Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Maho Neko: Especial De Parejas por Neko_Yami

[Reviews - 52]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Espero lo disfruten.En estas historias coneceremos un poco mas de los personajes secundarios,ademas de los protagonistas.

También servirá para entender algunos aspectos de las cosas que sucedieron en la primera temporada,e influirán también para la segunda temporada de la serie "Maho Neko".

§ Capítulo 1 §

♥ Yuki x Makoto ♥

La noche anterior, había vuelto a soñar con Makoto. No importaba que tanto tratara de frenar ese sentimiento, ignorarlo, o simplemente alejarme de él, este permanecía ahí, aferrado y enterrado en mi corazón. Tras pensar que estaba enamorado de dos personas al mismo tiempo, finalmente me di cuenta de que no era más que una excusa para tratar de ignorar la enorme atracción que sentía hacia mi compañero de equipo. Recordando tiempo atrás, fue cuando me di cuenta que esa atracción surgió desde el primer momento en que lo conocí. El momento en el que conocí a Makoto, es algo que estoy seguro nunca iba a poder olvidar.

Fue el primer día de clases en Maho, después de la ceremonia de inauguración. Me dirigía al cuarto el cual sería mi habitación durante mis estudios. Me sentía impaciente por que las clases empezaran, deseaba estudiar muy duro, e incrementar mi nivel de magia, todo con tal de convertirme en el orgullo de mi familia, y de mi clan, el clan de Odín. Cuando finalmente localicé mi habitación, vi a un chico acercándose a lo lejos, este iba caminando trabajosamente, cargando unas pesadas maletas, que estaba seguro pesaban más que él. Me detuve a unos metros de la puerta de la habitación, observando entre extrañado y divertido el intento del chico por caminar. Pero me sorprendió mas al ver que se detuvo enfrente de la puerta de mi habitación. Las reglas que nos dijo el director Xariot, habían sido claras, íbamos a compartir habitación con nuestro compañero de equipo.

Di un suspiro bajo, decepcionándome un poco de que el chico extraño de las maletas fuera a ser mi compañero, yo esperaba a alguien mas imponente, alguien que se viera mas poderoso. Bueno, aunque ni siquiera había sido capaz de ver el rostro de Makoto, pues las maletas que llevaba cargando se la tapaban. El misterio del rostro, finalmente se revelo cuando el despistado de Makoto trató de abrir la puerta aún cargando las maletas, no pudo cargar más con ellas, y se le cayeron, desparramando su equipaje por todo el suelo.

-¡Oh, no!

Exclamo Makoto muy sorprendido y apesumbrado. Cuando finalmente podía verlo completo, mi corazón comenzó a latir con fuerza en mi pecho. Un rostro con facciones finas, algo afeminado, pero lo suficientemente varonil para reconocerlo como un chico. Un cuerpo no muy delgado que digamos, más bien, esbelto, pero agradable a la vista.

Mi naturaleza siempre ha sido coqueta y atrevida, se que soy apuesto y atractivo para ambos sexos, ¿así que por que no aprovechar eso? Con mis 16 años de edad, ya había tenido varias parejas, incluso ya no soy virgen, y no es algo por lo que los halfs nos alarmemos, es común para los half perder la virginidad a una temprana edad, pero como siempre, eso depende de cada individuo, y los consejos siempre son los mismos: “protégete”. Las cosas son mas difíciles ahora, pues tanto como halfs hembras o machos podemos quedar preñados, así que el protegerse es primordial para no traer un bebé no deseado.

Siendo Makoto un chico muy lindo, no lo dude ni un momento, y decidí empezar mi plan de conquista, después de todo no iba a estar tan mal tenerlo como mi compañero de equipo.

-Oye, ¿quieres que te ayude?

Makoto ya había empezado a recoger sus cosas del suelo, cuando al oír mi voz, volteo a verme con atención.

