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Los susurros de tu corazón. por Elbuhoconlentes

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Notas del fanfic:

Pues esta idea es algo  alocada, por momentos al releerla siento que no tiene pies ni cabeza, aún así, no dejaba de sentir que debía compartirla y aquí la tienen, en verdad espero que sea de su agrado.

 

ya lo puse en el resumen pero lo vuelvo a repetir, tanto Naruto como sasuke tendrán otras parejas en algún momento de la historia, pero al final será puramente narusasu aún que su relación avance de forma lenta.

Notas del capitulo:

Pues... solo me queda cruzar los dedos y esperar a ver qué les parece esta historia.

Los susurros de tu corazón…
 
Es verdad lo que dicen de que el mundo es pequeño, cuanto odio a verlo confirmado, y gracias a ello este día he corrido y huido como cualquier delincuente lo haría, incluso deje mi fiel bastón atras,  nada me importo ni  casi rodar por las escaleras, ni empujar a algunos en mi camino.  verlo frente a mi, sentir su mano sobre mi hombro, la sensación del miedo recorrer mi piel, y mi mente evocando recuerdos, pensé que había superado a Naruto uzumaki y resulta que en el momento de la verdad solo deseo nunca haberlo conocido.
 
Al menos he llegado hasta mi oasis de paz, tranquilidad y seguridad… 
 Comenzaré por decir.
Es increíble cómo cada ser se adapta a la situación en la  que vive, al grado de que las dificultades que le aquejan se vuelven hasta cierto punto “normales”, por lo que se vuelve una costumbre pasar por encima de  todos aquellos problemas, aún que la lucha para ello  pueda ser  dolorosa.
 
Es increíble cómo la felicidad es la meta diaria, por  qué sonreír, amar, desear, divertirse, y mil cosas más hacen que la vida valga la pena, que importa lo demás si puedes ser feliz?
 
Pero también es increíble el como la existencia misma está plagada de momentos no gratos, momentos en los que te sientes quebrado, y perdido, en los que piensas en salidas falsas, rápidas, y fáciles, que no son más que una mentira, que engañándote por la cobardía se presenta ante ti, plantándose como tú auténtica realidad, curiosamente esos momentos son en los que tu voluntad más flaquea, no ves un segundo camino y te lanzas, solo anhelas el final…
 
Y tan pronto como te das cuenta, abres los ojos en un lugar diferente, y miras a tu alrededor con la confusión que nubla tu mente, vez  el llanto en el rostro que está frente a ti , e imaginas por sus gestos que hay aflicción y felicidad en el, sientes los brazos de aquellas personas que te aman, sientes el como te estrechan, intentando borrar lo sucedido, para ese momento tus ojos también estarán derramando lágrimas y te preguntarás, ¿por qué estaba dispuesto a abandonar esto?, la culpa te golpeara al rostro, un golpe que no dolerá más de lo que ya a dolido el de la conciencia de tus actos. 
 
Después solo quedará el amargo recuerdo, pero lo superarás con el amor de tu familia, de tus amigos, o tal vez, de algún amante, y es que es tan simple pero tan difícil de entender que, no importa la cantidad de personas que te aman, si no, con qué fuerza lo hacen, ilógicamente esto quiere decir que, el amor de una sola persona puede equivaler al de mil y todo ese amor tiene causa en ti y para ti. 
 
El tiempo seguirá su curso, a el no le importa lo que te pase en el trayecto, y no es que sea cruel, simplemente, es que como tú, hay miles, millones de personas que en el mismo segundo , están viviendo sus propias desdichas o alegrías, ¿Cómo podría el tiempo entonces detenerse a prestar atención solo a tu existencia?.
 
