TOMO 1.- FALLEN HERO.
Torre Stark, Febrero del 2018.
Han pasado ya dos años desde la guerra civil, y los rezagados están volviendo a la torre después de que Tony estuviera hablando con Ross, pidiendo por las modificaciones necesarias en los tratados para que estos protejan a todos y cada uno de las personas involucradas, en especial a sus hijos. Él lo único que quiere es lo mejor para esas tres personas que más ama en el mundo, a pesar de que dos de ellos le hayan dado la espalda en los eventos de hace dos años, son sus bebés y nunca podría hacer nada malo en contra de ellos, siempre los protegerá aunque esto signifique que ellos y el resto del equipo lo vean como un hombre egoísta, que solo piensa en sí mismo.
Arreglando su elegante traje Armani de tres piezas llegó a la sala de conferencias de la torre, donde las personas de los dos bandos y los nuevos miembros del equipo se encontraban, pudo ver atreves de los cristales la familiaridad con la que hablaban todos los miembros del equipo, integrando incluso a los nuevos, vio sus risas y sintió un ligero alivio de ver que al menos entre ellos no había rencores. Pero un nuevo pensamiento, le arrebato de nuevo su frágil paz mental.
Vería de nuevo a su esposo. Vería a Steve.
Cuando entró los pudo ver con más claridad a todos, los nuevos integrantes del equipo le regalaron sonrisas sinceras, junto con algunos de su “bando”. Sin embargo, Steve ni siquiera levanto la mirada de la mesa para verle. En automático su ánimo decayó aún más, y supuso que se rostro lo demostró, porque apenas lo notaron, todos guardaron silencio y le dirigieron miradas de todas las formas: de ira, miedo, alegría, admiración y… de arrepentimiento. Sí, le dolía ver a su única hija mostrando esa expresión, mirándole con remordimiento. Pero no le tomo demasiada importancia, y oculto toda emoción de su rostro. Tenía que darle una pequeña lección. Tal vez estaba siendo un poco duro, pero a él también lo lastimaron, y no solo físicamente.
Estaba tan cansado de este estúpido juego malvado.
-Qué bueno que vinieron, traidores. – Habló con desdén el castaño mientras caminaba hacia la mesa con un cuadernillo en las manos. Los tratados de Sokovia. – Como se habrán dado cuenta, hay nuevos miembros en el equipo, los presentaría, pero se pueden ir conociendo sobre la marcha. Ahora pasemos a lo importante, los tratados. Como ya han de saber, se les hizo cambios a los tratados para que todos puedan estar respaldados por la ley, entre los cambios realizados están las identidades. Ya no habrá necesidad de que ningún Inhumano, súper héroe, justiciero, etc. Revelé su verdadera identidad a la humanidad, y/o galaxia. – Leyó el castaño - ¿hay alguna duda al respecto?
Nadie dijo nada, todos lo veían igual que antes, y en silencio. Pero en medio de este silencio escucho claramente en su mente la voz de Loki: -Deberías de seguir adelante y sacarte de la mente al idiota de Rogers. - Giró su rostro y le miro en advertencia, mientras este le sonreia con arrogancia, recargado contra el hombro de Peter.
-Muy bien, prosigo. – Habló de nuevo el genio para bajar la mirada de nuevo a los tratados en sus manos, su mente no dejaba de evocar recuerdos de su esposo. Patetico. – Ningún héroe, inhumano, metahumano, mutante, etc. Podrá acudir a una misión sin que está este previamente autorizada por las naciones unidas, ¿Dudas? – Volvió a preguntar, esta vez mirando fijamente al capitán, esperando que hablara o al menos una reacción de su parte.
Obtuvo una reacción.
Steve bajó la mirada de nuevo, no logro identificar el porqué, pero esperaba que al menos estuviera entendiendo las cosas, que todo esto es por el bien de todos sus seres queridos.
-No sean tímidos – habló con un nudo en la garganta – díganme lo que pien…
-¿Qué pasará cuando necesitemos ir a una misión muy importante y el gobierno no nos deje ir? ¿Qué pasará con esas personas inocentes que necesiten de nuestra ayuda y nosotros no podamos brindársela por que no fue aprobada por el panel? – preguntó molesto el peliblanco, mirando al castaño con intensidad.
Por lo que escucho, el capitán aun no le decía nada a los demás rezagados, así que su mirada viajo de nuevo al rubio y se sorprendió de que esta vez, este si le estuviera mirando, pidiendo ayuda. Él no tenía la culpa de que no le haya dicho nada a los chicos. Tony trago en seco y Steve miro a Pietro con molestia y reproche.
-Pietro… - habló en advertencia el rubio, obviamente irritado con todo el asunto y preocupado de como esto pueda terminar.
-¿Qué? No me digas que no tengo razón por que…
-Pietro, para. Deja que… Tony hable- habló Wanda con la mirada baja, haciendo que el peliblanco callará al instante y mirará a otro lado. El rubio miró con sorpresa a la chica, mientras hacia una mueca por sus palabras. Tony no pudo evitar que sus ojos se cristalicen.
-Mira Pietro, será mejor que te mantengas callado si no sabes la verdadera magnitud de las cosas… - hablo esta vez el rubio, haciendo que todos lo miraran con sorpresa, ya que el capitán nunca le había hablado de esa forma a alguno de sus hijos.
Pietro le miró con desdén y respondió: -¿Cómo hiciste tú hace dos años?