-Ah, no, no te apures, así esta bien, gracias…

Me respondió Makoto con timidez bajando las orejas, y sonrojándose.

-Tranquilo, no hay problema.- Insistí, mientras me hincaba en el suelo, y comenzaba a ayudarlo-. Después de todo, seremos compañeros de equipo, tendremos que ayudarnos mutuamente si queremos que nos vaya bien.

-¿Compañeros? ¿Tú serás mi compañero de equipo?

-Si, esta habitación, la 110… ¿Va a ser la tuya, no es así?

-Si…

-La mía también, eso quiere decir, que seremos compañeros de equipo.

Concluí sonriéndole a Makoto, este, rápidamente se olvido de lo que estaba haciendo, y se concentro en mi.

-¡Ah!… ¡Mucho gusto! ¡Me llamo Makoto! ¡Mucho gusto! ¡Soy Makoto de Gaia, y manejo la tierra! ¡Mucho gusto! ¡Espero ser un excelente compañero de equipo!

Makoto se presentó muy nervioso, se había puesto mas rojo que una manzana, y había dicho “mucho gusto” tres veces. Si que era encantador, no pude evitar reírme en voz baja ante su extraña presentación.

-Igualmente. Yo soy Yuki de Odín, y manejo el hielo. Estoy seguro que los 2 seremos muy buenos compañeros, presiento que nos llevaremos muy bien.

Le mostré a Makoto una enorme sonrisa, y le tendí mi mano. Makoto rápidamente tomo mi mano, olvidándose de que estaba recogiendo sus cosas, y estas cayeron al suelo de nuevo.

-¡Oh, no!

Exclamo de nuevo Makoto, mirando sin saber que hacer mi mano, y las cosas que se le acababan de caer.

-Je, je, je… Que lindo eres Makoto-kun… Vamos, te ayudaré.

Al escuchar mi cumplido, Makoto bajo su vista, y de nuevo se sonrojo, sin siquiera atreverse a mirarme. Escuche como murmuro un tímido y bajo gracias, y continuamos recogiendo sus cosas. Mi primera impresión de Makoto, era que era un chico extremadamente tímido e ingenuo, era la primera vez que conocía a alguien así, y simplemente, había quedado embelesado ante su actitud y su aspecto tierno y aniñado. No mentiré, deseaba besarlo y poseerlo, los instintos gatunos de un half son muy débiles ante el sexo y el querer sentir placer, y yo lo era mas ante los chicos y chicas tiernos y encantadores como Makoto. Pensé en tratar de conquistarlo con mi galantería y mi aspecto, y que en unas cuantas semanas más, ya lo tendría en la cama para mi solo.

Al principio sólo me sentí atraído por Makoto, y el conquistarlo, sólo lo había tomado como un juego, como muchas veces lo había hecho antes. Pero el día en que trate de acostarme con él, fue el peor día de mi vida, el cual me hizo sentirme como una sabandija inmunda y horrible.

Fue en la noche, Makoto se encontraba sentado en su cama, terminando la tarea de hechizos. Mientras tanto, yo salía de darme un refrescante baño, vistiendo tan sólo unos shorts que me llegaban arriba de la rodilla.

-¡Pero que buen baño me di!

Dije en voz alta, para tratar de llamar la atención de Makoto. Makoto volteo a verme, y ante mi aspecto, se sonrojo, y bajo la mirada a su libro te texto.

-Ah… Que bueno que disfrutaste tú baño Yuki…

-¿No habías terminado ya ayer la tarea Makoto?

Le dije, sentándome a la orilla de su cama, meneando mi cola rubia de arriba hacia abajo.

-No, me faltó tan sólo un poco…

Makoto se veía tenso y nervioso ante mi cercanía. Era obvio que mi aspecto era para calentar las cosas, y tratar de seducirlo. Cualquier persona ya se hubiera dado cuenta, incluso, mis antiguas parejas se habían lanzado hacia mi en cuanto me habían visto así. Pero siendo Makoto tan ingenuo, estaba seguro de que ni siquiera había pasado por su cabeza. Makoto ni siquiera se atrevía a voltear a verme, ya que yo estaba semidesnudo.

