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ANTOLOGIA NICKELBACK por Noctis Caelum

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Notas del fanfic:

!!!!!!!!!!!ADORO ESTA BANDA!!!!!!!!!!!

Cada vez que escucho sus canciones el yaoi me viene a la mente jajaja en especial el sasunaru!!!!!!

Un día me vinieron muchas imagenes de esta adorable pareja.... asi que me dije "tengo que hacer un fic" y pues bien aca esta! le puse "Antologia" porq creo que no sera la unica cancion de este grupo que haga.... esq todas son como escritas para un sasunaru jajajaja bueno eso o es que mi trauma ya es grave ^^u

Igualmente, hare cortos de otras series o parejas siempre usando las canciones de la banda :)

ENJOY!

Notas del capitulo:

Bueno, los fics nacen con la finalidad de autocomplacernos y hacer que las historias giren con el rumbo que nosotras queremos (que la mayoria de veces es el mejor jajajaja)

Asi que este fic nace de esa necesidad, seria tan genial que este idiota testarudo de pelos de escoba abriera los ojos y viera lo que en verdad importa *w* se que es muy improbable XD pero los sueños son los ultimos que mueren!!!! jajajajaja

Para las que no conozcan esta cancion..... les dejo el link para que de ser posible la escuchen primero y despues lean el fic ^,^

http://www.youtube.com/watch?v=j4y-RzVGrHg

 

 

Far Away

SasuNaru

 

En este tiempo, en este lugar

Malos entendidos, errores…

 

La nieve caía suavemente sobre los techos de Konoha. Todos los habitantes dormían apacibles en sus cálidos hogares. La aldea había recobrado su paz y tranquilidad luego de meses de incontables muertes y peleas sin razón. A los aldeanos les había costado asimilar la idea del regreso de "esa" persona, pero Naruto se había encargado de convencer a las personas de que él había cambiado, y que como todo ser humano merecía una segunda oportunidad, pidiéndoles como un favor personal que lo aceptaran de nuevo en la aldea. A decir verdad el rubio había salvado la aldea de su destrucción total, estaban en deuda con él.

Se despertó a mitad de la noche sintiendo como el aire le faltaba, como si alguien se lo quitara. Abrió los ojos todavía con ese temor recorriéndole la piel, encontrándose con una inmensa oscuridad. Su visión era todavía borrosa, vio a su alrededor para asegurarse que aun seguía en su cuarto, su respiración era agitada, su piel estaba fría, pero el sabia que aquello no tenía nada que ver con el clima. Al parecer todavía sus viejos demonios lo acechaban. Veía fijamente aquel techo, tratando de calmarse, tratando de hacer que su cuerpo dejara de temblar.

Su frente estaba empapada de pequeñas gotas de sudor. Intento levantarse. Sintió como algo cálido rodeaba su pecho, levanto su brazo y toco una piel, esa piel que ahora conocía muy bien, esa piel tan blanca y suave que lo había enloquecido y embriagado ya tantas veces atrás, tomo el brazo y deposito un tierno beso en la palma de aquella mano para luego dejarla a un lado suyo con el mayor de los cuidados.

Lentamente se sentó en la cama, seco son el dorso de su mano los rastros fríos de sudor de su frente. Comenzó a ver aquellos objetos que desde hace dos meses eran familiares a su alrededor. Aquel pequeño cuarto les había servido de refugio desde que el había regresado a la aldea. Su casa estaba deteriorada y le traía malos recuerdos y bueno Naruto inmediatamente le había ofrecido que se quedara con él.

Veía aquella mesita de noche, el ropero, su mochila sobre el suelo, aquel símbolo en blanco y rojo que eran su orgullo en su camisa blanca junto a una chaqueta naranja tiradas junto a la puerta.  Su mirada se enfoco en un punto, era algo que lo regreso a la realidad e hizo que se sintiera en casa y el frio de su cuerpo se apaciguara. Vio sobre uno de los muebles, una foto. Esa foto que le traía tan buenos recuerdos de dos niños que se odiaban y que lo mostraban en aquella imagen. Una sonrisa se grabo en su rostro al recordar esa ocasión.

