— ¿Despertaste?
La dulce voz terminó de despabilar al moreno quien se encontraba abrazado de la persona que más amaba
—Ya… —Murmuró y sonrió al recibir múltiples besos en sus mejillas y labios
— ¿Quieres levantarte ya?
Hizo unos ruiditos y negó la cabeza disfrutando de los cariños que le obsequiaba Jin, duraron unos minutos más cuando la alarma sonó fuertemente
Jin se despegó del chico y apagó la alarma extendiendo su brazo, el otro seguía ocupado con la cabeza ajena, se talló los ojos y esperó a que Jungkook se enderezara estirándose y girando su cabeza esperándolo a que también se levantara
Ambos sonrieron cálidamente, en el ambiente solo se respiraba amor mientras estuvieran los dos juntos, se pusieron de pie no sin antes contemplar la foto ubicada en el buró con un marco sencillo dorado, eran los dos sonriendo hacia la cámara con la playa de fondo, tomada el día de su luna de miel
Llevaban 2 años juntos como esposos más 6 meses de noviazgo, nacidos en la misma Región de Chigona, en un pueblo llamado Zaranova y siendo vecinos desde pequeños, disfrutaron toda la infancia y adolescencia juntos aun cuando Jin era mayor que él y es que con una personalidad defensora adoraba ayudar al menor y protegerlo
Al cumplir los 18 años Jin decidió servir al país y fue como ingreso a la milicia, Jungkook se incorporó unos años más tarde porque no soportaba estar lejos de él y fue ahí donde descubrieron sus verdaderos sentimientos
Luego de 6 meses supieron que no tenían por qué demorar más y se casaron en una pequeña ceremonia donde invitaron a sus familiares y algunos amigos cercanos
Su luna de miel se la pasaron en el lugar paradisiaco de Oladia, famoso por sus hermosas Playas con aguas cristalinas y blanca arena
En la actualidad Vivian juntos y trabajan en la milicia siendo soldados del presidente Cho Jin Woong, padre de SeokJin
Lamentablemente en los últimos años la tensión había aumentado en el país Atlandor por culpa de la toma de poder de un Dictador llamado Kim Sang Joong sus ideales eran dominar todas las regiones más débiles pues su lema era “El débil nunca prosperara” deseaba terminar con todas las regiones “que no eran dignas a sus ojos” y así comenzó una guerra acabando con los pueblos más pobres, tenía un ejército que era denominado “Los temibles” conformado por el Coronel Kendall y su Comandante Rain, su forma de operar era algo escalofriante y poco ortodoxa pues no les interesaba el género ni edad para atacar y acabar con sus vidas, su misión era desarmar completamente la ciudad, la rendición ya no era una opción, tenían que desalojar o luchar y no morir
Para la buena fortuna de Chigona su ejército también era bastante fuerte soportando todo este tiempo los ataques del país vecino, Jin era un excelente Teniente liderando varios ataques exitosos y con el mínimo de bajas además junto con el Sargento Jungkook hacían un excelente equipo llamándolos Jinkook
—¡Teniente! — El soldado lo saludó levantando su mano hasta la frente y esperó a que el castaño le respondiera el saludo
Siguió caminando por todo campo militar hasta llegar a una oficina y presentarse con su superior
—Capitán —Lo saludó de forma militar y esperó a que su superior le diera permiso de descansar
—SeokJin, llegaste —Se alegró su jefe y le entregó unas hojas que de inmediato observó —Necesito que vayas para Mariod estamos teniendo problemas otra vez —Chistó con la lengua y observó por la ventana a los demás soldados que marchaban alejándose de ahí —Estoy harto de todo esto pero no nos queda de otra —Suspiró y miró al Teniente —Te daré dos pelotones parece que la cosas se complicaron más de lo que pensábamos
—¿Porque? —Dejó un momento las hojas
—Al parecer están atacando con la Infantería Pesada
—Ya veo… Claro, no hay problema en estos momentos los reúno —Volvió a ver un poco las hojas buscando en la lista de soldados entristeciéndose de no encontrar a Jungkook en ella
—Es más peligrosa tu misión, a él lo mande a Osra solo debe de cuidar la frontera unos días
Jin se avergonzó y negó con la cabeza —No tiene por qué darme explicaciones
El capitán solo rio y le pidió que se retirara, así lo hizo y comenzó a buscar a las personas de la lista, viajarían en dos M113 renovados
