-*-**-*-*-*-*-**-*-**-*-**NARRACION GAARA-*-*-*-*-*-*-*-*-**-*-*-*
Para comenzar mi nombre es Sabaku No Gaara, soy pelirrojo mis ojos son de color aguamarina y tez blanca, estoy casado con Sai Igarashi el cual tiene los ojos negros al igual que su cabello y tez aún más blanca que la mía; Llevamos casados dos años cuando nos enteramos de que tendríamos una hija, porque, sí soy un doncel; Ni Sai no yo sabíamos eso, es mas, no teníamos ni idea de que existieran chicos que pudieran concebir y la manera en como nos enteramos fue muy peculiar; Pero para que me entiendan déjenme contarles como pasó todo…
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Sai y yo teníamos poco más de un año saliendo; al igual que muchas parejas salíamos de vez en cuando al cine, a pasear por el parque, etc. Vivíamos en casas separadas ya que yo aún era menor de edad (16 años), y el acababa de cumplir la mayoría de edad, por lo que, al reunirnos, lo hacíamos en su casa ya que a mis hermanos no les dio mucha gracia que su Ototo anduviera de novio con el pervertido mas grande de todo Japón (exagerados ¬¬), y en una de todas esas reuniones pues….pasó lo que tenía que pasar; lo que no nos imaginamos es que ese pequeño encuentro tendría esa consecuencia (en ese entonces no sabía de la existencia de los donceles)
Ese día por la noche, me encontraba dando vueltas en mi cama, tenía cerca de media hora que me había dado un dolor en el vientre y no me dejaba en paz; trate de levantarme de la cama pero sentía como aumentaba el dolor, con mucha dificultad logré llegar a la cocina de mi casa lo mas silencioso posible, no quería despertar a mis hermanos y preocuparlos, ya tienen muchas ocupaciones cada día en la empresa donde trabajan.
Busqué en el pequeño botiquín medico que se encuentra en la cocina unos calmantes y me los tomé junto aun vaso de agua para posteriormente regresar a mi cuarto a intentar conciliar el sueño, lo que logré pero cerca de las tres de la mañana el dolor regresó mucho mas intenso que las veces anteriores logrando que gritara de dolor despertando en el proceso a mis hermanos que llegaron corriendo a mi habitación.
-Gaara, estas bien!?.-me preguntó mi hermana Temari quien me veía con cara de preocupación igual que Kankuro.-Rápido llama a una ambulancia!.-le dijo a Kankuro mientras me ayudaba a ponerme de pie.
-estas bien?, que es lo que te pasa, porque gritas así?.-trataba de averiguar.
-no…..no lo sé.-intentaba hablar pero cada minuto que pasaba el dolor aumentaba “la ambulancia ya viene, reíste hermanito” fue lo ultimo que escuche antes de perder el conocimiento.
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-listo, dentro de poco estará aquí.-escuche la voz de mi hermana mientras trataba de abrir mis ojos, por alguna razón los sentía pesados y mi cuerpo entumido aunque pude notar que el dolor había desaparecido. Seguí intentado hasta que logre abrir de a poco mis ojos visualizando una habitación blanca en la cual había un pequeño sofá de color café, una televisión en una de las esquinas y dos puertas por lo que, puedo imaginar una es para salir de la habitación y la otra dirige al baño.
-en cuanto llegue lo mataré, ASÍ QUE NO ME DETENGAS TEMARI!!.-se escuchó al otro lado de la puerta para después de unos segundos abrirse y dejar ver a mis dos hermanos los cuales al verme corrieron hasta mí e intentaron asfixiarme (en pocas palabras lo abrazaron o mas bien dicho, lo hizo Temari ¬¬)
-Gaara que bueno que despiertas, ya nos estabas preocupando.-dijo cuando por fin me soltó.
-que…pasó.-dije todavía adormilado.
-te lo explicaremos pero antes necesitamos que llegue alguien más.-dijo seriamente.
-alguien más?, de quien están ha...
