Talk to me softly
There is something in your eyes
Don't hang your head in sorrow
And please don't cry
I know how you feel inside I've
I've been there before
Somethin is changin' inside you
And don't you know
Kitazawa hizo presencia en el inmenso salón , Shuichi iba a su lado, fumando un cigarrillo y con el rostro indiferente.
Los que se encontraban disfrutando de la fiesta, se quedaron en silencio y escrutaron a los recién llegados, el pelirrosa vestía unos jeans apretados y una sencilla camiseta sin mangas que dejaba ver uno de sus hombros.
Le dio una palmada en el trasero- ve y has travesuras…
Shuichi le sonrió y se dispuso a perderse entre la multitud.
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-Era un lugar inmenso….lleno de gente y bebidas….quise tratar de pasar desapercibido pero era casi imposible…
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La música era estridente, casi no podía caminar por la cantidad de personas, el alcohol había hecho efecto y en los sillones ya se podía apreciar a varios chicos besándose y acariciándose.
Shuichi que llevaba algunos tragos encima comenzaba a excitarse, sus mejillas rojas y su rostro bañado por el sudor era más que una evidencia.
-Zorrita….-un tirón en su camiseta llamó su atención.
-¿Qué?
Un chico de cabellos blancos le sonreía, sostenía en su mano un apple martini.
-Debes estar feliz….
-¿Y eso porqué?
-Viniste con Yuki….
Shuichi sonrió con picardía y le acomodó el cabello blanco, provocando que el albino se enfureciera aún más- No se porqué Damian….pero me atrevería a decir que estás celoso…
-¿De ti?...no me hagas reír….eres solo uno de sus juguetes, pronto se aburrirá…
-Entonces….-Shuichi volvió a sonreírle y se alejó de él- ¿Cuál es el problema?
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-Oye japonesito precioso…..¿no quieres un rapidito eh?....-un hombre ebrio se acercó a él y le ofreció una copa, pero Shuichi no se molestó en contestarle, había recibido varias propuestas parecidas durante toda la noche.
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-No me ofendí….lo más gracioso de ser una estrella porno es que todos piensan que pueden acostarse contigo, pero es mi trabajo, es mi forma de ganarme la vida, yo no dejé que cualquiera se metiera en mis pantalones…
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-¡Shuichi…ven!....
El pequeño acudió rápidamente a la llamada de Kitazawa. Se coló entre la multitud, acercándose cada vez más al castaño, que pudo distinguir, conversaba animadamente con un rubio elegante de ojos verdes.
Ambos voltearon observándolo con una sonrisa, el hombre rubio poseía facciones infantiles y un rostro angelical pero maduro, hizo una pequeña reverencia evidenciando su origen japonés, Shuichi respondió rápidamente.
-Él es Seguchi-sama….el productor de películas para adultos más grande de Japón…está aquí de vacaciones y ha quedado sorprendido con tu trabajo.
Las mejillas de Shuichi se colorearon, aún no se acostumbraba a hablar con personas que veían sus películas- gracias…-Tohma le lanzó una mirada indescifrable y apartó algunos mechones rosados de su rostro, acariciándolo brevemente sin que el castaño lo notara.
-Creo que usted es muy especial Shindou-san…muy talentoso.
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-Era un productor muy importante…
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-Muy bien señor Shindou, el pequeño Iori será trasladado a esta escuela inmediatamente.
-Gracias.
El hombre mayor firmó unos papeles y sacando una elegante pluma de un cajoncito se dispuso a apuntar algo sobre una de las hojas- Shindou…Iori…
-No…
-¿Disculpe?...-el hombre miró con sorpresa al jovencito.
-Mi hijo es Iori Sakuma…
-¿Sa…Sakuma?...
-¡Como papi!...-el pequeño niño de cabello negro alzó las manos y corrió por toda la oficina desperdigando varios papeles en el camino.
-Hai…-sostuvo Shuichi con una sonrisa encantadora.
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-Señor Seguchi…¿usted aquí?....pero…
-Quise venir a supervisar la película….-de inmediato varios asistentes del set lo rodearon, acomodándolo en una silla.
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-Yo estaba filmando una película en ese momento, la causa del alboroto era su presencia, el nunca supervisaba una película personalmente. Hasta ahora.
