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Somos fanáticos de lo prohibido por DaniiiielaZ

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Notas del fanfic:

eh vuelto jeje, es mi primer omegaverse eh tratado de entender las "reglas" de dicho genero, sean gentiles. puede haber lemon en el futuro xD es chica x chica asi que si no les gusta el genero quedan advertidos :3

Notas del capitulo:

 

Aclaraciones necesarias para el omegaverse en cuestión:

*Creación del nido: como bien dice el nombre el omega al quedar embarazado comienza con la creación de un nido, este no es más que una habitación o un lugar donde almacenan pertenencias con el olor de sus seres queridos, este les da confort y tranquilidad para cuando llegue el nacimiento de los cachorros. Los omegas actúan muy defensivos en torno a los nidos, en ocasiones no dejan entrar ni a sus parejas al nido, si el omega no da el permiso necesario a una persona y esta entra en contra de su voluntad, el omega puede llegar incluso a la depresión ya que se sienten inútiles en su función de omega cuidando el lugar donde sus cachorros nacerán.

*rompimiento del lazo: el lazo se crea cuando un alfa reclama a un omega. Las formas de romper esto es con la muerte de alguno de ellos, como también si el alfa reclama a otro omega. Cuando el lazo es roto es muy común que ambos lados se sumen en una profunda depresión, esto se debe a que el lazo es tanto física como mentalmente. Al alejarse, sienten un vacío tan grande que no tienen fuerzas para continuar, muchos llegan a morirse en estas condiciones.

*cuando el hermano de Sofí le dice que apestas a Tea es porque cuando dos alfas se encuentras se perciben y no es agradable el olor de otro alfa.

Una castaña con gafas caminaba a toda velocidad mientras era seguida a unos pocos metros por una mujer mayor con rasgos similares entre sí, negaba fervientemente mientras hacia múltiples gestos con el rostro ya totalmente contrariado. Sus manos se movían de aquí y allá en negación, llevaban así un par de minutos pero la mujer mayor insistía continuamente.

— ­¡te vas a hacer cargo! ¿Crees que puedes llegar y hacer lo que te venga en gana? ¡Ya madura Tea! — La poca paciencia que le quedaba a la señora se estaba agotando a medida que su hija seguía negándose o de plano ignorándola — ¿Por qué no pensaste esto antes de anudarla? ¡De que te sirvieron todas las charlas que te di continuamente!

— ¿Por qué mierdas haría eso? No fue mi culpa ¡joder! Ponte alguna vez de mi parte, fue esa maldita omega Grrr todo lo provoco ella ¡que no lo ves! — trataba de defenderse la castaña mientras seguía molestándose. Nada de esto era su culpa. Era culpa de su maldita naturaleza alfa y de esa omega que no fue cuidadosa con su celo y casi que se le restregó encima pidiéndole que la use como la mayoría de los omegas Grrr solo recordar que no pudo controlarse y mucho menos ser cuidadosa para al menos no anudarla le provocaba un fuerte dolor de cabeza.

— tú también puedes tomar supresores para alfa y aun así siempre te negaste ¡crees que el mundo entero gira entorno a los estúpidos alfas! ¡¿Por qué debes ser igual a tu padre?! — Lo último provoco que ambas mujeres se detengan de golpe — es decir, no lo quise decir así…tú me entiendes. Solo se responsable con tus actos recientes y…

— tengo 16 años mamá ¿Qué esperas que haga? — La mujer mayor solo la miro fijamente transmitiéndole sus pensamientos — ¡¿debes estas bromeando?! No pienso desposarla por un simple revolcón que ella misma se buscó, no es el siglo pasado ya mamá. Si dinero es lo que necesitara en caso de quedar embarazada es lo que le daré — su madre bufo mientras la miraba decepcionada — no se hablara más del asunto. Déjame en paz.

— ¡no te crie de esta manera! Piensa un poco en lo que significaría esto para esa pobre chica. ¿tú crees que es fácil ser omega? Sufrir continuamente de los periodos de celo que en ocasiones son imprevistas. Debiste protegerla en vez de haber mantenido relaciones sexuales con ella — trataba fuertemente de hacerla entender pero su hija no entraba en razón — no digo que el matrimonio es la solución, sé que son jóvenes… solo te pido que no la dejes sola… no cometas los errores de tu padres.

— ¡No me lo menciones maldita sea! Es tan bajo que me compares con él, solo… al menos déjame digerir todo esto. No quiero seguir discutiendo en caliente contigo mamá — soltó un fuerte bufido mientras abrazaba a su madre — sigo siendo un adolecente de 16 años que no entiende muchas cosas. Estoy un poco asustada y en parte avergonzada… prometo hablar con ella.

