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Pasajeros por kaoryciel147

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Notas del fanfic:

Hola a todos, aquí inicio un nuevo camino con este fanfic, por supuesto continuaré con mis otros proyectos, este tendré menos de 20 o a lo mecho 20,al menos ese es el plan. 

Si bien tome de base la idea de la película Pasajeros, cuiertamente, como ya me es costumbre, comenzará a distanciarse de la linea que sigue la pelicula, de hecho desde el primer capi sucede!!!

Es la priemra vez que hago una historia futurista espeor les guste

Notas del capitulo:

Empezamos con la historia. Acompaña a Naruto en el despertar de su nuevo mundo!!!

PASAJEROS

Una nueva Era, donde las fronteras de los seres humanos no se limitaban en su natal Tierra sino que iba más allá de lo que cualquier generación anterior pudo haber imaginado, fantaseado o soñado. Las naves espaciales, la energía sostenible y las colonias espaciales eran parte de la cháchara común entre los terrícolas, aunque no todos tuviesen el valor de tomar un transatlántico espacial.

 

Justamente una silenciosa bestia espacial de enorme tamaño cobijaba en sus entrañas a 10 mil afortunados que habían tomado la decisión de iniciar desde cero en un nuevo mundo llamado “Konoha 10”. El nombre de la colonia espacial se debía a la afición del magnate por la reliquia cultural japonesa, así que en honor a sus gustos y la naturaleza de su amada persona decidió fundar aquella colonia de ensueño donde las personas con suficiente dinero o sin miedo al trabajo duro podrían limpiar sus vidas, perdurar a través de muchos años y fundar un mundo más agradable que la Tierra, o al menos a su gusto (pensamiento de muchos de los magnates que se habían embarcado).

 

No piensen que la Tierra había dejado de ser el Centro del universo de los seres humanos,  la cual, si bien había avanzado muchísimo y sería por siempre la cuna de la raza humana, estaba sobrepoblada, sus recursos eran controlados para que pudieran alcanzar a toda su población. Incluso con dinero, no se podía conseguir las enormes y lujosas viviendas que siglos atrás los magnates podían poseer. En todo el mundo existían límites para los tamaños de viviendas, control de natalidad, y un número exacto de cuantos recursos se podían comprar. (No había otra manera de que el planeta Tierra continuase sosteniendo vida humana)

 

“Konoha” era un proyecto enorme que había sido fundado por un magnate japonés llamado Jiraiya Sannin junto a su amado y caprichoso esposo científico Orochimaru Sannin y su colega, hermana política, Tsunade Senju. Ellos tres habían dedicados sus vidas a este mega proyecto, por lo cual sus nombres siempre quedarían grabados en la historia.  Aunque ellos no habían fallecido aún, decidieron criogenizarse (poner a invernar  su cuerpo) para poder ver el resultado de sus colonias fundadas, dirigidas por los descendientes de sus familiares, sus cuerpos, de hecho, viajaban para ser despertados en el Konoha 10, la décima colonia espacial humana que había  fundado su ambicioso proyecto.

 

A través de los siglos de historia humana,  eran sin duda tres de las personas más ricas poderosas y veneradas de todos los Tiempos. Hace 200 años iniciaron el proyecto, pero solo habían vivido humanamente 50 años, siendo despertados por temporadas cada treinta o cuarenta años, ellos habían vencido  a la mortalidad humana, al menos por el momento. Quizás descubrieran como perdurar aún más, recurso no les faltaban.

 

Cada que despertaban ellos veían el mundo cambiar, sus acciones crecer y nuevas personas a su servicio, en su último despertar hace cuarenta años fue cuando Tsunade, la médica de la sociedad conoció al amor de su vida un hombre en sus 40 llamado Dan que había entrado a trabajar para Konoha. Se casaron y ella lo convenció para que tomase el largo y frío descanso hasta que fuesen despertados en Konoha 10.

 

¿Cómo es que no perdían su dinero, sus acciones y derechos? Bueno, ellos no eran las únicas personas que tomaban la opción de criogenizarse. Artistas, modelos, entre otros accedían a esta inventiva. Pero no te confundas,  no diría que hacerlo fuese algo común pero tampoco inalcanzable, por tanto las leyes habían tenido que modificarse para que alcancen siglos en una misma persona.