Aclarando su garganta, el castaño por fin hablo: -Mira Pietro, entiendo lo que quieres decir, están sucediendo cosas que ustedes no saben aún, pero…
-Pero eso no les da el derecho de dirigirte a nuestro padre de esa manera – habló Peter, interrumpiendo lo que Tony estaba diciendo.
Pietro le miró con arrogancia, más no dijo nada, sabían que su hermano menor tenía razón, pero aún estaba sensible por el hecho de haber estado en prisión por culpa de los problemas que habían atravesado, pero también estaba arrepentido de sus acciones que los llevaron a ello.
Wanda miró a Peter sin expresión, y respondió por su gemelo: -¿y a ellos si de involucrarnos en sus problemas al punto de encarcelarnos? – Una lágrima rebelde rodo por su mejilla y entonces bajo su rostro, ocultando su afligió.
-Paren ya, los tres. – Hablo con voz firme el rubio, dando por terminada la pequeña discusión entre los hermanos Rogers-Stark.
La sala se sumió en un silencio sepulcral mientras Tony trataba de regular su respiración, sentía que con cualquier otra palabra de parte de sus hijos, se desarmaría por completo y no quería eso. Odiaba que lo vieran débil, y demostrar sus sentimientos. Una vez se hubo recompuesto, elevó su mirada y vio a Wanda limpiándose los ojos discretamente, mientras Pietro miraba a la nada, haciendo puño sus manos sobre la mesa, en un claro intento por no llorar también. No pudo más, tomo el cuadernillo y salió del lugar a toda prisa, dejando a los presentes confundidos.
-No puedo creer que hallas dicho eso, papá – hablo en menor de la familia para ponerse de pie e ir detrás de su otro padre.
Todos guardaron silencio mientras veían a Steve, el cual tenía la mirada baja, sopesando lo que acababa de pasar.
-¿Y bien? – Habló Natasha, haciendo que el rubio la mirará - ¿qué son esas cosas que aún no sabemos? – era una pregunta directa, pero que sin duda, todos se estaban haciendo.
El rubio suspiro con frustración, y miro a Bucky en busca de ayuda, pero este solo se encogió de hombros y se sentó junto a los gemelos para poder preguntarles sobre cómo se encontraban, ya que hora la castaña derramaba más lágrimas, tratando de ser silenciosa, tapada de la vista de su padre gracias al cuerpo de su hermano mayor.
-Bien, las cosas están así…
°
Tony ama a sus hijos con todo su corazón, y verlos de esa manera, tan débiles, a su pequeña Wanda, su única niña, y su bebé mayor tratando de ser fuerte, lo derribo por completo, sabe que es solo cuestión de tiempo para que las cosas entre él y sus hijos vuelvan a ser lo de antes, o eso es lo que quiere creer.
Caminó a paso veloz hasta llegar a su habitación y encerrarse en ella. No lloro como lo harían muchas personas, solo se quitó su costoso traje Armani de tres piezas, se dirigió al baño a llenar la bañera y una vez que estuvo lista se metió en ella, cerrando los ojos al instante. No quería pensar más, pero era inevitable que su mente regresará a la expresión que tenía su niña en su carita, la manera en que Pietro lo miraba con rencor y el como el más pequeño de sus bebés le defendía, a pesar de que no lo merecía. Por algo, los gemelos habían preferido irse al bando se su padre, el gran héroe de la nación.
No sabía cuánto tiempo llevaba así, pero abrió de nuevo los ojos por que tocaban la puerta del baño, frunció el ceño y en seguida la puerta se abrió y la carita de Peter se dejó ver entre la puerta.
-Hola papi, lamento haber entrado de esta manera a tu recamara, pero quería asegurarme de que estabas bien - habló el castaño menor, con un deje de preocupación en su voz. Le sonrió y le tendió una de sus manos llena de espuma para que se sentará al borde d la bañera.
-Ven aquí corazón, - una vez el chico se sentó donde le pidió, volvió a hablar – dime una cosa, ¿tú crees que he sido mal padre? – preguntó con un nudo formándose en su garganta.
Peter lo miró horrorizado y en seguida lo abrazo como pudo, sin importarle si se mojaba o no.
-Por supuesto que no papi, eres el mejor del mundo. – hizo una pausa, pensando muy bien sus siguientes palabras. – y estoy seguro de que Pietro y Wanda están de acuerdo conmigo, ellos te aman tanto o más que yo, solo que también tienen su forma de pensar y sus opiniones propias con respecto a los tratados.
. Ellos hicieron lo que creyeron correcto en su momento, y el que estén aquí hoy solo quiere decir que admiten que cometieron un error y están dispuestos a afrontar las consecuencias como pasó hace dos años. – largo un suspiro cuando su padre se separó de su abrazo y lo miro con ojos aguados, sin soltar una sola lágrima. – y por la actitud de Paps allá en la junta, él también sabe que cometió un error, aunque no sé si hará algo al respecto para enmendarlo.
El castaño mayor rio.
-Conociéndolo, seguro para mañana a más tardar está tratando de hablar conmigo para disculparse, pero dudo que con una disculpa sea suficiente.
-Así se habla papi, recuerda que los Stark somos difíciles.
Y ahí, en el baño de la habitación de Tony, padre e hijo rieron un poco mientras comenzaban a hablar de cosas banales, dándole un descanso a la siempre activa mente del genio mayor.