Prexus es un chico común y corriente, más de los que vez como protagonista de alguna novela o libro, o de alguna película de adolescentes basado en un libro muy vendido. Prexus mide casi 1.60 centímetros, con ello, es más bajo que el promedio de chicos a su edad. Prexus no se puede vestir con marcar de grandes tiendas puesto que su cuerpo, según su médico, pesa más que su estatura por lo que no es delgado… Tampoco es gordo, pero para la sociedad en que estamos, Prexus no serviría para una publicidad si la talla de su camisa es distinta a las letras S o M.
Prexus tampoco podría ser el rostro de una publicidad de cremas de afeitar, no tiene unas facciones sexys, ni eróticas, Prexus a sus 16 años es más bien bastante simple: Le gusta la fórmula uno, aunque a la mayoría de los chicos de su edad lo único que entienden por esto es la marca Ferrari y con deportivos en videos de música, Prexus le gusta leer novelas policiacas y criminales, aunque la mayoría de sus compañeros aún siguen atrapado en ciudad de papel, en crepúsculo o en alguna novela romántica donde la desafortunada resulta ser quien salvara el mundo; Prexus le gusta el voleibol, aunque por su condición física y estatura la mayoría piense que le gusta más saltar por las galletas en la alacena de su casa.
Prexus desde los 15 años es abiertamente homosexual y lo sabe toda su familia sin problema alguno; su padre no tuvo problemas en aceptarlo y a diario le pregunta si aquello no le genera problemas en la escuela. Su hermana mayor no le dice nada, solo de vez en cuando comparten ambos una opinión sobre algún chico si es que están en un centro comercial, Prexus nota que su hermana le encanta eso cuando salen, comparten risas y comentarios cuando hacen esto. Su madre sonrio y solo le pidió que no dejara sus estudios de lado, que el amor no alimentaba los estómagos, que los besos no aprobaban exámenes y que el sexo no traía dinero a casa… aunque algunos si les resultara…
Prexus nunca ha dado un beso y no es algo que le quite el sueño, sus compañeras se lo han preguntado algunas veces, pero él lo niega y sigue con su vida: no le quita el sueño ni se lo provoca aún más, a sus 16 años, el piensa más en qué carrera universitaria estudiaría, en como abrir una cuenta bancaria a su nombre con la mayoría de edad para ahorrar para una casa, un auto más adelante y quizás, un trabajo extra si quiere alguna vez conocer Alemania, ese país que tanto le gusta.
Prexus tiene amigas en su salón de clase, una de ellas es su más cercana, la conoce desde que terminaron la primaria y aun hoy es su compañera en la secundaria, ella siempre le dice que algún día un chico le pedirá ser su novio, pero sabe que lo dice porque Prexus nunca habla del tema… ella cree que no lo hace porque ve difícil aquella opción por su aspecto físico, Prexus no lo hace simplemente porque él piensa en cosas más importantes en su vida.
Prexus camina 45 minutos de camino de la escuela a su casa, en el transcurso, lee los titulares de los periódicos cuando se detiene en algún semáforo, compra la comida de su gato persa que se encontró en la calle y que adopto con la condición taxista de su madre de siempre tenerle su comida y limpiar su arena, Prexus además visita una librería cerca de su casa, no es muy conocido por el dueño ni se considera que sea un chico de libros, pero de vez en cuando busca alguna crónica policial nueva.
Prexus nunca se le ha declaro a nadie, si le ha gustado algún chico pero no lo dice, ni vive atormentándose de ello, ni creyendo que él le mirara y vivirán una novela de amor intenso contra todos los estándares de la sociedad donde el físico no atrae sino que el verdadero amor será el que triunfe.
Prexus este año conoció a un chico que se cambió de salón y se ha vuelto un amigo cercano, le tiene confianza y cariño aunque todo el salón (y su amiga Margaret por sobre todo) le han dicho que ese chico es gay y que seguramente siente algo por él.
Prexus hoy supo que su amigo es gay, y todo hubiera seguido como si nada si no fuera porque, lo escucho hablar con un grupo de chicas a las cuales les rechazo una invitacion porque “le gustaba un amigo suyo, y no podía ni quería ilusionar a nadie”
Prexus se sintio extraño y se pregunto, por un segundo, si el seria ese alguien.
