LA FUERZA DEL AMOR
El amor es la fortaleza para luchar en momento de adversidad.
Los humanos somos seres que al transcurso de nuestras vidas pasamos por momentos buenos que nos hacen sonreír y malos que nos han hecho llorar y sufrir, estos momentos malos son aquellos que nos hacen fuertes y conseguir la fuerza para seguir adelante.
Para todo shinobi su sueño es siempre llegara convertirse en Hokage, para llegar a tal meta se debe recorrer un largo camino lleno de barreras que solo el más valiente pudo superarlas ese es Naruto Uzumaki.
Una de las barreras más difícil que tuvo que vencer nuestro Hokage fue la Cuarta Guerra Ninja, una guerra tan grande y poderosa que llevo consigo la vida de muchos buenos shinobis, entre ellos sus grandes amigos.
La guerra estaba en su máximo nivel la alianza Shinobi había caído el único que quedaba de pie era Naruto, el rubio se negaba a perder sin importar que el mismísimo Kyubi no podía apoyarlo más y su chakra estaba el límite se mantenía en pie de lucha.
─ Llego tu fin Naruto. —Expreso lleno de maldad Obito al tener frente a sus ojos la oportunidad que reunir a los nueve bijun.
─ Nunca. —Respiraba agitado– No me voy a rendir ¡Escucharon!
─ Los tontos como él siempre mueren. —Hablo con desprecio mientras su ataque iba dirigido contra Naruto– ¡Muere!
El ataque final iba contra él, sabía que no podía defenderse que sus sueños terminaban en ese momento y sin poder traer de regreso a Sasuke.
─ Sasuke. —Susurro esperando el ataque.
Sentía como la vida era irónica tras todos los problemas que le había causado el pelinegro el único que venía en sus mente en esos momentos era él.
─ Sasuke te…. ¡¿Pero qué?! ¡¿Susano’o?! —Grito asombrado al sentirse rodeado por aquella energía color morado que poco a poco se iba aclarando– Sasuke…
─ Dime Dobe ¿Ya te diste por vencido? —Hablaba Sasuke parado frente a él– ¡¿Responde?! ¡AHHH! —Elevaba su poder para proteger a Naruto y a él mismo del ataque.
Por su parte Obito y Madara veían asombrado la intervención y traición de Sasuke en esos momentos.
─ Maldito Sasuke tuve que matarlo junto a todos desde un inicio. —Expreso con molestia Obito.
─ Tranquilo lo mataremos junto a su amiguito.
El ataque enemigo había terminado por el momento, Sasuke se mostraba cansado por la Susano’o utilizado, sus ojos sangraban haciendo caer de rodillas.
─ ¡Sasuke! —Naruto lo auxilio– ¿Por qué? ¿Por qué veniste?
─ Quise…divertirme…un poco. —Respondía jadeante– Con…mis nuevos amigos.
─ ¿Amigos? —Mira atrás suyos a un grupo de personas cuatro muy conocidas por él– ¿Hokages?
─ Nada mal Uchiha. —Hablo Tobirama acercándose al pelinegro– Te recomiendo descansar ahora nos toca a los mayores jugar.
─Deja de molestarlo hermano. —Se acerca Hashirama– Sasu-chan descansa que nosotros nos encargamos. —Dirige su mirada al Uchiha mayor– ¡Madara amigo!
─ Cuando vas a dejar de comportarte como un crio. —Lo mira enojado su hermano– Él nunca te considero su amigo.
Los hermanos discutían frente a los jóvenes quienes los miraban asombrado en especial Naruto quien no entendía nada.
─ ¿Primer y Segundo Hokage? Sasuke ¿Qué significa esto? —Mira al moreno que reposa en su hombro.
─ Es una larga historia.
─ Que las historias queden para luego se preparan para un segundo ataque. —Interviene el Cuarto Hokage.
─ ¡Oto-san! —Naruto se asombra al verlo.
─ Hola hijo, descansa y cuida de Sasuke.
─ Senseis vamos a la batalla por favor. —Hiruzen en medio de ambos Hokages.
─ Vamos, quiero hablar con mi viejo amigo. —Se adelanta Hashirama
─ Por un demonio él no te quiere. —Vuelve a gritar Toriyama.
Desde lo más alto Madara miraba seriamente a su “viejo amigo” que se acercaba para detenerlo.
