Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La luz de mis ojos por katialove99

[Reviews - 190]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este es una historia del mundo omegaverse, de dos seres atípicos que cruzan su vida y la cambian para siempre.

Notas del capitulo:

Es mi primer fic, ojala guste. Por favor dejen algún comentario para saber sus apreciaciones personales a si me sirven para continuar además para saber si hay algo que no se entiende. Es mi primer fic, probablemente tenga muchos errores de ortografía y redacción sepan disculparme no tengo mucho tiempo para dedicarme a esto y lo hago sólo de hobby.

Daniel no recordaba cuando se había convertido en el hazmerreír de toda la escuela, sencillamente un día paso, se dieron cuenta de su incapacidad para reaccionar a las feromonas de los Alfas. Al principio fueron pequeñas burlas pero con el tiempo se convirtió es el más cruel hostigamiento sobre todo de parte de sus compañeros donceles que le llamaban aborto de la naturaleza.  



El había sabido ese defecto suyo cuando tuvo su primer celo. Era una tarde de verano y sus padres habían decidido que lo mejor era permanecer en el hogar. Su cuerpo ardía, tenía miedo y no sabía como lidiar con las convulsiones y palpitaciones que tenían tanto su parte trasera como delantera. Era algo nuevo para él, hasta ese momento jamás había sentido la necesidad de tocarse ni menos había pensado en sexo.

 

 

En ese entonces era tres años más chico, había hablando con su padre doncel de los celos pero nunca algo tan específico al respecto de como calmar el deseo. Tenía los compresores pero no mermaban las sensaciones ni calmaban su cuerpo que parecía consumirse por dentro. Desobedeciendo todas las enseñanzas recibidas, decidió salir aquella tarde de febrero de su cuarto al baño, su olor rápidamente invadió la planta alta de la casa, llegando hasta el cuarto de su hermano que tenía un amigo Alfa de invitado. Nadie habría pensado que siendo un doncel tan precavido cometería semejante error. Daniel no recordaba con exactitud como se dieron los hechos, solo que de un momento a otro tenía encima al amigo de su hermano listo para devorarlo pero a diferencia de lo que pudiera esperarse de un doncel su cuerpo no reacciono como el resto, el pánico lo invadió y toda la exitación se fue de golpe.



Las feromonas de aquel Alfa habían tenido una reacción inversa y habían ocasionado que el primer celo de Daniel finalizará de golpe. Su hermano que había presenciado todo no supo como reaccionar menos su amigo, fue algo que nunca habían vivido de cerca ni tampoco algo que hubiesen escuchado que era posible. Los padres de ambos hermanos escucharon los ruidos y subieron corriendo pensando lo peor pero la escena que se encontraron también los dejo sin saber que pensar.

 

 

Después de esa tarde paso por muchos exámenes médicos sin que ningún médico pudiera darle una explicación exacta a su condición y “enfermedad”, hasta lo habían llevado al psicólogo para ver si era algo de su cabeza, fueron muchas noches de llanto porque no sabía como decirle a su padres que no le importaba ser diferente, que no consideraba algo malo lo que le pasaba y que le dolía que lo trataran como un bicho raro cuando él se sentía normal y hasta especial por no caer ante cualquier alfa.

 

 

En aquel entonces tenía catorse años, trataba de ser como todo doncel de su edad, se arregabla, iba a la moda y vestía ropa ajustada pero al darse cuenta de su condiciones especiales cambio radicalmente su forma de actuar y vestirse.

 

Habían pasado tres años de eso ahora era un muchacho delgado pero que usaba ropa tres talles más grande. Llevaba el pelo siempre suelto, de color oscuro como la noche tenía un flequillo abundante que le tapaba buena parte del campo visual protegiéndolo de las miradas de asco y burla constante que sentía a su alrededor.

 

Su mirada era triste... antes sus ojos verdes irradiaban vida pero ahora parecían opacos como el musgo. No entendía como hasta sus ojos habían cambiado tanto pero aunque intentará ser el de antes no podía reflejar otra cosa, desde que supo que era diferente toda su vida había cambiado para mal.

 

 

Su único amigo, los otros se habían distanciado sin darle muchas explicaciones, era un lindo doncel unos meses menor que él. Siempre habían estado juntos, desde kinder, era amigos inseparables y se contaban todo. Nico tenía su misma altura su problema más grave, a los ojos de ciertas personas superficiales porque para él nunca fue un defecto, era que tenía un peso más elevado que el resto y eso había mermado desde pequño su autoestima. Para mí eso era lo de menos, había que estar ciego para no ver lo hermoso que era en cuerpo y alma, hubiese deseado ser su hermano alfa para poder llenar de amor a su amigo que era el único que habia sabido contenerlo y darle apoyo.



Nico desde niño fue muy trasparante,  además de que sus miradas lo delataban era una cotorra que no podía guardar por mucho un secreto, a los quince me confeso que estaba enamorado de mi hermano, aunque no tuvo que decirmelo para que me diera cuenta si cada vez que lo miraba hacía cara de borrego y apenas podía dirigirle palabra.



Mi hermano, era lindo para que negarlo, alto, musculoso por las horas que pasaba en el gimnasio pero un completo patán como la mayoría de los alfas que se creían mucha cosa. Era cinco años más grande que nosotros. Desde que tengo uso de razón le llovían los omegas por donde fuese. Tenía ojos azules y pelo azabache como el mío solo que el lo llevaba en un estilo corto y moderno. Sabía que era guapo, sabía que era listo y por eso se daba el lujo de usar a los omegas a su antojo.

 

Mi pobre amigo no pude evitar enamorarse de aquel ser que a pesar de ser un patan tenían un lado bueno que fue el que lo encandiló. Podía criticar a mi hermano pero a su favor, salvo porque era un " Don Juan" , era muy bueno con todo el mundo y siempre ayudaba a cualquiera que estuviera siendo acosado.... fue por eso que mi amigo cayó tontamente enamorado de él.

 

 

Nico nunca me pidió que intercediera por él, nunca se insinuó con mi hermano, veía su mirada afligida cada vez que lo veía con un doncel diferente pero nunca dijo nada, siempre supe que era por su baja autoestima, quise hacerle cambiar de parecer pero yo era la persona menos indicada para hacerlo si me encontraba en una situación similar a la suya.



Ambos soñabamos con ser médicos y conseguir el amor de una persona que nos aceptará tal cual eramos, el primer sueño era mucho más factible que el segundo ambos lo sabíamos pero nunca perdiamos la fe en ese amor idealizado en que ambos creíamos tontamente, la vida nos enseñaría a ambos que los cuentos de rosas no existen.





 

Notas finales:

Por favor, dejen un comentario, así subo otro capítulo lo más breve posible.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).