Comenzando a desesperarme, decidí actuar. Tome el cuaderno y el libro de texto, y los aleje de la cama, al tiempo que tomaba a Makoto de los hombros, y lo empujaba suavemente para acostarlo en la cama.

-Yuki… ¿Qué haces?

Exclamo Makoto extrañado, abriendo mucho sus ojos verdes.

-Descansa un momento, y vamos a divertirnos un rato Makoto.

Sin más, comencé a besar su suave cuello con delicadeza, sólo sentí como su cuerpo se tenso, y enredo su delgada cola a sus piernas, en señal de incomodidad.

-Yu… Yuki…-Dijo este, con la voz entrecortada y nerviosa-. ¿Por qué haces esto?

-Juguemos un rato Makoto.

Le respondí, volteándolo a ver seductoramente. Los ojos de Makoto me demostraban tristeza y miedo.

-¿Jugar? ¿Tú haces esto sólo por jugar? ¿No es por que sientas algo por mí?

-… No es como si importara ¿oh si? Ya muchas veces lo he hecho antes, sin que halla sentimientos de por medio. No es algo malo.

Makoto volteo el rostro, sus ojos estaban entrecerrados, llenos de dolor y decepción.

-Yo siempre he querido que mi primera vez, sea con alguien a quien ame, y no sólo por querer sentir placer. Yuki… ¿No sientes un enorme vacío al hacer las cosas así?-Me quede mudo sin saber que decir, ahora que lo reflexionaba, lo había sentido al ver a mis parejas de un día partir sin decir nada mas que: “eso estuvo fenomenal, gracias por la gran noche”. Makoto continuo hablando, sin cambiar la expresión de su rostro-: Las personas con las cuales lo has hecho, apuesto a que sienten lo mismo… ¿Divertirte con los sentimientos de los demás también es parte del juego Yuki?

Me quede helado y muy avergonzado sin poder contestar. El rostro de Makoto demostraba mucho miedo, por un momento, el brillo de alegría y cariño que siempre veía emanar de él, desapareció, y todo había sido mi culpa.

Muy avergonzado, me aleje de él lo más rápido que pude, y tome mi ropa de dormir la cual estaba en mi cama, comenzando a vestirme. En esos momentos, me sentía peor que la más pequeña e insignificante de las escorias del universo. Voltee a ver a Makoto, el cual me veía con asombro sentado desde su cama. Le hable con voz dulce y arrepentida, bajando las orejas.

-Discúlpame Makoto, mejor dicho, no creo que me puedas perdonar, y estas en tu derecho. Aún si no aceptas mi disculpa, te la ofrezco. Jamás debí tratar de aprovecharme de ti así, soy una persona horrible al tratar de hacerlo.  

Makoto, por increíble que pareciera, acepto mis disculpas, pero no se atrevió a verme a los ojos, hasta después de una incomoda semana, la cual se me hizo eterna. En ese tiempo, en el cual se alejo de mí, y ambos hacíamos de cuenta como si nada hubiera pasado, me di cuenta de lo especial que era Makoto para mí. Pero decidí alejarme, pues no deseaba lastimarlo de la misma manera que ya lo había hecho antes, deseaba protegerlo y cuidar su ingenuo y dulce corazón, aun cuando actuara desde lejos.

