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Inseguridad [KaiSoo] por SoolSan

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Notas del fanfic:

¡Hola! aquí comienzo con este nuevo proyecto -w- es un KaiSoo que se me paso por la cabeza un día, y escribí inspiradísima todo. Las personas que ya han leído antes mis fics deben decir ~oh KyungSoo y JongIn que novedad~ lo sientoooo =_= pero estos dos son mi musa inspiradora :c Ya estoy pensando en cosas nueva así que denle una oportunidad a este fic ^^

Quizás piensen que el comienzo es algo soso pero mientras avanza conocerán más la personalidad de cada personaje, así que espero que le den una oportunidad y lo leaaan >n< 

Como siempre espero sus hermosos reviews para saber que tal avanza todo; desconsuelos, críticas, amors, etc. Todo sera resivido y contestado con cariño *w*

Sin más que decir espero disfruten la lectura ^^

 

 

Notas del capitulo:

Creo que actualizare los miercoles o jueves -w- son mis días un poco desocupados -universidad, trabajos, ugh- además de que estoy subiendo otro fic acá jojo  Pero si son lindas y dejan reviews quizás actualizo antes ^^ 

 

 

Prólogo

 

Parado mirando la luz roja del semáforo, que se encontraba detenida mientras los autos pasaban con rapidez por la calle muy cerca de él, haciendo correr una brisa bastante agradable sobre su cuerpo —ya que el calor que estaba cayendo aquella mañana sobre las grises calles de Seúl era espantoso—, KyungSoo observa su reloj de muñeca con tranquilidad mientras espera que el semáforo cambie de color.

Las madrugadas veraniegas no eran las preferidas de Do KyungSoo. El sol chocaba de lleno en sus ojos demasiado temprano por la mañana, los rayos anaranjados lo enceguecían abruptamente mientras los intentaba evitar con torpeza con su mano  colocándola por sobre su frente, aplastando su arreglado cabello color negro, y existía un  calor abismante que nublaba por segundos su vista mientras caminaba apresuradamente por el cruce que ahora está despejado de autos,  pero no de personas. Esquivando con rapidez a la gente que, hoy por ser día lunes, anda más ajetreada que nunca.  

No, definitivamente el verano no es su estación del año favorita. ¿Pero, qué le puede hacer? Básicamente no puede hacer nada al respecto, ya que, como ciudadano  mayor de edad,  que debe ingresar a la sociedad como un trabajador esforzado, debe llegar a la hora a su trabajo manteniendo en calma su cuerpo, que se encuentra casi ardiendo por el calor que hoy decidió caer sobre Seúl.

Mientras va caminando hacia su destino  a paso lento, ya que KyungSoo por ser una abochornada mañana no pudo dormir bien, así que se levantó casi media hora antes para tratar de evitar fallidamente una ciudad ajetreada. A escasos metros, sobre  un pilar gris notó  un cartel bastante llamativo, colores verdes y cafés adornan el papel acompañado de letras clásicas dándole un toque sofisticado al anuncio. KyungSoo poso sus ojos en aquella publicidad y con sus enormes ojos moviéndose de lado a lado leyó como se inauguraba un nuevo café en la ciudad hacía unos días, y para suerte de él, se encontraba caminó a su trabajo. Luego de leer detenidamente cada letra no lo dudó ni un segundo y decidió ir a visitar aquel local.

Pasar los días calurosos tomando café es algo que pocas veces acostumbra a hacer. Mientras observa la hermosa fachada del local, ve como la gente ya está animosa bebiendo bebidas frías y uno que otro bebe un café caliente. El vapor desprendiéndose de la blanca taza acompañado del exquisito olor a granos de café recién molidos hacen que le entren ganas de hasta beberse el agua hirviendo de lo que vende ese lugar. Pero claro, nunca lo haría, beber café es solo un deleite otoñal, en veintiséis años es lo que su cuerpo ha acostumbrado, o eso al menos es lo que él piensa mientras ingresa al lugar y posa su mirada en la lista de bebidas.

Colocando sus brazos sobre el mesón que está al lado de la caja registradora, ignorando por completo si hay alguien para atenderlo o no, dejándose llevar de a poco por el desbordante aroma que abundan en el lugar, sus ojos leyeron algo que logró llamar su atención. Miró la lista de precios y casi instintivamente sacó su billetera de su maletín. Levantó su vista para ver si alguien había aparecido para atenderle y complacerle, y claro que lo había.