Así que entiendes, que el tiempo seguirá siempre de frente, y que solo tú te puedes impulsar para seguir a su lado, que solo tú decides sobre tu existencia, será como volver a nacer, ante tus ojos se abrirán nuevas posibilidades, nuevos gustos,  nuevos deseos, y lo que antes te parecería imposible, se vuelve una realidad, aún que pensándolo bien, no es que se abran nuevas posibilidades, ellas siempre estuvieron ahí, solo que de alguna forma o por diversas razones no volteabas a verlas.
 
gracias a tu esfuerzo  de seguir, logras recomponer tu vida,  y le das sentido comparándola con diferentes cosas, por ejemplo,  para mi es algo parecido a una hermosa pintura, que sobre el lienzo blanco proyecta la belleza misma, sumiéndote en el placer de saber que lo que tienes frente a ti es indescriptible e  inexplicable , así es como cada quien tiene una pintura que le representa y a simple vista para los demás puede que sea perfecta, pero para el dueño, estará más que claro que es una mentira, pues dicha pintura tendrá pequeños fallos y salpicaduras, por qué dicha pintura no es perfecta, pero es la pintura de tu vida y como tal la aceptas, ya que solo tú sabes del valor que representa.
 
E igualmente podemos compararlo con una pieza musical, oh, música, tan bella!, música, que sin poder escuchar hace palpitar mi corazón que en algún momento creía vacío, preciosa música, que te vuelves una razón más para sonreír, y aún que, no pueda deleitarme con cada una de tus notas, puedo sentirlas en cada pequeña vibración que las teclas del piano me  ofrecen como intercambio, y lo mismo sucede cuando toco el violín, en el momento en el que acomodo tan fina pieza de madera entre mis manos y cuello, en el momento en el que mi mano contraria toma su arco, el violín me ofrece una magia y placer fuera del mundo terrenal, solo entonces me doy cuenta de que, aún que sea sordo a todo lo demás, puedo escuchar algo más haya del simple sonido.
 
Ya han podido notar que soy un sentimental, y no, no me avergüenza aceptarlo…
 
Mi nombre es sasuke uchiha, actualmente estoy en la universidad,  y este es mi segundo año el la carrera de artes, nací sordo y por si fuera poco con una enfermedad llamada aniridia, no suena tan mal no?, a excepción. De que dicha enfermedad me deja con una agudeza visual realmente baja, así es, prácticamente no veo más haya de mi nariz, lo que para otros es tan común como pasear en un día soleado, para mi se vuelve la más épica de las aventuras, es imposible pasar desapercibido si todo el tiempo llevas lentes de sol por qué los cálidos ases de luz lastiman tus ojos, además de tener que usar gotas especiales, y lo es mucho más si en un salón de clases, sientes las penetrantes miradas de todos aquellos a quienes se les hace extraño que tus ojos sean completamente negros, por qué esa es otra de las características que causa esta enfermedad, la falta de iris en mis ojos es total, es una suerte el que no haya desarrollado cataratas. 
 
Esta condición es algo que ahora  no me incomoda, y que cuando puedo “presumo”,  superar un intento de suicidio me hizo ver que es necesario  aceptar  el como se nace, lo que se tiene en la vida y lo que se puede lograr con ella, lo que me hace lamentar al saber que muchos más no tuvieron esa “ segunda oportunidad”  tal vez una parte de mi vive al máximo y sin excesos en honor a ellos. 
 
Pues bien actualmente tengo un cuarteto de amigos, los raros entre las rarezas, les hablaré sobre ellos solo un poco y más adelante iré profundizando mi relación con cada uno. La primera persona que considere mi amiga, fue a una joven  que actualmente y a pesar de la distancia se mantiene como tal, una verdadera amiga, la saltaremos pues hablare de ella en algún tiempo, les mencionaré ahora a sigetsu, el loco que ahora mismo, creo que duerme sobre la banca, y al que karin  su novia y otra de mis mejores amigas parece querer despertar, solo me falta mencionarles a juugo, y puedo asegurarles, conociéndolo tanto como lo hago, que debe estar trayendo algo de comida para mantenernos “bien alimentados y activos”. 
 
Cada uno de ellos tiene su peculiaridad, así que haré  algunas comparaciones , para comenzar esta sigetsu el es como mi recordatorio ambulante de que, puedes mandar a la mierda los malos comentarios sobre tu persona, los malos tratos y las miradas despectivas  y simplemente dedicarte a ser feliz cumpliendo tus metas y tus sueños, karin ella es como aquel dueño de un auto que a pesar de funcionar a medias y tener múltiples fallas, se acomoda frente al asiento y lo hace andar utilizando todas las estrategias posibles, incluso golpes  y en muchos casos el auto es el mismo sigetsu y hasta yo mismo, y bueno por último juugo, a el lo compararé con un chef que solo siguiendo sus instintos toma los ingredientes menos apetecibles y los mezcla en lo que resulta ser el mejor de los platillos, como curiosidad extra, dicho chef también se comporta como la madre de aquel platillo…
 