Tratando de olvidar a Makoto, fue cuando empecé a fijarme en Akari, al principio, mis intenciones con él, eran las mismas que tenía con Makoto. Un chico lindo, dulce y de un cuerpo delgado pero agradable como el de Akari, claro que resultaba atractivo para muchos halfs machos. Y aunque traté de conquistarlo varias veces, Akari me había rechazado con su temperamento fuerte, ya que si hay algo que lo caracteriza, es que es un chico que nunca deja que nadie se aproveche de él. Las cosas se complicaron cuando él y Yue comenzaron a llevarse mejor, pues Yue pareció poner un muro alrededor de su compañero de equipo, el cual no dejaba que lo atravesara nadie. Y si te atrevías a tratar de pasarlo, estabas seguro que te iría mal, odio admitirlo, pero Yue no es la clase de persona con la cual desees meterte, o tenerla como tu enemigo.

Trataba de concentrarme en Akari, pero los sentimientos por Makoto permanecían ahí, sin importar lo mucho que yo luchara contra ellos. Tampoco es como si me esforzara por ignorarlos, pues en estos momentos, me encuentro en un tren eléctrico rumbo a la provincia de “Terra”, es decir, los territorios del clan Gaia, el clan de Makoto.   

La invitación de ir a visitarlo unos días a su casa, me llego en la primera semana de las vacaciones de invierno. Sin nada que perder, decidí ir, pues Makoto me había  hablando de tantas maravillas de su clan, que ahora me había entrado la curiosidad por conocer la vida del clan Gaia.

 

***

-¡¡Yuki, bienvenido!!

Makoto me saludó con una enorme sonrisa en su rostro, cuando me localizo en la estación del tren. Mi provincia, “Sleipnir” y “Terra”, no estaban lejos, el viaje había durado sólo 1 hora. Como ambas eran parte del país de Lagarem, entonces no había problema en vernos en vacaciones si así lo deseábamos.

Makoto y yo caminamos hasta fuera de la estación de tren, y tomamos un taxi para llegar a su casa. Me sentí maravillado al ver “Terra” por primera vez, era una provincia llena de espesa vegetación, muchas especies diferentes de flores y árboles. Además de que a cualquier lugar que voltearas, podías ver diferentes tipos de animales. Animales en los jardines de las casas, en las calles caminando libremente, estar en “Terra” era como estar en una especie de ciudad bosque. Pero siendo un clan que venera a la naturaleza, no esperaba menos.

-Discúlpame por tener que irnos en taxi.-Habló Makoto a mi lado, con un poco de vergüenza-. Pero papá no quiso prestarme el auto pues la vez pasada lo choque.

-¿Lo chocaste?-Exclame un poco sorprendido- ¿Cómo esta eso? ¿Acaso ibas en dirección contraria en la calle o algo así?-Makoto no contesto nada ante mi broma, simplemente bajó la vista, sonrojándose.-Entonces era cierto… Ay Makoto, eres tan distraído.

-¡A cualquiera puede pasarle!

-No en tu propia provincia.

Makoto ya no dijo nada, sólo desvió la mirada muy avergonzado, bajando sus orejas. Me fascinaban esas actitudes de él. Para ya no incomodarlo más, decidí cambiar el tema rápidamente.

-Y cuéntame… ¿Cómo te ha estado yendo? ¿Aprovechas bien tú tiempo libre?

 

***

Makoto era hijo único, vivía solo con su padre y su madre. Ambos eran muy amables y serviciales. Su madre, Shitose-san, era la típica mujer preocupada por su familia, y por tener su casa bien arreglada y limpia. El padre de Makoto, llamado Katsuhiro, por su parte, más que comportarse como un padre, se comportaba como el hermano mayor de Makoto. Era de esos hombres divertidos, que se la pasaba haciendo bromas todo el tiempo, un hombre con un espíritu muy joven, lo cual resultaba muy agradable.

-Dime Yuki-kun, ¿te gustó la comida?

Me preguntó Shitose-san, mostrándome una enorme y cálida sonrisa.  

-Si, muchas gracias Shitose-san, en verdad era deliciosa.

