Mi vida era de lo más sencilla del mundo, tenía todo lo que quería solo se lo pedía a mis padre y ellos me lo daban nunca me han negado nada, soy el niño consentido de la familia Kwon siendo hijo único mis padres me consentían. Estoy en la mejor escuela de Corea era mi último año ya iba a pasar a la Universidad, aunque no lo necesitaba para que estudiar si tu familia es una de las más ricas del todo Seúl, no le veía en caso.
-Ji
-¿Qué quieres Tae?
-Uy ¿Estás de mal genio?, bueno eso ya no es nuevo en ti.
-Ash es que mi appa quiere que me valla a estudiar a la Universidad de Corea.
-¿Y por eso estás enojado? ¿Sabes cuantos quieren entrar en esa escuela y tú todavía te haces el digno?
-Tú lo has dicho otros no yo
-Ay Ji creo que tus señores padres te han consentido demasiado.
-¡¡Cállate Tae!! Y si así fuera me lo merezco ¿no?
-Como digas Ji o mejor te digo Sir Ji
-Si eso suena más con clase.
-Hay amigo creo que te hemos perdido.
-Bueno, tengo el dinero como para comprarle la sonrisa a cualquier pelagatos que está en esta escuela, así que ¿Por qué no creerme un Sir?
-Como tú digas Ji, ¿Por cierto ya te enteraste que entro un chico nuevo?
-Otro pelagatos más, por dios la escuela debería de dejar entrar a solo personas con clase social alta.
-Ni siquiera sabemos si es pobre o rico Ji
-Estoy seguro que es un muerto de hambre como muchos aquí.
-Bueno eso solo lo sabremos, cuando lo conozcamos, creo que estará en nuestra clase.
-Valla más lame botas, en fin veamos quien es.
-Está bien.
Nos dirigimos a nuestro salón para ver quién era el siguiente pelagatos que había entrado a la escuela. Llegamos y ahí estaba era un chico no tan guapo, sonreía mucho cosa que me dio risa, tenía el cabello rubio y se ve que para ser el primer día de clases ya había hecho amistad.
-Hola ¿Así que tú eres el nuevo?
-Si mucho gusto, me llamo Dae.- dijo extendiéndome una mano.
-¿Eres rico?
-No, no lo soy.
-Entonces aléjate de mí, ¿No sabes quién soy yo verdad?
-No, la verdad no.
-¡¡ENTONCES DIGANLE QUIEN SOY YO!!- me dirigí a los que se encontraban.
-Es JiYong el chico más rico de toda la escuela. El que puede comprarnos la risa a cada uno de nosotros.- decían en coro los demás.
-Así es y bueno como no eres rico mantente alejado de mí.
-Está bien.- me decía
Tome mi asiento y comenzó las clases, el día se fue rápido gracias por eso la verdad es que odiaba estar ahí, en esa escuela el único que toleraba era a Tae y eso porque es hijo del socio de mi appa pero si no, ya hubiera mandado a la goma este mugroso colegio, en donde dejan entrar a cualquier tipejo.
Por fin sonó la campana.
-Ya era hora.- decía
-Jajaja ay Ji, y bueno ¿iremos a tu casa verdad?
-Obviooo
-Ok.
Salimos de clases y vimos que el nuevo iba caminando hacia un tipejo que estaba del otro lado de la calle.
-¿Sera su novio?- le pregunte a Tae
-¿Quién?
-El nuevo míralo, esta con ese tipo de moto, ven vamos a divertirnos un poco.
-No Ji vámonos, que te importa si tiene novio.
-Ven quiero divertirme un poco.- le decía mientras avanzaba hacia ellos.
-¿Pero valla el nuevo tiene novio?- les dije haciendo que voltearan, cuando vi que el de la moto se quitaba el casco, pude notar que era un chico bastante guapo tenía el cabello negro y le cubría un ojo, pero me impresiono esa mirada tan hipnotizante que tenía ¿Qué me está ocurriendo?
-Ji, ya vámonos.- oí a Tae y sentí sus manos jalando mi brazo para irnos.
-Ay Tae que tiene de malo conocer al novio del nuevo.- le decía.
-No…no es mi novio.- dijo Dae.
-¿Por qué lo niegas?
-¿Y si fuera su novio tiene algo de malo?- escuche decir a pelinegro su voz, esa voz era fascinante, tenía una voz tan gruesa que hacía que mi piel se pusiera de gallina.
-No para nada, digo un gato como Dae ¿Qué se podía esperar? Obvio un gato como novio.
-Ji vámonos, el… él no está hablando en serio.- decía Tae disculpándose.
-Claro que estoy hablando en serio.
-Déjalo quiero escuchar lo que dice.- escuche como el pelinegro le respondía a Tae.
-Lo vez Tae hasta ellos saben que lo son.- le decía mostrando una sonrisa burlona.
- Y ¿Qué somos unos gatos?- me decía
-Obvioo.
-¿Y tú quién eres?- me preguntaba el pelinegro.
-Yo soy JiYong y puedo comprarte la risa con mi dinero.
-¿En serio?
-Claro ¿Cuánto quieres por la tuya?- le dije, el solo se burló lo que me hizo enojarme nadie se burlaba de mí y menos ese don nadie con motocicleta.
-¡¡Dime cuanto quieres por tu insignificante sonrisa!!
En ese momento me tomo por mis hombros y me estrello en la pared, no podía moverme sus ojos estaban mirándome directamente a los míos, no sentí miedo sentí más bien una atracción hacia él, no sé porque pero el tipo que estaba enfrente mío al tenerlo tan cerca se me hacía demasiado guapo.
-Mira niñito, no quiero lastimarte pero no puedes andar por la vida haciendo de menos a las personas, tal vez seamos gatos como tú dices, pero ¿a ti que te importa? tú vive tu vida y deja a los demás en paz, si tienes tanto dinero como dices ve y gástalo, disfruta tu vida y no te metas en la de los demás.
Después de decirme eso me soltó, pude ver que alrededor había muchos alumnos ¿En qué momento se dieron cuenta? Sentí la mano de Tae que me sacaba de la multitud.
-¡¡ME LA VAS A PAGAR, TE JURO QUE ME LA VAS A PAGAR…ESTO NO SE QUEDA AS!!- le decía al pelinegro
-Ya TOP no le hagas caso.- escuche hablar a Dae, así que le decían TOP…
-Vámonos Ji, deja de meterte en problemas.- me decía jalándome hacia el auto que nos estaba esperando.
-¡¡Maldito ya vera quien soy yo!!
-Si claro Ji tus ojos dicen todo lo contrario.- me sonroje ante las palabras de Tae.
-Lo vez hasta te sonrojas, ¿Te gusto el “gato” ese, verdad?
-No claro que no como tú dices es un gato.
-Bien Ji yo solo digo lo que vi.
La verdad es que si me había gustado, pero no se lo diría a mi amigo… y no lo admitiría…eso era como un acto suicida, la tarde continuo normal jugando tenis en mi casa, nadando en la alberca… pero había una cosa que no salía de mi cabeza…TOP.