Un chico de cabellos exageradamente rubios le sonreían a todo dientes frente a él, su sonrisa era encantadora y porque negarlo, seductora. Tenía una hermosa tés color morena que era imposible de ignorar si ese chillón color de cabello lo acentuaba a cada segundo. KyungSoo lo observó por unos segundos y cuando sus labios gruesos los distrajeron lo suficiente el joven comenzó a hablar.

 

—¡Hola! Buenos días ¿Qué va a llevar?—preguntó el moreno mostrando su sonrisa a todo momento haciendo deleitar al pelinegro con tal belleza mañanera. El bajo relamió sus labios distraídamente mientras sacaba los billetes.

 

—Buenos días, voy a llevar el té blanco helado—dijo KyungSoo limpiamente mientras el joven no quitaba la vista sobre él—. O mejor ¿Qué me recomiendas?—habló el pelinegro sonriendo con seguridad. 

 

—Si quieres pasar el calor, definitivamente tu elección es correcta. Pero si eres adicto a la cafeína te recomiendo nuestro expreso— hablaba confiadamente el rubio mientras el pelinegro observaba en detalle los labios del chico—. ¡Es excelente!— finalizó animoso el muchacho, KyungSoo sonrió en respuesta y entrego los billetes. 

 

— ¡Vaya! que persuasivo, si no tuviera apuro bebería café— argumentó KyungSoo—. Pero me quedó con mi té blanco, bien frio por favor—sonrió alegremente el pelinegro mientras el muchacho recibía el dinero.

 

—Buena elección, ¿disculpa cómo te llamas?—Canturreó el moreno mientras le pasaba el vuelto al bajo—. Es para cuando te llamen—explicó ahora último.

 

—KyungSoo—respondió con una sonrisa ladina el pelinegro.

 

—Muy bien KyungSoo, allá en la orilla te llamaran—finalizó el rubio dándole una última mirada a los apetitosos labios de su cliente.

 

Mientras KyungSoo estaba parado frente a la mesa donde esperaba que le entregaran su té, aprovechó de observar el lugar; hermosas mesas de madera color caoba llenan el sitio acompañada de sillas color negro muy cómodas a la vista, las paredes están pintadas de un color verde musgo que va bastante acorde con el lugar. Varias plantas y cosas silvestres adornan el local, además el intenso olor a café con leves toques de vainilla flotando en el aire le hacían un lugar perfecto. Y por qué mentir, los empleados eran bastante atractivos. 

Escucho su nombre sonar en el aire cerca de la mesada y levanto la mirada hacía el lugar, un chico de cabellos claros con un sonrisa extendida, haciendo relucir unos hoyuelos en su cara le entregaron su pedido. El pelinegro dio una pequeña reverencia en forma de agradecimiento y se alejó de la mesada. 

A paso firme y ya casi saliendo del local noto un detalle escrito en el cartón que envolvía el plástico que contenía a su té mientras llevaba la bombilla a su boca. Con una caligrafía apresurada leyó detenidamente lo que el cartón tenía escrito. Paro su marcha frente al local y dio una última mirada a la caja registradora, el muchacho de cabellos rubios notó su presencia y le sonrió de inmediato elevando su mano en forma de despedida sonriendo descaradamente, KyungSoo se carcajeó sonriéndole en respuesta y siguió su camino mientras movía su cabeza en negación.

No era la primera vez que a KyungSoo le coqueteaban en una cafetería, y menos un hombre, por alguna extraña razón los hombres parecían encantados con su belleza algo infantil y exagerada, o eso era lo que BeakHyun le decía cuando estaba ebrio e intentaba besarlo.

Pero escribir en el cartón de su té es bastante novedoso, y más si se apreciaba bien su contenido:

 “Que tengas un buen día KyungSoo, ¿hoy está radiante el sol no?, espero que mañana no estés apurado para probar nuestro expreso ^^.”

El pelinegro ni siquiera puede pensar en cómo el muchacho escribió eso tan rápido y lo hizo calzar a la perfección en el pequeño espacio.

Mientras da otro sorbo al refrescante y delicioso líquido que aquel muchacho de cabellos fosforescentes preparo para él, Do KyungSoo reflexionó aquella mañana que no era normal que los hombres se sintieran atraídos hacia su belleza. 

 

 

 

Notas finales:

¿Y? ¿Muy soso? jojo espero les guste >n< y comenten

 

Saludos ^^ 


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