 

Pero no era solo a estos memorables científicos a los que contenía el Avalon, la silenciosa nave que navegaba sin detenerse a través de las sombras y luces del espacio infinito. Por supuesto, estaba el capitán de la Nave y su tripulación compuesta por 150 personas, otras 100 estaba compuesta por científicos, médicos, biólogos y todos los especialistas de las ciencias que se necesitaba como precaución. Por otro lado, el círculo de  pasajeros estaba compuesto por 4 niveles cultural-social-económico. La clase A, por supuesto, estaba reservada para aquellos que poseían una fortuna personal; con sus enormes cuentas bancarias siendo trasladadas a su nueva aventura podrían acceder a lo que deseasen en su nuevo planeta y que en la Tierra estaba limitado. Nuevamente podrían obtener los lujos, vivencias y diversión que deseasen. Ellos, en su mayoría, eran magnates, hijos de estos que iban a llevar sus empresas más allá de la Tierra, fundar nuevas sucursales, artistas, escritores y demás famosos, algunos incluso invitados por ser personajes icónicos, reconocidos, etc; luego estaban las personas de clase B, las cuales habían pagado a cuotas su pasaje y permanencia, como quien compra un lote de terreno desde la tierra contrato para darle a su familia o compañero una buena calidad de vida, estaba compuesta por profesionales, personas con medianos y pequeños negocios, intelectuales, etc. Las personas de clase C eran personas que huían de sus orígenes, que por razones personales habían firmado un contrato de pago de servicios en el nuevo planeta, a la nueva sociedad le convendría, y es que  un nuevo planeta que ofrece  diversión sin fin no puede funcionar sin servidores que trabajen a pesar de los numerosos androides ayudando, por lo cual estaba compuesta por profesionales jóvenes, técnicos, personas normales, “familias” enteras que habían emigrado; la clase D finalmente no había tenido los recursos económicos ni siquiera para dar una inicial, pero ellos, por motivos desconocidos, habían decidido huir de la Tierra a cambio de una vida de servidumbre; por supuesto protegidos por las leyes de trabajo, por lo cual, si bien estaban endeudados de por vida, tendrían comida, techo compartido y alguna que otro servicio de relajación. Eran un nuevo mundo, se necesitaba de todas las clases sociales para mantenerlo en el equilibrio que el ser humano conoce.

 

El espacio era inmenso, pero el Avalon no era un montón de maquinaria pesada y obsoleta, ni tampoco era un principiante, manejaba de forma tranquila y automática, pues la tripulación solo sería despertaba a siete meses de llegar al nuevo planeta, y es que cuando te menciono que era un re inicio lo era, ya que el viaje constaba de 100 años humanos, dentro de los cuales los pasajeros  dormirían 99 años y medio, con seis meses libres para que comiencen a disfrutar del crucero más lujoso espacial, incluso los de clase D podrían tener una pequeña probada de ello.

 

Así pues, las personas que viajaban y dejaban familiares y amigos que no creían en la criogenización probablemente nunca volverían a verlas, incluso seguramente esas queridas personas estarían ya ancianas o muertas.

30 años humanos el Avalon condujo sin ningún tipo de problema, como una maquina diseñada por Orochimaru Sannin, el amado esposo de Jiraiya, esta iba en su tercer viaje, fue especialmente diseñada para que los tres creadores de los viajes espaciales por placer pudiesen llegar tranquilamente a Konoha 10 y por supuesto, inaugurarla como era debido.

 

Sin embargo, los humanos nunca alcanzarían la perfección de los dioses que alguna vez soñaron y veneraron, por tanto las creaciones humanas, máquinas y computadores, eran imperfectas también. El Avalon hizo un mal cálculo y atravesó una inesperada condensación gaseosa que hirió al potente monstro que cargaba con cientos de vidas.

 

Calculando los daños,  el Avalon logró atravesarlo: condensando más energía de la que debía, superó, triunfo y continuó, simplemente almacenando información de daños leves en su memoria para en un futuro muéstrasela al capitán Kakashi y a los tres Sannin.

 

Solo faltó unos días para que aquel daño hiciera algo sumamente inesperado, lo que para una computadora era solo un memorándum técnico causaría el cambio de planes y vida de un ser humano que dormía apaciblemente, quizás dibujando una mueca divertida, soñando en su fría capsula con el mañana…

De pronto, el aire al que estaba conectado se desbloqueó, el líquido que corría por sus venas se desconectó, la capsula estaba abriéndose mientras comenzaba el lento proceso de descongelamiento. Aspiró profundo y extrañado, sintiendo una apremiante sensación de ahogo;  sus pulmones, finalmente, luego de tantos años comenzaban a funcionar pero parecían que habían olvidado como obtener el oxígeno necesario para mantenerlo con vida. No fue fácil, sintió unos segundos de ahogo, su cabeza dolía, su mente estaba ansiosa y confundida; sus ojos no lograban ubicar nada, parpadeaba confundido intentando entender lo que a su alrededor había, su cuerpo se sentía frío y tieso. El pánico invadió su ser hasta que  escuchó una suave voz femenina, captando rápidamente su atención.

