Gané!- Dijo Un pelirrojo con tono triunfante-Ahora harás Todo lo que te diga por este mes, Yuu
Tsk Maldito Conejo Tramposo –decía un pelinegro por demás enfadado.
Lo Primero Que harás...Mmmm… Dime Yuu ¿Qué es lo que más odias?
...- Solo Se Limitó A lanzarle una mirada asesina
Ahh! ¡Ya Lo Tengo!... Quiero Que Salgas Con El Moyashi -dijo tratando de aguantarse la risa.
¿Qué Te Hace Pensar Que Ese Enano Querría Salir conmigo?-
Mmmm no lo sé, además aunque te rechace será divertido verte declarándote
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Entró a su habitación gruñendo por lo bajo azotando fuertemente la puerta.
¡No podía creer que había perdido contra ese Conejo! Se Maldecía A Sí Mismo por haber aceptado su estúpida apuesta. Lo peor era que tendría que declararse al Moyashi, era el chico que más detestaba en el mundo, lo odiaba, su cortesía su amabilidad esa estúpida necesidad de querer proteger a todos y lo que más odiaba de él era esa estúpida sonrisa por demás falsa ya que no quería que nadie se preocupara por él, lo sabía siempre lo había notado como el menor fingía estar bien cuando se encontraba peor que todos’. Respiro pesadamente para luego volver a salir, debía hacerlo esta noche y Lavi lo estaría vigilando.
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Estaba devorando su exagerada ración de comida Cuando de pronto noto a cierto pelinegro sentarse junto a él.
Eh?.... ¿Pasa algo? -preguntó ante la extraña presencia, era la primera vez que Kanda se sentaba Junto a él sin que Leenalie se lo pidiera.
Necesito Hablar contigo-dijo con tono serio-Acompáñame.
Solo Se Limitó a Seguirlo hasta que llegaron a la biblioteca.
Lavi ya le había señalado donde debía llevarlo y que hacer ya que era la primera vez que se le declaraba a alguien.
Que Pasa Kanda??
Moyashi Tu…tu, Me Gustas-dijo el azabache tratando de ocultar su mirada, ahora solo debía esperar que lo rechazase para poder largarse a entrenar.
¿Qué…que Dijiste?-había oído mal o Kanda ¿se le acababa de declarar?
Lo que oíste, tú me gustas-
Tú…también me gustas- murmuró el menor agachando su cabeza para ocultar su muy notorio sonrojo.
Eh? –no sabía que hacer estaba casi seguro de que lo rechazaría, levantó la vista y pudo ver a Lavi sobre Unos estantes observando la escena sin poder parar de reír ,le hizo un par de señas para que lo besara a lo que el pelinegro solo respondió con una mueca de desagrado, tomó la barbilla del menor para alzar su vista ‘esta será la peor cosa que abre echo en toda mi vida’ pensó para sí mismo antes de darle un pequeño beso en los labios que al poco tiempo comenzó a ser más apasionado, tomó por los hombros al menor y lo separó de sí bruscamente dejando perplejo al peliblanco ,volvió a mirar al menor quien estaba completamente sonrojado y con la respiración agitada y se alejó rápidamente saliendo del lugar.
Ka…Kanda?- murmuro al verlo salir
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Entró rápidamente a su habitación cerrando la puerta tras de sí, se recostó sobre su cama para luego delinear sus labios con las yemas de sus dedos ‘no entendía por qué pero aquel contacto le había gustado más de lo que quisiera reconocer’ Un leve sonido lo saco de sus pensamientos, alguien tocaba la puerta suavemente.
¿Quién es?- Preguntó secamente
Etoo…Soy yo, Allen - respondió con timidez ante el tono usado por el pelinegro.
Ya Pasa Moyashi- La puerta se abrió suavemente dejando ver al peliblanco, a quien miro con confusión ante su visita.
Eh… quería saber si te encontrabas bien- le hizo una seña para que se acercarse sin moverse de su lugar, el chico lo obedeció y se sentó junto a él.