Makoto comenzó a recoger los platos de la comida, yo decidí ayudarlo pues era parte de la etiqueta que mi familia me había enseñado. Una vez terminamos de lavarlos, Makoto y yo regresamos a la mesa, platicando alegremente. Sin embargo, me sentí un poco extrañado de descubrir a Shitose-san, mirándonos a su hijo y ami de manera embelesada.

-Mako,-dijo esta, sin despegarnos la vista de encima,-no teníamos idea de que tu compañero de equipo fuera un chico tan galante y agradable.

-Gracias por el cumplido, Shitose-san-. Respondí con una pequeña sonrisa-.Debo decir que usted es una mujer encantadora, y una excelente ama de casa. Makoto y Katsuhiro-san deben sentirse afortunados de tenerla como madre y esposa.

Shitose-san se sonrojo, y habló muy emocionada, sujetándose la cara con sus manos:

-¡En verdad es un encanto! Mako, me sentiría muy feliz de tener a Yuki como nuero.

-¡Oka-san! ¡¿Por qué dices eso?!

Gritó Makoto abriendo mucho sus ojos, y sonrojándose.

-Lo que dice tu madre es cierto Makoto-.Continuó hablando Katsuhiro-san, mirando pícaramente a su hijo-.Ya va siendo hora de que te consigas a alguien…No quieres envejecer y pasar el resto de tus días solo ¿no es así? Yuki-kun es un muy buen partido.

-¡Basta, dejen de decir esas cosas, por favor!

Makoto estaba muy avergonzado, mientras yo sólo podía voltear mi rostro para que no me vieran reír. Sin duda, los padres de Makoto eran muy divertidos.

 

***

Habían colocado una cama extra que tenían en la casa en la  habitación de Makoto, para que yo pudiera dormir en su cuarto. Antes de dormir, Makoto me había pedido disculpas por lo que pasó como sus padres como unas 50 veces ¿Es que quería matarme de ternura o algo así?

-Y dime Yuki…-Dijo de repente Makoto, cuando comenzaba a conciliar el sueño-. ¿Te estás divirtiendo? Espero no te sientas mal por como son mis padres, son algo raros…

-Descuida, no te preocupes por eso, a decir verdad, me agradan bastante. Son 2 personas muy cálidas y amables. Además, con el simple hecho de estar contigo, todo se vuelve agradable y divertido.

Makoto no contesto nada ante eso, simplemente, vi como su cola se agito un poco bajo las sabanas, en reacción en lo que había dicho. Ambos permanecimos en silencio por unos segundos más, cuando Makoto habló con voz tímida.

-Y, mañana… ¿Qué te gustaría hacer?

-Ummm… Me contaste que tenías varios caballos, ¿no es así? Además, al llegar pude ver los establos. Mañana quiero que me enseñes a montar a caballo.

-¡Si, esta bien!

Escuche a Makoto muy emocionado al lado de mí. Montar a caballo, era una de las actividades favoritas que tenía Makoto.

 

***

Me había tomado tan sólo unas horas aprender a montar a caballo apropiadamente, una vez lograbas dominarlo, se volvía una actividad muy agradable y relajante. Makoto y yo estábamos cabalgando en un bosque cercano a su casa.

-¡Vaya Yuki, me sorprendes! Aprendiste muy rápido.

-No es difícil una vez entiendes como se hace. Además, eres muy buen maestro Makoto.

-No es para tanto, a decir verdad, lo hago desde que soy muy pequeño.

Me contesto Makoto un poco avergonzado.

-Y dime… ¿Te has comunicado con los demás? Yo sólo he tenido contacto con Mizu y con Ryu.

-Ummm, si, un poco con todos. Mizu me contó que él y Hikari iban a ir a un concierto.

-¿De veras? Ryu me dijo que él y Kagami también irían a un concierto… ¿Me pregunto si será el mismo?

-Quien sabe…-Opinó Makoto, encogiéndose de hombros-. Karasi y Yami estaban pasando las vacaciones en sus casas, y preparando varias cosas para las festividades de navidad… Y Akari y Yue están pasando las vacaciones juntos de nuevo en casa de Akari.