—Tranquilo, señor Uzumaki, Naruto. Es completamente normal que sienta nauseas, dolor de cabeza y le cueste respirar pues ha estado durmiendo por casi 100 años. Es un proceso usual, debe de guardar la calma y seguir atentamente mis consejos.

 

Se aferró a su voz, tenía algo tan dulce en su tono que su cabeza dejó de doler, sus pensamientos iniciaron a ordenarse, catalogando recuerdos, sueños y realidad. Lo recordó, poco a poco, él era Naruto Uzumaki, hijo de Minato y Kushina.

 

—Usted es Naruto Uzumaki, pasajero número 3600, clase B, bienvenido, soy Shiori su asistente de viaje, permítame llamarle Naruto. Nos encontramos en el Avalon, nave propiedad de la compañía Konoha, rumbo a Konoha 10, colonia terrestre, propiedad del grupo Sannin.

 

Su corazón seguía agitado, pero a cada palabra de la muchacha se tranquilizaba, sus ojos finalmente pudieron observar al frente, veía un rostro de mujer joven, de rasgos asiáticos, intentó tocarla, atravesando de inmediato la pantalla. Soltó un sonido de sorpresa, pero recuperó algo de control, sus brazos se sentían torpes, no creía ser capaz de tener fuerza para ponerse en pie por el momento. Recordó unos brazos estrechándole, algunas lágrimas mojando su hombro, risas, un “tebane” y un “suerte, hijo”. “Ah,… mi despedida de la Tierra”, recordó.

 

—Bien, Naruto hemos terminado de chequearte, estas completamente sano, has dormido 100 años, te llevaremos a tu cabina para que puedas recuperarte. Recuerda que estamos en tramo final del viaje hacia Konoha 10 donde te espera una nueva vida, un nuevo mundo para crecer y ser feliz.

 

“Ser feliz” sonrío perezosamente: aquello había sonado hermoso. Sus recuerdos del porque se encontraba en un crucero interracial llegaron. Él era un aventurero, jamás domado, sobrepasó las expectativas de sus padres, amigos y familiares; la Tierra y los planetas aledaños habían sido muy poco para él, quería construir algo grande y se terminó embarcado ahí. No tenía razones ocultas ni un pasado desgraciado, no fue un hombre millonario, pero tampoco poco próspero.

 

Alzó su mirada y observó las imágenes de la tierra prometida,  llena de campos verdes que le esperaba en la nueva colonia espacial, nuevos paisajes, nuevos descubrimientos, un mundo donde podría poner sus habilidades y creatividad a disposición de la humanidad.

 

—El tramo final del viaje durara 6 meses, en los cuales disfrutaras de las más lujosas comodidades que ofrece el Avalon. Recuerda que tu grupo es 1B, con tus compañeros de clase podrás entablar amistad y quizás encontrar un compañero o compañera para esta aventura.

 

¿Compañero? ¿Compañera? Sonrío, quizás sí, quizás no, no había huido de una pareja ni tampoco deseando una, pero por supuesto no se negaba a compartir buenas experiencias con alguien.

 

En esta nueva época, la mayoría de las personas se declaraba como una especie de lo que en siglo XXI llamaban  “pan sexual”, aunque con ciertas  tendencias o preferencias, en todo caso, nada estaba prohibido en cuanto a la práctica sexual. ¿Por qué contenerse a experimentar con su sexualidad? Era lo que pensaba la mayoría de personas de esos tiempos. De hecho eran muy pocos los de clase B, los que como él, nacía de una familia nuclear de pareja establecida. Muchos llegaban al mundo, solos, como su padre, como parte de la época en que un gobierno decide que es momento de que bebes lleguen al mundo. Así mismo el sexo biológico era algo bastante menos valorado, al igual que la supuesta capacidad reproductiva de las mujeres, quienes eran consideradas igual a los hombres, de hecho el poder reproductivo era algo manejado políticamente, sanitariamente y económicamente; y todos estaban de acuerdo con ello. El intenso control de natalidad era algo necesario para el mundo.

De esta manera solo después de una rigurosa investigación es que se permitía a una persona, pareja o triada criar a un bebe.

 

Su capsula continuó moviéndose, llevándolo fuera de las enorme salas de criogenización, donde todos los pasajeros dormitaban en su capsula personal. Naruto sentía cada vez mejor sus músculos, deseaba estirarse. Ya fuera en un pasillo color plateado, unas luces blancas en sus bordes le marcaban un camino.

 

—Por favor, siga el camino marcado.

 

La capsula se inclinó levemente, instándole a utilizar sus piernas luego de tantos años, con mucho esfuerzo sacó la pierna derecha, la sintió adormecida pero pudo sostenerse, luego la izquierda, sentía que iba a derrumbarse, pero aspiró fuerte y se mantuvo en equilibrio, sonrió animado por su logro.

