EL REGALO DE PERFECTO
CAPITULO I
REGALO PARA EL DOBE
Los detalles siempre son bienvenidos dentro de un matrimonio.
El matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer según lo establecido por la sociedad, pero en la actualidad el matrimonio realmente corresponde a la unión entre dos personas que se aman sin tomar en cuenta el sexo.
El matrimonio entre homosexuales es un tema muy debatido entre la sociedad actual que se niega a romper los esquemas que la biblia impone a los seres humanos “Por eso el hombre dejará a su padre y a su madre para unirse a su mujer”, pero en aquellos textos sagrados jamás habló de los problemas que presenta una relación heterosexual que sin tomar en cuenta que tienen todo al alcance de sus manos para ser felices no lo son; tienen la facilidad de un matrimonio, una familia y ante todo la aceptación en la sociedad, pero que sucede con aquellas parejas que cumples los esquemas establecidos desde tiempos remotos simplemente terminan en maltrato a la pareja, abandono de los hijos y la mejor salida a sus problemas el divorcio.
El matrimonio que fue hecho para durar solo hasta que la muerte sea quien separe a las parejas ha desaparecido, un nuevo esquema de parejas ha nacidos, parejas que son capaces de luchar contra la discriminación que son sometidos dentro de la sociedad actual, sin importar cuanto se amen no son capaces de contraer un matrimonio, formar una familia, todo por el simple hecho de ser del mismo sexo.
La sociedad homosexual es muy criticada y tachada como la mayor aborrecida por el simple hecho de amarse uno al otro sin problemas, impedimentos, ni mentiras.
Muy pocas parejas logran conseguir el gran sueño de contraer matrimonio, una de esas parejas que logro lo imposibles fue Sasuke Uchiha y Naruto Namikaze.
Sasuke y Naruto se conocieron cuando apenas tenían 15 años con todo el mundo en su contra, su amor salió a flote y se fortaleció para vencer aquella barrera que la sociedad le tenía impuesta, su familia comprendió que su amor era real que no podían hacer nada para separarlos y que solo podían apoyarlos para que se sigan amando.
Al llegar a sus veinte años ambos chicos ya vivieron juntos tomaron la decisión de unir sus vidas mediante un papel, en su país el matrimonio homosexual no era permitido pero aprovechando la facilidad en el estado de California Estados Unidos lograron cumplir su meta de casarse.
Hoy tres años después de ese logro, su vida es simplemente perfecta, casados y felices, aun sienten que su matrimonio aún no está completo, en su vida aún les falta un pequeño detalle.
Un hijo.
Tras una larga lucha de parte de Sasuke para adoptar a un pequeño los papeles de adopción volvían a ser negados por el simple hecho de ser homosexual.
─ Otra vez. —Susurraba Sasuke mientras tenía entre sus manos el documento de adopción– ¡Qué tontería! No aceptan solo por ser homosexual.
La decepción se reflejaba en los ojos de Sasuke, la adopción era algo que llevaba más de un año luchando pero simplemente no lo había logrado.
─ Hubiera sido el regalo perfecto para el dobe. —Comenta para mí mismo mientras tiene en sus manos la foto de un joven rubio.
RING —El sonido del celular lo trae de sus pensamientos mientras observa en la pantalla el nombre de su esposo.
─ Hola Dobe. —Sonríe levemente
─ Teme no podre almorzar contigo. —Habla algo acelerado.
─ ¿Por qué? ¿Ocurrió algo? —Pregunta preocupado.
─ Pues sí, mi amante quiere almorzar conmigo, dattebayo. —Ríe levemente.
─ Muy gracioso.
─ Jaja, ¿Celoso?
─ Para nada, al contrario me evito el gasto del almuerzo. —Comenta divertido– Vas a dejar en crisis al pobre.
─ Jaja, si fuera verdad no te estuvieras burlando, hablando enserio. —Cambia el tono de su voz– Acaba de ver un accidente en la autopista están trayendo niños heridos solicitan mi ayuda.
─ Entiendo, no te preocupes comeré con Itachi justamente hoy nos iba acompañar mi papá.
─ ¿Tú papá? Discúlpame con Fugaku-san para para la próxima, Teme te dejo ya están llegando la ambulancia, besos nos vemos noche. —Corta la llamada.
─ Este Dobe me corto. —Miro fastidiado el teléfono– Es mejor que me reúna con papá.
Naruto era pediatra y su trabajo como médico sabio consumirlo pero no lo suficiente como para olvidarse de su esposo, al mismo tiempo el trabajo de Sasuke como presidente de las compañías de su padre lo consumía todo el día pero hacia lo posible que por la noche nada intervenga al momento de estar con su pareja.