Prexus desde ese dia, sonrie a su amigo y aunque no quiere, se ha comenzado a hacer ilusiones sobre si, quizas si ha llegado el momento en su vida de besar a alguien, de sentir un abrazo, Prexus se ha preguntado que pueda tener para que alguien le quiera, y a comenzado a darle mas segundos a su imagen frente al espejo, pensando en si en verdad su amigo sienta algo por el, seria quizás por su sonrisa, por su piel clara, por algo propio.
Prexus le ha confesado a su hermana, despues que esta notara que sonrie cada que Boris, su compañero y amigo, le envia algun mensaje, algun chiste, alguna broma. Su hermana le ha pedido que le cuente y el no duda en pronunciar las palabras que le hacen a si mismo, sorprenderse….
“Creo que me gusta mi amigo Boris”
Prexus ha pensado en todo esto los ultimos dos meses y hoy, que iba de camino a su casa conversando con Boris, se detuvo en la avenida 45 con esquina calle 8 en el semaforo en rojo, y le dijo a Boris que le gustaba… le gustaba mucho.
Boris es un chico que es timido, que es alto, que es atletico y que es simpatico con las chicas pues es caballeroso y tierno… Boris cuando nadie los ve, se apoya en el hombro de Prexus y le cuenta de que quiere ser Medico, que quiere trabajar en urgencias aunque la neuromedicina es otra cosa que le gusta mucho, Boris de vez en cuando, cuando las clases de lectura todos tienen su atencion en los libros, estira su mano hasta la de Prexus y acaricia sus dedos con los suyos, nota como Prexus lo observa y ambos mantienen la mirada con el otro, para despues dejarla sobre sus manos, que bajan por debajo de la mesa y escondidas de todos, se entrelazan.
Boris disfruta de ir a hacer tareas a casa de Prexus con sus compañeras o solo, la hermana de Prexus le hace siempre algun comentario, que la madre le reclama y el padre se rie… el solo tiene a su madre, y es las tres personas juntas…
Boris hoy recibió la declaracion de parte de Prexus, su amigo, de que le gustaba…
Boris se sintió demasiado nervioso y le negó… “Lo siento Prexus… pero, tu no me gustas…”
Prexus lo observo y miro posteriormente el piso, después el semáforo cambiar y caminar diciéndole que entendía y que quizas solo confundio su amistad.
Prexus no el dio mayor importancia de camino y siguio hasta su casa, sus clases, todo… dos semanas despues, supo que toda la clase lo empareja con Boris y que a este le incomoda algo la situacion, y Prexus se ha sentido ya incomodo con ello, porque por primera vez en su vida, las palabras le pesan…
“El chico gordo le gusta el nuevo”
“Boris el alto, Prexus el bajo”
“Si tuvieran Sexo, Prexus asfixiaría a Boris”
“Boris le gustan con carne en los huesos”
Prexus ve la incomodidad de Boris y le duele aun mas todo lo que pasa… quizas, quizas las palabras serian otras si el fuera delgado, si el fuera algo mas alto, las chicas seguramente les emparejarian y hasta se emocionarian de solo pensar que entre ellos algo podia pasar… Prexus ha comenzado a pensar que si tan solo fuera atractivo, quizas hasta esto seria un chiste en casa…
Hoy escucho, de que Boris le gusta un chico un año menor, que es del equipo de futbol, que es risueño, que es algo bajo pero delgado, que es castaño y que ya algunos chicos le han coqueteado.
Alguien le pregunta su opinion a Prexus sobre aquello … “total eres el mejor amigo de Boris, el te tuvo que contar que le gusta ese niño” ..
Prexus no responde por que su amistad con Boris va mas alla de los chismes pero le duele saber, que los gustos de boris son estandares que el no alcanzara…
Hoy en la mañana, Prexus de 16 años, 1.60 quizas, un peso de unos 70 Kilos, esta enamorado de su mejor amigo y este le rechazo, porque el gusta un niño de 1.68, castaño, delgado, quizas de unos 51 kilos y con un casi club de fans … Prexus no puede hoy mantenerse tan estable como siempre con esos temas, hoy siente que todo es mas que el… hoy se siente feo.