Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Pink & Purple [AleFanny] por MinnieSunny

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

He decidido escribir este pequeño Fanfic para simple entretenimient.

 

he dividido mis nombres y mi personalidad para darles vida a las dos protagonistas.

 

Es una historia de incesto y es, básicamente obra totalmente mía.

 

Espero que la disfruten mucho.

Notas del capitulo:

Hola queridos lectores, me he inspirado un poco para lograr este pequeño Fanfi que constará de tan sólo seis capítulos.

 

Para los que no sepan me llamo Alejandra Estefania y he decidido ocupar mis dos nombres y dividír mis características y personalidad en dos para darles vida a Alejandra y Estefania.

 

Esoero que lo disfruten, es la primera historia incetuosa que escribo así que... ¡De verdad espero que la disfruten y sea de su total agrado!.

He decidido escribir esto antes de dirigirme al bosque.

 

Tengo que contar y plasmar las historia de mi madre y mi tía porque, básicamente, es necesario hacerlo.
No diré mi nombre por el momento, se volvería irrelevante para esta pequeña historia.
Sé de ante mano que el incesto ya es un tema tabú y cliché.
Pero, permítanme este pequeño tiempo. Bien, comenzaré.

 


Alejandra y Estefanía son dos hermanas gemelas ; ambas poseían facciones idénticas, misma altura, mismo todo. Pero con gustos diferentes : Alejandra amaba el color rosa, pintar y dibujar, cantar era su mayor pasión. Jugaba a las muñecas y hasta en ocasiones creía que era una princesa de cuento de hadas, adoraba aquellas canciones Pop que sonaban en la radio. Y a sus escasos seis años era muy social, hacia amigos a todos lados, pero también era una niña muy tranquila y muy sensible. Siempre andaba con una sonrisa en su rostro.

 

Mientras que Estefanía era todo lo contrario, siempre antisocial, no era una niña común ni mucho menos fácil de tratar, a ella le gustaba estar en el jardín analizando todo y anotaba quién sabe qué cosas en una libreta (bitácora, así le denominaba). Le gustaba el color morado y tocaba el piano. La seriedad que ella desprendía era abrumadora y en cierta parte temible para los demás. No tenía amigos y sólo tenía a una persona favorita : Alejandra.

 

A pesar de que ambas tenían diferencias era verdad también que compartían cosas especiales : amaban leer, escribir, bailar juntas. Hacían un dueto increíble ; Estefanía tocaba el piano y Alejandra se encargaba de cantar majestuosamente. Ellas dos se complementaban.

 

Y como eran un complemento se llevaban las dos de maravilla. Su relación no les preocupaba pero, para sus padres y familiares y en sí para la sociedad era un problema a simple vista.

 

—Mamá ha vuelto a decirme que me llevará al psicólogo... –y la pequeña Estefanía contó con tremenda bronca, Alejandra soltó de forma estruendosa su Barbie patinadora cayendo al frío suelo.

 

Ellas se encontraban en el patio, Estefanía en la pequeña sección del jardín y Alejandra en el suelo grisáceo.

 

—¡¿En serio lo harán?!–Alejandra agitaba sus pequeños y pálidos brazos de una forma desesperada, parecía una actriz muy dramática de los años cincuenta.

 

—Si, Ale –los ojos de Estefanía salían pequeñas llamas de rabia. Ella sabía que era una persona normal, no necesitaba ayuda ni sermones de aquellos 'loqueros'.

 

Fanny, quiero ir contigo – Ale fue corriendo hasta Fanny. Ellas sólo y únicamente se podían llamar así. En la bitácora diario de Estefanía escribía a "A" (refiriéndose a su hermana) y "E" (refiriéndose a sí misma).

 

Estefanía sonrió borrando todo rastro de enojo y rabia. —Ale, te quiero siempre a mi lado –esto parecía una confesión adolescente pero, irónicamente ella sólo contaba con seis años cumplidos. La otra pequeña castaña sonrió y corrió con los brazos extendidos hacia su hermana, su abrazo sorpresa provocó una caída al pasto para ambas y a la vez ganaron unas sonrisas cómplices. Unas sonrisas llenas de felicidad.

 

 


***

 


Pasara lo que tenía que pasar, Estefanía y Alejandra siempre estaban juntas, crecían juntas. Y la etapa de la adolescencia vino hacer de las suyas junto con las hormonas alocadas.

 

—¿Crees que Alan es lindo, Fanny? –tras esa pregunta relativamente 'estúpida', Estefanía soltó su libro de biología.

 

"Sujeto no deseado No. 14. No, por supuesto que no es lindo."