 

—Felicidades, Naruto. Ahora continua, seguiré hablándote por el camino a través de tu pulsera de identificación.

 

Naruto levantó su muñeca derecha, dándose cuenta que llevaba una pulsera plateada metálica algo fría. Se apoyó en la pared plateada y continuó caminando. Una puerta se abrió.

 

—Bienvenido a tu cabina, aquí pasarás el resto del viaje cuando no estés disfrutando de las diversiones del Avalon.

 

Era una habitación sencilla, tal y como la había pedido cuando lleno las formas de ingreso al Avalon. Tenía una cama simple, bien ordenada, un estante bloqueado con seguridad dactilar un cuarto que debía de ser el baño, un pequeño frio bar y un espacio vacío donde en automático la joven que le había guiado apareció a cuerpo completo.

—Por favor, haga el check-in aquí para proceder a liberar su equipaje. —Le indicó.

 

Naruto se acercó a la pulsera de la chica holograma. Luego de un clic, los estantes, el frio bar y el baño quedaron desbloqueados. Sonrío, todo ya estaba ordenado y listo para ser usado.

 

Un vaso cayo de un dispensador y se llenó automáticamente de un líquido rojizo.

—Es agua pro biótica, le ayudará a eliminar cualquier bacteria y a restablecer su organismo, preparándolo para que pueda alimentarse por sí mismo.

 

Sujetó el vaso, lo llevó a sus labios y tomo rápidamente, provocándose un poco de tos. Tenían un sabor poco agradable, pero era necesario. Dio resultado, pues el nudo en su estómago se deshizo.

 

—Muy bien, Naruto. Descansa, mañana a primera hora  empezará tu inducción con tu grupo para poder explicarles sobre Konoha 1, prepárate para tu nueva vida, trabajo y demás;  y por supuesto para que los conozcas. Ya que tu grupo está conformado por personas que comparten tus gustos e intereses no dudo que te sea satisfactorio entablar una amistad con ellos.

 

Naruto nuevamente asintió, sentía el peso de un enorme cansancio cargar en sus hombros por lo cual se dirigió a su cama, retiró la sabana y se abandonó al sueño.

 

El avalon contaba con un contador de tiempo a modo humano, es decir, que de igual manera que repartía el calendario en 12 meses de 30 o 31 días, excepto por febrero, además de dividir el día en 24 horas. Por lo cual para no afectar el delicado sistema humano, dividía el día en mañana, tarde y noche. Naruto había sido despertado durante la “noche” así pues, horas más tarde, al “amanecer” volvía a despertarse para iniciar su primer día dentro del Avalon.

 

Una voz masculina anunció el tiempo, y la música que ponía, tal cual como había descrito en sus formularios, era una de sus canciones favoritas. Con ánimo se levantó de su cama, sus piernas ya se sentían fuertes, aunque su estómago estaba hambriento. Se dirigió rápidamente al baño animado por la música, se desnudó e ingresó a la ducha. El agua templada, ni fría ni caliente fue el toque final para que sus músculos despertasen y se contrajeran ansiosos por obtener acción.

 

— ¡Vamos´tebayo!

Terminó cantando al tiempo que se enjabonada y luego remojaba. Se sentía curioso porque tipo de personas conocería, mujeres, hombres, intersexuales transexuales, que gran variedad estaría conformado su nuevo círculo social, seguramente serían personas divertidas como él, con buen sentido del humor, que les gustase la naturaleza, el construir, diseñar, etc.  Quizás alguien atractivo.

 

Al terminar de bañarse se acercó al espejo, deseaba verse presentable, además utilizar su ropa propia le hacía sentir más como él mismo.  Tomó una polera y un par de jeans, la verdad era que tenía un estilo bastante sencillo, era de ese tipo de tribu que le gustaba usar ropa simple, no solo funcional, solo que se viera bien pero sin utilizar maquillaje, o poner demasiada atención en el corte, peinado del cabello. Su estilo se debía a que sus padres, ambos habían pertenecido a ese tribu urbana de estilo.

 

Una vez listo se encaminó a la salida, siguiendo las instrucciones de su asistente holográfica llegó a un aula, pasó su pulsera por la puerta para abrirla y suspiró, tragó y se dio valor para conocer a las nuevas personas que ocuparían su vida.

 

No estuvo preparado para no encontrar a nadie.

 

Abrió los ojos,  estaba sorprendido ¿acaso se había equivocado de hora?

Sin embargo, como si el aula estuviera llena de personas, una estructura digital apareció en la pantalla del frente.

 

—Bienvenido, clase B. En esta inducción les explicaremos como funciona la colonia Konoha 10 y su estructura social y política.