Ahora, les contaré algo de lo que fue mi pasado, un pasado que en este momento no genera sentimientos desagradables en mi, quiero pensar que solo fue la sorpresa lo que me ha hecho alejarme de ÉL, y al que extrañamente le doy gracias por haber sucedido de esa forma, pues gracias a eso he llegado hasta este momento en mi vida, aún que claro, si tuviera la oportunidad de cambiar algo , sin dudar lo haría…
 
… 
 
Fue durante la escuela secundaria, para ser precisos, al entrar en ella, rogué tanto a mis consentidores padres para que me permitieran estudiar en una escuela pública, en lugar de recibir educación privada como venía haciendo, ellos no estaban convencidos del todo, pues para las personas que tenemos una u otra cualidad “diferente” a lo que el estándar de la sociedad marca como “normal”  tendemos a ser tratados de formas, como decirlo, extrañas.
 
Pero bueno,  siguiendo el consejo de mi hermano mayor itachi, quien día a día se esforzaba y aún hoy en día lo sigue haciendo, para que mi vida sea aún mejor de lo que lo era y es, comencé a salir más de casa, a demostrar que podía ser más independiente, y que estaba listo para abandonar de cierta forma “el nido” como itachi solía llamarle a la casa de nuestros padres, las primeras veces que salí al parque y sus alrededores lo hice con mi hermano, disfrute de tirar patadas al balón, sin casi acertar una de ellas cuando jugábamos futbol, lo que nos hacía reír con ganas, y me maravillaba la forma en que me describía todo aquello que estando lejos me era difícil alcanzar a ver. oh!, pero no lo olviden, también soy sordo, así que se preguntarán, ¿y como es que tu hermano lograba eso? Pues es  otra de la virtudes de itachi que desde pequeño, aprendió tres tipos de lenguaje, el lenguaje “normal” con que el la mayoría se comunica atravez de la voz y sus sonidos, el lenguaje de señas, que está dirigido a los sordos, pero también el lenguaje táctil, que me permite saber que señas se están realizando cuando las realizan en la palma de mi mano, complicado no?, así que ahora saben lo genial que es mi hermano, en fin, con su ayuda, logre lo que mis padres tanto temían,  y no por qué no confiaran en mi, si no, por qué no confiaban en la sociedad en su poca educación y su escasa tolerancia.
 
Con los arreglos necesarios fui inscrito en un colegio que prometía adaptarse a mis necesidades, se me dieron libros comunes iguales a los de mis compañeros con lenguaje escrito, pero también se me dieron los mismos con lenguaje braille, por eso de que mi vista se cansa con facilidad, se me asignó un lugar en clase, justo el del frente y más central del salón, el pizarrón se cambio por uno más grande, para permitirle al profesor realizar sus escritos en mayor dimensión, y bueno, el director de dicha escuela me pidió comprensión, pues el maestro que estaría al frente de la clase no tenía experiencia con un caso como el mío, pero aún así estaba dispuesto a intentar aquella proeza, por lo que fui advertido, muy probablemente los primeros días o semanas, la interacción con mis compañeros sería difícil y hasta nula.
 
Nada de eso bajo mi moral, tenía la plena confianza de que con el tiempo podría llegar a hacer amigos, nunca e tenido una imagen exacta de mi físicamente hablando y aún así, creo que puedo recordarme a mí mismo parado frente a aquel salón en el que apenas distinguía partes de rostros y ya más levemente colores de cabello y formas en la lejanía,  así que dispuesto a presentarme espere hasta que el maestro a mi lado toco mi hombro, esa era la señal que indicaba que era mi hora de presentarme, tome una de mis libretas y escribí en ella.
 
- hola, mi nombre es sasuke uchiha, me alegra estar en su clase y espero hacer muchos amigos, soy sordo y no veo muy bien. 
 