Muy largo, muy tarde

¿Quién era yo para hacerte esperar?...

La navidad se acercaba, pero el ya había recibido el mejor regalo de todos. Un regalo que no cambiaría por nada. Sus ojos siguieron recorriendo aquel cuarto, viendo como su ropa había quedado regada por aquel frío suelo, el recuerdo hizo que se sonrojara un poco al recordar cómo había llegado hasta ahí. Se encontraba sin camisa, pero el frio que momentos atrás lo había atormentado, ya lo había abandonado. Paso su mano sobre su negro cabello para acomodarlo un poco y no le llegara a los ojos, pero este siendo rebelde regreso a su lugar, dando un pequeño suspiro no le dio importancia.

Sin hacer mucho movimientos salió de la cama, no quería despertarlo. Camino sigilosamente por aquel frio suelo de madera. Tomo los primeros pantalones que encontró y se los puso. Afortunadamente eran suyos porque le quedaban del largo exacto, los acomodos justos bajo su ombligo, quería sentirse cómodo así que no se puso ninguna camisa. Estiro un poco sus brazos, haciendo que sus músculos se tensaran para luego relajarse nuevamente. Revolvió su cabello negro y se dirigió a la mesita junto a la ventana por un poco de agua. Mientras vertía aquel traslucido líquido veía como las calles de Konoha lentamente se llenaban de blanca nieve. Tomo el vaso y se acomodo en el marco de aquella pequeña ventana.

El pequeño cuarto de Naruto estaba en una segunda planta, así que desde esa posición tenía una hermosa vista de la aldea. Vio algo que le llamo la atención. Unas sombras se movían por las calles, se ocultaban tras el tronco de un frondoso árbol. Eran dos chicos de unos 10 años que al parecer se había escabullido de sus casas para encontrarse a solas. Sasuke veía con curiosidad a aquella pareja que se necesitaban tanto el uno al otro -Si tan solo yo hubiera sido de esa manera- jamás terminaría de arrepentirse por sus errores y el que más le dolía de todos era el haber lastimado tanto a Naruto.

Le dolía el pecho solo de recordar aquellos momentos donde lo había lastimado. Recostó su cabeza sobre el amplio marco de madera. Giro su rostro y vio a su ángel dormido. Ese ángel que lo había rescatado del mismo infierno. Se preguntaba si se merecía tenerlo junto a él. Se preguntaba si su infeliz vida valía tanto la pena. Veía detenidamente aquel cabello rubio cubierto por la oscuridad de la noche

Solo una oportunidad

Solo un aliento

Solo en caso de que quede solo uno…

-¿Por qué desperdicie tanto nuestro tiempo juntos?- estrujo el pequeño baso de vidrio entre sus manos

 

Porque tú sabes

Tú sabes, tú sabes…

 

Naruto le había dicho que dejara todo atrás y comenzaran una nueva vida juntos y así recuperar el tiempo que se les había ido de las manos. Pero él no se lo podía perdonar, cada noche las pesadillas lo atormentaban. Todas las decisiones que había tomado le habían traído graves consecuencias todas menos las de hacer lazos con su pequeño zorro. Ahora que lo tenía con él, era como si el oxigeno por fin llegara a sus pulmones.

Su mirada azabache no se separaba de aquella hermosa visión de su bello durmiente. Durante ese poco tiempo juntos se fue acostumbrando a nuevas sensaciones, felicidad, ternura, deseo, pasión, habían tantas cosas que el rubio le provocaban, como lo hacían ahora. Su cuerpo había comenzado a asimilar esa presión que ejercía su corazón cada vez que veía a su pequeño zorro. El sonido ensordecedor del palpitar de aquel corazón que pensaba estaba sin vida para amar nuevamente. Lo veía dormido e indefenso dejando mostrar sutilmente su espalda y una de sus piernas.

Se preguntaba como había podido vivir tanto sin poder tocar aquella piel, sin besar aquellos labios y sin escuchar aquella vos tan sensual cuando pronunciaba su nombre.