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Shuichi gritaba y se retorcía de placer, tenía las piernas abiertas, la mitad del cuerpo sobre un escritorio y un pelirrojo lo penetraba rápidamente.
El pelirrosa giró el rostro, sus ojos estaban entrecerrados y apenas podía observar la figura de Tohma mirándolo directamente con un habano entre los dedos.
Se relamió los labios y volvió la mirada al pelirrojo nuevamente, curiosamente el pelirrojo se había convertido en Seguchi, y eso consiguió excitarlo aún más. Gritó y pegó su cuerpo al del más grande.
-¡Corten!...
El pequeño abrió los ojos de golpe, el pelirrojo salió de su interior con cuidado y lo ayudó a ponerse de pie.
Un asistente se acercó a el y lo envolvió en una bata blanca.
-Shuichi…
El rubio le sonreía- reservé una mesa en un conocido sushi-bar , te espero listo…
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-Era algo nuevo para mí….había salido con hombres mayores antes, pero sentía que él sería diferente. Comenzamos a salir, filmé decenas de películas para Japón y Estados Unidos, recibí varios premios, incluyendo el de mejor actor del año y acababa de cumplir los 20.
Estaba felíz y enamorado. Nuestra relación era secreta pero me contentaba con eso….aún cuando tuve que hacer muchas cosas que no me agradaron del todo…
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-Tu departamento es hermoso…-Shuichi lo recorrió con los ojos, asombrándose de la belleza del lugar, la decoración, lo pulcro que se veía.
Algo llamó su atención, justo en la parte superior de un muro, sin nada más a los lados, un bello cuadro de un atardecer, dos niños, uno rubio y otro castaño sentados sobre el verde césped mirando hacia el sol. El cuadro tenía una pequeña inscripción que Shuichi no logró leer.
-¿Y eso?
-Nada importante….te tengo una sorpresa
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-¿Cuál es la sorpresa?...-el niño caminaba entre sombras….Tohma cubría sus ojos con ambas manos.
-Te encantará…
Las manos fueron retiradas, lo primero que observaron sus ojos fue una cama cubierta por sábanas negras y a un muchacho semidesnudo de cuerpo atlético sobre ella.
-Pero…¿Qué…?...- Shuichi abrió la boca, pero las palabras no salieron, no entendía nada.
-Sh…-el rubio posó el dedo índice en sus suaves labios- es un regalo para mí….¿quieres regalarme algo verdad?...
Shuichi asintió aún confundido por el asunto, pero no podía negarle nada a Tohma después de todo lo que había hecho por él.
-Jugarás con él mientras yo observo…-hablaba en susurros mientras desnudaba con suavidad el pequeño cuerpo de su amante- es bueno variar un poco…
-Pero yo…Tohma…-Shuichi se halló desnudo de pronto y con un leve empujón por parte del rubio cayó sobre la cama- no quiero….
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-Pensé que sería la primera y la última vez, pero se repitió muchas veces, incluso con dos tipos, yo era siempre el protagonista. Me sentía mal, solía llorar mucho. Me sentía usado. Y ese era el precio de mi amor.
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-Y ese tipo…¿es bueno contigo?
Iori miraba televisión en la salita, ya tenía 5 años y su parecido con Tatsuha comenzaba a aflorar, cada día le recordaba más y más al moreno.
-Claro que sí Yuuji…¿acaso crees que sería tan idiota de estar con un patán?
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La llama de una de las velas iluminaba apenas la mesa cubierta por el fino mantel blanco.
Shuichi comía en silencio, disfrutando la suave melodía del violín y la intimidad del rincón en el cual se habían colocado.
Tohma bebía vino y no quitaba los ojos del pelirrosa.
-Venus
-¿Uhm?...-Shuichi lo miró con sus grandes ojos violetas.
Seguchi tomó una de sus pequeñas manos por debajo de la mesa y la apretó con cariño- ese debería ser tu nombre…
El chico parpadeó y frunció el ceño - ¿Ese no es el nombre del canal porno donde salen mis películas?
Soltó una carcajada ante la carita molesta de Shuichi, el niño era demasiado adorable.
-No tontito….-el menor hizo un puchero y se soltó de su agarre- Venus es el nombre de la diosa griega del amor…según la mitología es la diosa más bella del Olimpo.