 
Ahora que lo pienso fue una muy mala presentación, pero itachi dijo que debía escribir lo que sentía y bueno así me sentía.  el primer día fue difícil, estuve sentado por algunas horas, siendo testigo de cómo el profesor iruka daba todo de él para hacer su clase entendible, y lo fue, solo que no pude disfrutarla del todo, sentía la mirada de algunos de mis compañeros clavada en mi espalda y en cada uno de mis movimientos, y entonces también comencé a sentir pequeños golpes en la parte trasera de mi cabeza, en varias ocasiones voltee pensando, “tal vez alguno de ellos quiere hablarme y no sabe cómo hacerlo” me emocione y estuve feliz, y entonces aquella primera emoción se vino abajo, pues aquellos “golpecillos” siguieron estrellándose en mi rostro, podrán imaginarse lo que es no saber quién te está lanzando cosas ni  el por qué lo hace, el que si lo noto fue el profesor, no sé qué pasó, solo pude distinguir que dos chicos salían del salón, esa fue la primera vez que preste atención a aquel cabello rubio, solo momentos más tarde me di cuenta de que alguien se había sentado en una de las bancas que tenía a mi lado, ella fue la primera de mis más grandes amigas, éramos en ese entonces un par de tímidos contra el mundo. Hinata, esa chica que sin esperar nada a cambio se esforzó por entenderme, por comunicarse conmigo, y agradezco tanto por ello, el lenguaje de señas era complicado de aprender de un día a otro, que decir del braille, así que ella se las arregló, escribía en la parte superior de mis libretas  lo que quería decirme,  me es tan claro el recuerdo de su primera frase.
 
- hola a ti también, yo soy hinata, ¿quieres de mí amigo?. 
 
Y como negarme ase petición que yo mismo ansiaba, y que se me presentaba con el borroso rostro de esa chica adornado por una sonrisa. De inmediato escribi un 
- si.
 
con ella a mi lado las cosas eran más sencillas, me acostumbre a dejar mi bastón dentro de la mochila, ya no lo necesitaba pues hinata era mi guía, y supongo que en verdad fue gracioso pues andábamos pegados en todo momento, incluso, mis padres tuvieron una conversación con los suyos, algunas veces fueron a comer a casa y entre ellos también nació un fuerte lazo de amistad, recuerdo que contábamos los pasos del salón al pasillo, del pasillo a los baños, de los baños para el patio, en fin,  teníamos números para todo, y hablando de ese vergonzoso tema, recuerdo que para usar los sanitarios ella me acompañaba hasta la puerta, como siempre cargando en una mano una libreta a la que amarro un lapicero, pienso que llamaba a la puerta de los sanitarios  para asegurarse de que no había nadie antes de entrar, y me llevaba hasta ellos, ahora no puedo evitar reír al pensar lo patético que era, pero en su momento me sentía agradecido. 
 
Y es que hinata, con su carácter dulce, tímido y bondadoso, le hacía frente a sus propios temores para defenderme, de quien? De casi todos, pero en su mayoría, de aquel grupo de chicos liderados por el de cabello rubio, casi al cumplir cuatro semanas de estar acudiendo a la escuela, me atreví a usar los aparatos que hacían posible que escuchara, no me gustaban y siguen sin hacerlo, por qué me permitían oír pero no entender, tan acostumbrado estaba a la comprensión del valor que las señas le daban a los objetos a mi alrededor, que podía reconocer unas tijeras si las acercaba lo suficiente a mis ojos, tocándolas o en su caso, con las señas  o escritura que las denominaban , pero las palabras me eran confusas, pues no lograba aún dominarlas del todo, confundiendo sílabas y letras o dándole otra “fonética” por lo que en mi juventud, ese problema era aún mayor. 
 
Quise intentarlo por qué me daba curiosidad saber, ¿Cómo era la voz de hinata?, y ¿la de el profesor iruka?, sería que el salón se mantenía en “silencio” durante sus lecciones, o durante ellas predominaban aquello a lo que llaman “murmullos”, ese día mis padres como de costumbre   Me llevaron a la escuela, mi mama se despidió con un “buena suerte amor” que plasmó en la palma de mi mano ayudándose con sus dedos, y mi padre apretó mi hombro, esos simples gestos alimentaron mi valor y baje del auto, ni siquiera me moleste en saca el bastón por qué sentí la mano de mi amiga,  como siempre me abrazo, antes de mostrarme la hoja en la que había escrito
 
- Listo para un nuevo día?. 
 
