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Love Secret por Momoka Yuuki

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Notas del fanfic:

¡Hola! Buenos días, tardes, noches o dependiendo de la hora en que lo vean. :D

Este es mi primer fan-fic, espero y sea de su agrado. 

Nota: Los personajes no son mios, son propiedad de Masashi Kishimoto-sensei.

Notas del capitulo:

Me disculpo por faltas de ortografía.

Cap.01 Concurso

En uno de los  jardines del prestigiado instituto de Konoha, más específico en el sección de preparatoria se encontraban debajo de uno de los frondosos árboles un grupo de amigos tomando su almuerzo de manera tranquila y sin interrupción alguna, hasta que un joven rubio de aparentemente diecisiete años llego corriendo y lanzando chispas para posarse en el centro del circulo en donde se encontraban los jóvenes tomando sus sagrados alimentos, cruzándose de brazos y mirando analíticamente a todos los presentes que ahora lo veían con infinita curiosidad , soltó un largo suspiro.

- ¿Por qué nadie se dignó a acompañarme o al menos esperarme para que comiéramos juntos?- haciendo un puchero de evidente molestia el joven rubio se recargo en el tronco del árbol y se dejó caer para tomar asiento y empezar a tomar su almuerzo ya que habían pasado alrededor de diez minutos desde que se había dado el toque de salida.

-Vamos Naruto, no te enojes- pasando su brazo derecho alrededor de la espalda del rubio para darle un abrazo reconfortante, habló una chica peli-rosa – que te va hacer indigestión la comida – soltó una pequeña risa y deshizo el contacto.

-Sakura tiene razón- hablo un chico de cabello alborotado color castaño y con unos extraños triángulos en la cara – no es para tanto, nosotros ya teníamos hambre y como vimos que estabas demorando más de lo previsto decidimos venirnos ante de que terminaras, ¿verdad chicos?- miro a sus compañeros de alrededor para que le dieran razón ante su explicación y todos asintieron de acuerdo.

-Pero esa no es razón para que ninguno de ustedes me acompañara en la charla con el profesor de literatura- dijo el blondo dándole una mordida algo brusca a su bolita de arroz.

-Bueno, lamentamos no habernos quedado- dijo un joven de apariencia robusta que respondía al nombre de Chouji- pero haber dinos ¿qué fue lo que te dijo?

Los ahí presentes asintieron y miraron al joven que ingería sus alimentos a una velocidad impresionante y nada sutil.

-Me habló acerca del evento de letras que se celebra cada año y quiere que represente al grupo en el concurso interno- tomo un pequeño sorbo de agua para pasarse el resto de comida que todavía tenía en la boca.

-¡Eres un asqueroso Naruto!- dándole un fuerte golpe en la cabeza a puño limpio Sakura le propino un buen golpe al peli-rubio dejándolo sumamente aturdido- un doncel no debe comportarse de esa manera no es propia de su imagen.

Sobándose la parte afectada y con unas pequeñas lágrimas en sus ojos azules le soltó un codazo a su compañera que está esquivo fácilmente al ver la predecible acción del blondo y lanzo una carcajada.

-Ya basta de tantos golpes- dijo una chica de mirada perlada y expresión tímida, los demás la miraron algo incrédulos ya que les era extraño que ella alzara la voz para decir algo además de que no titubeo al momento de decir aquello- no ven que Naruto- Kun nos iba a decir cómo le fue con Uchiha- sensei.

-Muchas gracias Hinata- chan – sonrojándose un poco le dedico una radiante sonrisa que solo logro que la chica de cabello color azulado se sonrojara y bajara su mirada hacia sus temblorosas manos.  

-Bueno, como les venía diciendo- prosiguió Naruto- resulta que por mayoría de votos, cosa de la cual yo no estaba por enterado- observo como los ahí presentes se hacían los desentendidos- me eligieron como el representante para el concurso de historias cortas, versos y fabulas.

-¡oh! Que bien, muchas felicidades Naruto – le palmeo la espalda Sakura – deberías estar feliz, no todos tienen el honor de poder concursar en aquel evento, claro solo si pasan las eliminatorias.

-Si tanto te alegra poder representar tú honor en aquel evento, porque no te ofreciste como voluntaria o al menos como mi acompañante- la señalo con un tono sarcástico.