—No puedo creerlo, no te veré hasta quien sabe cuándo, no sabré como te fue —Decía acongojado el Teniente
—No te preocupes por mí y dedícate guardar todo lo que ocuparas —Habló Jin terminando de ordenar la mochila de Jungkook en los casilleros —Además en cuanto todo se arregle me pondré en contacto contigo, tu habrás terminado la misión el viernes
—¿Para qué? —Se recargó en estos y se cruzó de brazos —Comamos primero al cabo saldré hasta en la noche
—Mmm —Cerró la mochila y se le quedó viendo sospechosamente
—Ahhh quieres que te haga Aegyo —Se alejó de los casilleros e infló los cachetes —Por favor por favor Jinnie —Colocó sus manos como si fuera un conejo y movió su trasero de un lado a otro haciendo reír al mayor —“Hyung” —Lo dijo con una voz chillona que avergonzó a Jin quien solo bajó el rostro riendo nerviosamente
No pudo más y fue hasta moreno abrazándolo y besando sus labios sin pedir permiso
—Te odio
—¿Por qué? —Sonrió maliciosamente luego de besarlo otra vez
—Te amo demasiado que jamás te diría que no a algo… Vayamos tonto —Lo despeinó y caminó sin dejar de abrazarlo
Ese día comieron tranquilamente en un pequeño restaurante en las afueras del Campamento Militar, la señora ya los conocía así que les sirvió abundantemente, los extraños al ver sus ropas militares los saludaban con respeto y estos les devolvían el saludo
—Voy a pedir mis vacaciones —Alegaba Jungkook —Así que pídelas cuando regreses
—¿A dónde quieres ir? — Cuestionaba curioso luego de meterse a la boca una cuchara llena de arroz
—Oladia
—¿Otra vez?
—Si —Suspiró feliz — Quiero una segunda luna de miel —De reojo miró los anillos de compromiso que portaban ambos
—No se diga más —Lo interrumpió tomándolo de la mano y entrelazándola —Vayamos una vez que regresemos
Terminaron y se dirigieron hacia el vehículo tomados de la mano, antes de entrar se regalaron un beso, no les importaba demostrar cuanto se amaban en público, sus compañeros en la milicia estaban más que enterados de su relación y los apreciaban mucho cuidándolos cuando estaban separados
Llegaron al campamento y estuvieron juntos la mayor parte del tiempo revisando algunas cosas, preparándose para sus viajes y conversando con los demás compañeros
—Bueno… —Jungkook suspiró y miró el vehículo, la media noche ya estaba acentuada —Entonces nos vemos en una semana
—Si —Lo imitó suspirando también y se acercó para darle un dulce beso en los labios —Nos vemos entonces amor…
Jungkook se sonrojó por el apodo y asintió con la cabeza alejándose sin soltarse aun las manos, se vieron por última vez y dedicándose una sincera sonrisa se despegaron caminando cada quien a su respectiva misión
El mayor fue el primero en subirse del lado y acomodándose la gorra observó como el auto de Jungkook se alejaba del campamento, le deseó buena suerte en la mente y en unos segundos el conductor se dispuso a manejar hacia Mariod
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Una vez que llegaron, esto a primeras horas de la mañana, de inmediato contempló que la situación estaba bastante mal
Se estacionaron en un pequeño pueblo lejos de la zona de guerra y vio como estaba completamente vacío, algunos cuerpos de civiles en el suelo que le rompieron el corazón, aunque tuviera ya años ejerciendo esta labor jamás se acostumbraría, pero su deseo por vencer este mal era más fuerte y no se detendría tan fácil, Jin era alguien que luchaba sin cesar por alcanzar la meta
Saludó al otro Teniente y le comentó la situación, en una mesa colocó un mapa y le mostró donde se encontraban las tropas enemigas
—Muy bien —Jin se alejó y observó el mapa con las manos en la cintura —Tal vez si mandamos unos cuantos por aquí —Le mostró con el índice —Podamos tener algo de ventaja
—Mmmm —El teniente se rascó la barbilla pensando meticulosamente —Creo que sería una buena idea —Se miraron unos segundos —Leetuk sabe lo que hace muy bien, por eso te trajo aquí —sonrió —Hagamos eso entonces
Jin agradeció el cumplido y continuaron con el plan, sabían que el ejército era difícil, estos últimos meses habían perdido ya 9 compañeros, las fuerzas de Kim Sang Joong se fortalecían cada vez mas o al menos eso sentían, cada día escuchaban en la televisión que conquistaba más tierras