Claro que lo estaba. 
 
- Puedes por favor hablarme?. – escribí  en su libreta y estaba lo suficientemente cerca de su rostro para ver la sorpresa que se reflejó en el. 
- Tienes los aparatos puestos! – su voz fue suave y muy agradable, hasta ahora supe que  esa había sido su  frase completa pues yo solo entendí  “ aparatos estos”  así que solo moví la cabeza para afirmar. Lo siguiente que escuche fueron sonidos que no entendí y una que otra palabra entre ellos.
- E tan maravilloso, oemos blar e todo. – vi que sus labios se movían dejando salir su voz, todos los sonidos escapaban de ella tan rápido que me fue difícil descubrir el mensaje, tuve que casi arrebatarle la libreta.
- Perdón, escucho tu voz pero no entiendo todo lo que dices – fue vergonzoso admitirlo pero a ella no pareció serle  malo.
- Lo siento yo también,  creo que me emocione demasiado, te dije. Están maravilloso podemos hablar de todo.- volví a decirle que si, y solo segundos después me di cuenta de que lo había hecho con lenguaje de señas, una vez más entendí lo importante de nuestra amistad, pues aún con nuestras diferencias y limitaciones buscábamos entendernos. – creo que yo te enseñaré a expresarte con la voz y tú me enseñaras a hacerlo con las manos. – fue lo que escribió antes de jalarme para que entráramos al salón.
 
 
Mi día comenzaba de lo mejor, quien me diría que aquella magia se perdería conforme pasaban las horas, sentado en mi banca y  con hinata estirándose desde la suya con la intención de escribir algo, sentí la vibración de los pasos de los demás compañeros, aunado a los ruidos que me parecían tan confusos, ya me  había adaptado a los horarios así que de inmediato supe que la hora del descanso había llegado, y muy probablemente hinata escribiría el típico.
 
 
- Vallamos a la cafetería. 
 
 
El momento nunca llegó y todo se vino abajo, ese día no fui a la cafetería, no termine el horario de clases  y en su lugar me enviaron a casa, yo mismo conté una mentira para presentarle a mis padres, uno de mis errores,  pues si hubiese expuesto lo sucedido, tal vez ellos podían haberle encontrado una solución. 
Yo no sabía el nombre de ninguno de los demás compañeros no interactúaba  con ellos, así que los  diferenciaba por aquellas características que eran más fáciles de distinguir, como el color de sus cabellos, su altura, etc, y precisamente ese día distinguí de nuevo aquel cabello rubio, justo antes de sentir como la libreta que antes estaba frente a mi se estrellaba en mi rostro.la ironía de todo aquello fue que a él si le entiendi cada una de las palabras que dijo. 
 
- Fue un fantasma… estupido sordo,  ciego –
 
 
 por qué entendí a lo que se refería con estupido, pues por qué era la manera en la que itachi ofendía a los que se metían conmigo cuando andábamos en la calle, el “fue” lo entendí por mi madre, quien solía contarme que uno de mis abuelos también padecía de sordera. “El fue sordo”  solía repetirme,  Y la palabra “fantasma” la comprendia gracia a mi antigua fascinación por aquellos entes que algunos aseguraban existían y otros afirmaban que no, de cierta forma eran parecidos a mi, viviendo en un limbo entre uno y otro mundo, pero sin llegar a pertenecer a alguno. 
 
Lo curioso de los golpes en el rostro, es que si son en la mejilla, en la frente o el mentón, podrás obligarte a no derramar lágrimas, el problema es que si va dirigido a la nariz la tarea se vuelve imposible, pues el dolor es tan diferente, y eventualmente mis lágrimas brotaron, escuche las risas no solo de él, si no de todos, escuche también la ansiosa voz de hinata, que parecía afligida, me obligue a contener el llanto, el miedo y la debilidad de mi cuerpo aún que no obtuve un buen resultado, me decepcione de mí mismo, pues pensé “ no debería ya estar acostumbrado a todo esto” por qué aquella cabellera rubia siempre tenía que ver con mis caídas en los pasillos, en aquellos momentos en los que hinata no estába  a mi lado, con las pelotas golpeando en mi cuerpo durante educación física, con que de mi mochila desaparecieran libros y libretas de forma tan seguida, que ya comenzaba a ser un gasto notorio para mis padres, para luego aparecer mágicamente con algunas frases escritas en ellas, frases parecidas a las que él había mencionado , alguno que otro “eres un fenómeno”, “por qué no te largas”, “ tus ojos son horrendos”, “ eres un monstruo”, “ a nadie le importas” y un largo, muy largo etc, que de apoco y sin que en ese momento me diera cuenta, fueron mermando mis ánimos. 
 
