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Por tú amor por Conejita_yaoi

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Notas del fanfic:

Hola, es mi primer fic de Soul Eater, aunque ya he leído varios, son muy pocos los que tiene a esta pareja, por eso me vi en la misión de hacerla más popular. espero les guste, Soul Eater y sus personajes no me pertenecen, de ser así habría ciertos acontecimientos que pondrían a la serie una clasificación mayor y lo hubieran hecho más interesante. jojojojojojo!!!

Notas del capitulo:

Hola!!! este fic es un Spirit/Stain o sea, que el pelirrojo será seme y nuestro científico loquito el uke, y a quien no le guste que se vaya a comer bellotas al monte!
otra cosa, quiero aclarar que para gran vergüenza, no he visto toda la serie, y ni hablar del manga que ni siquiera he leído ningún tomo... en fin, espero les guste.

-¿Es un reto?


-Tómalo como quieras. Si lo logras, ya sabes cuál será tu recompensa.


Esas simples palabras pudieron haber sido tomadas con simpleza, de no ser por un inconveniente; que involucraba a un tercero que nada tenía que ver y que nada sabía de sus planes. ¿Y cómo sucedió todo? Retrocediendo sólo un poco, a un par de horas y entonces las cosas quedarán más claras.


**


Un pelirrojo muy apuesto y alegre, coqueteaba con algunas mujeres de proporciones generosas y risueñas, igual de coquetas e insinuantes, que prestaban sus atenciones al galán en turno. Por supuesto, el pelirrojo don Juan no perdía oportunidad de dar algunas caricias indecentes a las hermosas damas.


-Bueno señoritas, se me está haciendo tarde. Tengo que irme, pero les prometo que regresaré.


En eso estaba cuando divisa una abundante cabellera azabache. La sedocidad de aquella cortina negra le impactó en gran medida que no pudo resistirse a “flotar” y olisquear aquel cabello. Su perfume era exquisito, a flores exóticas y madera. Pero la dueña de aquellos hilos oscuros se giró para mirar con pocos amigos al atrevido sujeto.


-¿Qué cree que hace?


-Olfatear el aroma de tu cabello.


Le dijo con su mejor pose “sexy”. Pero la mujer de piel blanca y ojos purpura, sólo lo miró con recelo.


-Pues no lo hagas. Me molesta que estén invadiendo mi espacio y más encima que me olfateen el cabello.


Lejos de intimidarse o avergonzarse por su comportamiento anterior, trató nuevamente de seducir a la hermosa mujer. Sus verdes ojos se enfocaron con los de ella y trató de usar su encanto a través de la vista. La dama ni se inmutó, solo lo observaba aburrida y con hastío.


-Si ya terminaste de hacer el ridículo, por favor déjame en paz.


-Oh, vamos. No seas tímida, sé que puedo causar un gran impacto, pero no muerdo, no te preocupes.


Su enamoramiento superficial le hizo querer darle un beso, a lo que la mujer sólo tomo un vaso de agua echándoselo encima. El impactó sufrido por el agua helada fue inmediato, sus ojos desorbitados y tiritando del frío. La hermosa pelinegra sonreía burlona y complacida con su “obra”.


-Bueno, eso si que fue muy divertido, ¿no te parece?


-Eso fue inesperado.


Dijo mientras la miraba, pero inmediatamente su sonrisa de galán apareció de nuevo.


-Pero eso no hace más que aumentar mis deseos de querer salir contigo.


Su ceño se frunció con disgusto.


-Ni lo sueñes, no saldría contigo ni en un millón de años.


-¿A sí?


Nuevamente su sonrisa deslumbrante que a traía a las muchas admiradoras de la guadaña mortal. La ojipúrpura sólo lo miraba con desprecio.


-Pues quédate sentado esperando porque nunca va a suceder, ¿entiendes?


-Oh, vamos. No te decepcionaré.


-No gracias, prefiero que no lo intentes… nunca.


Las otras chicas miraran graciosas el espectáculo que presenciaban en primera fila. Era algo muy gracioso de ver. Spirit seguía insistiendo, pero ante cada nuevo intento era un nuevo rechazo. La mujer simplemente no se dejaba convencer por el galán. Harta ya de tanta insistencia, la dama quiso darle un punto final al asunto, por lo que sonriendo malignamente, miró a los ojos verdes del pelirrojo y con voz misteriosa le habló quedito.


-Muy bien, te propongo un trato.


Captando inmediatamente la atención del otro, continuó.


-Si logras hacer lo siguiente tal vez considere el salir contigo.


-¿En serio?


Gritó muy emocionado.


-Sí, por supuesto, pero no será algo fácil. Si logras convencer de salir contigo a alguien más que no sea yo entonces aceptaré.


Spirit sonrió con seguridad.


-Claro, eso no será difícil.


La mujer sonrió traviesamente.


-Ah, pero no será quien tú quieras y ya. No, será mucho más difícil que eso. Tiene que ser alguien a quien te desagrade, alguien antisocial y huraño.


Al mencionar las características no pudo evitar pensar en Franky.


-Eso casi parece a alguien que conozco…


-Perfecto, esa persona será.


-¡¿Qué?! No, espera, no puedo hacer eso…


-Bien, entonces te rindes.


