuya, pareciéndome ver que Yuya le decía algo al oído a Yusaku, dejé los vasos, la bandeja en el lavabo, derramando agua encima y volviendo con ellos.
−Sé que todavía es temprano, pero realmente ya me tengo que ir – dijo Yuya seriamente
− ¿eh? ¿Por qué tan de repente Yuya? ¿Te molesto o no te sientes bien con algo que dije? – pregunté preocupado
−No, estoy bien Yuma créeme solo, es mejor que me vaya, no me siento bien conmigo mismo – dijo parándose, recogiendo sus cosas y caminando hacia la puerta.
− ¿Qué tienes? ¿Te podemos ayudar en algo? – dije insistente
−Yuma esto no se trata de ti, se trata de mi – dijo molestándose.
−Déjalo Yuma, deja que se vaya – dijo Yusaku gentilmente.
− ¿Por qué? ¿Qué me están ocultando que no quieren que sepa? – dije irritado.
−Yo- Yo no puedo estar mucho tiempo en tu casa Yuma – dijo Yuya con el perfil bajo y tono triste.
− ¿Qué? ¿Por qué no? – dije intrigado
−Yo- Yo- Yo tengo- tengo – dijo sin poder articular bien la oración
− ¡Díselo ya! – dijo Yusaku gritando, dejándome impresionado porque desde hace mucho no escuchaba gritar a Yusaku.
−Yo tengo una enfermedad Yuma – dijo mirándome triste.
− ¿Qué enfermedad? ¿No es contagiosa o sí? Si lo fuera ya nos hubieras contagiado y no podrías salir de tu casa ¿Qué tipo de enfermedad es? – dije sorprendido y temeroso.
− ¿Si te lo digo me vas a dejar ir? – dijo mirándome seriamente.
−Lo juro, dime ¿Qué es? – dije.
−Se llama trastorno disociativo, tu hermana y hermano saben que tengo esta enfermedad desde que éramos pequeños, por eso no me dejan acercarme mucho a ti, aunque no lo demuestran, pero realmente ellos no están del todo de acuerdo con que seamos amigos. Pero créeme Yuma que mi amistad contigo es lo mejor que me ha pasado en mi vida. Nos vemos – dijo sinceramente y sonriendo en lo último, yéndose y cerrándose la puerta.
−Dime Yusaku ¿tú lo sabías? – pregunte en estado de shock
−Si, tus padres le contaron a mí tutor y el a mí, sin embargo, no es pretexto para que él no siga siendo nuestro amigo, siempre ha estado allí para ti, nunca ha presentado muchos cambios de gravedad, así que, tranquilízate todo estará bien, vamos a tu cuarto a que te distraigas un rato antes de que tu hermana Akari y Yugi lleguen. ¿sí? – dijo convincentemente.
−Si, tienes razón ¿verdad? Nada va a cambiar con esto – dije saliendo del shock, sonriéndole y junto con él fuimos a mi habitación.
Yusaku y yo al estar a mi habitación, empezamos a jugar videojuegos, sin embargo, el pensar en la situación de Yuya, con mi familia y también que nadie se molestó en decirme me estaba poniendo triste.
− ¿Qué ocurre Yuma? – pregunto Yusaku mirándome preocupado.
−Bueno, es solo que me da cierta tristeza saber lo de Yuya, con mi familia y contigo – dije en un tono desanimado.
−Yuma, si no te lo dije es porque no había necesidad, Yuya nunca tuvo un cambio a tu lado, él está estable cuando está con nosotros, si algún día él tuviera un episodio te habría dicho de inmediato de que se trataba y por tu familia no te preocupes, mientras él no te haga daño y sigua normal no va a pasar nada – dijo sonriéndome.
−Claro, me permites un momento sigue jugando sin mí, necesito hacer algo en mi computadora un momento – le dije, mientras me paraba del suelo, caminé hasta mi escritorio, me senté en mi silla, encendí mi computadora y abrí mi archivo donde suelo escribir – realmente no tengo mucho valor para expresarlo muy bien, pero siento que aquí puedo hacerlo mejor, más fácil y sintiendo un poco de alivio – pensaba mientras escribía todo lo ocurrido hoy.
Cuando acabe de escribir me sentí con un poco de sueño, bostece y Yusaku al darse cuenta me convenció de que durmiera un rato y qué el me despertaría cuando Akari y Yugi regresaran. Yo acepte quedándome profundamente dormido, no sé cuánto tiempo paso, si fue corto o largo, sin embargo, Yusaku me despertó justo cuando mis hermanos llegaron y ambos bajamos para recibirlos.
− ¡Bienvenidos! – dijimos al mismo tiempo.
−Oh, Yusaku ¿qué estás haciendo aquí? – pregunto Akari
−Yuma me invito, hoy no teníamos tanta tarea, así que me invito a pasar el rato – dijo Yusaku encubriendo su verdadero propósito.
−Oh, está bien ¿Quieres quedarte a cenar? – dijo Yugi
−No quiero ser una molestia, ya me retiraba de igual forma – dijo cortésmente
−No es ninguna molestia, anímate solo será poco tiempo – dijo mi hermana.
−De acuerdo, aceptare su hospitalidad, muchas gracias – dijo amablemente.
Mi hermano y hermana terminaron de hacer la cena, mientras nosotros al estar esperando que estuviera lista subimos a mi cuarto a hablar un poco y jugar, nos llamaron para bajar, suspendimos todo, al bajar, comenzamos a comer; después de agradecer por ella, al termino Yusaku decidió irse, despidiéndose amablemente con todos y agradeciendo de nuevo por todo. Minutos después, me di un baño, terminé mi tarea para finalmente irme a mi cama. No obstante, tengo la sensación de que a partir de este momento algo cambiara y pueda que haya más cambios futuros.
Continuara...