—Disculpe ´tebayo—Hizo alzar su voz—Debe haber algún tipo de error

—Por favor, las preguntas serán al final así que tome asiento

Naruto confundido paseó su mirada por el aula vacía como si mágicamente aparecería alguien con quien intercambiar sus dudas y miedos.

La maestra continuó explicando cómo estaría dividida la ciudad fundada, por Naruto no podía oír nada, sus manos temblaban. Así que no soportando más se puso de pie.

— ¡Aquí no hay nadie!—Gritó exasperado y nervioso.

—Todos estamos aquí, tranquilízate, guarde la calma.

— ¡Estoy solo ´tebayo!

—Estamos todos juntos. —Replicó la presentadora holográfica.

 

Apenas unos instantes después, la presentadora continuó con su monótono discurso. Naruto se puso de pie, abandonó el aula y corrió por los pasillos desesperado, todo era silencio, al menos del tipo humano. Solo escuchaba los pequeños robots cumplir su función de limpieza. No había seres humanos más que él ¿Por qué?

 

Gritó fuertemente buscando señal del error. Finalmente terminó en el hall principal, nuevamente gritó hasta que sus ojos divisaron un robot suspendido de apariencia amigable que decía brindar información. Hizo la pregunta pero este solo el respondía que se encontraban en camino a Konoha 10, finalmente le dijo que existía la biblioteca o más bien el buscador universal, una sala especial donde le resolverían sus dudas. Por su parte, una idea comenzó a anidarse en su mente, pero no quería que creciera pues el pánico inundaba en mayor medida en su ser.

 

Ingresó al Buscador universal, una sala oscura, había un maquina en el centro de tono plateado, la activo con su pulsera, una voz le dio la bienvenida y le invitó a preguntar. Esta vez intentó hacer una pregunta más certera.

 

— ¿A cuánto tiempo de  Konoha 10 estamos´tebayo?

—A 70 años.

 

Sus ojos azules perdieron brillo, agitado salió corriendo, buscando la ayuda de su pulsera regresó a la Sala de Internación, y como había sospechado, todos estaban bien dormidos: él era el único ser humano que había sido despertado. Sin poder evitarlo sus ojos se llenaron de lágrimas de impotencia. Apretó los puños, tercamente salió e inició a llamar, perdiéndose entre los largos pasillos silenciosos.

 

Cuando caminaba balanceándose sin sentido,  un sonido llamó su atención era como si alguien limpiase un vaso. Se dio cuenta que se encontraba en la zona de placeres del Avalon. Camino lentamente, su corazón se hinchó cuando al ingresar a un bar lujoso observó a un hombre de cabellera blanca limpiar un vaso.

— ¡Que alegría ´tebayo!

—Ohh, al parecer un cliente bastante joven llegó. Haber muchacho ¿que deseas tomar? La casa invita.

 

Naruto parpadeó confundido.

— ¿Por qué preguntas eso? ¡Estamos en crisis, somos los únicos despiertos!

EL barman solo río audiblemente.

 

—Oye, oye, muchacho eso sonó raro y además no lo es. Déjame servirte una copa.

— ¿Por qué estás tan poco preocupado?

Naruto se acercó, fue por ello  que pudo notar que la parte de abajo del androide no estaba finalizada.

 

El joven hundió su cabeza en sus brazos, iba a tener que aceptar su realidad: era el único pasajero humano despierto y aún faltaban 70 años para llegar a su destino.

 

— ¡Soy el único aquí! mi maldita capsula de dormir se averió ´tebayo

—Por supuesto que es imposible. Esas capsulas las diseño el más sexy científico de todos los tiempos, mocoso.

Para agregar aquel barman parecía tener personalidad propia.

— ¿Ves a alguien más aquí, anciano?

El barman no pudo responder.

Antes de que el barman pudiera decir algo más, Naruto  se puso de pie y salió no iba a darse por vencido, estaba decidido a que repararía esa capsula, se pondría a dormir de nuevo y por fin podría iniciar su vida llena de riqueza en Konoha 10.

“¡Voy a volver a dormir, se cómo sea  pues soy Naruto Uzumaki´tebayo!

………………

Gracias a la biblioteca universal con la que contaba había podido ubicar un mapa genérico para los pasajeros sobre la nave espacial donde viajaba, Era simplemente apabullante su situación pero Naruto no se caracterizaba por huir de sus problemas, sino de con vigoroso espíritu enfrentar cada situación.

 

Una sonrisa escapó de sus labios cuando finalmente llegó al área de descargas, era como una biblioteca más especializada virtual que seguramente hubiera sido compartida por él y sus compañeros de área si se hubiera despertado en el momento ideal. Naruto había estudiado ingeniería mecánica-electrónica.-robótica, era un especialista a totalidad, aunque se debe confesar que  pudo lograrlo no precisamente por ser un ”cerebrito” sino por su terquedad y extrema curiosidad, le encantaba crear cosas, encontrar soluciones, nunca detenerse.