-No eres el primero que me dice eso…
-Pero me aseguraré de ser el último.
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Tohma hablaba con alguien por el teléfono, Shuichi se aseguró de que estuviera ocupado antes de acercarse al cuadro nuevamente.
Afiló los ojos y leyó con dificultad las diminutas letras.
‘’Nunca lo olvides…algún día este cuadro será famoso….con amor….’’
-¡Shuichi!...
El grito del rubio lo alertó, tenía el ceño fruncido y no se veía muy contento- ven aquí…
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Shuichi le arrebató el cigarrillo de las manos, esa noche había sido aún peor. Expulsó el humo por la boca. Había tenido que follar con tres tipos que empezaron un jueguito sadomasoquista. Tohma solo había observado, los tipos habían hecho de él lo que quisieron.
Luego el rubio lo folló hasta el cansancio y ahora se encontraban ahí, desnudos, sobre la cama.
-¿Alguna vez amaste a alguien?
-¿Te pusiste romántico?
-Solo dímelo…-Shuichi apagó el cigarrillo.
-Solo fue un amor adolescente…tonterías
Shuichi sintió por un momento que todo a su alrededor se detenía.
Recordó su infancia en Japón junto a su madre, la primera vez que Tachi le había levantado la mano, el abandono de su madre, las noches que pasó en el cobertizo esperando a su regreso, el día que conoció a Tatsuha en aquel parque, su primer beso, su primera vez, la noticia de su embarazo, el rechazo de Tatsuha y la violación en manos de Tachi.
El nacimiento de Iori, la primera mirada que cruzó con Ryuichi, el sexo en su estudio, su muerte, el intento de suicidio.
-No quiero estar solo mamá…¡no me dejes solo!...
-No me dejes solo
-No me dejes solo
-¡Mamá no te vayas!
-¡MAMÁ!
Solo, solo, solo, solo, solo, solo, solo, solo…..
Hasta que…
‘’Estuve enamorado…’’
‘’Lo que más rabia me dio…fue que le di mi primer cuadro….’’
Quiso alejarse lo más posible del hombre acostado a su lado, quiso gritar y vomitar de asco.
Y lo entendió todo.
Un par de lágrimas cayeron por su rostro.
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-Una vez….todos dijeron ‘’será recordado como la mayor estrella porno’’….me sentí exaltado, pero no realizado, eso no me trajo la felicidad que yo buscaba…
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-Tohma…
-¿Qué?
-Ya no te amo.
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Shuichi subió los boxers por sus delgadas piernas, el cabello rosado le cubría los ojos, buscó con insistencia sus pantalones pero una mano sobre su brazo lo irguió de golpe bruscamente.
-Si me dejas…te mataré Shindou…
Shuichi solo atinó a sonreír, cosa que enfureció aún más al de ojos verdes que frunció el ceño y le volteó el rostro de una bofetada- ¡asquerosa puta!...¡eso es lo que eres!...¡una asquerosa perra!...
El pequeño sostuvo su rostro con cuidado, aún agachado en el suelo por el impacto del golpe, limpió el hilillo de sangre que manaba de su labio y sin atreverse a mirarlo pronunció con voz aburrida.
-Todo está bien Tohma…porque ¿sabes?...yo ya estoy muerto.
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Se encogió en una esquina del balcón, abrazó sus rodillas, la lluvia caía suave sobre su cuerpo. Un gemido escapó de sus labios y soltó a llorar- ….¿porqué me siento tan solo?....todos me dejan, todos se van…
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El niño apareció en el umbral de la habitación , en pijamas y frotando uno de sus ojos violetas con la mano.
Shuichi tiró las mantas a un lado y se incorporó- ¿Qué pasa amor?
-¿Podemos comer hamburguesas hoy?....¿y vamos a los juegos?
Shuichi le sonrió y depositó varios besos en la tierna piel de las mejillas- ¡Claro que iremos!....hoy será un día solo para ambos.
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-Llevé a Iori a un fast food que solíamos frecuentar. No había mucha gente ese día así que no me reconocerían.
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-Iori-chan, come todo o me molestaré….
El niño moreno infló los cachetes- pero mami no me gusta con mucha mayonesa…
-¿Entonces porqué le pusiste tanta?