-Ya sabes que mi fuerte no son las letras que digamos, así que para que me arriesgo no quiero poner mi dignidad en juego- volteo la cabeza en notable descontento y cruzo los brazos.

-Tiene razón Naruto, para que querer tenerla como acompañante si has visto como escribe sus mensajes, eso sería una descalificación segura- soltó el chico peli- castaño con una risa de por medio.

-Esa estuvo buena Kiba- esta vez el rubio lanzó una carcajada ganándose otro golpe en la cabeza por parte de la oji-jade.

-Ya estuvo bien, será mejor que Naruto nos termine de relatar lo ocurrido que ya está por terminar el receso- esta vez fue Chouji quien alentó al rubio para que terminara.

-Como les venía diciendo- se le escapo un corto suspiro- gracias al apoyo de todos ustedes me va a tocar venir los próximos cuatro fines de semana a tomar clases extra de literatura con horario normal.

Los chicos le miraron sorprendidos y agacharon la mirada ya que no sabían que decir sin terminar de regarla más y era porque su rubio compañero y amigo era amante de los fines de semana porque se dedicaba a escribir o tocar el piano libre de toda responsabilidad u obligación.

-Mira ve el lado positivo- comenzó Kiba- siempre te dedicas a escribir no sé qué cosa en tu casa  así que es relativamente lo mismo, no entiendo el porqué de tu enfado.

-Ese no es el problema Kiba- coloco sus dedos de la mano derecha en el puente de la nariz- el problema es que ninguno de ustedes se dignó a pasar estos fines de semana al menos a hacerme compañía.

-Pero ya Sakura- chan te había dicho por qué- dijo Chouji aun comiendo aunque ahora eran una papitas con las que se estaba deleitando.

-Bueno lo entiendo de ustedes, pero… - rascándose la mejilla y oyendo como los ahí presentes le gritaban un “oye” como protesta – pero Shikamaru él no tiene excusa alguna para no poder acompañarme.

El nombrado que hasta el momento se había mantenido ajeno a la charla que mantenían sus amigos, se encontraba mirando el cielo y la forma de las nubes como si esto fuera lo más interesante del mundo, pero al momento de escuchar su nombre a colación no pudo evitar entrometerse.

-¿Qué es lo que estaban hablando de mí?- soltando un sonoro bostezo y tallándose uno de sus ojos miro al blondo.

-Estaba diciendo que ¿por qué no te ofreciste para ser mi acompañante en el evento de letras?- hizo un ligero puchero y lo miro fijamente.

-Qué problemático- rascándose la nuca y volviendo a tomar lugar para continuar con su tarea favorita, mirar el cielo- pero no gracias, esos días tengo cita con mis dos amores.

-Eres… - el rubio estaba a punto de resoplar algo pero el timbre de entrada se hizo presente logrando así que todos se pusieran de pie y hábilmente guardaran todas sus cosas para dirigirse a su respectiva aula de clase.

Una vez terminadas las clases, como era costumbre desde que se estaban en el jardín de infancia los seis amigos se despedían en la entrada del instituto ya que sus choferes personales iban a recogerlos en la puerta de acceso. Despidiéndose de su amiga Hinata, Uzumaki Naruto miró su reloj de pulsera que ya marcaban las 14:45 h del día, tomo su mochila y la coloco sobre su hombro para tomar marcha e ir directamente a la parada de autobús.

Naruto a pesar de asistir a un colegio de alto renombre como Konoha que abarcaba todos los niveles de educación, era una persona socialmente hablando “promedio”, él asistía a esa prestigiosa escuela gracias a una beca que le sustentaba y obtenida gracias a su alto rendimiento académico, de ahí que todos sus compañeros le escogieran para ser el representante de su grupo; vivía con sus padres Minato Namikaze y su madre Kushina Uzumaki, el primero era muy parecido a él tanto que se podría decir que era la copia adolecente de su padre, esté se dedicaba a la investigación de seres microscópicos en diversos factores ambientales y su comportamiento, su madre por otro lado era reportera en una canal dedicado al medio ambiente y especies animales, de ella había heredado su cara y el carácter tan animado que poseía ya que su progenitor era demasiado tranquilo.