Recuerdo también mis manos forcejeando e hiriendo las mejillas de mi agresor, quien obviamente fue mucho más audaz que yo, aquello finalizó abruptamente, cuando el rubio, de quien después conocería se llamaba Naruto, arrebato de mis oídos las prótesis auditivas, el simple recuerdo de aquel espantoso sonido perforando en mi cerebro aún eriza mi piel, caí de rodillas sosteniendo mis orejas, ridículamente pensé que el dolor se debía a que me las había arrancado, y mi terror aumento aún más al sentir la calidez y el aroma de la sangre,  ahora sé por mis amigos, que mi voz es tenue, y según sigetsu hasta delicada, a si que solo puedo imaginar que los gritos que solté entre el llanto fueron perturbadores, por qué mi garganta dolía cada vez que salían de ella. 
 
Como ya lo dije, en casa conté una historia totalmente diferente, dije que sin querer desajuste las prótesis y que eso había lastimado mis oídos,  fue una semana de estar en casa, de consultas al especialista y de afrontar qué tal vez, uno de mis oídos ya no era viable para la prótesis, un día antes de volver a la escuela los padres de hinata se presentaron en casa, al parecer hinata había señalado lo que en verdad ocurrió, pero era su palabra contra todo un salón, que parecía incapaz de sentir al menos empatía. No era de sorprenderse que todos los abusos que yo recibía ahora se dirigían a ella, y a diferencia de mi, ella si se los dijo a sus padres,  el motivo de aquella visita era el de despedirse, pues se iba a transferir a otra escuela, los culpables, o debo decir, el mayor culpable de mis antiguos compañeros, recibiría su castigo, de eso se aseguraron los padres de mi amiga, y por los rostros que en ese momento vi en mis padres supe que ellos también lo harían, hinata y yo pasamos todo aquel día juntos,  hasta que la noche llego y con ella el momento definitivo, mi corazón dolió, y volví a llorar, ambos lloramos abrazados y ella, en un gesto enternecedor se despidió con un.
 
- No te dejaré solo, te visitare tanto como pueda. 
 
 
en mi se generó una sensación extraña, un nudo en la garganta por aquella “ despedida” y la emoción de la felicidad por qué lo había expresado con sus manos. 
 
Nunca regresé a aquel colegio, lo qué resto del año volví a mi rutina de aprendizaje en casa, e itachi se mantenía a mi lado, intentando todo el tiempo animarme, pero aquellos sucesos ya me habían marcado, de cierta forma me volví más propenso a sentir las miradas, a darme cuenta de las burlas, y le perdí el gusto a enfrentarme al mundo, incluso me sentí una carga, por qué mi hermano prefería quedarse en casa a ver maratones y películas en la televisión, que salir con sus insistentes amigos que a diario lo visitaban para invitarlo a salir,  con mis padres era lo mismo, las cenas románticas cesaron, y su rutina se volvió trabajo y casa.
 
Una noche itachi vino a mi habitación, tomó mi mano entre la oscuridad de la misma y comenzó a “hablarme” yo podía sentir el temblor de sus dedos cada vez que se posaban en mi palma, recuerdo que me sentí mal por hacerlo sufrir y recuerdo también sus palabras.
 
- Por favor, vuelve con nosotros, vuelve a sonreírle a la vida.
 
