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Corazones opuestos...un corazon oscuro y un corazon puro por rukia sakura

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Notas del fanfic:

Esta es mi primer Yaoi original así que espero que les guste, para los que leyeron mi otra historia esta es una versión diferente.

Notas del capitulo:

Espero que les guste, me inspire mucho en hacerla, espero sus comentarios para continuarla, ya que tan solo pienso hacer tres o cinco capítulos pero si les gusta are más capítulos.

 Dominick

Estaba en la escuela como de costumbre, era un dia normal y común como todos los días, mi vida era algo aburrida pero era así feliz. En eso me sacan de mis pensamientos.

-hoye Dominick, vamos al centro comercial después de la escuela-dijo mi mejor amiga Annelise

-si vamos-dije

Terminaron las clases y fuimos directamente al centro comercial, era un dia como cualquiera, hasta que nos percatamos que el chico que acosaba a mi amiga y el que me golpeaba diariamente se acercaba a nosotros.

-hola preciosa, como estas-dijo Max

-déjanos en paz-dijo Annelise  

En ese momento sus amigos nos empujaron hasta la salida del centro comercial para después llevarnos a un callejón, en eso sus amigos comienzan a golpearme, mientras que Max tocaba a mi amiga.

-déjala, golpéame todo lo que quieras-dije

-no, ella me gusta, así que la are mía-dijo

Ambos estábamos perdidos, a mí me golpeaban, pero a mí no me importaba pero ella seria violada, en eso él le rompe el uniforme, en eso cierro los ojos, en ese momento escucho una voz de un hombre y abro los ojos, y veo un chico de veinte golpeando a Max, era un chico de cabellos rubios, ojos color marrón y una piel bronceada. Los demás chicos me dejaron de golpear, sacaron unas navajas de su suéter del uniforme, atacaron al chico rubio, pero él los esquivo, después golpea a cada uno dejándolos inconscientes.

Se sacó su chamara para ponérsela a Annelise, después la cargo, el me mi miro por un instante, después saco un pañuelo de su pantalón, y me lo entrego, me limpie la sangre que estaba en mi rostro.

-¿están bien?-dijo

-sí, gracias-dije

-¿los llevo a un hospital?-dijo el chico rubio

-Annelise, ¿estás bien?-dije

-sí, pero tienes que ir tú, estas herido-dijo Annelise

-no te preocupes ya estoy acostumbrado-dije

-tienes que ir, dejaremos a tu amiga en su casa y te llevare-dijo el chico rubio

-pero…-dije

-ve, yo estoy bien-dijo Annelise

Subimos a su coche, y fuimos directamente a casa de Annelise, me despedí de ella, en el camino rumbo al hospital decidí hablar con él para que me dejara marcharme a mi casa.

-disculpe, me podría dejar aquí, ella no lo sabrá-dije

-no, vamos-dijo fríamente

No tuve más opción que ir al hospital, al legar me atendieron, curaron mis heridas, por suerte no eran tan graves pero si tenía varios moretones por mi cuerpo.

-¿te llevo a tu casa?-dijo

-no, así está bien gracias-dijo

El me miro con enojo, me cargo por todo el estacionamiento hasta llegar al auto, me siento en el asiento del copiloto, estaba sumamente sonrojado.

-¿Dónde es tu casa?-dijo

Le conteste y le di la dirección de mi casa, estaba muy sonrojado, a tan solo pocas horas de conocerlo, me sentía intimidado por su personalidad fría y demandante. En eso me saca de mis pensamientos.

-ya llegamos-dijo

-gracias, perdón por las molestias, le pagare por lo del doctor, pase a mi casa y le daré el dinero-dije tímidamente  

-no es nada, solo dime tu nombre-dijo

  -mi nombre es Dominick Harrison, ¿Cuál es tu nombre?-dije

-soy Esteban Peralta-dijo fríamente

Me baje del auto y fui directamente a mi casa, después él se marchó,  subí a mi habitación y comencé a hacer mi terea como todos los días.

Al dia siguiente fui a la escuela como lo hacía diariamente, fui a mi salón, en eso me doy cuenta que esta Max con sus amigos, con golpes en sus rostro, Annelise llego en ese instante y ellos nos miraron con enojo, en eso llega la profesora.

-a los que mencione, vayan a la dirección ahora, Max, Tom, Billy, Annelise y Dominick-dijo la profesora

Los cinco fuimos a la dirección, para ver lo que sucedía, al legar el director comienza a regañar a Max ya su pandilla.

-¿Cómo es posible? que tu Max intentaras abusar de una de tus compañeras y ustedes dos golpear a uno de sus compañeros-dijo el director

-¿Cómo supo?-dije

-en internet ronda un video de lo sucedido ayer-dijo el director

-pero…-dije

-Max, Tom y Billy, han deshonrado a la escuela, están expulsados-dijo

Ellos se marcharon, ya que en ese momento llegaron sus padres y se los llevaron.

-Annelise, no te preocupes el video fue eliminado-dijo uno de los profesores

-espere un momento, pero si hace un instante lo mostré-dijo el director sorprendido

En eso suena mi celular, y reviso el contenido del mensaje, me había sorprendido el mensaje y más de quien era.

Dominick ya nadie te molestara, por cierto yo fui el que borro el video y también lo subí yo para defenderte de esos idiotas, nos vemos pronto.

Atentamente Esteban Peralta

¿Cómo había conseguido, mi celular?, Esteban había sido el que subió el video, a leer la parte en que decía defenderte algo en mi comenzó a sentir calidez. A tan solo poco de conocerlo sentía algo en mi corazón al recordarlo.

Regrese a m salón a retomar las clases, eso era la rutina de todos los días, era la misma fastidiosa rutina de mii vida. Era la hora de la salida, fuera de la puerta principal de la escuela ay varias chicas, caminaba solo ya que Annelise habían ido por ella, camine directamente a la multitud de chicas, cruce la puerta principal pero en eso una voz dice mi nombre, al darme cuenta de quién era sentí que mi corazón comenzaba a latir con más frecuencia.

-Dominick, ¿podemos hablar?-dijo seriamente

-sí, hablamos aquí o en una cafetería-dije

-no, vamos a mi departamento-dijo

Me sorprendí ante sus palabras, así que acepte y fui a su departamento, al llegar vi que era un lugar sencillo pero espacioso, en eso Esteban me saca de mis pensamientos.

-sé que eres un niño apenas, pero ay algo en ti que me hace cambiar de parecido relacionado con el amor, sí que quiero conocerte más-dijo

-¿a qué te refieres?-dije

-no lo sé per me gustaría conocerte a un más-dijo  

-está bien soy Dominick Harrison, nací en Londres pero vine a vivir un tiempo a Dinamarca, tengo diecisiete-dije

-soy Esteban Peralta, soy de México pero vine a estudiar y aquí e quede a trabajar –dijo

Continuamos platicando hasta las ocho de la noche, Esteban se ofreció llevarme a mi casa, trate de negarme, pero hizo lo mismo que en el hospital, me volvió a cargar al estilo princesa y me llevo al auto, llegamos a mi casa y él se despidió de mí, a l entrar comencé a brincar de la emoción como si fuera una adolecente enamorada, en eso me di cuenta de lo que sentía por Esteban, o era un simple agradecimiento si no era que comenzaba a sentir algo por el a pesar de los pocos días de conocerlo.

Notas finales:

Los siguientes capítulos los subiré cada lunes, pero cada capítulo será extenso, comenten para saber sus opiniones. Hasta la próxima.


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