Ante la sola mención de Yue, sentí mi cuerpo tensarse, y agarre las riendas del caballo con mucha fuerza. Estaba seguro que no importara que tantos años pasaran, lo que había hecho nunca se lo iba a perdonar, ni tampoco iba a poder olvidarlo.

-Lo siento mucho Yuki…-Habló de repente Makoto, mirándome con melancolía-. Fue una imprudencia de mi parte hablarte de que Akari y Yue están juntos, siendo que a ti te… te gusta Akari. En verdad lo lamento.

-¿Qué? Ah… No… No te preocupes por eso, a decir verdad, ya no importa. Decidí dejar de insistir con Akari, él me ha rechazado varias veces, y se perfectamente cuando debo rendirme.

-¿De veras?-Preguntó Makoto, con una enorme sonrisa en su rostro. Pareció darse cuenta de que había sonreído inconscientemente, y después, desvió la mirada apenado.-Es decir, lo lamento Yuki… Espero te sientas bien pronto.

-Así será.

Sonreí un poco ante la reacción de Makoto, una sonrisa dulce y tierna. Él era la única persona que me hacía sonreír así. 

Antes de que esos malos recuerdos volvieran a mi cabeza, jale las riendas del caballo, y lo hice comenzar a correr rumbo al norte.

-¿Yuki? ¿A dónde vas?

-¡Vamos Makoto! ¡Te reto a una carrera al final del bosque!

-¡¡No, Yuki, espera!!

Le había tomado una considerable ventaja a Makoto, ahora, su voz se escuchaba de muy lejos, y no podía entender bien lo que decía. Sólo pude entender palabras como: “no” y “camino”, pero lo más extraño, es que Makoto gritaba con angustia detrás de mi.

De repente, sentí a mi sangre helarse, a unos metros de mí, se encontraba un peñasco, el fin del camino. A la velocidad con la que el caballo iba corriendo, y considerando la distancia que quedaba de camino, el caballo no iba a alcanzar a detenerse a tiempo.

En vano, jale las riendas para detenerlo, aunque sabía perfectamente que no lo lograría. El caballo y yo habíamos comenzado a caer, cuando vi como una pared de rocas comenzaba a formarse justo delante de nosotros, deteniendo nuestra caída. Era Makoto, él había utilizado sus poderes para salvarnos. Me sentí aliviado por un momento, hasta que el caballo comenzó a relinchar, y a moverse frenéticamente, pues estaba muy asustado. A causa de eso, perdí la fuerza y el equilibrio, y caí del caballo hasta el suelo.

-¡¡Yuki!!-Gritó Makoto, llegando a donde estaba yo. Se arrodillo rápidamente y me ayudo a levantarme-. Oh, por Gea… ¿Estas bien?

-Si… ¡Auuuu! ¡Mi brazo!

 

***

Esas no habían sido exactamente, las vacaciones que yo hubiera deseado. Pensaba eso, cada que veía mi brazo derecho enyesado a causa de mi caída del caballo. Makoto me había cuidado el tiempo restante que había planeado quedarme en su casa. El día en que volví a mi casa, Makoto me acompaño en tren eléctrico hasta mi casa para ayudarme con las maletas. A causa de esto, mis padres lo convencieron de que se quedara en mi casa esa noche, y partiera el día siguiente.

Algo curioso, es que mis padres quedaron encantados con Makoto, al igual que me había sucedido a mí con los padres de este.

Esa noche no podía dormir, por lo que decidí salir, y darle una visita a ella, siempre hacía lo mismo cada vez que me sentía triste o preocupado por algo.

Caminé por varios minutos, cubriéndome bien, pues “Sleipnir” era una provincia con muy bajas temperaturas, en esos momentos incluso se encontraba nevando. Llegue finalmente ante la tumba, y coloque en ella el ramo de flores que había comprado en la tarde para ella.