Deberías Preocuparte Más Por ti mismo- se movió de su lugar para luego acomodarse en el regazo del menor quien solo lo miraba detenidamente, tomó entre sus dedos los cabellos del azabache, luego de unos minutos volvió a oírle hablar.
No deberías estar conmigo-
¿A qué te refieres?
No soy una buena compañía ni siquiera podré darte lo que quieras- Sonrió Levemente ante lo dicho por el mayor.
Eso no me importa, solo con estar contigo soy feliz – esa sonrisa parecía tan sincera que le hacía replantearse lo que estaba haciendo, ¿De verdad quería jugar así con los sentimientos de aquel chico? cerró sus ojos suavemente dejando atrás sus pensamientos no sabía por qué pero le parecía grato estar de esa manera, estaba a punto de dormirse cuando un leve roce en sus labios lo había sacado de su letargo, aquel chico le estaba besando, era un beso suave y levemente dulce –¿Por qué aquellos labios le parecían tan irresistibles? ¿Por qué cada vez que los rozaba sentía que lo que hacía estaba mal? - trató de profundizar aquel beso pero fue interrumpido por una voz del exterior.
Yuu, ¿Estás ahí? Ábreme la puerta necesito hablar contigo- no podía ser otra persona más que Lavi – frunció el ceño ante la intromisión.
Lárgate no tenemos nada de qué hablar-
Ohh ¡Claro que sí! Y lo sabes, solo ábreme de una vez –
….-
Bueno Si quieres puedo gritar lo que te tengo que decir, ¿eso te gustaría?-
Lo siento debo irme – pronunció besando la mejilla del menor -¿eh? ¡Qué había dicho el jamás hablaría de esa manera! ¿Acaso pasar tiempo con ese enano ya le estaba afectando?- Abrió la puerta y le lanzó una mirada asesina al pelirrojo.
Vamos a otro lugar aquí no podemos hablar-
Está bien- dijo siguiendo al pelinegro.
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Aún se encontraba en aquella oscura habitación jamás había entrado en ella, todo le parecía tan solitario, tomó el abrigo del azabache acercándolo a su cuerpo para aspirar su aroma, todo le parecía un sueño Kanda había dicho que le gustaba nunca pensó que el pelinegro se fijaría en él, siempre había pensado que lo odiaba, por su fría actitud con él. Se recostó suavemente sobre la cama aún sin separarse de aquella prenda, así se quedó unos minutos observando un extraño reloj de arena que contenía una flor de lotto, al poco tiempo fue vencido por el sueño.
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Vaya Yuu Parece que no resultó como querías, yo tampoco me hubiese imaginado que al Moyashi le gustaras- dijo entre carcajadas.
………..-
¿Vamos Yuu acaso no te divierte saber que le gustas a la persona que más odias?
No me parece gracioso jugar con los sentimientos de otras personas- dijo con un semblante serio
Cualquiera pensaría que te interesas por el-
Es solo que odio estar cerca de ese enano, además no tengo interés en salir con un idiota- sentía que se estaba mintiendo así mismo, en realidad tal vez nunca lo odio, tal vez el estar siempre peleándose era la única forma que tenía para estar cerca de él .
Y ¿qué hay de mí?
¿A qué te refieres?
¿Saldrías conmigo?
Prefiero al Moyashi
Quiero que me des un beso-
¿Por qué lo haría?
Debes hacer lo que yo te diga durante todo el mes- dijo con tono arrogante.
¿No te vasta con lo del enano?
¡Pues, no! – dijo acercándose al pelinegro quedando a centímetros de su boca.
¡Eres un maldito! – El pelirrojo lo beso apasionadamente, se sentía asqueroso, no era para nada como el beso de Allen, hasta sentía náuseas- se separó rápidamente y limpio su boca con el dorso de su mano.
Si eso era todo lo que querías, tengo que irme- dijo con tono serio saliendo del lugar dejando a un furioso pelirrojo.
Entró a su habitación y vio al peliblanco completamente dormido sobre su cama con su abrigo entre los brazos ¿acaso lo estuvo esperando todo ese tiempo?