-GAARA!!!, ESTAS BIEN?, NO TIENES NADA?, QUE FUE LO QUE PASÓ?.-sí, efectivamente es Sai el que entró casi destrozando la puerta de una patada totalmente alterado.
-cálmate Sai…estoy bien.-le sonreí intentando calmarlo, siempre que se alteraba o se preocupaba cuando llegaba tarde al colegio o a una de nuestras citas (aunque fuera un solo minuto ¬¬), lo hacía e inmediatamente se calmaba.-aunque, yo también quiero saber que fue lo que pasó.-dije para ver a mis hermanos quienes estaban al otro lado de la cama en la cual me encontraba completamente serios.
-chicos.-hizo una pausa como para meditar lo que iba a decir para luego soltar un suspiro y continuar.-Al grano, no tengo paciencia para decirlo con tantos rodeos. Sai, Gaara acaban de tener un bebé.
-Kankuro, si lo ibas a decir así mejor les hubiera contado yo.-regaño Temari sin darse cuenta de las expresiones que teníamos tanto Sai, como yo.
-que?...eso….eso es…imposible.-Sai todavía no podía creerlo.
-lo mismo pensamos nosotros cuando llegamos con Gaara inconsciente al hospital.-me miró para continuar.-cuando llegamos le dijimos al primer doctor que encontramos que necesitabas ayuda, ya que, te desmayaste después de mucho tiempo de estarte quejando de un dolor, él comenzó a revisarte y cuando tocó tu vientre puso cara de asombro y le dijo a sus ayudantes que prepararan la sala de cirugía lo más rápido que pudieran.-hizo una pausa para que Kankuro continuara.
-Nosotros nos alarmamos cuando escuchamos eso, digo, quien no se alarmaría si a su hermano menor lo mandaran a ese lugar y tu no sabes que es lo que sucede.-tomo aire y continuo.-cuando te llevaron a la sala el doctor nos hablo para decirnos que era lo que estaba pasando, creo que se notaba a kilómetros de distancia nuestra confusión y preocupación, y fue cuando nos contó sobre los donceles.
-lo don…que?.-preguntó sin entender Sai.
-los donceles son aquellos chicos que pueden procrear.-todos volteamos a ver al doctor el cual acababa de entrar en el cuarto.-son muy pocos los casos de jóvenes varones que han quedado embarazados pero los ahí y tienen exactamente los mismos síntomas que un embarazo femenino normal.
-Pero, yo no tuve ningún síntoma durante el embarazo.-contesté extrañado por lo que acababa de decir.
-estas seguro de eso?, posiblemente si los tuviste y no pensaste en esa opción.-finalizó el doctor.
-ahora que lo dice.-dije recordando.-si tuve mareos pero pensé que era una enfermedad del estómago y sobre los antojos, asumí que eran porque Temari comenzaba a cocinar bien.
“con razón comía sin problema alguno eso que Temari llama comida”, pensó Kankuro con una gota en la sien.
-Pero eso no explica que no subiera de peso.
-no en todos los embarazos subes de peso, a muchas mujeres embarazadas jamás les crece el vientre y siguen estando embarazadas, es la genética de cada persona.-dijo sonriendo y saliendo al pasillo y entrando de nuevo pero esta vez con una enfermera.-ahora jóvenes, les presento a su hija.-al terminar de decirlo la enfermera se acercó con la bebé y la colocó en mis brazos.
-es…es hermosa Gaa-Chan.-decía llorando Sai; la pequeña tenía el cabello negro, la tez blanca como Sai y los ojos aguamarina como los míos los cuales se abrieron al escuchar el escándalo que asía su padre.
-ya cálmate Sai, la vas a hacer llorar.-regaño Temari, pero contrario a lo que pensaba la rubia, la bebé comenzó a reír haciéndome sonreír.
-y como le pondrán?.-preguntó con curiosidad mi hermano.
-Tsuki.-dijimos al unísono Sai y yo para luego voltear a vernos i sonreír mientras mi azabache nos abrazaba y me besaba la frente para luego susurrarme al oído:
-Arigatou, Gaa-Chan.