El amor de un demonio.   Prologo.   La gente sabe que nada es peor que el infierno.   La torturas, los alaridos de la gente, su sangre saliendo de sus heridas. Y de la manera que viviste y moriste en tu vida como humano, se repite una y otra vez en el infierno.   La gente dice que nunca Irán al infierno y cuando llegan se preguntan "¿Por qué? ¿Por qué yo? ¿Qué hice para merecer esto?"   Y yo les suelo responder: "engañaste a tu esposa…", "robaste una niña… luego la violaste y la golpeaste… quieres que sigas" o "le robaste a un anciano y luego le disparaste….". Todos se muestran arrepentidos y piden otra oportunidad.   Me río de todos esos malditos infelices. Solo hay poca gente que de verdad se merece ir al cielo y estar a la derecha de Dios. Los cristianos dicen que le son fieles a sus esposas, que trabajan duro y que rezan todas las noches.   Yo me río de ellos. A esos hombres o mujeres les pongo una pequeña tentación delante de ellos y caen como tontos. Algunos se resisten mas que otros… peo alguno no caen y aunque pusieran mi pie delante.   Es una adolescente, su nombre es Quinn Fabray. Tan solo recordome de su nombre me enoja. Es rubia de ojos avellanas toda una belleza. Pero como todas las rubias son lesbianas. Por eso mandare a mi hija mayor, Rachel. Ella es morocha de piel bronceada ojos café pero cuando se enoja son rojos, sus piernas son armas mortales, la tentación de muchos, quizás suene como un pervertido pero es mi hija se cosas muchas de ella. Como sea, su misión es seducir a la pequeña Quinn Fabray y que tenga algún vicio.   Cuando le dijo de la misión su sonrisa es más grande mas maligna. Y sale de este mundo. Pero hay algo que mi hija no sabe que misión no es para que la niña Fabray. Sino para que ella conozca el amor. Cosa que yo el rey de las tiniebla, lucifer, Satanás. Eh conocido….   Continuara….