Lo intenté, en verdad lo hice pero hay tan poca comprensión en este mundo, hay muy poco respeto, y una facilidad en las personas para actuar de formas hirientes, al día siguiente, complací la petición de itachi, fuimos al parque, jugábamos futbol, y mi cuerpo comenzaba a liberarse de aquella tensión entre las risas, y una vez más  sucedió, una vez más las personas se encargaron de hacerme ver, que el mundo no estaba hecho para alguien como yo, retrocediendo aún más en el tiempo, los “ hubiera” saltan por montones, por qué pienso, que si esa mañana no me hubiera puesto el aparato auditivo en mi oído, no hubiera escuchado las burlas de los otros chicos en el parque, por consiguiente, no habría llorado e itachi no se hubiera visto en la necesidad de agarrarse a golpes con ellos, ese día la vida de mi hermano cambio, siendo casi  mayor de edad, y habiendo golpeado a tres menores, los procesos legales no se apiadaron de sus razones, e itachi luego de un juicio, mucho dinero invertido por parte de mis padres, y un muy buen abogado, pago su mal comportamiento con un par de meses en detención y servicios comunitarios, lo que jamás recuperó fue la oportunidad de volver a la escuela, y aún que fingía que disfrutaba las lecciones en casa, yo intuía que no era así, y aquellos amigos que le visitaban dejaron de hacerlo, lo vi convirtiéndose en alguien parecido a mi, y me sentí tan culpable, por qué, mis padres y el podían hacer sus vidas, sin nada que los atara o frenará y aún así, seguían a mi lado. 
 
Decidí que era mejor hacerme a un lado, después de todo nadie extraña aquello que le estorba, durante la noche me levante y fui a la cocina, tome un cuchillo y pensé, “ bien solo clavalo  en el corazón” lo intenté varias veces pero fui cobarde, así que opte por hacerlo de una forma menos dolorosa, busque entre los cajones  hasta dar con aquel frasco  de pastillas que ayudaban a mi madre a conciliar el sueño, me la podía imaginar llorando por las noches pensando en mi hermano, por qué yo mismo hacía eso durante el tiempo que permaneció en detención,  tome una tras otra y volvi a mi cama. 
 
Nunca he tenido el valor de pregu tar que sucedió, quien fue el primero en encontrarme y por cuánto tiempo estuve así antes de despertar, pero cuando lo hice, sentí que no era mi cuerpo el que habitaba, todo en mi estaba como adormecido, y bueno, lo siguiente fue tiempo de recuperación y mucha terapia psicológica.
 
 
Agradezco que mi familia perdonará mis actos, que me apoyara después de ellos, y mucho más el que jamás me han considerado un estorbo como yo lo pensaba, y así con unas nuevas ansias por vivir y comenzar de cero, volví a intentar acudir a la escuela pública, las burlas continuaron, las miradas y las habladurías pero ya no tenían importancia, y esta vez, la relación con mis compañeros fue mejor, al grado de que podía interactuar con ellos, con dificultad claro, pero al final de cuentas ya no estaba excluido, hinata se enteró de lo sucedido, y me enteré de que a diario iba al hospital a visitarme, desde entonces apenas tiene un tiempo libre y quedamos de vernos en algún lugar, quién diría que aquella niña tímida ahora se perfila para ser una abogada que llena de seguridad  es la mejor en su clase.  
 
No solo termine la escuela secundaria, me las arreglé para sacar adelante el bachillerato, y bueno una vez terminado este, me di cuenta de que optaría por estudias arte, más específicamente música, por qué en una de las noches que salí con mi hermano, este me llevó aún café en donde la principal atracción era la música en vivo, la prótesis auditiva que aún puedo usar no me permite escuchar mucho, pero el sonido de ese piano, fue tan majestuoso, mi hermano noto mi interés, y de un momento a otro le pidió al dueño del lugar la oportunidad de que yo lo tocara, y no dude en hacerlo, fue como ser llevado en aguas tranquilas, que calman el corazón, pero que también lo aceleran con emociones sublimes.
 
Está por demás decirlo pero, actualmente prefiero tocar sin el aparato en mi oído, por qué mi cuerpo se estremece con las vibraciones que los instrumentos generan  al ser tocados,  soy feliz, en verdad lo soy, por eso es que me pregunto. ¿por qué justo ahora Naruto tiene que aparecer?, ¿por qué ahora parece que quiere acercarse?... . 
 
Notas finales:

Lamento si hay faltas de ortografía o nombres cambiados, la letra "n" de mi teclado no funciona muy bien así que bueno si falta alguna ya sabrán por qué.

 

gracias por darle una oportunidad a este fic 


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