En las profundidades del mar existe un mundo marino llamado La Atlántida, lugar en el cual viven sirenas, tritones, peces, en fin todo ser marino. Es un lugar de gran belleza en donde los seres acuáticos viven en paz y armonia quien lo Gobierna es el Rey tritón soberano de los océanos, el cual tiene 3 hermosos hijos, 2 sirenas y un tritón.
La primera sirena la mayor su nombre es May tiene 25 años,posee unos largos cabellos rubios ondulados, ojos color violeta, el don que tuvo al nacer fue el de la belleza y la danza.
El segundo hijo fue el triton de nombre Joey tiene 16 años sus cabellos son igual de rubios que los de su hermana solo que los de este son lacios, sus ojos son de un color miel brillante, su don al nacer fue el de una hermosa voz y belleza
Y por último la sirena menor de nombre Serenity tiene 15 años de cabellos castaños, ojos color gris claro, su don al nacer fue el de la sanación y la belleza.
Ese día se encontraban May, Serenity y Joey jugando con una pelota cuando apareció un pequeño tritón con cabello tricolor y hermosos ojos lila, sin duda uno de sus dones es la belleza poseía la misma edad que Joey.
—joey!
En cuando Joey lo vio salió tras de él, ambos se alejaron y comenzaron a hablar.
— ¿Encontraste mas tesoros Yugi?
—así es Joey, recientemente naufrago un barco, ven a ver…
Ambos tritones comenzaron a nadar y en menos de 5 minutos llegaron a un barco que estaba partido por la mitad, habían restos de el por todo lados. Entraron por una de las ventanas y comenzaron a explorar todo el barco, estaba todo destruido por dentro, se adentraron más y encontraron un libro con tapa dorada, Joey lo cogió dispuesto a llevárselo consigo, siguieron viendo hasta que un Tiburón los vio y trato de devorarlos pero gracias a la agilidad de ambos lograron escapar.
Comenzaron a nadar a la superficie, pues querían saber que decía el libro, y solo una persona se los podría decir. Al llegar a arriba comenzaron a buscar y encontraron lo que buscaban, una casa en medio del mar, se acercaron a ella, específicamente a una ventana y lanzaron una piedra esperando que salga esa persona. Al ver que no salía lanzaron otra y al fin ambos tritones vieron una cabellera tricolor igual a la de Yugi solo que esta persona era más alta tenía los ojos más fieros y de un color rojo carmesí, El tambien poseia la misma edad que los tritones.
Este joven al ver quienes lo había llamado se apresuro en bajar, al llegar diviso a los dos tritones y se acerco a ellos con una sonrisa.
—hey! ¿Que los trae por aquí?-dijo asustando a ambos tritones.
—Atem, no nos asustes así, mira que tu eres el único humano en el que confiamos-dijo Yugi
—Gomen gomen, pero a que han venido
—Pues hemos encontrado un libro y queríamos que nos dijeras que dice-dijo el rubio pasándole el libro a Atem.
— A ver, mmm pues es un libro de cuentos-dijo Atem pasando las páginas para ver más cosas.
—Cuéntanos uno –dijo el pequeño tritón tricolor.
—De acuerdo, Hace mucho tiempo vivía una hermosa doncella de nombre Ariel que soñaba con ser una bailarina, pero su padre estaba en contra de eso pues creía que las bailarinas nunca prosperaban en la vida, Ariel indignada dejo su casa para demostrarle a su padre que lo que decía no era cierto, al poco tiempo logro que la aceptaran en una escuela de Baile. Ella practicaba día y noche para conseguir su más grande sueño. Un día conoció a un muchacho del cual ella se enamoro profundamente, pero al enterarse de que este iba a casarse entro en depresión y….
— ¿y? que sucedió después, dime!-dijo Joey ansioso
—Lo siento, pero hasta ahí llega, parece que arrancaron esa página.
—Que lastima-dijo Yugi
—Dime Atem que es el amor, he escuchado que es el sentimiento humano más hermoso que hay
—A si es, pero es un sentimiento que a veces también logra destruir a la persona, cuando no es correspondido.
—Tú lo has sentido Atem?-dijo joey curioso
—Sí, pero el mio es algo prohibido para ambos ya que no podemos estar juntos-dijo Atem mientras miraba de reojo a Yugi, se quedaron en silencio por unos momentos..
