Postrado sobre el suelo se hallaba su ultrajado cuerpo, inmovilizado y sangrante, la evidencia de la violación era más que evidente tanto exterior y interiormente, el no podía creer lo que podía haber sucedido, miro que de sus hermosos ojos azules corrían intensos ríos de lágrimas mientras su mente estaba estancada en el techo, sus labios apenas podían moverse y de estos salió un susurro de ayuda apenas oído antes de colapsar, la habitación se obscureció y con esto se fue su conciencia por completo, cuando el volvió a abrir los ojos de nuevo la luz del cuarto le cegó, ya era de día, intento levantarse pero con una mano en su hombro le retuvo, estaba preocupado pero al parecer a él no le importo voltear a verlo y fruncir el seño, era al último que parecía querer ver en ese momento.
Wata-que fue lo que paso,-interrogo, al parecer fingiendo calma-.
Dou-eres un insensible!!, sabes que me violaron y aun me haces que te lo repita!, -le grito mientras no podía evitar llorar con coraje asiendo que su herida se abriera al intentar ponerse de pie-.
Dou-calla!, no me refiero a eso!,-lo izo que volteara a verlo limpiando así sus lágrimas y terminar abrasándolo, mostrando por fin interés-.
Wata-no lo sé, tu lo viste..., me miraba en el espejo y era yo,...eso me ataco, -suspiro, cuestionándose que quizás el espectro de su reflejo lo había hecho-.
Dou-debemos preguntárselo a yuko, -le menciono de inmediato-.
Wata- esto es culpa tuya y suya, nunca me advirtió nada cuando nos pidió esa tarea, -recordó-.
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watanuki es un chico amable y muy enérgico, era de pocos amigos por su extraño carácter y ahora que ingresaba a la preparatoria no era un gran cambio, solo se concentraba en los estudios y sobrevivir por su cuenta, huérfano desde niño por lo que pensaba seriamente los pros y contras de sus actos pasando desapercibido, excesiva mente responsable, aunque solía ser muí explosivo, tenía una extraña habilidad que llevaba en su sangre, era muy bueno atrayendo espíritus, lo que le era imposible ser normal o siquiera aparentarlo, siempre teniéndoles atrás de él como el flautista de camerin”, esa tarde andaba de camino a casa, recién había hecho las compras pero no tenía ganas de cocinar, aun con el hambre que le reclamaba su estomago, suspiro para luego ser aludido por un gruñido, se quedo inmóvil un momento y rogó no fuera otro espíritu, no quería salir corriendo de nuevo, empezó a caminar esperando solo fuera un canino, mas no veía a ninguno y el sonido se dirigió a él sin rastro de pasos, siendo su alarma para comenzar a correr.
Las lámparas de las marquesinas le guiaron al parque, ahí el sonido se desvaneció, agitado tomo un respiro recargándose en el lumbral del poste de luz y enfoco con claridad el lugar, no tardo ni un minuto el percatarse bien de su posición cuando sintió como algo largo se deslizo por su pierna por debajo de su pantalón, alarmado comenzó a correr y gritar, pensando era una serpiente y que ahora se lo iba a despachar, intento sacarla de entre sus ropas casi sacándose los pantalones y así quitárselo de enzima pero esta pronto trepo a su cuello enroscándose en el, ahora lo ahorcaría pensó el ojiazul con terror, intento desesperadamente de desenroscarla de su cuello mientras esta soltaba una especie de chillido, que lo izo percibir que una serpiente no chillaría, no era una serpiente era otra cosa, posiblemente un espíritu, la soltó asiendo que la criatura volviera a enroscarse en su cuello rápidamente mas no apretándolo sino abrasándolo y ronroneando como un cachorro.
Yu-Ho baya,...con que aquí estas, gracias, -comento una mujer acercándose de entre las sombras-.
Wata-como?, porque, -soltó extrañado y a la defensiva-.
Yu-las gracias son por encontrar a mi zorro, -menciono la mujer, con kimono rojo-.
Wata-su zorro?, -menciono confundido, el no había visto algo semejante a un zorro a quilómetros, no sabía de que hablaba-.
Yu-claro, el que traes ahí, -menciono estirando la mano asiendo que de inmediato el animal volviera con ella-.
Wata-eso... no puede ser un zorro..., -balbuceo, ella no podía ser normal si también podía verlo, ella era pelinegra de cabello muy largo, de ojos en tono tinto y muy alta-.
Yu-piensa lo que quieras,....-le dio la espalda unos segundos y prosiguió,-ven con migo,..
Wata-oiga que dice, para qué!?, no puedo ir con usted, no la conozco, que tal es una secuestra dora o algo peor, huele a saque, no me diga, esta ebria!! –le gritaba aun algo asustado por estas asolas con ella-
Dou-calla, que dramático eres, -alzó otra voz, asiéndose notar el joven que venía con ella y guardaba silencio-.
Wata-quien te pregunto, idiota!!,-volvió a gritar pero ahora a su receptor que fingía no oírle tapándose los oídos-.
Yo-ya niños no a pelear,-ordeno sonriendo pícaramente-
Dou-para que me trajo aquí, -pregunto el ojidorado mirando al ojiazul y asiendo se una barrera con su brazo porque este intentaba desquitarse a golpes con él, intuyendo la mayor lo citó ahí por el otro chico-.
Wata-porque esa cosa me ataco!, -refiriéndose al zorro, ya que podía jurar lo había perseguido hasta ahí -.
Yu-el por qué del motivo de estar aquí no es relevante" le contesto al moreno para proseguir- el no te estaba atacando, solo te buscaba,-le aclaro al ojiazul-.
Wata-esa cosa dio un susto de muerte!, y como que me buscaba, porque?!!, yo no soy una presa!!... -volvió a exasperarse, no le entendía nada y era obvio era alguien de cuidado-.
Yu-te buscaba por tu habilidad, -por fin empezó a hablar claro-.
Dou-que habilidad..., -soltó algo extrañado por como el ojiazul discutía por un animal que no se veía por ningún lado-.
YU-es cierto doumeki, tu no los puedes ver, en cambio tu si,-señalo watanuki al notar su confusión-.
Wata-espere, entonces ese si es un espíritu?, -analizo, para caer en la cuenta de que nunca ella menciono ese punto-.
Yu-claro, como te dije tenemos que irnos, -comenzó a caminar seguida por doumeki de cerca que parecía no estar sorprendido por lo recién mencionado-.
Wata-esperen pero yo ni les conozco!!, como se que son de fiar!!-nuevamente objeto-.
Yu-ya basta watanuki, no seas un niño,-sonrió, sin siquiera voltear a verle-.
Wata-como sabe mi nombre~ ,-se sorprendió, deteniendo su andar, acaso ella era una bruja se pregunto-.
Yu-lo dice tu maletín,...-lo señalo riendo divertida ante su expresión de sorpresa-.
Wata-haaa!! Yo creía que era adivina!!, porque me asusta!, -grito molesto, cuando por fin se veía seria sale con esas cosas, seguro estaba jugándole una broma una ebria-.
Dou-ruidoso,...-enfatizo y tapo sus oídos pensando que tendría que soportarlo todo el camino-.
Wata -y a ti quien te hablo grandísimo bobo!!,-le reclamo mientras lo veía irse tras yuko tapándose los oídos ignorándolo nuevamente, no tenía ni la más mínima intensión de seguirla pero el zorro volvió a abrasarlo y lo jalo a la fuerza mientras le daba chibis besos zorrunos que le asían cosquillas-.
Continuara.....
