Mi razón para vivir. por princesa tsunade

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Notas del fanfic:

Hola a todos, aqui les dejo mi segundo fic yuri. esta basado en un hecho real. espero que les guste y que me dejen sus reviews ;)

¿Alguna vez has sentido que no sirves para nada? Que todo lo que haces nadie lo ve y ni siquiera sabes porque lo haces o a donde te llevara. Cuando ya no crees ni el destino, ni en Dios ni siquiera en ti misma. Cuando te acuestas a dormir a la noche sola, totalmente sola y en la oscuridad de esa habitación te preguntas ¿Qué has hecho de tu vida? ¿Cómo llegaste al punto en el que deseas estar muerta?

Cierras tus ojos y le pides a Dios, que si en algún lado esta, no despiertes al otro día. Que al menos algo de fe te queda y no quieres terminar con este inmenso, profundo y desgarrador dolor porque sabes que eso te valdrá una eternidad de tormento.

Pero El no te escucha y es tan cruel, Dios, el destino, o la mismísima vida que ves que no te abandona y que tienes que levantarte y seguir el día a día, la insulsa y torturante vida cotidiana.

Te levantas sola. Estas completamente sola en la casa. Tus padres trabajan y no tienes hermanos, solo cuatro perros que te saludan por la ventana y te observaban como si sus ojos descifraran tu dolor. Sonríes, lastimosamente pero sonríes. Y les hablas.

Es increíble pero lo único que te saca el dolor son esas tres bellas e intuitivas perritas y ese celoso y guardián perrito que te cuida de todo. Sonríes porque al menos sientes que ellos te quieren de verdad y se preocupan honestamente por tu vida.

Miras la mesa y ves un pilón enorme de papeles. Si debes estudiar, una carrera que tú elegiste y que estabas decidida a seguirla pero que ahora solo tienes ganas de cortarte la venas y dejar que tus problemas fluyan junto con la sangre. Pero sigues siendo creyente, una pizca de fe esta en tu interior y sabes que si lo haces el tormento eterno te seguirá.

Además por más que difieras en algunos asuntos con tus padres los amas. Y sabes que si te quitas la vida, se las arruinaras a ellos. Porque eres su única hija. En quien depositaron su esperanza, sus sueños y su amor. Y tú serás tan egoísta que los dejaras solos.

Suspiras cansada una vez más. Esta enferma y extraña oscuridad llega arrastrándose persiguiéndote cada vez más. Y sientes como te alcanza y te hunde en un profundo océano. Sientes que algo, unas extrañas cadenas te atan y te precipitan más y más hacia abajo y tratas de soltarte pero… ya te has rendido.

Si, te has rendido a la depresión. Vives la vida cotidiana como si se tratara de la misma obra de teatro que actúas todos los días. Lo mismo de todos los días.

Estudios, la limpieza de la casa, dejar la comida lista.

Sonríes porque para los demás eres la hija perfecta. Tienes la casa impecable, a tus mascotas (que para ti son como tus hijos o mas porque son los únicos que logran arrancarte una sonrisa sincera) limpias y bien alimentadas. Haces el mandado y jamás, jamás en tu vida has causado problemas. No has ido a bailar, has estudiado durante toda tu vida como tus padres te han ordenado. ¿Fiestas? ¿Salidas? No hay manera, estabas y estas muy ocupada forjando tu futuro. ¿Novios? ¡Menos! Los pocos chicos que te han gustado te han roto el corazón, y al que te le declaraste dijo que prefería estudiar a tener una novia, y te llamo ¡molestia! Porque solo te interferirías en su futuro.

Se te rompió el corazón ese día, hace precisamente tres años, y lo cerraste, para siempre. Te volviste fría, frígida. Eres incapaz de sentir algo por alguien más. Solo te dedicas a estudiar. El golpe fue muy fuerte. Aprendiste de la forma más difícil a no dejar que las cosas se te vayan de las manos. Y así seguiste con tu vida, fría solo pensando en tu futuro y en tu carrera.

Pero un buen día te empezaste a hacer preguntas sobre tu vida “perfecta”. Maldita terapia que remueve cosas ocultas. Y entonces llegaste a esto. A una enorme y carcomedora depresión que te esta matando. Te preguntas ¿Qué estoy haciendo? ¿Cómo llegue a aquí? ¿Por qué estoy tan sola? ¿Por qué no soy feliz si estoy haciendo lo que planee? ¿Porque no soy feliz si todos me dicen que soy perfecta? ¿Qué pasara conmigo en unos años?

Tus padres también te ven triste y te fuerzan porque les cuentes. No dices nada. “Todo esta bien, es solo la presión de la universidad” les respondes. Pero ellos siguen insistiendo. Especialmente tu padre. Que no deja de decirte que la culpa es tuya porque no elegiste abogacía como El quería. Si, porque siendo abogada tenias el futuro asegurado. Y todo se tambalea cada vez mas, hasta sientes que el firmamento se te viene encima. Y esto no termina aquí porque tus padres quieren que termines una carrera de cinco años en dos. Y como puede ser que no trabajes. Y tu padre, talvez sin quererlo, te hiere cuando te llama parasito, inútil. Y tu sientes que te hundes mas en el océano y que gritas y gritas con todas tus fuerzas para que te ayuden, para que te salven pero nadie lo hace. No vales nada. No eres nadie. Y solo quieres morirte. Díganme ¿Cómo se hace para vivir una vida vacía? ¿Para repetir el mismo día una y otra vez? Cuando sientes que estas detenida en el tiempo y que nadie se da cuenta. Peor aun cuando sientes que tu espíritu esta frío y dormido en algún lugar congelado esperando a que alguien lo rescate.

