Naruto suspiro por quinta vez consecutiva —Deberías ponerte a trabajar en vez de estar perdiendo el tiempo—reprendió Deidara
Naruto contemplaba por la gran ventana del lujoso lugar como llegaba su cliente preferido, ese joven varón de 27 años, cabellos negros al igual que sus ojos de mirada fría piel blanca tan blanca como la nieve, soltó un suspiro.
Deidara se acerco al rubio menor para golpearlo en la cabeza con uno de los libros que había cercas —Prepara todo para atender a tu novio— dijo Dei burlándose de la situación de su compañero
Con pesar al ver que Sasuke se perdió en el edificio, camino a preparar las cosas, limpio la silla preferida del hombre, templo el agua, coloco toallas limpias cuando la puerta se abrió ya estaba todo listo, se acerco para recibir al cliente —Buen día joven Uchiha — saludo en una reverencia
Deidara condujo al hombre a una de las sillas — Va a ser el servicio completo— pregunto
Sasuke se quito el saco dejándolo a un costado, se sentó en la silla recargando su cabeza hacia atrás —Si — contesto
Naruto se agacho a los pies de Sasuke para quitar los zapatos del joven, coloco la pequeña tina de hidromasaje donde metió Sasuke los pies, saco los instrumentos para la manicura, con fascinación Naruto manipulaba las estremecedoras manos del Uchiha mientras Deidara cortaba y lavaba el cabello.
—Cuidado con mi mano— hablo Sasuke al sentir un poco de dolor, Naruto se sonrojo asintiendo un poco.
Al terminar el trabajo de manicura y pedicura, el rubio menor tomó sus instrumentos, dedicándole una pequeña sonrisa al magnate quien lo miro —Tu eres nuevo verdad— afirmó
Naruto hinflo sus mejillas en un mohin tan tierno —Tengo aquí tres meses— hablo ofendido
Sasuke lo medito un momento, —A cierto, eres el hermano de Deidara, Boruto.
—Eres un idiota, no puedes aprenderte mi maldito nombre, te lo he dado más de 10 veces —grito molesto el rubio — !Me llamo NA-RU-TO, aprenderlo maldito teme — exclamó para salir encabronado del pequeño salon.
Deidara estaba sorprendido con el saco de Sasuke en las manos "Maldito Naruto, a ver si no, nos corren" pensó sonrió forzado para entregar el saco
—Perdonelo joven Uchiha— pidió Deidara con un tick en el ojo a causa del comportamiento de su hermano.
Sasuke miraba fascinado el lugar por donde se había marchado el rubio menor, —No te preocupes— hablo para pagar los servicios prestados
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Deidara entro en el cuarto donde desinfectan los instrumentos —!Que demonios te pasa¡ — reprendió
—Me molesta que no se aprenda .i nombre — grito frustrado — Quiero que se fije en mi
—Naruto— suspiro Deidara —Eres solo un empleado más, el no va a voltear a verte.
Un suspiro cansado salió de los labios del menor —Pero lo amo
—Entiende que para que una relación funcione, los dos deben de amar o atraerse mínimo, tu vives un sueño Naru — hablo comprensivo — Se vale soñar — rio ante el puchero que hizo Naruto — Pero no lo puedes forzar a qué te note.
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Naruto solía esperar viendo por la ventana cuando Sasuke iba a ese spa, el se encargaba de ayudar a su hermano, pero los Miércoles, que era el día que el Uchiha menor iba al local, sus nervios no lo dejaban y se la pasaba esperando la llegada del pelinegro.
Pero ese día no entro solo como siempre, acompañado de una joven de cabellos rosado, se adentro al lugar.
La sonrisa del siempre alegre Naruto se borró cuando la joven tomo del brazo a Sasuke
—Por favor— rogó la de rosados cabellos —Tienes que acompañarme a la fiesta de Ino.
Sasuke saco su saco, para colocarlo en el perchero sentándose en la silla sin que le dieran la indicación, esperando al joven manicurista que estaba en shock
—Sakura tengo mucho trabajo, ya no tengo 18 años para estar de fiesta en fiesta— se quejo Sasuke
—Oh vamos, no seas tan anticuado — reprochó la chica, quien paseó su vista por el lugar —A que vienes a este lugar— cuestióno la joven
—Vengo consentirme— se burlo el Uchiha, con pesar Naruto llevo de nuevo cuenta el material escuchando a la pareja, discutir, reír y arreglar sus problemas todo eso lo puso de mal humor, picando al Uchiha en varias ocasiones.
—No te dije que tuvieras más cuidado dobe— gruño Sasuke
—No me llamo Dobe— se quejo el rubio
—Ya lo sé Karuto— sonrió al decirlo Sasuke, el rubio apretó los puños y se fue enojado
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—Si quieres te puedo presentar a mi hermano— dijo Temari al verlo entrar en el cuarto de servicio, Naruto se jalo los cabellos —Lo quiero a el— grito frustrado
—Si tanto lo quieres, haz un amarre— se quejo Deidara ya fastidiado de que siempre es lo mismo.
Naruto miro a su hermano con los ojos brillando —¿Que es eso?— pregunto ilusionado
Deidara dudo en contestar pero aún así respondió —Es un hechizo para hacer que una persona se fije en ti— hablo — Es brujería — finalizó
Naruto llevo una mano a su barbilla —¿Es muy caro?— pregunto pensando en sus ahorros
—Estas de broma— exclamó su hermano —De verdad piensas hacer brujería
—Tu lo sugeriste— contesto inocente Naruto
—Lo decía jugando— indico Deidara
—Yo conozco un brujo muy bueno— interfirio Temari
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Al finalizar el trabajo Deidara y Naruto se encaminaron a la dirección que les dió Temari.
El lugar era una casa verde de la cual salía un olor a hierbas, tenía flores secas, imágenes de santos, deidades y celebridades, el lugar estaba faltó de iluminación, una muerte estaba pintada en la pared, muchas botellitas de diferentes colores y tamaños por todas partes, velas con leyendas en la parte de atrás junto a una imagen, una ristra de ajos colgados en la puerta.
Con temor se adentraron mirando una mesa con una bola de cristal, cartas en ella, infusiones.
—¿Eso es una gallina?— cuestionó Deidara en un susurro —Naruto mejor vámonos— pidió
—Si quieres vete tú, yo tengo que hablar con esta persona— exclamó decidido el rubio menor
—Jovenes que los trae por aqui— cuestionó el hombre frente a ellos, su largo cabello negro contrastaba con su pálida piel —Algun destierro, una limpia, lectura de cartas.
—¿Usted es Orochimaru?— pregunto con nervios Naruto
—Asi es— contesto mirando de cercas al de las marcas
—Yo quiero que alguien se enamore de mi— exclamó en un grito
—Oh vienes por un amarre de amor— rio para caminar a una mesa donde había huevos de gallina de color negro, tomo un papel para dar las instrucciones y los ingredientes, para llevar a cabo el ritual.
—Tienes que seguir los pasos, al pie de la letra si quieres que esa persona te ame— hablo Orochimaru garabateando en el papel — El costo son $$$—
—Naruto, no se te hace muy caro— susurro Deidara
—Me pagas los ingredientes y el resto cuando haya resultados— sonrio cínico Orochimaru