El joven rubio era sociable por naturaleza y automáticamente sin que se lo propusiera se daba a querer y respetar, por esa misma razón no tuvo ningún inconveniente o rechazo de parte de sus compañeros cuando entró a ese instituto desde el segundo año de primaria conociendo así a su grupo de amigos Hinata, Chouji, Kiba, Sakura y Shikamaru. Entre ellos había un lazo de amistad muy fuerte ya que conocían casi todo de ellos mismos, desde lo más simple hasta lo más complejo o bizarro, aunque como todos ellos Naruto guardaba un secreto y ese era su amor platónico jamás correspondido.

La parada de autobús estaba a unas dos cuadras después de la escuela, un tramo demasiado amplio por que no cabe mencionar que el instituto era demasiado extenso además de que la segunda cuadra estaba conformada por un lote baldío protegido que también era demasiado amplio, así que se hacía una  caminata de quince a veinte minutos aproximadamente, cuando diviso la parada pudo notar que su camión ya se encontraba arrancando y por más que intentara correr o gritarle este no se detendría a esperarlo. Resignado avanzo hacia los asientos de la parada a esperar ahora más o menos media hora a que pase la siguiente ruta, tomo asiento saco un pequeño libro de su mochila y se dispuso a leerlo para hacer más amena la espera.

El sonido de un claxon lo obligó a interrumpir la lectura de su libro, levanto la mirada y pudo percatarse de un BMW color negro parado justamente delante de él, extrañado observo como la ventanilla del copiloto iba descendiendo para encontrarse justamente con la persona que conducía aquel elegante automóvil, para su sorpresa era el profesor de literatura de nivel superior.

-Uzumaki, que extraño verle por aquí a estas horas- dedicándole una tenue sonrisa se dirigió al joven muchacho- ¿no han pasado por ti?

- ah hum... no realmente- rascándose la mejilla y sonrojándose un poco- no alcance el autobús y justamente estoy esperando el siguiente.

-¿Quieres que te lleve?- se ofreció el profesor invitándole a entrar a su auto.

-¡oh! no, gracias Uchiha- sensei - más nervioso de lo que estaba y bajando la mirada para evitar que el nombrado viera su tenue sonrojo - puedo seguir esperando el transporte.

-No tienes por qué apenarte- estirándose para abrir la puerta del acompañante y viendo la hora en su reloj de pulsera- no han pasado ni diez minutos desde que el último se hizo presente, mejor sube.

Ya abierta la puerta el profesor retomo su lugar esperando que el joven muchacho subiera al auto, por otro lado el rubio se sentía demasiado incomodo ante la propuesta del profesor pero analizando su comportamiento sería demasiado descortés de su parte si se rehusaba a subir al vehículo ya que el pelinegro le estaba esperando, así que sin más se adentró al automóvil, cerró la puerta y se colocó el cinturón de seguridad, escuchó el rugir del motor en cuanto el profesor giro la llave para encender el auto y lo puso en marcha.

-Muy bien, y a ¿dónde vamos?- sin apartar la vista del camino preguntó al joven sentado a su lado, no pudo evitar soltar una risita ya que veía como el blondo se encogía en el asiento de acompañante de evidente nerviosismo, mientras que el rubio al escuchar la suave, ronca y varonil voz del conductor reacciono de inmediato.

- A… a el parque de ecología, por favor Uchiha- sensei – dijo esto en un tono suave y tímido, no pudo evitar reprenderse mentalmente por su comportamiento de ese momento ya que era sumamente ridículo, que podría llegar a pensar de él, que era una persona tímida o desconfiada, claro que no él era Uzumaki Naruto y la palabra cohibido o tímido no pegan con él, entonces ¿por qué esa reacción?

-¡oh! Vamos a la misma dirección, ¿vives cerca de ahí?- aun conduciendo.

-sí, vivo a diez minutos de ahí caminando en la colonia del lado derecho del parque recreativo- Naruto volteó a verlo de reojo y al notar su perfil no pudo evitar sonrojarse más de lo que se encontraba y encogerse nuevamente en el asiento.

-Eso sí que es increíble, yo vivo en esa misma dirección pero del lado izquierdo, pero el tramo caminando es mucho más largo es de veinte a treinta minutos- ahora fue él quien miro al joven muchachito y no pudo evitar sonreír al ver aquella expresión de sumisión del joven.