Y fue entonces, cuando deseaba estar muerta, que tu apareciste. Yo no buscaba a nadie y te encontré. Si, de entre las miles de personas que conocí durante mis veinte años de vida tu eres la que realmente ilumino el océano oscuro el cual estoy atrapada. ¿Cómo? Te lo contare:

Primero y principal tu sonrisa es el combustible que hace que me mueva, camine, coma, etcétera.

Tus palabras, sin conocernos bien, escuchaste mis problemas y me animaste, me diste valor, me hiciste creer en mi misma. Bueno al menos me hiciste saber que no todo estaba perdido. Me diste consejos, ideas para poder valerme por mi misma.

Me convertí en masajista para poder pagarme mis estudios gracias a ti, porque me diste valor de hacer algo por fuera de mi carrera para cerrarles la boca a mis padres y pagarme yo misma mis estudios.

Pero mis padres me ¿prohibieron? Si, prohibieron trabajar, porque mi padre cree que dejare mis estudios por el trabajo.

Y otra vez la luz que tú me habías dado se empezó a desvanecer. Pero no importaba porque te veo tres veces por semana y cada día que te veo solo necesito que me saludes para volver a vivir.

Inconveniente que se presenta, mejor dicho que se presento ahora. Mi depresión avanza y siento que no valgo nada. Parece que la tristeza le gana a mi fe y siento que lo que tuve ganas de hacer este tiempo por fin tengo el valor para hacerlo. Sin embargo hay cosas que me detienen porque no son solo mis padres son los que me aman, mis amigas y amigos también me quieren mucho, mis tíos, primos, abuelos, tías, primas, mi querido y dulce ahijado. Y… también… estas tu. Que no se como llamarte porque eres mi amiga, te amo y a la vez eres mi esperanza, mi luz, mi todo.

Te veo una vez mas, después de ir a la psicóloga y callarme nuevamente mi deseo de suicidarme. ¿Me extrañarías si desaparezco? Tuve la tentación de preguntártelo pero me tomarías por loca. Talvez lo este, el silencio tiene acción el mas cuerdo es el mas delirante. Sin embargo llego a ti y solo te abrazo. Notas mi tristeza y me abrazas muy fuerte. Siento tu calor invadir mi cuerpo. Siento tu luz nuevamente. Y una pequeña chispa de esperanza surge dentro mi congelada alma.

Te sientes cansada y me pides que te haga masajes. Te digo que si, de hecho, nunca puedo decirte que no a nada. Al terminar te pregunto “¿Qué tal estuvo?” Y me respondes: “Muy bien, tienes un don en esas manos que debes explotarlo”

¿Un don? ¿De verdad tengo un don? De la nada mis lagrimas comenzaron a salir, cuando nadie daba un centavo por mi, y cuando mi propio padre me llamaba inútil tu me dices que tengo un don. Te abrazo y te agradezco. Me correspondes el abrazo y me dices que es verdad. Que solo me dices la verdad. Pero si supieras todo lo que estoy sufriendo entenderías mis lagrimas. Porque lamentablemente yo no soy como tu. No soy fuerte, no soy rebelde, no soy feliz como tu. Tristemente no puedo decirte la verdad. No puedo decirte mis verdaderos sentimientos. Talvez huyas, y no soportare otra decepción. Menos en mi estado actual y menos ahora que eres mi luz entre tanta oscuridad.

Solo puedo decirte que eres mi luz, mi ángel, que eres la única que me levanto cuando nadie mas lo hizo. Que eres la única que ve mi tristeza cuando para los demás soy feliz. Me diste fe y esperanza porque creíste en mi cuando ni siquiera yo me creo. Me diste alas y me hiciste volar. Tocaste mi mano y pude tocar el cielo. Perdí mi fe, y tú me la regresaste.

Tú dijiste que no había estrella que no pudiera alcanzar. Y hoy puedo decir que mi mundo es un lugar mejor, gracias a ti.

Gracias por creer en mi cuando nadie mas lo hizo. Talvez exagero al decir que eres todo para mi. Que ahora al ver el tentador cuchillo sobre la mesa pienso que mi vida ya no esta tan vacía. Que ahora no es todo oscuridad sino que hay una luz brillante y fuerte que me protege. No estoy sola. Sino que te tengo a ti.

Casi se me acaba la fe, casi se me acaba la esperanza, casi me rendí pero te pensé a ti. Y aunque no lo creas me detuve. Detuve la locura que estuve a punto de hacer. Porque si muero, quiero hacerlo en tus brazos. Pero si lo hago se que te entristecerías. Por eso de ahora en mas mi vida ya no esta vacía. Sino que de ahora en mas mi razón para vivir… eres tu, y solo tu.

Gracias. Muchas gracias.

Notas finales:
¿que les parecio? se aceptan todo tipo de criticas ;) jajaja. De verdad espero que les haya gustado.

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