Luego de la charla con su querido esposo toma su saco para colocárselo mientras hace una llamada por su celular.
─ Nii-san, ¿Dónde están? —Escucha la respuesta de parte de su hermano– Esta cerca llego en unos minutos.
Una vez dada la dirección Sasuke se dirige al restaurant “Chidori” unos de los más conocidos en la ciudad de Tokio y de exclusividad Uchiha al ser parte de una de las cadenas de Itachi.
─ ¡Sasuke por acá!
─ ¿Eh? —Voltea para encontrarse con la mirada de los dos pelinegros– Padre, Hermano.
La sonrisa se posó en los labios de Sasuke al encontrarse con su progenitor, Fugaku Uchiha un hombre de aproximadamente 50 años, cabello y ojos color negro, con una mirada seria para el mundo, pero para sus hijos en especial para Sasuke una llena de amor.
─ Hijo mío. —Fugaku abrazo a su hijo menor cuando este estuvo frente a ellos.
─ Te extrañe papá. —Susurro el menor mientras correspondía el abrazo.
─ ¡Hey! No me dejen fuera. —Reclama Itachi al ser ignorado por ambos.
─ ¿Celoso? —Pregunta Sasuke a su hermano al terminar el saludo.
─ Para nada, papá me quiere más a mí. —Itachi saca la lengua a su hermano.
─ Dejen de pelear.
Desde el momento que su querida esposa murió Fugaku tomo la tutela total de sus hijo al inicio se le hizo muy difícil cuidar a un niño de ocho años y otro de trece años él solo, pero con mucho amor y esfuerzo ahora tenía frente a sus ojos a dos profesionales.
─ Pero papá Itachi comienza. —Contrataca Sasuke con un pequeño puchero en sus labios.
─ Itachi no molestes a tú hermano. —Fugaku mira seriamente a su hermano mientras Sasuke aprovechando el descuido de su padre para sacarle la lengua.
─ ¡Míralo! ¡Me saco la lengua! —Itachi señala a Sasuke.
─ ¿Yo? —Dice inocentemente– No hice nada.
Fugaku sonreía al escuchar a sus hijos pelear sin tomar en cuenta que Itachi entraba a los treinta y Sasuke en los veinticinco cada vez que se reunían parecían dos pequeños intentando acaparar la atención de su padre.
─ Disculpe. —Una de las empleadas llamo la atención de los adultos– ¿Qué desean servirse?
─ Veamos. —Fugako revisa la carta– Un plato de sopa de fideo estilo Fun Chu.
─ Yo quiero. —Sasuke esta vez toma la palabra– Crema de tomate.
─ Una torta de chocolate para mí. —Dice Itachi con una sonrisa.
─ No. —Fugaku mira serio a su hijo– Eso no es comida, tráigale una sopa Fin Chi con verduras extra para ambos.
─ ¿Eh? ¿Yo porque? —Sasuke reclama.
─ Enseguida les traigo.
─ Papá no es justo. —Dijeron ambos con un puchero en sus labios.
─ Están en crecimientos mis queridos niños. —Sonríe al recordar el pasado.
Al llegar la comida a los niños…digo a los adultos nos les quedo más que comer lo que su padre les había pedido una vez terminada su comida todos disfrutaban de una taza de té, excepto Itachi que comía su torta de chocolate.
─ Sasuke. —Fugaku mira a su hijo– Te veo preocupado ¿Ocurre algo?
─ No es nada. —Contesta.
─ No te creo. —Interviene Itachi– Apuesto que Naruto lo tiene en abstine….
─ Itachi. —Lo mira severamente su padre– Come callado.
─ Hai. —Sigue comiendo.
─ ¿Algún problema con tú esposo? —Vuelve a preguntar preocupado por el menor.
─ Con Naruto todo está bien. —Sonríe– Es solo. —Baja levemente la mirada– Hace un año inicie los trámites para adoptar un bebé, pero por más que mi hoja de vida es perfecta, mi estabilidad es la que cualquier niño viviera bien.
─ ¿Qué paso? ¿Pudieron adoptar? —Pregunta su padre.
─ No, por el simple hecho de ser homosexual no puedo adoptar un niño. —Baja tristemente la mirada.
─ Es normal. —Dice Itachi– Para los homosexuales nos he imposibles adoptar, somos una aborrecida para la sociedad.
─ Itachi. —Su padre lo mira.
─ Tranquilo padre, él tiene razón, tenía planeado llegar con el bebé en brazos como regalo de aniversario para Naruto. —Sonríe levemente.