Aun existían lugares tranquilos del otro lado del continente, lamentablemente en el que vivía Jin y Jungkook era otra historia, por más que se había tratado de firmar algún acuerdo el presidente estaba empeñado en rehusarse, ni siquiera sus consejeros sabían porque quería atacar de forma tan fría
En fin, no era momento de cuestionar las acciones del enemigo, llevaban años luchando así que solo restaba esperar ayuda por parte de otros países y sobrevivir a los ataques
Hacía unos meses atrás el presidente de Chigona logró contactar con el dueño de la Corporación Gobotek, llegaron a un buen trato ya que se conocían en el pasado y lograron comprar bastante armamento y defensa
La empresa Gobotek usaba tecnología bastante innovadora, siendo su invento más exitoso que tenía hasta el momento eran unas capsulas con el fin de hacer que los objetos grandes fueran más fáciles de transportar; dichas cápsulas eran aproximadamente del tamaño de una batería estándar, en uno de sus extremos tenían un botón. Para sacar el objeto que contienen, debían de oprimir el botón y posteriormente arrojar la cápsula a una buena distancia, el objeto aparecía unos segundos después. Para volver a convertir el objeto en cápsula debían oprimir un botón normalmente integrado en el propio objeto.
Con esta invención revolucionó la vida de las personas, solo estaba limitado a no llevar objetos de tanto peso, lo más que podía cargar era entre 80 y 95 kilos
Gracias a esto el ejército de Cho Jin Woong podía transportar vehículos de 2 ruedas, armas hasta tiendas de campaña entre otros
Los primero días fue bastante difícil pues el enemigo contaba con morteros, que dispararon y lastimaron a varios soldados, para buena fortuna Jin contaba con dos excelentes médicos y de igual manera gracias a poder transportar objetos con las capsulas estaban muy bien preparados para esas situaciones
Luego de una semana exhaustiva, lograron derribar las barreras del ejército y conquistar esas tierras, el trabajo no terminaba ahí, debían limpiar la zona y protegerla de ataques posteriores, Jin solo se ocupaba de la parte administrativa en estas circunstancias
Un día después de declararse victoriosos se había puesto en contacto con su superior y con Jungkook por Radio, el chico ya había regresado y le comentaba que iría a otra frontera a ayudar a las personas de ese lugar
—¿Ya pediste tus vacaciones?
—¿Ya y tú?
—Aun creo quedarme unos días más —Respondía el castaño
—Ahhh…
—No suspires —Rio al escuchar la voz apagada de Jungkook
—Lo sé, recuerdo cuando te asignaron a Orión….
—Sí, esa vez duramos 2 meses separados
—Siento que se repite —Sonrió sin importar que Jin no lo vería
—No te preocupes a como veo llegaré el mismo día que tu —Hizo una pausa —Pero te extraño mucho
—Yo también
—Nos vemos mi amado Kookie —Escuchó una risita, sabía que estaba ruborizado sin siquiera verlo, pero conocía demasiado bien a Jungkook —Te amo
—Yo también
Colgaron y Jin continuó con el arduo trabajo, todas las noches rezaba porque todos sus compañeros estuvieran a salvo pero siempre dando un plus a su esposo
Pasaron 4 días más y luego de comunicarse con el capitán les otorgó el permiso de regresar siempre y cuando se quedaran algunos soldados
—Perfecto Sargento, le estaremos dando el reporte cada semana
—Si —Jin se despidió y se subió al auto militar
El conductor encendió el motor y se dispuso a regresar a la base militar, conforme pasaba el tiempo Jin dejaba escapar una sonrisa de alivio, la misión había terminado y tal como le había dicho hoy mismo regresaría Jungkook
—Lo veo muy sonriente Teniente —Se atrevió a comentar el conductor
—Si —Rio un poco —Mañana pediré mis vacaciones
—Ah de verdad…. ¿Le dijo el sargento que lo hiciera? —Abrió sus ojos por la intromisión y rápidamente se corrigió —Lo siento es que antes de irnos nos comentó —Se apenó y miró hacia el camino
Jin se echó a reír calmando el ambiente —Así es, me dijo que las tomara nada más regresando
—Quiere ir a Oladia
—Ya veo, dicen que es muy bonito
—Lo es —El conductor escuchó atentamente —Cuando tengas oportunidad te lo recomiendo
—¿No es muy caro?
