Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

K-141 por sasunarujonathan

[Reviews - 9]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Los personajes no me pertenecen.

Lamento de antemano las faltas de ortografía.

Gracias por leer.

 Caminando por la calle Naruto, entró en el Sweet Coffee, cerca de la avenida central. Ordenó un café mientras veía su móvil. 
 
 
— ¿Deseas algo más cariño? — La chica que le atendía sonreía a medias. Era una chica rubia, alta y complexión gruesa. 
 
 
— Solamente, linda. — respondió el rubio.  La chica dio vuelta y se fue a atender a un hombre que recién entraba.
 
 
 Pensando en cómo encontrar a Mito. Su nave se había estrellado cerca del mar, lejos de la ciudad. Por fortuna o por desgracia. Él quedo inconsciente, cuando  despertó su tía no estaba, lo que era probable que ella hubiese caído en otro lugar. Posiblemente ella lo estaría buscando también. Ése planeta era pequeño comparado con el suyo, mas, no era pequeño del todo. 
 
 
 
Debía darse prisa tenia tan sólo cuatro meses en tiempo humano para volver a su planeta. La batalla comenzaría y su tía Mito y él debían estar allí cuando eso empezara.  Mientras pensaba en cómo encontrar a su tía entre tantos lugares o viceversa. El sujeto que había entrado después de él, se sentó en frente suyo. 
 
 
— ¿Estás perdido muchacho? — preguntó el hombre. Joven, cabello negro corto, muy pálido, ojos negros, con vestimenta de alguien de clase media. 
 
— ¿Parezco perdido? — 
 
— Sí
 
— Con todo respeto, todos en esta ciudad parecen perdidos. 
 
— Eso es verdad. Sin embargo tú — lo señaló con el dedo — pareces más perdido que los demás.
 
— ¿Qué te hace pensar eso? 
 
— No lo has negado completamente.
 
— No estoy perdido.
 
— Ah…— El joven se acomodó mejor en su asiento y se aclaró la voz — Mi nombre es Sai. Y ¿El tuyo rubio? 
 
— ¿Importa mi nombre? 
 
— Es cortesía, tu madre no te lo enseñó. 
 
— Sí. Algo quieres… ¿Qué es?
 
— Creí que estabas perdido. Las personas siempre buscan a alguien y yo les ayudo a encontrarlos.
 
— ¿De verdad? ¿Cómo?
 
— Como un detective.
 
— ¿Eres detective?
 
— No. Pero, conozco a alguien que es buen detective, te puedo llevar con él por 20 dólares.
 
— ¿Eso es todo?
 
— Él te puede ayudar a encontrar el camino a casa.
 
— Yo no estoy perdido — alzó una ceja rubia. Y con una elegancia poco común lanzó un bostezo. — Sólo estoy cansado.
 
— Bueno, si sabes de alguien que ocupe de mis servicios avísame.
 
— ¿Tus servicios?
 
— Sí. Ya te lo dije, puedo llevarte con el mejor detective de toda la ciudad. — el rubio ladeo la cabeza y entrecerró los ojos.
 
— ¿El mejor de toda la ciudad?
 
— Sí. Su nombre Sasuke Uchiha.
 
— Dame 20 dólares y te llevo con él.
 
— ¿Eres adicto o algo así?
 
— Sólo busco maneras de ganarme la vida.
 
— Estafando a personas como yo.
 
— No te estoy estafando.
 
— Algo me dice lo contrario.
 
— Déjame demostrártelo. — Naruto suspiró. 
 
— Escucha, Sai. No estoy perdido. Busco a alguien, simplemente eso.
 
— 20 dólares, sólo 20 dólares. — Naruto dejó dinero en la mesa y salió del lugar junto al otro hombre.
El rubio le dio 20 dólares y el hombre lo llevó hasta la entrada de un edificio. Le dijo que preguntará por el detective y lo encontraría.  Ajá, pan comido, si no hubiese sido que la recepcionista le dijo que ya esa persona no trabaja ahí.
 
 
— Un hombre me dijo que trabaja aquí, le di 20 dólares. — Naruto le informó a la mujer, esbelta, castaña, ojos verdes, labios muy rojos y actitud impaciente.
 
— Pues cariño, acaban de estafarte, hace más de un año que Sasuke dejó de trabajar aquí. Así que vete por donde entraste.
 
— Necesito encontrar a una persona.
 
— Lugar equivocado para buscar.
 
— Señorita podría decirme dónde trabaja o vive ésta persona. Hablaré con él, si me quiere ayudar bien y si no, buscaré a alguien más.
 
— Ese hombre dejó de trabajar porque se aburrió del trabajo. Le pareció aburrido en un momento, además no es como si le hiciera falta el trabajo su familia es dueña de una empresa privada de seguridad. No puedo decirte dónde vive. Por favor vete ya, o tendré que llamar a seguridad para poder seguir con mi labor. — El rubio cansado suspiró y se acerco a la mujer, sus ojos fijos en ella. La chica borró su expresión de fastidió y parpadeó.
 
— Dame la dirección o número de teléfono ya.
 
— Sí… — susurró mientras buscaba en su ordenador. 
 
— En el edificio Rock Stars. En la avenida central, está cerca, piso 33, departamento 16.
 
— Ahora me entiendes, qué bonito. Consígueme un coche que me lleve directo hasta ahí.
 
— Sí, señor. — La mujer de ojos verdes, agarró el teléfono y tecleó un número. — listo señor.
 
— Gracias, cariño, que pases un buen día.
 
— Sí, señor…— parpadeó de nuevo incrédula, viendo como aquél hombre se iba.
 
El coche estaba afuera un auto negro, Uber sencillo. Subió y suspiró. ¿Por qué los humanos eran tan estresantes entre ellos mismos?
El coche dio vuelta en dos esquinas y lo vio. Muy tranquilo el bastardo.
 
 
— ¡Detente aquí! — bajó del auto — ¡Espérame aquí! — a paso rápido se dirigió, Sai lo vio y empezó a correr, mas, no avanzó mucho, al escuchar la voz del rubio.
 
— ¡Te ordeno que te detengas! — Sai quedó estático, empezaba a sudar.
 
— ¿Pero qué…?
 
— Me estafaste.
 
— No, yo …
 
— ¡Cállate! — El pelinegro frunció el ceño.
 
— ¿Eres un brujo o algo así?
 
— Algo así. Escucha, es de mala educación cambiar de tema, ¿Tu madre no te lo enseñó?
 
— Sí.
 
— Vendrás conmigo, aún no sé que haré contigo.
 
— ¿Qué hacer conmigo? ¡¿Vas a matarme por veinte dólares?! 
 
— No, quizá te mate por verme la cara de perdido. ¡Vamos! —ordenó Naruto.
 
 
Ambos subieron al coche. Y éste siguió su destino.
  
 
Notas finales:

¡Gracias por leer!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).