─ Bromeas Ototo. —Sasuke mira a su hermano– Tú que llegas con un niño en brazos y Naruto que te vota de la casa por infiel.
─ No creo que Naruto haga eso. —Reflexiona un momento– Al inicio si se enojaría pero cuando le explique…Agrr no se ni porque pienso eso igual no vamos adoptar.
─ Hijo. —Su padre le toma la mano– Veraz que algún día ese deseo se hará realidad.
─ Eso espero. —Sonríe ante el apoyo brindado por su padre.
─ Ahora Ototo, ¿Qué le vas a regalar a Naruto de aniversario? —Pregunta interesado Itachi.
─ Pues…. —Un aura oscura cae sobre Sasuke– No tengo ni la menor idea y es este sábado. —Suspira derrotado.
─ Tiene tres días para pensarlo. —Dice su padre– Porque no van de viaje.
─ Una cena romántica bajo la luz de la luna. —Opina Itachi.
─ Una comida frente a la playa. —Otra vez da otra idea Fugaku.
─ Cómprale un auto nuevo. — Itachi–
─ Llévale flores. —Fugaku.
─ Jejeje. —Una gota resbala por la nuca de Sasuke al escuchar sus ideas.
─ Insisto un viaje para dos cerca del mar siempre es muy bueno en estas fechas. —Sonríe Fugaku recordando sus viajes con su difunta esposa.
─ Padre. —Sasuke lo mira enternecido.
─ Ototo puedes raptar a Naruto el sábado temprano llevarlo a las profundas montañas donde hay un maravilloso hotel, ya te doy el nombre, pasan todo el fin de semana. —Ambos pelinegros lo miraban con mucha atención– Y….pones en práctica la Kamasustra.
─ ¡¿Qué?! —Abre los ojos asombrado por la idea de su hermano.
─ Deja de decir tonterías, un aniversario debe ser especial. —Se levanta.
─ ¿Dónde vas? —Pregunta el menor.
─ Voy al sanitario, no peleen en mi ausencia.
Una vez que Fugaku abandono la mesa ambos hermanos se miraban mutuamente sin emitir palabras, hasta que Itachi saco la lengua a su hermano.
─ Comenzaste. —Dice serio Sasuke– Te voy acusar con papá.
─ Te voy acusar con papá. —Le repite su hermano con voz de burla– Jaja, no has cambiado sigues siendo el mismo niño llorón de siempre.
─ Cállate, ya voy a llamar a mi cuñado para contarle lo que haces. —Lo mira con superioridad.
─ Mi Dei no te va creer. —Dice firmemente.
Ambos permanecieron en silencio un largo rato hasta que Itachi lo mira medio divertido.
─ ¿Qué? —Pregunta Sasuke.
─ ¿Aun eres virgen verdad? —Pregunta como si nada.
─ ¿Qué? Que tonterías dices claro que no, por algo llevo tres años de matrimonio, no me la voy a pasar mirando los ojos de Naruto toda la noche sin hacer nada. —Dice algo avergonzado.
─ No seas baka, no me refiero a eso, está claro que todas las noches se la metes a Naru-chan. —Dice burlón.
─ No seas vulgar al referirte de esa forma de mi esposo. —Habla ofendido Sasuke.
─ Bueno, bueno, lo que quiero decir ¿Alguna vez te la han metido? —Sasuke abre los ojos asombrado– ¿Has sido uke alguna vez?
─ Este… —Gira su rostro avergonzado– Yo bueno….¿Y tú lo has sido? —Evade con otra pregunta.
─ Si, actualmente cumplo los dos roles. —Dice orgulloso Itachi.
─ ¿A dónde quieres llegar Itachi? —Pregunta serio.
─ Esta fue una idea de un amigo para mi aniversario donde año pasado. —Lo mira con una extraña sonrisa posada en sus labios– El regalo perfecto.
─ Regalo perfecto. —Susurra asombrado– ¿Cuál nii-san? ¿Cuál es el regalo perfecto.
─ Regálale a Naru-chan un fin de semana uke. —Dice como si nada.
─ ¿Uke? ¿Es decir yo…? —Lo mira asombrado.
─ Si ototo, todo este fin de semanas serás el uke de la relación. —Sonríe divertido ante las caras de su ototo–
─ Todo este fin de semana.
─ Si, este fin de semana le vas a entregar tú virginidad.
─ ¿Eh? ¡Mi virginidad! –Se levanta asombrado por las palabras de Itachi.
No hay mayor regalo de aniversario que uno que viene del corazón y que entregue lo más importante para una persona.
¿Sasuke se volverá el uke de la relación?
¿Naruto aceptara ser seme?