—Pues como cualquier destino turístico—Le sonrió
—Ah, puedo serle franco les tengo mucha envidia a ustedes dos —Jin rio aún más y luego de un “porque” continuó — Tal vez suene muy cursi pero su amor puede verse a kilómetros de aquí, son nuestra pareja favorita de la base, sabemos que nunca se separaran
—¡Que cosas dices! —Se ruborizó y alzó la voz balbuceando —Porque dices esas cosas, mira tú eres un soldado y estás hablando con tu superior de esa forma, vaya esta juventud ya no tiene respeto
El conductor rio ya que ese reclamo sonaba más a palabras soltadas a causa de los nervios
Siguieron conversando como dos compañeros más hasta que llegaron a la base, comenzaba a oscurecer y el viento estaba recio al parecer se aproximaba una tormenta
—¿Vaya esto no estaba previsto o sí? —Habló Jin sujetándose la gorra por el fuerte viento
—Dejaré el vehículo Teniente
—Si adelante —Esperó a que el conductor dejara el vehículo y se incorporó a todo su pelotón para llegar juntos
Antes de llegar a la oficina del Capitán se detuvo saludando a otros Tenientes platicando un poco de sus misiones
En ese momento llegó otro vehículo M113 y sonrió, sabía que era el de Jungkook, en ese momento cayó un rayo que asustó a todos los presentes incluyendo a Jin
La camioneta se abrió aun sin terminar de estacionarse y vio a un soldado caminando apresuradamente; el teniente entrecerró sus ojos y observó mucha sangre en sus ropas
Abrió sus ojos en segundos y caminó hacia el rápidamente, interceptándolo, en cuanto se vieron el soldado se sorprendió y retrocedió un paso temblando
—¿Qué paso?
—Teniente —Las lágrimas salieron por si solas con rapidez —Fue una trampa, nos estaban esperando…. —Se limpió la nariz
Jin tragó saliva y parpadeó un poco al sentir las primeras gotas de lo que sería una fuerte lluvia
—¿Cómo? —Desvió la mirada y vio solo a unos cuantos bajar, todos con la cabeza gacha y vendas en brazos y cabeza —¿Dónde? —Miró a todas partes comenzando a estresarse al no encontrarlo
—Lo siento…
Estas palabras llamaron la atención de Jin y bajó la vista al ver que en las manos del soldado tenían unas placas de identificación
—No lo logró….
—Que…
Le entregó las placas leyendo que decían Jungkook junto con su año de nacimiento y el anillo de bodas
—De verdad…. —El soldado lloró más se sentía demasiado avergonzado —Fue una bomba…
—Pero… —Su cabeza dio vueltas y dio un paso hacia atrás, estaba en Shock, no sabía ni cómo reaccionar
Leetuk llegó de inmediato preguntando estresado que es lo que había ocurrido, el soldado repitió lo mismo explicando lo de la bomba y de cómo los soldados no habían sobrevivido
—¡Que! —Leetuk miro preocupado a Jin
—Seok… Jin…
El castaño bajó la vista como si su alma hubiera huido de ahí y soltó los brazos tirando las placas y anillo en el suelo, la lluvia comenzó a pronunciarse junto con truenos y relámpagos
El castaño dejó de escuchar y tragó saliva, desolado, perdido, sin un corazón para latir, no había palabras para expresar los sentimientos que estaban brotando
Cayó de rodillas totalmente abatido, ignorando los gritos de sus compañeros quienes preguntaban su bienestar, respiró profundamente y lloró….
Jungkook murió en batalla ese día…