Su madre asintió retirándose del cuarto de su hija para así darle unos momentos a solas. Tea tenía razón, la estaba presionando demasiado con lo acontecimientos pero entro en pánico apenas su hija le contó lo sucedido la noche anterior. Su hija tenía la suficiente confianza para no dejarla fuera de nada que acontezca en la vida de su hija. Su única hija.

Tea por su parte trataba de aclarar sus pensamientos. Todo había ocurrido tan rápido, se quejaba por haberse quedado más tiempo del necesario en la escuela. Tenía unas cosas que resolver respecto a un informe que debía entregar la siguiente semana y prefirió terminarlo en la biblioteca de la escuela. Todo estaba en calma hasta que sus sentidos la alertaron cuando percibió un dulce aroma que la obligo a buscar la fuente de dicho olor.

Se encontró con algo que no esperaba… una hermosa joven de cabellos claros jadeando, apoyada sobre uno de los escritorios de la biblioteca. La chica tenía los ojos cerrado mientras una de sus manos se perdía entre sus piernas, debieron pasar unos pocos minutos cuando la rubia abrió los ojos sorprendida percibiéndola.

— Ayúdame.... — fue lo que susurro jadeante mirándola con una mirada totalmente caliente…

— Y debiste cogértela sobre el dichoso escritorio, ¡pudiste haberte largado! ¡¿Ese es tu ridículo autocontrol?! GRR — sacudía la cabeza alejando los recuerdos de ayer. No entendía porque fue tan fuerte el llamado, antes le había ocurrido que había estado cerca de una omega en celo y nunca había perdido tanto la cordura como con la chica esa que ni el nombre conocía. Tras aparearse con la omega salió del trance y se retiró no sin antes llevarse algo importante de la omega en cuestión, se acercó a su mochila escolar sacando la billetera que se había llevado. La abrió buscando lo que esperaba encontrándolo— Sofía Altamirano…

.

.

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Trataba de aparentar que no estaba nerviosa pero no podía, sus manos temblaban levemente denotando una mezcla entre nervios y miedo que la estaba dominando. Recordaba las palabras de su madre “ni se te ocurra rugir si hay un alfa más en casa, trata de llevar un perfil bajo ¿estas consiente que sabrán quien eres apenas te huelan? Yo aún percibo el olor de esa chica en ti”. Sabía que debía esperar más días pero su madre insistió y ella particularmente también quería adelantar eso, debía hablar con la chica para tomar una decisión si es que ella no tomo una ya…

Golpeo la puerta frente a ella esperando salir en una pieza cuando deba cruzar la puerta camino a casa, por dentro rezaba que no haya un alfa en casa o esto se podría poner más feo de lo que ya es aparentemente.

— pude olerte desde hace unos 5 minutos ¿Qué te tardaba tanto?... pasa— sonrió nerviosamente mientras festejaba al ver a la chica y no a sus padres recibiéndola.

— Primero que nada esto es tuyo — le entrego su billetera rozando levemente su mano con la rubia sintiendo un hormigueo en esta— y bueno supongo que sabrás a que vine… tenemos que hablar sobre lo de antes de ayer.

— ¿tenemos que?, ya tome medidas al respecto. Tome una píldora con eso debería ser suficiente — se sentía cierta incomodidad entre ambas, a pesar de haber compartido algo tan íntimo seguían siendo desconocidas.

— sabes que eso no es suficiente, te anude mientras estabas en celo el porcentaje de embarazo es de más del 90% y eso lo deberías saber… no estaría aquí si ese porcentaje no fuera tan alto — la rubia bufo mientras se dejaba caer en el sillón más cercano, sabía que la píldora no ayudaría mucho, tampoco le sorprendió que la chica frente a ella lo sepa — ¿tienes pensado que hacer? Tenemos 2 opciones y respetare la que elijas. No presionare ninguna de las posibilidades porque entiendo que es tu cuerpo y puedes hacer con él lo que desees.

— Tu nombre… empecemos por ahí.

— Dorotea Fernández, puedes llamarme Tea, ¿puedo sentarme? — Pidió apuntando una silla frente a Sofía, esta asintió mientras peinaba un poco sus cabellos — entonces… ¿Qué quieres hacer?

