¿Cuantas veces han vociferado contra tu destino? Estoy seguro que más de una vez, yo Furihata Kouki lo hice, me atreví a quejarme por él, pero ahora me doy cuenta que tanto dolor al final es recompensado con un futuro tranquilo, no importa lo que demoré, te aseguro que llegara buenos tiempos.
¿Qué quien soy para decir esto?, pues creo que sería bueno recordar algo de mi pasado…
Habíamos ganado la copa de invierno, ¡era genial!, mis hermanos y mis padres me veían orgullosos desde las gradas, y yo sentía mi corazón a mil, y lo mejor es que pude jugar en ese último partido del triunfo, aunque no hice un buen espectáculo, me caí muchas veces y mis piernas temblaban como gelatina, sobre todo cuando me enfrente a Akashi Seijuro, no puedo negarlo, él me daba mucho miedo, ¿porque? No lo sé, pero su sola presencia me ahogaba, aun así no podía dejarme vencer y deje todo lo que pude en la cancha, sé que no ganaron por mí, ya que los protagonistas y héroes era Kuroko Tetsuya y Kagami Taiga, aun así me sentí parte de ese mágico momento que jamás en mi vida se alejara de mí.
El equipo de Seirin estaba conformado por personas amables, los sempais eran justos y la entrenadora siempre velaba por el bien del equipo, me sentí como si estuviera en mi familia alrededor de mis hermanos.
Me asombro conocer a Kuroko Tetsuya y mucho más saber que pertenecía a la gran mencionada generación de los milagros, y sobre todo saber que era un omega como yo, bueno no cómo yo, él era todo un omega y yo sólo la caricatura de uno. Lo admiraba mucho.
Por otro lado Kagami Taiga, ¡era un monstruo! Pero en el buen sentido de la palabra, al principio me pareció intimidante hasta algo egocéntrico, pero tuve que retractarme, nuestro “tigre de seirin” era muy amable y su pasión por el básquet era contagiosa. Aunque sabía que nunca alcanzaría su nivel, me gustaba trabajar tan duro como él y compartir mi gusto por el básquet con todos los miembros del equipo.
Estaba muy feliz y me imaginaba ganar el próximo torneo todos juntos de nuevo, me había prometido mentalmente mejorar y servir de apoyo a Kagami y a Kuroko.
Pero eso nunca llego ese partido de triunfo fue mi último partido con el equipo.
El día que fue feliz también fue mi día de tristeza, mamá tuvo su primera recaída, llegue a pensar que era la persona con más mala suerte en el mundo. Ella siempre fue una persona muy fuerte y para mí era la mujer más hermosa del mundo, una cálida y tierna madre que dejaría todo por sus hijos.
Ese día con la emoción del momento y ver el triunfo de mi equipo tuvo una descomposición, mi familia se preocupó mucho, pero mamá dijo que solo era por la tensión y la emoción que no nos preocupáramos, que solo son los signos de la edad.
Pasamos toda la noche en vela con la promesa de mi madre que iría al día siguiente al médico, ya que su palidez no era signos de buena salud, fue cuando recibí la llamada de uno de mis compañeros de equipo, me invitaban a una fiesta en celebración de nuestro triunfo, lo pensé mucho para aceptar ya que estaba muy preocupado por mamá, pero al final ella y mis hermanas me dijeron que vaya a divertirme.
Accedí, pensé que solo sería una celebración entre nosotros pero... ¡me engañaron vilmente! Y allí estaba yo junto a los demás miembros del equipo ¡frente a una mansión enorme! propiedad de Akashi Seijuro ¿eso era cierto? ¡Cómo llegue hasta allí!
_¿Sempais están seguros que deberíamos estar aquí?
_¡Claro nos invitaron!
_ Pero…
_ Tranquilo Furihata Kun, él mismo Akashi Kun nos invitó, al parecer quiere reunirnos nuevamente.
_ Lo comprendo por ti Kuroko, porque fueron ex compañeros de equipo pero y ¿nosotros?
_ ¡Vamos Furihata! (Kagami me da un golpecito en la espalda) también me invito a mí, por ende todo el equipo, ¡será comida gratis! no tenemos nada que perder.
_ En serio, ¿no lo estás tomado muy tranquilo Kagami?
_ Y a todo esto ¿porque te fuiste tan rápido después de ganar el partido? _kagami le pregunto inquisitivamente)
Furihata no quería hablar sobre sus problemas personales y trato de desviar el tema.
_ ¡Miren por allá no somos los únicos equipos invitados!