-Te he extrañado tanto Midori, no sabes cuanta falta me haces…

De repente, escuche unos pasos cerca de mi, y voltee de inmediato a ver de quien se trataba. Era Makoto, este se encontraba a lo lejos, dedicándome una mirada entre apenado y preocupado.

-Makoto… ¿Qué haces aquí?

-Ah… Discúlpame Yuki, estaba dormido en el cuarto de huéspedes, cuando te oí caminar y pasar por el cuarto. Después te vi salir, y me preocupe por ti, lo siento, no sabía que venías a visitar a alguien.

-Si que te disculpas muchas veces al día, esta bien, descuida…

Una vez dicho esto, volví la vista a la tumba frente a mí. Makoto llego a mi lado, y me preguntó con inseguridad:

-¿Esta bien si te pregunto de quien es esa tumba?

-Si, es de Midori… Mi hermana menor.

-¿Tu hermana?-Exclamo Makoto sorprendido-¿Cómo es que nunca me dijiste que murió? O… ¿fue hace poco?

-No, fue hace ya 4 años, pero me sigue doliendo como el primer día. Discúlpame, pero no es algo de lo que me guste hablar, ella murió asesinada, así que no es algo bonito de recordar…

-Te entiendo, pero… Apuesto a que tú hermana era una persona encantadora.

-Lo era, era la pequeñita más hermosa, dulce y cariñosa que te puedas imaginar.

Bajé las orejas, y no puede evitar derramar unas cuantas lágrimas al recordar los días felices y tranquilos que viví junto a mi hermanita. De repente, vi como Makoto se acerco a la tumba de Midori, y se agacho frente a ella. Toco el suelo, y concentró su magia en su mano. Segundos después, mire asombrado como la nieve alrededor comenzaba a desaparecer, y ahora, sólo se podían apreciar hermosas flores de diferentes colores, se veían tan vividas como en la época de primavera.

-Makoto…

Susurre con sorpresa.

-Estoy seguro que donde sea que este, tu hermanita es muy feliz ahora Yuki… También se que no se arrepintió de nada, ya que tuvo un hermano mayor tan bueno, amable y protector como tú.

Makoto se levanto, y me mostró una enorme y bondadosa sonrisa. Sin importarme nada mas, me acerque a Makoto, y lo abrasé con fuerza, apoyando mi cabeza en su hombro, llorando en silencio.

-Yuki…

-Quedémonos así, por un momento más…

Le susurré al oído, mientras lo abrazaba con mas fuerza, de manera que no pudiera alejarse de mi. Si tan sólo pudiéramos estar así para siempre, si tan sólo no hubiera sido tan idiota como para lastimarte así, si tan sólo pudiera tenerte para siempre y no dejarte ir.

Pensaba todo eso, mientras veía a la nieve caer sin cesar, dándome cuenta de que ya no había marcha atrás, y que ya no tenía por que arrepentirme. Si había cometido un error en el pasado, aún podía remediarlo y lo haría, trabajaría y me esforzaría al máximo por ser la persona que lo mereciera, ya que estaba perdidamente enamorado de Makoto.

 

+ Fin +

 

Notas finales:

Wiiii,me encanto el final de esta historia *o*

Espero me disculpen por la demora,y ojala la espera halla valido la pena.

Pienso que Yuki y Makoto son una de las parejas mas tiernas del fic >w<

Bueno,la siguiente será la historia de Kyousuke y Hikari,así que si son fans del sexy guitarrista y de la "flamita sexy" no se la pueden perder. =P

Cierto,el fic ya tiene  blog y es: http://mahoneko.blogspot.com.Aquí ademas de publicar el fic también,estoy poniendo fichas tecnicas de los personajes,y ya hay dibujos de Yue y Akari,así que si pueden y gustan,pasen a verlo n.n

Nos vemos,y gracias a los que esten leyendo esto *o*


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).