— no lo sé…esto es extraño, no sé si lo percibes pero mi cuerpo te está llamando. Sé que debe sonar de locos pero lo estuve pensando y… ¿Qué tan casualidad fue que nos encontremos ese día? — la rubia la miraba expectante, Tea sabia a lo que se refería, ella también lo sentía. E inclusive sabía que su cuerpo estaba extraño desde que se alejó de ella, ayer no podía sacarla de su cabeza — pero no te confundas… por muy raro que sea esta situación no pienso quedármelo, tengo solo 16 años y… no creo que sea lo correcto ser madre. Menos en esta situación… somos unas simples desconocidas.

— sí, lo comprendo y respetare tu decisión, te acompañare en todo el proceso y quiero disculparme por esto, sé que no te obligue a nada pero yo debí controlarme de alguna manera, tú tienes una excusa ningún omega puede luchar con el fuerte deseo que les provoca el celo. Pero yo si debía controlarme o al menos no debí anudarte… realmente lo siento — lo decía sinceramente luego de pensarlo y dejar de culpar a la chica.

— no fue toda tu culpa, recuerdo exactamente que fui yo quien te pidió que me anudes y antes de que lo digas lo sé. Sé que en ese momento el omega anhela que lo fecunden pero te puse las cosas más complicadas cuando con mis piernas evite que quieras retirarte — se produjo un largo silencio mientras ambas solo se miraban — al menos te agradezco que no me mordiste, si me hubieras reclamado hubiera sido terrible y sé que te lo pedí… así que te lo agradezco.

— si te hubiera reclamado ahí si estaríamos en problemas, si decidiste interrumpir el posible embarazo tendríamos que alejarnos totalmente y eso sería terrible para ambas. También me preocupa tu decisión, debemos llevarla a cabo cuanto antes de otra forma comenzaras a crear el nido para el cachorro y… ya entiendes será difícil todo. Buscare una cita para mañana entonces — saco un papel mientras anotaba algo en este para luego entregárselo a la rubia — este es mi número, por ahora mantengámonos en contacto pero solo el estrictamente necesario y…

— ¿tú qué quieres hacer?, sé que dijiste que respetarías mi decisión y lo admiro. Pero… ¿no quieres conservarlo? Solo en el caso hipotético en que… olvídalo estoy diciendo estupideces, somos desconocidas, jóvenes y quizás ni te parezco atractiva… digo, o-olvídalo no sé qué estoy diciendo. Es tu presencia o no lo sé y-yo…

— Eres hermosa… lo pensé mucho y si me lo permites quisiera conocerte más. Estamos en una situación complicada para ambas no tenemos mucho tiempo además de… Grr — Tea sintió una presencia de un alfa lo cual la altero al instante, sentía la antes desconocida condición del “llamado del alfa” parándose y poniéndose frente a Sofía la cual se sorprendió.

— Qué asco, apesta aquí — entro a la casa un joven de unos 23 años el cual al notar la presencia de un alfa frente a su hermana se alteró— ¿Quién mierda eres? Grr y ¿Por qué hueles a Sofí?

— Calmados los dos, Nico… es de quien te conté no actúes como si no lo supieras, Tea tranquila es solo mi hermano mayor — a pesar de que Sofí trato de calmar a Tea esta seguía en posición dispuesta a lanzarse sobre el recién llegado, el cual seguía mirándola ahora más enojado.

— así que eres tu quien se aprovechó de mi hermana, ¿Quién te crees?, además de que tomas esa postura de alfa dominante ¡ridícula! Estas en mi casa, agacha la cabeza si no quieres que te saque en trozos.

Ambos se rugían acercándose lentamente, Sofí no podía permitir una pelea entre dos alfas que podría poner en riesgo la vida de amboso de cualquiera que quede en medio incluyéndose, abrazo por la espalda a Tea mientras le ronroneaba tratando de calmarla, dejaba salir una feromonas solo para ella. A los minutos esto funciono sorprendiendo al alfa mayor… veía la interacción de su hermana y la desconocida entendiendo lo que seguramente ellas desconocían.

— Apestas… pero no quiero alterar a mi hermana, vete apenas termines aquí… y que sea rápido — nunca había creído en lo que es “tu pareja destinada” posiblemente las jóvenes frente a él tampoco lo sabrían pero eso es lo que era, él podía verlo. Por un lado veía a un alfa protegiendo a su omega y por otro lado veía a una omega calmando a su alfa. Para él estaba claro… pero seguramente para ellas aún no.

 

 

 

Notas finales:

como quedo claro esto sera un fic, tratare de que no sea largo :3, me disculpo de los posibles errores ortograficos que puedan haber y se me hayan pasado. gracias por leer.


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