 

Descargó los archivos suficientes, se dirigió nuevamente a las cámaras de criogenización pero no era suficiente, tenían una configuración especial. Así que  investigó un poco más, supuso entonces que debía encontrar el manual en papel. La sociedad había avanzado y si bien era cierto que la mayoría utilizaba libros, revistas, tratados, etc. de manera virtual en sus tabletas enrollables, manuales particulares eran manejados aun en escrito y ello por problemas de hackers o de perdida de información. Naruto invirtió dos largas semanas encontrando aquellos manuales, teniendo que des configurar puertas de acceso y demás. Finalmente los encontró, se dio la pesada tarea de leerlos.

 

Para tener mayor comodidad, se dirigía siempre  al gran comedor que la nave tenía, mención aparte fue la decepción que se llevo cuando no pudo tomar el desayuno que deseaba sino que tuvo que tomar un desayuno bastante pobre, suposo que eran cuestiones de categoría social, la mayoría de desayunos exquisitos que venían con el programa y el viaje eran para la clase A, no quería imaginarse que clase de desayuno servían a los de clase más bajas que él.

 

Finalmente ya con las herramientas listas alrededor de su cámara de criogenización se dispuso a arreglarlo. Gracias al manual encontró la exacta configuración. Grito animado cuando su capsula, luego de tantos intentos, finalmente  se prendió. Sin perder tiempo dejó todo de lado y se metió, la cámara se cerró; él se acomodó esperando que el largo sueño le llegase y ello solo fuese una divertida anécdota que contar a sus futuros amigos. Sin embargo, luego de unos minutos dentro de la capsula el oxígeno escaseó, abrió los ojos aguados...¡estaba ahogándose!

Esa cámara solo había prendido pero no podía someterlo a dormir nuevamente ¿Qué diablos pasaba ahí? ¿Cómo era posible que no pudiese mandarlo a dormir, quizás realmente los manuales de configuración no estaban ahí, quizás solo los creadores que dormitaban muy protegidos en la sala de mando podrían restablecerlo.

 

¡Gritó desesperadamente! Salió de la sala de hibernación y se dirigió con una furia inigualable a la sal de mandos.

 

 La enorme puerta que protegía a la tripulación donde estaban también los creadores no se abría. Solo habían conseguido un par de moretones por sus desesperados intentos.

Lo había intentado absolutamente todo: usando toda su fuerza bruta, con palanca, incluso había flameado pero simplemente no se hacía  ni mínimo de daño. Así también intento hakearla usando un conector externo, pero realmente estaba completamente protegido, solo podía abrirse desde adentro.

Lloriqueó recordando a sus padres. Pero pronto, luego de limpiarse las lágrimas con brusquedad volvió a intentar abrir la puerta. Sin ningún éxito.

 

Jaloneó sus cabellos, gruesas lagrimas cayeron por sus ojos, la desesperación lo envolvía, terminó con una copa en su mano y el robot bartender observándolo.

—Estoy jodido ´tebayo. Voy a morir haciéndome viejo como una pasa sin ver nada más que esta nave, sin conocer a nadie en especial

—Oh vamos, no hay mal que por bien no venga, mocoso. —Consoló el bartender, volviéndole a llenar su vaso de trago.

— ¿Qué bien puede haber sino logró dormir nuevamente? Voy a envejecer lentamente y quizá cuando sea ya un anciano recién todos despertaran jóvenes y relucientes, incluso esos estafadores…—Gritó lleno de frustración.

—Naruto, no seas tan pesimista.

—Nunca lo he sido, siempre he visto lo bueno peor qué de bueno podría tener esto…

—Quizás es que estas viendo siempre al futuro, a tus metas lejanas, a lo que quisieras tener pero no puedes, deja de torturarte con lo que no puedes solucionar, concéntrate en lo que tienes.

 

Aquel robot de cabello blanco había sonado como un padre regañándolo. Aunque no precisamente como el suyo, Minato era una persona sabia pero mayoritariamente calmada. Naruto los extrañaba, no quería pensar que ellos probablemente… bueno, a pesar de no haber llegado a su destino, en la  Tierra ya habían pasado 30 años.

 

Sin embargo en la situación en la que estaba quizás valiese la pena escuchar a aquel robot. Suspiró y pensó tenía habilidades que quizá podría permitirle disfrutar de comodidades que en su categoría social no le hubieran permitido si todo hubiera sucedido como lo esperaba, sonrío con una pizca de travesura en sus labios.