Dijo encogiéndose de hombros y restándole importancia al asunto. Inmediatamente, Albarn trató de detenerla.


-¡No! Espera, no es que me rinda, pero es que esa persona es hombre, yo no pienso seducir a un hombre.


La mujer la miró con seriedad.


-Bueno, entonces ríndete, porque no tengo ningún interés en salir contigo. Lo siento galán.


-NO, lo haré. Te aseguro que lo haré. Cuando lo logre entonces tendrás que salir conmigo.


-¿Estás seguro? Piénsalo bien. Acabas de decir que no piensas en seducir a un hombre. Si no puedes hacerlo no lo hagas…


-¿Es un reto?


-Tómalo como quieras, si lo logras ya sabes cuál será tu recompensa.


Le dijo muy seriamente.


-Pero…


Agregó en un tono más grave.


-Debo advertirte que si lo haces deberás cuidar tus acciones, pues puedes terminar haciendo algo que no podrás remediar.


Y así fue como Spirit Albarn fue a realizar su objetivo. Llegó al lugar que sabía se encontraba su objetivo, sin duda, ahí estaba y no se equivocó. Daba clases a sus alumnos, por supuesto, estaba más emocionado él que sus propios educandos. Cuando las clases terminaron, vio su oportunidad. Trató de hacer trabajos mentales para imaginar que era una despampanante mujer. Se lo imaginó con piernas esbeltas y cintura y un pecho crecido y generoso, con rasgos más femeninos y una vez que su imagen mental fue la de una súper atractiva mujer, trató de armarse de valor. Por supuesto, intentaría usar todos sus conocimientos en las artes de la conquista.


Caminó con paso seguro y pausado y una vez que estuvo a su lado, trató de hacerse notar. Cuando Stain se percató d su pelirrojo amigo levantó la mirada algo indiferente.


-¿Qué? ¿Se te ofrece algo? ¿Una disección tal vez?


Dijo esto último con una sonrisa y con el cuerpo más suelto, mirándolo ahora más de frente. Spirit sudó frío ante aquella palabra.


-He… no, en realidad sólo quería saber si te gustaría salir un rato, ya sabes, para distraerte un rato.


-¿Salir?


La palabra la pronunció de tal forma como si fuera la primera vez que la escuchaba.


-Sí, vamos. Debes estar muy aburrido tú solo, todo el día…


-En realidad tengo mucho que hacer. Cientos de disecciones que hacer y por supuesto muy poco tiempo para hacer todo eso que ya he mencionado…


-Nada de eso. Vamos.


Tomó la mano del peligris. El de lentes miró a su compañero.


-¿Qué haces?


-Anda, vamos.


Ya sin poder objetar nada más, Spirit arrastró a Stain al “exterior”. Todo era tranquilo, sólo caminaban. Stain estaba un poco confundido por la repentina insistencia de su amigo a sacarlo a fuera. Pero Albarn… él era otra historia. Estaba nervioso. No sabía cómo proceder. Imaginar a Stain como mujer no sería suficiente para avanzar, pues bien sabía que cualquier intento sospechoso sería muy mal recibido y posiblemente un buen golpe y como tiro de gracia una disección gratuita. Así pues, es que estaba planeando muy cuidadosamente su siguiente jugada, claro, si es que no planeaba terminar en una mesa de disecciones y con un cuchillo a punto de cortarlo en muchas extensiones. No, claro que no, era por eso que estaba siendo muy cuidadoso. Una vez que estuvo seguro del plan a seguir, dejaría que todo lo demás fluyera.


-El sol está por ponerse, debo irme ya.


-¿Eh?... ¡Ah! Sí. Claro, ya se ha hecho tarde. Te acompaño a tu casa.


-No es necesario, yo puedo…


-Tonterías, vamos.


Dijo mientras señalaba su camino. El pobre de Franky no tuvo muchas opciones, pero no objetó nada más y resignado se dejó acompañar hasta su casa. Una vez ahí, abrió la puerta y dispuesto a despedirse de su raro amigo se giró para quedar de frente, pero no pudo reaccionar rápido, pues inmediatamente su mano fue sujeta con delicadeza y los ojos verdes se posaron en los suyos al tiempo que aquella voz profunda y atractiva le dijo casi bajito.


-Fue un día esplendido, creo que debemos repetirlo alguna otra vez.


-Eh… yo…


-Adiós, Franky…


Sus ojos grises se ampliaron al escuchar la forma cariñosa en que se pronunció su nombre… ¿Qué era lo que estaba pasando? Y lo más importante ¿Qué era lo que estaba comenzando a sentir en su pecho? ¿Enojo? Lo que si tenía claro era la confusión y una sensación de desagrado. ¿Qué demonios estaba planeando ése idiota de Spirit? ¿Qué idiotez estaba haciendo ahora? Lo que fuera que estuviera pensando, lo mejor sería que lo dejara fuera de sus locuras. No se sentía con el humor suficiente para soportar aquello. Respiró hondo y rascó su cabeza con pereza. Una vez adentro de su casa, se dispuso a dormir. La confusión en su cabeza era un distractor muy grande para poderse concentrar en sus disecciones. Lo dejaría por ahora.

Notas finales:

Hola, espero que les haya gustado y que le den una oportunidad a éste fic de crecer, diganme lo que opinan. gracias!!!


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