En la otra acera frente a ellos, una “limosina” se estacionó, de ella bajaban los miembros del equipo de kaijo, entre ellos se pudo destacar una cabellera rubia, con un traje echo por diseñador, con unos lentes de sol (era como ver un artista popular) Kise Ryouta se veía muy fresco y nada común, muy a la altura del lugar donde se dirigía.
_ Kise Kun como siempre tratando de llamar la atención (pronunció Kuroko algo indiferente)
_ Kise cree que va a modelar o qué -menciono Kagami un poco fastidiado-.
Pero cuando el rubio comenzó a caminar se dieron cuenta que cojeaba.
_ ¿Oye aún no se ha recuperado de su lesión? – opino el capitán con los demás miembros.
_Al parecer no…
De pronto kise san sintió que era observado, volteó para luego, esbozando una sonrisa se acercarse a Kuroko.
_ ¡Kurokocchi que bueno que viniste!.
Hizo el intento de abrazar al peli celeste pero fue interceptado por Kagami.
_¡Oye kise!, ¡no te han dicho antes, que es de mala educación invadir el espacio personal de otros!
_¡Moo kagamicchi!, que aburrido eres, además, no estoy por ti, yo sólo quiero abrazar a kurokochi y felicitarlo por su triunfo.
Furihata se dio cuenta de la molestia en el rostro de Kagami, se le notaba a leguas (o sólo lo notaba él) que el pelirrojo sentía algo por su autodenominada sombra y sentía celos de Kise san. Después de todo kise era un alfa muy guapo.
_Gracias kise Kun (Kuroko contestaba una vez más indiferente a las emociones del rubio)
_¡Estuviste fantástico kurokocchi! ¡y tú también kagamicchi!, ¡bueno en general todos ustedes estuvieron sorprendentes!
_ Oe kise tampoco seas tan amigable con los rivales.
_ Eh pero kasamatsu sempai
El capitán del equipo de kaijo saludo a todos y estrecho nuestras manos, también lo hizo conmigo y lo mismo hizo kise san, me sentí muy honrado.
_ Ohm tú ¡eres quien enfrento a Akashicchi!
Kise san se acercó mucho a mi agachándose en el acto, pude ver más de cerca sus ojos dorados, tenía que reconocer que eran muy bonitos, pero de alguna forma me puse a temblar (¿sería por su aura o su aroma? después de todo era un alfa)
_ Mucho gusto…soy Furihata Kouki.
_ Kise Kun estas incomodando a Furihata Kun.
_Está bien, pero me recordó un poquito a ti kurokocchi.
_ ¿en qué? Pensé.
_ ¿Bueno entremos no?
_ Vamos…
Dentro ya estaban los equipos de los respectivos ex miembro de los milagros, el lugar era muy suntuoso, y todos estaban bien vestidos, sólo yo era él que traía harapos comparado con todos.
Me pondré en un rincón específico pensé.
El anfitrión Akashi san, nos dio la bienvenida y un discurso, disculpándose con todos sus ex compañeros y sus respectivos miembros de equipo, Kise fue el primero que aplaudió emocionado entre lágrimas, aunque yo también estaba llorando, Akashi san había sonado muy sincero.
¡Y la fiesta comenzó!, yo me sentía muy fuera de lugar, así que me acomode en medio de mis sempáis, (algunos eran betas) para sentirme más tranquilo, después de todo mi presencia como omega era nula, y no porque podía ocultarla como en el caso de Kuroko san, sino porque simplemente no podía ser captada, era un omega defectuoso.
¿Defectuoso? Y es porque soy el único omega en una familia de betas, mis padres son betas, mis hermanos y hermanas también, ¿Por qué Salí siendo un omega? ¡Ni yo mismo lo sabía!, pero le preguntamos a mi abuelo paterno, y él nos contó sobre mi bisabuela, al parecer esta pertenecía a una familia con espíritu animal, una chihuahua para ser exactos, si ahora comprenderán por qué tiemblo mucho, está en mis genes.
Mi bisabuela se enamoró de un beta común y huyo con él, por supuesto los padres de ella lo tomaron como una afrenta y le dieron la espalda, pero eso a ella no la amilanó, se casó con su amor y tuvieron hijos, claro está que cuando un omega tiene hijos con un beta estos niños nacen también siendo betas, pero a ella no le importaba sacrificar la herencia de su espíritu animal, si podía tener a su lado a la persona que amaba.
Una historia muy romántica en verdad, por eso nuestra familia siempre decía que los Furihata son aquellos “sacrificados por amor”.