 

—No, Ale. Sabes que detesto a los hombres– decretó Estefanía. Si había algo que odiaba era que Ale se fijara tanto en los hombres, no eran nada especiales. Los consideraba idiotas, patanes, mentirosos, sucios, dobles cara y a veces muy machistas. Fanny admiraba mucho más a las mujeres, sólo había un hombre al cuál admiraba y ese era su padre.

 

—Tú y tus cosas, Fanny –se echó a reír Ale mientras continuaba leyendo su libro de poemas.

 

Por estas cosas Estefanía en su bitácora escolar determinaba a los hombres cómo 'sujeto no deseado No....', y los iba numerando. Para tener catorce años tenía muchas bitácoras, "eso no es propio de una dama, Estefanía" eso le decía su abuela siempre que la iban a visitar. Por esto y más Estefanía dejó de convivir con su familia, se sentía oprimida por los roles de género que todavía existían y Ale era la única capaz de ponerse en su lugar, la única capaz de hacerla sentir querida y no tan rara.

 

'Rara', Fanny había descubierto hace algún tiempo que sentía atracción física y mental hacia su hermana, y eso, no era bueno, se le conoce como incesto. No era tema de espanto para ella ya que investigando descubrió que era común en el siglo XVI, pero Ale, ¿Cómo lo tomaría ella?. Francamente eso tenía miedo Fanny, quería borrar esas sensaciones de rareza con Ale para evitar asustarla y que la dejara sola en uno de los momentos que más necesitan apoyo los adolescentes. "Todo esto es hormonal, ya pasará. Ya pasará". De ese modo Estefanía se ponía el límite de la cordura.

 

—Ale.... –Estefanía dejó un largo tiempo suspendida la letra 'e' para mostrar aires de misterio.

 

—Uhmm– Alejandra seguía sumergida en esos versos llenos de amor y pasión con los que deleitaba a sus ojos y a su corazón.

 

—¿Crees que soy rara? –de verdad Fanny no le gustaba esa etiqueta. 'Rara'

 

—No Fanny hermosa. Es más, sí fueras un chico ya te hubiera besado y hasta quizás me tuvieras enamorada– esto último lo dijo con tono feliz y con una sonrisa muy cautivadora. Sus ojos le brillaban. Estefanía estaba estupefacta, sí fueras un chico, eso le había dolido un poco.

 

—¿Sólo sí fuera un chico? –Estefanía frunció el ceño. Compararla con un hombre era bastante indignante. Alejandra se dio cuenta del error que acaba de cometer sin ella quererlo.

 

—N-No es eso, Fanny –Ale movió sus manos frenéticamente, cómo si así borrara mágicamente el error.

 

—Entonces demuéstrame que no necesito ser un chico, bésame –retó Estefanía con seriedad. Una ola de calor invadió todo el cuerpo de Alejandra. Un recuerdo salió de su mente, días atrás se había encerrado en el baño ; se miró en el espejo y en un dos por tres pegó sus labios contra éste, y una sensación extrañamente cómoda se apoderó de ella.

 

Pues esa misma sensación regresó, miró a todos lados buscando gente, buscando una excusa válida para detener todas las mariposas y calores abrumadores que sentía en su interior pero ella sabía que no había nadie, el parque en el que se encontraban a esas horas estaba desierto es por eso que les gustaba, para poder leer de forma satisfactoria sus libros debajo de los árboles más frondosos.

 

Es un simple beso.

 

¿Qué hay de malo darle un beso a tu hermana? En otros países dar besos en la boca significa cultura pero desgraciadamente les tocó nacer en un país y sociedad llenos de tabúes y críticas.

 

El viento sopló de una forma dura pero con sensación romántica. Alejandra se acercó lentamente hacia su gemela, tenía los puños cerrados y cada vez más aplicaba más fuerza, sus labios temblaban ligeramente. Su mirada estaba conectada con la de Fanny. Había atracción en el ambiente, ¿Esto realmente es 'hormonal'?. Y de un momento a otro la punta de sus narices chocaron, es ahí dónde cayeron en cuenta que la distancia era milímetrica, sus respiraciones se juntaron, cerraron los ojos y lo temible, atrevido, excitante, prohibido y hermoso sucedió : ambas se dieron un beso. El viento volvió a soplar fuertemente moviendo las hojas de los árboles provocando una melodía suave.

 

Su primer beso.

 

¿Era normal que ellas sintieran miles de cosas revolotear por todo su adolescente y hormonal cuerpo?.

 

Y fue aquí el comienzo de la locura y aventura. El pecado y amor, de su juego llamado : "me gustas".

Notas finales:

De ante mano gracias por leer, si te ha gustado puedes dejar tu bello comentario 

 

See You Later 💜


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).