 

—Nos vemos, ero-sennin, voy a explorar este pedazo de chatarra.

 

Ninguna puerta le detuvo, excepto la de la habitación de la Tripulación por supuesto. Se mudó a la suite más lujosa que la nave tenía, esta incluso tenía un jacuzzi privado con pequeñas cataratas que daban masajes. Después exploró al zona de diversiones: había  todos los juegos posibles, se concentró en la jaula de béisbol y en la de básquet. Luego se metió al karaoke el cual te puntuaba y tenía publico virtual que coreaba tus canciones junto a ti, fue energizante. Vistito cada tipo de restaurante, los cuales eran atendidos por robots, no lo negaba la comida no estaba mal, comió ramen hasta hartarse lo cual era increíble.

 

Y así, día tras otro, probando juegos, comidas, comodidades y sin embargo nada  sentía llenarle, faltaba alguien a su lado, quien sea un amigo o  amiga, quien sea un ser vivo que festejara junto a él, alguien con quien divertirse, saltar, pelear, llorar y sufrir. Poco a poco la sensación de ahogo crecía, las “diversiones” comenzaron a aburrirle, se aprendió de memoria como ganar cada juego, recorrió los menús de todo los restaurantes, probo los tragos e incluso se embriago hasta quedarse inconsciente, nada tenía sentido. Ni siquiera los lentes de realidad virtual para ver porno de todos los tipos, jamás se compararían a la compañía de un buen amante, tenar un cuerpo cálido entre sus brazos, ver los sonrojos, escuchar verdaderos gemidos, sentir la piel sudada de un cuerpo contra el otro.

 

Poco a poco dejó de importarle el arreglarse, rasurarse o tan siquiera bañarse, recorría toda la nave como un sonámbulo con ojeras, la barba rubia crecida, las babas pegadas en su mentón, el cabello desordenado y el cuerpo apestoso por semanas sin baño. Solo comía siguiendo un instinto básico de supervivencia, el cual poco a poco desaparecía.

 

En un arranque maldijo con lágrimas en sus ojos y estrelló una botella de algún licor que había estado tomando.

 

Sin darse cuenta había llegado nuevamente a la cámara donde permanecían todos criogenizados, indiferentes a su dolor y desesperación.

 

Su mirada se dirigió hacia donde había caído la botella, era la puerta hacia una de las diversiones que no se había interesado en ingresar durante estos meses de libertinaje. Uso su pulsera y la puerta se abrió, al parecer era abierta para todos los pasajeros. Una conocida voz, su asistente le explicó que se trataba de una caminata sobre la cubierta de la nave que incluso podría flotar en gravedad cero en el espacio y que el traje que usaría le mantendría seguro de las inclemencias del espacio.

 

Sin meditarlo más se desnudó y se puso el traje, era ligero para la contextura que tenía, le mantenía arropado y el oxígeno entraba sin problemas. Siguiendo el camino iluminado abrió la compuerta, su asistente le explicaba que el cable lo mantendría seguro y conectado a la nave. Se preguntó si en otra falla de la nave el cable se rompería y él quedaría flotando en el espacio para siempre, se sorprendió de notar que no le importaba demasiado.

 

Continuó su camino, la puerta se abrió, paso su ID y nuevamente otra puerta se abrió mientras la anteriores se cerraron detrás suyo la fuerza del exterior le atrajo pero su traje le mantuvo pegado a la cubierta, se asomó por esta era como un cañón, un salto al vacío, en respuesta a lo que veía en el infinito espacio  su corazón dio un vuelco, nuevamente parecía latir en su pecho.

 Presiono el botón de seguridad y sus pies se liberaron, pudo saltar al vacío, sin embargo tal y como le aseguró su asistente, el cable le mantuvo unido con la nave.

 

Dejó fluir en ese momento sus lágrimas, lloró con franqueza y sin tapujos, dejando que las fuerzas gravitacionales se disputaran su cuerpo, siempre sintiendo la tensión del cable que lo mantenía seguro.  Fue catártico, no supo cuánto tiempo pasó, simplemente flotando, de todas maneras no importaba no existía persona alguna en el universo que se preocupara por él.

 

Cuando el oxígeno llegaba a un nivel peligroso, la misma nave lo trajo de regreso de forma automática. Se quitó el traje que lo protegía, quedó semidesnudo nuevamente.

Permaneció parado sin que su cuerpo lo llevase de vuelta a las áreas comunes, inesperadamente una fuerza en su interior nació, como era últimamente costumbre no lo pensó decidido a paso fuerte caminó a la puerta que liberaba al espacio, abrió la primera compuerta, y estuvo a punto… tan cerca de presionar el botón que sin el traje lo expulsaría de la nave y le dejaría flotando en el espacio en una muerte segura, pero al menos se desharía de esa desesperación que lo carcomía.