Cerró los ojos y recordó todos los momentos en que ese pequeño cuerpo se había contorsionado de placer bajo sus brazos. Las veces en que aquellas manos se habían extendido frente a él para ayudarlo a levantarse cuando habia estado derrotado. Recordó el cálido rose de sus labios al momento de besarse.

Se preguntaba como había podido vivir tanto tiempo sin poder amar a Naruto...

 

Que te amo

Te he amado por todo este tiempo

Te extraño

He estado muy lejos por mucho tiempo

Sigo soñando que estarás con migo

Y que nunca te iras

Dejare de respirar si

Ya no logro verte nunca más.

 

Abrió sus ojos, el deseo nacía nuevamente, solo habían pasado unos cuantos minutos y ya tenía la necesidad de él. Lo tenía tan cerca, pero sentía en su piel que si no lo tocaba pronto este sueño se acabaría y regresaría a su pesadilla eterna. Dejo el vaso sobre aquel marco de madera y comenzó a caminar hacia aquella bella imagen.

Se sentó suavemente sobre la cama. Su pulso comenzaba a acelerarse y los nervios comenzaban a surgir. Siempre tenía cierto temor de arruinar "esto" que le estaba pasando, así como había arruinado todo lo demás en su vida. Alzo su mano para tocarlo. Se sentía ridículo en aquella situación, su mano estaba temblando. Con esa mano había hecho infinidad de atrocidades sin ni siquiera bacilar y ahora... temblaba. Pero es que no quería perderlo, eso sería como morir en vida para él. Estaría dispuesto a soportar mil infiernos antes de perderlo nuevamente. Era demasiado preciado, demasiado valioso…

 

Sobre mis  rodillas, ahora pido

Una última oportunidad para un último baile

 

Sus ojos estaban cerrados, habia girado y ahora era su pecho el descubierto. Su cabello le caía desordenado sobre el rostro. Le acomodo algunos cuantos, rozando suavemente aquella rosada mejía. Una de sus manos estaba sobre su pecho, la tomo entre las suyas. La levanto suavemente y dejo otro suave beso sobre ella, cerró sus ojos y atrayendola hacia su frente, decía en un susurro…

–No sabes cuánto te agradezco que jamás me olvidaras. Eres el ángel que me salvo del infierno en el que estaba. No sabes cuánto te amo. Daría lo que fuera por hacerte olvidar todos los malos momentos que te hice pasar. Sé que es mi última oportunidad, te prometo que jamás me alejare de ti nuevamente, solo espero que tu nunca te vayas de mi lado…- su voz comenzaba a sonar entrecortada

 

Porque contigo, soportaría

Todo un infierno para sostener tu mano…

 

-Crees que me iría de tu lado ahora que por fin te tengo junto a mí…. Sasuke-

 

Lo daría todo

Lo daría por nosotros

Daría todo pero no me daría por vencido…

 

Sintió como una suave mano se posaba en su rostro. Le transmitía tanta calidez. Ladeo su rostro para acercarse más a aquella sensación. Solo con escuchar aquella vos todos sus temores disminuían. Abrió los ojos para encontrarse con aquellos brillantes zafiros que lo veían fijamente. Se ruborizo un poco, todavía no se acostumbraba a aquel sentimiento. Sus labios se abrieron, iba a decirle algo a su rubio pero un dedo cubrió sus labios…

 

Tan lejos

Has estado tan lejos por mucho tiempo…

 

Cuantas veces debo decirte que dejes de atormentarte con todo esto. Estas junto a mí ahora y es todo lo que nos debe de importar. Hemos pasado todas nuestras pruebas y al final nuestro amor fue el vencedor.