─ Hashirama es mío. —Se lanza a la batalla para detenerlo– Como siempre tú ototo cuidándote las espaldas.
─ Claro que no, no esta vez, esto es solo entre tú y yo.
La batalla entre los más grandes en la historia estaba frente a sus ojos, Naruto y Sasuke miraban todo asombrado y al mismo tiempo planeaban como derrotar a Obito.
─ Obito Uchiha. —Sasuke miraba interesado a su pariente al enterarse de la verdad.
─ Si fue compañero de Kakashi-sensei. ¿Qué haremos? —Mira interesado a su amigo.
─ Debemos acabar con él y esta guerra tonta. —Abre sus ojos mostrando su sharinga– Acabar con esta cadena de odio que mi familia ha tenido por tantos años.
─ Hagámoslo. —Pone su mano en el hombro del moreno– Juntos ganaremos.
─ Naruto gracias por todo. —Mira a Madara– No quiero terminar como Madara que teniendo un gran amigo nunca lo acepto y decidió vivir lleno de odio y soledad.
─ No estás solo, me tienes a mi, Sasuke antes que todo esto termine quiero que sepas que. —Queda en silencio– No quiero seguir siendo tu amigo.
─ ¿Qué? —Abre sus ojos llenos de asombro– Entiendo era de menos al final no soy una buena influencia. —Baja la mirada deprimido por perder a un gran amigo.
─ Porque. —Alza la mirada de Sasuke– Te quiero más que un amigo, Sasuke yo te amo, desde hace un tiempo me di cuenta que lo que sentía por ti iba más allá que una simple amistad.
─ Yo… —Estaba completamente asombrado ante las palabras del rubio.
─ No quiero una respuesta ahora. —Se levanta– Primero derrotemos a Obito y detengamos esta guerra.
─ ¡Naruto! —Lo llama antes que se aleje– Demostrare a mi familia que el amor nos hace fuertes no débiles. —Sonríe con un leve sonrojo.
─ Hai.
Naruto y Sasuke tenían en la mira a Obito quien se enfrentaba a Minato, su invocación había derrotada gracias al Segundo y Tercer Hokage, Hashirama tenía acorralado a Madara.
La guerra había tomado otro rumbo, el rasengan y el chidori estaban en sus manos, ambos corrían hombro con hombro hacia el moreno este último ataque definiría el futuro shinobi.
─ ¡Vamos Sasuke! —Mira al moreno quien le sonríe, observa como sus labios dicen algo – ¿Sasuke?
─ Naruto. —Se siente llamado girando su nombre hacia al moreno.
─ ¿Sasuke?
─ Naruto. —Volvía a llamarlo, no entendía que pasaba.
─ Dobe despierta
¿Despertar? ¿Acaso él?
Su mundo se volvía blanco llevándolo lejos de aquella guerra.
─ ¡Maldito Dobe abre los ojos ahora mismo! —Se sentía zarandeado de un lado a otro.
─ Hmm. —Abre sus ojos encontrándose con un par de ojos lleno de enojo– Sasuke. ¿Eres tú?
─ No, soy el Rey de Suna que te viene a visitar, Baka. —Expresa muy enojado.
─ ¿Eh? ¿Qué paso? —Lo mira algo adormitado.
─Eso pregunto yo ¿Qué hace el Hokage dormido?
En esos momentos recordó todo, la guerra había terminado hace tres años atrás, ese ataque combinado había funcionado aunque había dejado al Uchiha inconsciente por el cansancio, tras una larga lucha ante las naciones habían perdonado a Sasuke, y ahora era su mano derecha y guardián personal.
─ Supongo que me dio sueño, sabes estaba soñado con la Cuarta Guerra. —Comenta con una sonrisa.
─ ¿Cuarta guerra? ¡Acaso recordaste cuando le tomaste de la mano a esa Hyuga! —Grita enojado “celoso”.
Odiaba el día que a Kiba se le ocurrió molestarlo con cierta escena de la cuarta guerra que nadie podía olvidar, recordaba claramente como ese día su novio Sasuke se había enojado como nunca por solo hecho de pensar que SU novio andaba de manos con otra.
─ Sasuke. —Se acerca para abrazarlo por la espalda– Ya te dije que solo lo hice por pena, ya sabes por la muerte de Neji.
─ Si claro. —Responde ofendido– Lo más seguro has de querer que ella este a tu lado.