 

Tan cerca…sus dedos acariciaron el botón  e intentaron presionar, solo tenía que empujar sus dedos y saldría volando, se perdería en el espacio y moriría rápidamente;  pero en vez de ello una llama, un miedo primitivo lo sacudió, corrió despavorido de regreso a la nave, como si alguien le hubiese obligado a saltar al espacio. Corrió tan rápido y sin sentido de regreso por la sala donde dormitaban todos que tropezó, cayendo de frente, por suerte no se golpeó la cara. Adolorido y pesado se puso de pie. ¿Acaso el destino podía ser más cruel?

 

Justamente al ponerse de pie,  quedó frente a una sola capsula de criogenización, a través de ella pudo ver a la persona que dormitaba y Naruto podía jurar que no había conocida criatura más bella. Era de origen asiático estaba seguro, de cual ciudad de la Alianza Asiática, no sabía, pero esa piel blanco y sus cabellos que bellamente enmarcaban su rostro delicado solo podían pertenecer a esa zona. Sus labios se veían rosados, su nariz era pequeña, su contextura corporal firme. Se quedó sin aliento, la idea de lanzarse por el espacio le pareció estúpida, si lo hubiera hacho no hubiera podido conocer a aquel ser humano. ¿Sería hombre nacido? Que poco importaba que fuera, solo sabía que era hermoso.

 

Al lado de su cámara de criogenización, como en todas, había una pantallita con información muy básica: el chico pertenecía a la clase -a la más alta de echo- su profesión en la Tierra era de escritor web y productor de contenido; su nombre era: Sasuke Uchiha. Lo repitió tantas veces como un mantra, lo acunó así mismo sonriendo volviendo a mencionar aquel nombre.

Tenía una nueva meta, investigar todo sobre ese chico que le había devuelto la chispa de vida aunque sea una pequeña.

 

¿Hasta dónde llegaría para apagar la soledad que le amenazaba?

 

 

 

 

Notas finales:

Hola a todos. Este es mi nuevo proyecto para Naruto. Definitivamente será más corto que Traición a la Sangre, Tendrá mpreg? Bueno es un lejano futuro, creo que mucho es posible.

Si bien me inspiré en la idea base de la película Pasajeros, si ya han leído otra adaptación mía,-Amor Real que esta en FF y AY- saben que tiendo a distanciarme bastante del material original. Por otro lado, la idea base me gusto pero como la desarrollaron no, además que la muestra de su futuro me pareció bastante simple, común, genérico, sin ningún cambio social resaltante que quiero explorar, sinceramente hay pocas "obras futuristas" que en verdad se animan a explorar como sería un futuro, tienden a tener lo mismo que la familia conservadora actual de madre padre e hijos que ni siquiera representa la realidad a totalidad igual que la forma de ser de hombres y mujeres, incluso obvian hacia donde esta dirigiéndose la sociedad con respecto a los derechos lgtbi, creo que en un futuro las etiquetas se volverán obsoletas pero que nadie lo verá extraño salvo algunos cavernicolas, por otro lado el control natal es algo muy importante en un mundo sobrepoblado, y el ver el cuerpo de las mujeres por las misma mujeres de igual forma...si alguien ha leído Un mundo feliz wow .......así como el hecho de tener hijos. 

En este futuro al parecer solo algunos desean y tiene la posibilidad de criar hijos, pero creo que los embarazos tradicionales ya no son tan comunes y que las mujeres ha cambiado su estructura interna, ya que existe métodos para tener hijos sin ellas, además se volvió más libre las operaciones de cambio de sexo y se prohibió la cirugía de corrección que aplican a intersexuales, permitiendoles conservar sus órganos sexuales de ambos sexos, etc hay mucha más diversidad, pero no quiero hacerles spoilers ni apabullarlos de información, por el momento es todo ya irán descubriendo más de este universo. 

Si han visto la película, se darán cuenta que ya cambie algunos detalles como darle un poco más de contexto al mundo del que viene Naruto el porqué va hacia la nueva colonia y el porqué hay nuevas colonias, igual que el criogenizarse. No es excesivamente caro pero tampoco barato. Creo que a Orochimaru le va muy bien con ello sobre todo porque quiere lograr la inmortalidad. 

¿Creen que Naruto despierte a Sasuke? creo que la respuesta es obvia ¿están de acuerdo?

Esa es difícil..creo..

¿Como creen que reaccionará Sasuke?

PD: Digamos que crearon al androide barman con la imagen y semejanza de Jiraiya pero el verdadero esta criogenizado junto con Orochi y Tsunade. Los veremos despiertos?

Cualquier duda hagamenla saber.

 


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