—Yami Atem! Grito alguien desde la casa de Atem, alarmando a los 3.
—Creo que mejor nos vamos, Gracias Atem-dijo Yugi y tanto el cómo Joey se sumergieron para ir a su hogar.
—Atem! – desde la orilla se pudo ver a un Joven de hermosos ojos azules como el mar, alto y castaño, parecia de la misma edad que Atem.
—Que sucede Seto
—Mi tía te llama, llego tu querida-dijo Seto con sarcasmo.
—ahhh- suspiro resignado Atem mientras entraba seguido se su primo seto.
******
Mientras tanto en las profundidades Joey y Yugi habían llegado, pero con lo que no contaban es la regañada por parte del padre de Joey.
—Se puede saber en donde estaban, los hemos estado buscando por un largo rato-dijo furioso el Rey Tritón
—Gomen nasai padre, solo fuimos a jugar un momento por el laberinto de las algas.
—Asi es su majestad, por favor no regañe a Joey-dijo Yugi apenado, pues se sentía mal de mentirle al rey.
—Mentira!-grito una pequeña ostra mientras entraba, se dirigía a el rey y le decía algo en su oreja. Al terminar el rey tritón se enojo de sobremanera levantándose de donde estaba sentado.
—Como es eso de que has subido a la superficie y para colmo has hablado con un humano-grito el rey tritón.
—Estúpida ostra-susurro—Padre se que hicimos mal pero, es que me interesa mucho el mundo humano, quiero aprender de ellos, quiero saber que es el amor, además Atem sabe de nosotros y prometió guardar el secreto.
—Y tu le crees, piensas que él lo cumplirá! Ja! no me hagas reír, el amor no es más que una ilusión que crearon los humanos para ser viles y malvados.
—Mientes, es más que una ilusión, este libro-dijo sacando el libro de un bolsito que llevaba—te lo explicara mejor-Joey le acerco el libro a su padre pero este lo arrojo lejos y con su tridente lo destruyo. Joey quedo muy sorprendido al igual que Yugi.
—Padre! Como has podido-dijo Joey entre triste y furioso—Te demostrare que el amor no es una ilusión y que los humanos nos son monstruos como tú crees, nosotros somos los monstruos ya que tenemos hijos sin amor y sin una pareja-al terminar de decirlo Joey salió huyendo siendo seguido por Yugi.
El Rey solo se volvió a sentar con la cara llena de tristeza en eso se acerco su hija mayor May y le pregunto—¿Crees que fui muy duro?
—Padre debes entender a Joey, después de todo el también es parte humano es normal que tenga algunos sentimientos de aquellas criaturas.
—Lo sé, pero temo por su seguridad, nunca debi de meterme con esa humana, espero no cometa alguna locura…
****
Por otro lado iba Joey nadando con su amigo Yugi, el rubio estaba que hechaba fuego por la boca, no entendía porque su padre no entendía que los humanos no eran tan malos como decía.
— ¿Qué piensas hacer? Pregunto su amigo, ya que conociendo como lo hacía a su amigo sabia que este no se quedaría quieto.
—Yugi se que lo que te voy a pedir es extraño pero, me acompañarías al mundo humano.
—Claro amigo-dijo Yugi sin captar bien el mensaje de Joey.
—Pero no como Tritones, si no como....humanos..
—……-
Yugi se había quedado sin palabras, lo que su amigo proponía era realmente una idea descabellada. Joey supuso que Yugi no aceptaría así que estaba por decirle algo cuando la voz de su amigo dijo…
—De acuerdo Joey después de todo yo también quisiera encontrar el amor-dijo Pensando en cierto tricolor mayor —pero como lo haremos, no creo que tu padre quiera permitírtelo.
—Gracias yugi pero, iremos con Ishizu.
Yugi abrió sus ojos lilas—¡¿La bruja del mar?!
—Así es, ella es la única que puede aparte de mi padre.
—De acuerdo Joey, recuerda amigos hasta el fin-Joey sonrió y se encaminaron hacia la cueva de la famosa bruja Ishizu, sin saber que esta los observaba por medio de su bola de cristal.
—Jajajajajajaj….si vengan a mi pequeños pececitos jajajajajaja…. —La cueva en donde se hallaba dejo de estar tan silenciosa y se lleno de una risa macabra, lo cual indicaba que algo malo estaba por suceder…