Mientras tanto Naruto no podía evitar pensar <<no es posible que casi seamos vecinos>> aunque claramente la colonia que mencionaba el profesor era más bien un fraccionamiento residencial para gente de la más alta gama, por eso la división por aquel parque, mientras pensaba pudo sentir la leve mirada que le proporciono el mayor y no pudo hacer nada más que encogerse nuevamente en el asiento de cuero, se seguía reprendiendo diciendo <<no puedo ser más que evidente, ya basta Naruto, te vas a delatar si sigues actuando así, actúa más natural>> pero como podía actuar más natural si el profesor que se había ofrecido a llevarle a casa no era otro que Uchiha Madara su amor platónico y la persona que se dedica a robarle uno que otro suspiro, su amor imposible e inalcanzable, por esa misma razón se reprendía para evitar quedar más patético ante él.

El silencio se adueñó del automóvil logrando que el ambiente se tornara un poco tenso, el rubio optó por mirar el paisaje que consistía en sí en árboles, cerros y alguna que otra casa, motivo, era porque el colegio quedaba en una zona apartada del bullicio de la ciudad. Por otro lado Madara encendió el estéreo del auto sintonizándolo en una estación de música instrumental, el blondo decidió armonizar un poco el ambiente rompiendo el silencio.

-Uchiha- sensei, ¿Por qué no me enteré de la votación para representar a la clase?- dijo felicitándose internamente por actuar como siempre.

-¿Quién imparte esa asignatura en tu grado?- pregunto sin dejar de mirar el camino.

-Kakashi- sensei – dijo levantando los hombros, le parecía algo extraño que preguntara quien era su instructor ya que él era quien se encargaba de “liderar” a todos los docentes de esa asignatura por la simple razón de que el Uchiha era el profesor de nivel superior.

-uhm- fue todo lo que el pelinegro profirió como respuesta, su ceño se contrajo levemente y siguió manejando, no podía creer como era posible que el muchacho llamara a su subordinado Hatake por su nombre y no por su apellido como lo hacía con él, simplemente no lo toleraba.

Naruto al escuchar aquel monosílabo no supo cómo reaccionar, ¿acaso lo había hecho enojar?, iba a abrir la boca para disculparse aunque no entendía bien la razón, pero fue interrumpido.

-Lo que sucedió fue lo siguiente- suspiro, sabía que no debía dar detalles con respecto a elección pero simplemente no quería incomodar más al menor de lo que ya estaba porque pudo notar que su anterior reacción provoco algo de confusión en el chico- ustedes fueron elegidos automáticamente por sus profesores de curso y lo de las votaciones era para cerciorar que la dedición del profesor era la correcta, no te enteraste porque ese día les mando a llamar para que realizaran diversas actividades.

Ahora Naruto entendía el porqué de la elección sin su presencia, aunque se le hizo raro el motivo que les dieron para no estar ahí presentes, tenía tantas de ganas de preguntar pero mejor se mordió la lengua- Gracias Uchiha- sensei.

-No hay de que- estiro su brazo y le revolvió un poco los rubios cabellos- pero dime Madara.

El blondo al momento del contacto sintió que su corazón palpitaba desenfrenadamente, pero aún más cuando le dijo que le llamara por su nombre, dios, como era eso posible no podía articular palabra alguna así que solamente asintió como respuesta, giro su vista hacia el camino y pudo notar que ya habían llegado a su destino, el camino fue corto en comparación a que si hubiera tomado el autobús.

Empezó a desabrocharse el cinturón de seguridad para después tomar su mochila ya que esta había sido colocada debajo de sus pies, espero que el seguro fuera desactivado y abrió la puerta.

-Muchas gracias Uchiha- sensei- bajándose del auto y haciendo una leve reverencia, por otro lado Madara no pudo evitar fruncir el ceño al escuchar como lo llamó.

-No fue nada, nos vemos luego- una vez cerrada la puerta, Madara le dedico una leve sonrisa y se retornó marchándose de ahí, mientras que el rubio veía como partía hasta perderlo de vista.

 

Notas finales:

¡Gracias por llegar hasta aquí!

¿Qué tal les parecio?

Todos sus reviews son bienvenidos =) (no sean tan crueles, por favor).

Nos vemos la proxima semana.

Bye!

Besos y abrazos.


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