Fue un momento realmente perturbador, porque, no lo se…
-que pasa?- dijo un chico de cabellos largos y azulados agitado mirándolo desde la cama –ya te cansaste?- mordió sus labios con desprecio mientras se reincorporaba sobre la cama –estas satisfecho con esta abominación-
Realmente… porque será…
Solo lo pensé y un segundo después estaba encima de el.
-Haces esto con todos?- dijo con un tono elevado el chico sobre la cama –te divierte ver a la gente así?, pensé que yo era una persona despreciable- lo mira fijamente el chico de cabellos azules –pero…- suspira aliviado –me alegra saber que existen personas peores que yo-
Esa sensación, mis dedos acariciando su espalda, mis labios besando su cuerpo, sigue en mi mente.
-Piensas quedarte como estúpido sin decir nada- finalmente el peli azul sobre la cama exploto, recogió su ropa del suelo y comenzó a ponérsela –quiero ver la cara que pondrá Sawada Tsunayoshi cuando le diga lo que me hiciste- sonrío lascivamente el chico.
-Tsunayoshi-kun…- Murmuro un chico de cabellos blancos y un tatuaje en forma de una pequeña corona invertida sobre su mejilla izquierda -te gusta?- se giro para mirar la expresión del otro chico.
-jum…- sonrio –kufufufu~ que? Vas a decirme que estas celoso?- lo miro divertido.
-Mukuro-kun- dijo su nombre tranquilamente mientras se acercaba al chico de cabellos azules el menor no pudo mas que retroceder unos pasos porque estaba un poco asustado.
-no deberías decir eso cuando tu y yo acabamos de hacer el amor no lo crees?-sonrió sínicamente y levanto la barbilla del peli azul con una de sus manos tratando de besarlo.
-déjame!!!- lo golpeo Mukuro con su mano –no me toques!!!- dijo con una mirada de odio sobre sus ojos –tu y yo- lo señalo –lo que acabamos de hacer no fue mas que follar-
Porque será que…
Su cara enojada me excito.
-Follar?- sonrió el peli blanco –el único follado aquí fuiste tu y yo recuerdo que gemías por el placer que sentiste- Mukuro se sonrojo.
-estúpido!!!- intento golpear al chico de cabello blanco y luego dijo en un tono divertido –oh!!! Que dirían los subordinados si supieran que el gran Byakuran, no es más que un marica- el peli azul lo miro con más odio que antes cuando dijo estas ultimas palabras.
-y que si fuera marica- el peli blanco lo acorralo contra la puerta –eso no tiene nada que ver contigo oh si?- soplo aire entre el cuello y la oreja de Mukuro –aun si supieran lo que soy, esos inútiles no podrían conmigo- sonrió sádicamente.
El dijo no, muchas veces, pero aun así no pude detenerme, pensé que seria divertido si me burlaba un poco de el, pero el único perjudicado fui yo.
Mukuro lo empujo con todas sus fuerzas para zafarse, se acomodo bien su corbata y lo miro fijamente –jum… si piensas eso de tus subordinados, entonces no sirves para ser jefe del mundo- abrió la puerta de la habitación luego de colocarse sus guantes se giro para mirarlo –prefiero mil veces a Sawada Tsunayoshi- sonrió por ultima vez y se perdió entre los pasillos de aquella base.
-con que Tsunayoshi-kun eh?-
Fueron solo palabras saliendo de sus suaves labios, pero aquel nombre realmente me irrito.
-Sawada Tsunayoshi…- murmuro un peli azul recargado en una puerta.
-Mukuro!!!- grito el chico de cabellos naranjas al sentir el calor del fuerte abrazo que le dio el peli azul –realmente…- susurro –te prefiero mil veces a ti que a el- murmuro esto para si mismo tratando de convencerse de que aquel sentimiento que había sentido cuando el peli blanco lo acaricio no era amor.