 

Quiero que te quedes

Porque te necesito

Quiero escucharte decir

Que me amas

Que me has amado por desde hace mucho…

 

Se sentó y acerco al rostro del pelinegro.  Lo tomo entre sus manos y acerco su frente a la de él.  Sus respiraciones se mezclaban entre los susurros de Naruto…

-Sabes que pasaría una y otra vez por todo nuestro dolor solo para poder vivir "esto" que estamos sintiendo en estos momentos. Eres lo más importante en mi vida, siempre lo has sido. Por ti me he hecho más fuerte solo para poder alcanzarte y traerte de regreso a mi lado. Te amo tanto. Por favor no me dejes solo nuevamente, que esa sería mi verdadera muerte. Yo nunca te dejare. Cuando sientas que caes yo te levantare, yo seré esa luz que necesitas para salir de la oscuridad, si solo me das una oportunidad- acerco sus labios para besarlo dulcemente mientras una lagrima rodaba por su mejía encontrándose con la otra que se había deslizado hace mucho por la del azabache

 

Te perdono

Por estar ausente por tanto tiempo

Así que no dejes de respirar

Créelo…

 

El azabache lo estrecho entre sus brazos y susurro al oído –Eres lo más bello que he tenido en mi vida- lo recostó nuevamente sobre la cama y beso nuevamente. Las manos del rubio subían y bajaban por la firme espalda del ojinegro, haciendo que este profundizara con pasión aquel beso.

 

Sostente a mí, nunca me sueltes

Mantente respirando

Porque yo nunca te dejare nuevamente

Créelo…

 

La nieve seguía cayendo en las calles de Konoha, mientras que dos jóvenes amantes consumaban su amor. Entrelazaron sus manos mientras Naruto mantenía un movimiento constante sobre las caderas de Sasuke. Las paredes de aquel pequeño cuarto eran inundados con sonidos llenos de deseo y pasión. Los movimientos eran suaves y constantes en un vaivén lleno de sensualidad que hacía que Sasuke se volviera loco.

Lo tumbo para quedar sobre el rubio, levanto una de sus piernas y la coloco sobre su hombro mientras comenzaba a embestirlo rápidamente y con fuerza. En aquellos momentos era cuando sentía que todo aquello era real. Que la persona que gemía bajo el era a única en su vida y que era tan real como él.

 

Sostente a mí, nunca me sueltes

Mantente respirando

 

Naruto se aferraba a las blancas sabanas de la cama mientras Sasuke lo penetraba, había disminuido la velocidad ya que sabía que a Naruto eso lo enloquecía –Mas… rapi..do- alcanzo a balbucear. Pero Sasuke quería que lo deseara mas, se acerco a él y arremetió con un beso agresivo y lleno de pasión. Naruto se aferro a su cuello y lo mordió en señal de protesta y le dijo al oído –Te amo, Sasuke- eso era todo lo que necesitaba. Le encantaba escuchar su nombre en ese tono de sensualidad.

Bajo la pierna del rubio y tomo cada una con sus manos para complacer su petición, dándole embestidas rápidas y fuertes, sintiendo como recorrían por su cuerpo pequeñas descargas eléctricas llenas de placer. Bajo sus piernas y lo tomo por la cintura para levantarlo y dejarlo sobre su regazo y así podría tener al rubio frente a él. Rápidamente Naruto pasó sus brazos sobre sus hombros y atrapo sus labios en un beso. Sus respiraciones eran aceleradas, sus corazones latían al unísono, era como si se fusionaran para ser una sola persona. Sasuke aprovecho la cercanía del rubio y se acerco a su oído –Yo también te amo, Naruto-

 

Sostente a mí, nunca me sueltes

Mantente respirando

 

Muchas eran las cosas que les esperaban. Muchas habían sido las cosas que los había separado. Pero ahora había solo una que los unía, que les daba fuerza y que alimentaban día con día. Eso que le había dado la perseverancia a Naruto para seguir tras Sasuke. Eso que había logrado que la oscuridad del corazón de Sasuke se desvaneciera. Eso que podía hacer que una persona viajara al paraíso o al mismo infierno. Pero es por ese sentimiento que muchos pelean, mueren o sueñan. Es el sentimiento que muchos buscan pero nunca encuentran.

Ese es el sentimiento del ........... AMOR.           

Notas finales:

Bueno, eso ha sido todo ^.^

si bueno el final me salio algo cursi ¬¬ jajaja

espero que les haya gustado la cancion y el fic!

dejenme muchos comentarios jajaja todo sera bien recibido

bye bye!


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