Se mantuvo en silencio y comió la hamburguesa, Shuichi había ordenado una ensalada bastante ligera.
Llevó un pedazo de tomate a sus labios y notó con extrañeza que su pequeño hijo había dejado de comer y observaba algo con mucha fijeza.
No le tomó importancia y siguió comiendo.
-Mami ¿Quién es él?
Shuichi dejó el tenedor descartable a un lado y giró el rostro. Tatsuha los observaba a ambos bajo unos lentes oscuros.
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Jugó con la lechuga sobre su plato, paseó el tenedor por sobre ella sin interés.
Iori estaba lejos de ambos, en los juegos para niños.
Tatsuha lo observaba, era un niño precioso y bajito, parecido a Shuichi pero con sus rasgos y su cabello. Aún no podía creer que esa criatura llevara su sangre.
Dirigió sus ojos a Shuichi esta vez, apenas había crecido unos centímetros, fácilmente podía pasar por un niño de 15 años, su rostro era fresco y joven, exudaba la inocencia de la que se había enamorado años antes. Parecía hermano del niño, tenía el rostro escondido entre sus lindos cabellos rosas, lo cual le impedía ver su expresión.
-Ví…algunas de tus películas…en Japón…y en Londres eres muy famoso…incluso hay varios carteles con tu rostro.
Shuichi no dijo nada y tragó un bocado de ensalada.
-Te ves bien…
El silencio le respondió nuevamente, comenzaba a incomodarle, jamás se le pasó por la cabeza que el dulce niño lo trataría de esa forma.
-Escucha Shu…lo siento mucho…siento no haber estado ahí para ti…
El pequeño alzó el rostro por primera vez, y Tatsuha se quedó mudo cuando lo tomó por la camisa pegando su rostro al de él con violencia.
-¿Lo sientes?...-rió- verás…realmente no creo que lo sientas, porqué…¿Dónde estuviste cuando me moría de dolor en un hospital mientras daba a luz a Iori?...¿ o cuando no tenía dinero para comprarle pañales y tuve que chupársela a un tipo por 15 dólares?....¿o cuando se enfermó por primera vez y me quedé despierto toda la noche?...cuando dijo su primera palabra que por cierto fue ‘’mamá’’….cuando se le cayó un diente, o su primer día en la escuela, cuando regresaba llorando o se sentía triste porque sus amiguitos tenían papá y él no….cuando aún no tenía una cuna y debíamos acomodarnos en la diminuta cama de un mugroso apartamento mientras tu jugabas tennis y tomabas tu asqueroso whisky caro con tus malditos amigos ricachones, así que no vengas a decir que lo sientes, imbécil cabrón, porque no lo haces realmente.
Lo soltó con desprecio y tomó otro bocado de ensalada, antes de sonreírle a Iori que saludaba desde arriba de una resbaladera.
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-Fue un accidente…algo que nunca debió pasar…
-Sí, fue un accidente que tu pene se clavara en mi trasero y que quedara preñado…-exhaló el humo del cigarrillo en el rostro del moreno, ahora estaban en el acogedor apartamento de Shuichi, Iori jugaba con unas pinturas y hojas de papel, era casi una costumbre que Ryuichi le había pegado, adoraba pintar.
-No quise decir eso…-se disculpó de inmediato- me refiero a…
-Si sé a lo que te refieres, pero no me gusta considerar a la razón de mi vida un ‘’accidente’’, si no tienes nada más interesante que decir, puedes regresar a Londres, a tu vida de la alta sociedad inglesa con tu fino, educado y adorado prometido, pierdes tu tiempo aquí con una prostituta y el producto de un ‘’accidente’’
Tatsuha comprendía a la perfección el rencor y el rechazo que su presencia provocaba en Shuichi.
-Me iré hoy mismo Shu…solo…solo déjame cargarlo antes de irme…
-Después de todo Tatsuha…yo no soy tan miserable como tú, te odio, pero tampoco puedo perjudicar a Iori, ni privarlo de algo que le pertenece, así que, has lo que quieras…
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-Ya no lo odio tanto como antes, pero aún no estoy listo para perdonarlo. Me hizo mucho daño.
Don't you cry tonight
I still love you baby
Don't you cry tonight
Don't you cry tonight
There's a heaven above you baby
And don't you cry tonight