─ Claro que no. —Lo gira para mirarlo frente a frente– Para que quererla si tengo a ti.
─ Naruto. —Gira su rostro sonrojado– Termina rápido para volver a casa.
─ Claro.
Solo Naruto conocía como derrotar aquella postura de “soy el mejor” de su actual esposo, sabía cómo hacerlo sonrojar y hacerle sentir muy bien, con todos los ánimos de vuelta se apresuró a firmar documentos y entregar misiones bajo la atenta mirada de SU esposo, desde hace un año ambos eran ahora una pareja feliz y nadie en este mundo se metía en sus vidas.
─ ¡Termine! —Gritó emocionado.
─ Por fin. —Susurro Sasuke.
─ Sasu. —Se acerca a su esposo quien lo mira interrogante por la forma en que lo llamo– Vamos a casa, muero de hambre. —Susurra muy cerca del oído de su esposo.
─ Po…podemos pasar por un ramen. —Responde nervioso por su cercanía.
─ No tengo hambre de ramen. —Lame su oreja– Quiero leche mi neko.
─ Le…Leche… ¡Pervertido! —Se aleja sonrojado–
─ Vamos Sasuke. —Lo acorrala contra una pareja– Tú eliges. ¿La casa o mi escritorio? ¿Qué eliges?
─ Yo… —Siente como su esposo mete su mano dentro de su pantalón– Ahh…la…casa. —Susurra entre cortado por las caricias de la mano del rubio.
─ Buena elección. ¡Vamos! —Hace unos sellos con sus manos y aparecen en su habitación.
─ ¡Oye! —El rubio lo empuja hacia la cama acorralándolo en la misma– Dobe… —Gira su rostro sonrojado.
─ No me canso de decir lo hermoso que te vez en momentos como estos.
─ Cállate dobe y hazlo rápido. —Murmuro excitado ante la mirada de su esposo.
Sus caricias mutuas no se hicieron esperar, entre besos y gemidos se despojaron de sus ropas quedando como Dios los trajo al mundo, Naruto jugaba con entrada de Sasuke solo con sus dedos, mientras ese jueguito molestaba a Sasuke.
─ Ahh… Do…be…Quiero…ah…sentirte…Ahh… —Gemía ente el juego de su esposo.
─ Estas muy caliente. —Coloca su miembro en la entrada del Uchiha– Uhh que estrecho.
─ ¡Ahhh! —Clava sus uñas a la espalda de su esposo.
Sus embestidas iban en aumento tras los minutos que pasaban, sus labios se juntaban en un beso lleno de pasión.
─ Naru…ahh…me…ven…go. —Susurraba excitado Sasuke al oído del rubio.
─ Junto…
Unas cuantas embestidas bastaron para que ambos se vengan, Sasuke en medio de ambos y Naruto dentro de su esposo.
Tras una larga demostración de amor la pareja se encontraba abrazados uno al otro en la cama, dándose pequeños mimos.
─ Te amo. —Dijo Naruto mientras besaba la frente de su amado.
─ Yo a ti. —Respondió bajito pero lo suficiente para que escuche Naruto.
─ Aun me parece increíble. —Comenta calmadamente.
─ ¿Qué te parece increíble? —Lo mira de reojo curioso a su esposo.
─ Me parece increíble, después de tantos problemas al fin estamos en paz y felices. —Abraza más al pelinegro.
─ Quien lo diría, yo quien nadie le quería.
─ Eso es mentira. —Lo mira– Yo siempre te quise solo que tú no aceptabas este amor.
─ Fui un tonto. —Se acurruca en los brazos de su esposo– Pero no más.
─ Nunca más nos volverán a separar.
─ Te amo Naruto.
─ Eso fue lo que me dijiste aquella vez. —Lo mira.
─ ¿Eh? ¿Cuándo?
─ Antes de acabar con Obito me susurraste algo. —Esas palabras hacen sonrojar al Uchiha.
─ Duérmete, tengo sueño. —Oculta su rostro en el pecho de su esposo.
─ Yo también te amo Sasuke. —Sonríe al sentir un beso en su frente.
─ Dobe….
La guerra termino y con ella dio apertura en nuevas oportunidad para ser felices, Naruto y Sasuke no desperdiciaron esa oportunidad de demostrar al mundo que los Uchiha son un clan lleno de amor, capaz de romper todo tipo de barreras, gracias a la fuerza del amor.
FIN
NARUSASU