Todo iba normal en mi familia, hasta el día que yo nací, no tenía orejas, ni rasgos de un animal como los alfas y omegas, pero…¡tenía una pequeña cola! .
Después de varias visitas al médico se llegó a la conclusión que era un omega, uno muy simple e imperfecto, y que de seguro conforme vaya creciendo ese lado mío desaparecería volviéndome un beta común y corriente.
O al menos eso pensaban mis padres, pero los años pasaron y aunque no daba vestigios de ser un omega ¡si lo seguía siendo!, ¡en fin! Mientras no me molestase en mi vida diaria, no pensaba en ello.
Pero esa fiesta estaba llena de alfas fuertes y omegas valiosos, un ejemplo era la generación milagrosa, de ellos el único omega había sido Kuroko, los demás Akashi san, Midorima san, Kise san y Aomine san eran todos alfas, y alfas de rangos altos, dos de ellos eran felinos grandes (un león y una pantera) había un búho y ¿un oso? Si más no recordaba mal,( Kuroko san le había contado que espíritu animal eran sus ex compañeros) y Kise san era un lobo, ¿será por eso que Kuroko decía que kise era como un perro? Aunque desde mi punto de vista Kise san no parecía ser uno.
La fiesta continuaba normal y la comida estaba muy buena, hasta que a algunos de los invitados se les ocurrió traer cervezas, después llego lo peor, el amigo de Midorima san (creo que se llamaba Takao san) , estaba bebido y para su mala suerte y la de todos los demás ¡había comenzado su etapa de celo! , mis padres y el médico me habían hablado sobre ello, es algo que les ocurre a los omegas, desde que entran a la pubertad, pero hasta ese momento yo no había sentido nada de eso.
Comenzó a soltar su aroma para llamar la atención de Midorima san, que por su parte la bebida le había caído mal y ¡estaba semiinconsciente!
Pero ese aroma despertó a los demás omegas presentes y al parecer cada uno de ellos tenían alguien que les gustaba en esa reunión, se sintieron desafiados por Takao san y también soltaron sus aromas.
¡Y allí comenzó el estruendo!
Los alfas guiados por el aroma e instintos, querían marcas sus territorios y tomar a los omegas
Los omegas solo querían ser deseados y demostrar que eran mejores que los otros.
Yo no sentí nada raro, si bien percibía los aromas, no causaban ninguna reacción en mí, al contrario ¡estaba aterrado!.
Chocaron contra mí, (al parecer no sentían que era un omega y me ignoraron) caí de bruces contra el suelo, ¡me iba a pisar! pero Kise san lo evitó.
_¿Te encuentras bien?
Asentí con la cabeza
_ Mejor te pones a un lado Furihata, ¿¡rayos! que les pasa a todos?
¡Eso me sorprendió!, al parecer Kise san no había caído presa de sus instintos como los demás.
De pronto ambos vimos como Aomine san y Kagami comenzaban a pelear al parecer por Kuroko, ambos estaban sacando sus garras y colmillos. Las auras de tigre y pantera se hacían presentes.
Sin decir nada Kise san corrió hacia ellos para detenerlos.
Aomine san y Kagami san lo golpearon pensando que también quería a Kuroko para sí mismo, pude ver como los ojos dorados de Kise san se encendían, muy parecidos a como cuando hacia la copia perfecta, hasta yo me estremecí un poco, de pronto todos pararon, estaban como ¿hipnotizados?
Fue cuando sentí que me cogían de la mano y me jalaban.
_ Aprovechemos este momento, no sé qué ha hecho Ryouta, pero paremos todo esto.
Mi vista se posó primero en la mano que me jalaba luego levante mi vista y vi la espalda para luego levantarla un poco más y ver una cabellera rojiza.
¡Era el mismísimo Akashi Seijuro!.
_ Vamos, entremos aquí, mis empleados ya están esperando afuera.
De pronto entraron los empleados de Akashi san, Trayendo consigo pequeñas bombas de agua que seguro contenían algo, y comenzaron a rosear a todos con ellas.
Fue la primera vez que sentí dentro de mi miedo, un calor muy confortante, esa blanca mano que me protegía de alguna manera , me hizo sentir avergonzado pero bien. Después de dejarme en un lugar seguro me pidió disculpas y se alejó, sabía que solo estaba siendo cordial y buen anfitrión pero mi mano sintió el abandono de la suya, y entrelace mis dos manos para que no se sintiera tan sola. ¿Quién pensaría que años después nunca dejaría ir esa mano?