Objetivo: confesar a Kurosaki Ichigo el amor que se le tiene.
Tiempo: lo más pronto posible por el tiempo que se ha perdido por posponerlo.
Material: todo el que se disponga.
Finalidad: ser pareja del sujeto ya dicho, conllevando con ello TODO lo que eso implica.
Plan A: violación
-¡ERES UN IDIOTA, PENDEJO, INBECIL, INSENSIBLE, POCO COMPRESIBLE, PSICOPATA…!
-no entiendo tu punto, Rukia.
-¡MI PUNTO ES QUE NO LO VIOLARÁS Y PUNTO!
-ni si…
-¡Y PUNTO!
Resultado: descartado.
Plan B: Cine
-no me invites y ya.
-eres su mejor amiga, debo invitarte ¡eres mi pinche excusa!-regaña un peliazul a una pequeña mujer de nombre Rukia que no se inmutaba a la ira del hombre.
-¡no me digas “excusa”! ¡Ve a la casa y dile que lo invitas al cine! ¡No es muy complicado!
-¡ahhh! ¡Qué pinche necedad! ¡Si fuera tan pinche fácil ni te necesitaría!
-¡es fácil!
-¡no lo es!-se calman, fulminando con la mirada al público expectante de semejantes gritos.
Suspira la mujer y propone otra cosa al chico que hace meses la invita a todos lados con tal de que lleve a su amigo de quien está plenamente enamorado. Ella lo sabe porque él se lo dijo pero es algo que TODOS saben, y con TODOS es todos, incluso su buen amigo Ichigo que espera aun pacientemente que se lo diga.
-le dira a Ichigo que iremos al cine y al final, por alguna razón, no podré ir ¿de acuerdo?
-¿ves? Era tan…
-no me hagas cambiar de opinión-amenazó ante ese gato desagradecido.
Bosteza a la película de acción para estirarse y poner un brazo sobre los hombros de su acompañante.
Está temblando de las piernas y siente las manos sudar al igual que su frente. Se limpia la cara con el antebrazo y se aclara la garganta.
Ichigo lo mira a los ojos, esperando.
-Ichigo…-traga saliva y agradece la oscuridad que no deja ver su sonrojo.
-sí, Grimmjow.
-bueno… quería… es… este… es… ¿me pasas las palomitas?
-toma.
Resultado: fallido.
Plan C: baile.
-por favor, Rukia. Estoy diciendo por favor.
-no puedo creer que no pudieras decírselo.
-pero ahora si podre, antes no había pensado en que decirle ahora sí.
-ah… muy bien. Ve a su casa, di que pensabas que estaba ahí y me invitarías a bailar pero como no es así llevas a Ich… ya se fue.
Podía sentir el cuerpo delgado de quien estaba enamorado sudar y calentarlo sin vergüenza a pegarse tanto. Se sentía seguro ya que ese era su ambiente.
-Ichigo-dijo en un jadeo del cansancio de llevar casi 1 hora en la pista.
-si… Grimm…-respondió con las mejillas rojas de seguirle el ritmo al otro, jadeando sin darse cuenta que excitaba al peliazul.
-debo ir al baño.
-¿Qué?
Corre a cerrar la puerta del inodoro antes que vieran una reacción fisiológica inmoral.
Resultado: fallido.
Plan D: Cena
-no, no, no y no. Estás solo.
-pero…
-ya he gastado todas mis excusas y nada te cuesta invitarlo a cenar.
-claro que sí, parecerá una cita.
Se golpea la frente con su pequeña palma ante la idiotez de ese tipo que no se da cuenta que ha tenido miles de citas con el pelinaranja.
-ya sé, esto haremos Grimmjow, nos invitas a los dos juntos y de repente me caerá un piano encima, así no podré ir.
-¿y de donde sacaremos un piano?
-¡eres un estúpido! ¡Vete al demonio!
-¡Rukia, Rukia! ¡No me dejes…! ¿Ahora qué voy a hacer? Bien, puedo hacerlo.
-yo abro.
-hola, Ichigo.
-hola, Grimmjow-dice saliendo y cerrando la puerta para poder coquetear como lo ha hecho en esos meses, pegándosele, hablándole lindo y jugando con la ropa del otro.
-¿estás ocupado?
-no, para nada.
-ah…
-¿Por qué?-quiso ayudarle.
-…bueno, pensé que… que si no estabas ocupado… podría… podría… podríamos…
-¿sí?
-podríamos…
-¿Qué podríamos hacer?
-¿dije podríamos? No, quise decir que podrías ponerte a hacer algo, pinche huevón.
Resultado: no llevado acabo.
Plan E: paseo por el parque.
-tienes suerte que te perdone, Grimmjow.
-me adoras, no puedes vivir sin mí.
-¡¿quieres que…?!
-ya, ya, no te me enchiles tan rápido, pinche neurótica. A todo esto ¿a qué vinimos al parque?
-ah, Ichigo, al fin te encontramos.
Se enfría de pies a cabeza el felino que preparado se traba al hablarle a ese chico y sin saber que lo vería no sabe ni como hablar.
Suena un teléfono y contesta la chica.
-sí, aja… voy para allá. Me tengo que ir, nos vemos-les dice y Grimmjow no tiene ni oportunidad de detenerla.
-¿Qué tendría que hacer?-dice el pelinaranja.
-alguna cosa sin importancia, seguramente.
-bueno, qué más da ¿quieres caminar un poco?
-sí,…
Al final se sientan en una banca y suspira, infla el pecho y se prepara.
-Ichigo, hay algo que he querido decirte y no he… podido.
-¿Qué es?-se acerca un poco más.
-queria que supieras….
-dime.
-que supieras que…-lo mira a los ojos y cree que no terminara la frase pero sí que podrá demostrárselo-que me…
-qué asco.
-¡vete a la mierda, Ulquiorra!
Resultado: interrumpido.
Plan F: noche en un mirador.
-¿de verdad pudiste invitarlo?
-oh, sí, yo, Grimmjow Jeagerjaquez, sin ayuda de nadie, pude invitarlo.
-ya, dime a quien se lo pediste.
-… está bien… le dije a su hermana que le dijera por mí-responde avergonzado-me tengo que ir, debo irme a arreglar.
-llevas condones.
-¡qué bonito lugar, Grimmjow! Me alegra que Yuzu nos dijera que viniéramos a este lugar. Ella, sólo una niña conociendo este lugar-dice burlón.
-si… que raro ¿no?
-sí, muy raro.
-vamos a sentarnos.
Observan las luces de la ciudad y escuchan el sonido de los autos a las distancia. Pronto siente que tendrá el valor de decírselo.
-Ichi.
-dime, Grimm.
-… me…-baja la cara y piensa que es demasiado directo y que el valor lo abandona, por lo opta por otra cosa para darse tiempo-¿Qué piensas de mí?
-¿Qué pienso de ti?-se sonroja y pregunta otra cosa-¿sobre qué?
-no lo sé… en general. Quiero decir ¿te agrado?
-sí, me agradas… me agradas mucho-confiesa jugando con sus manos.
-¿de verdad?
-sí.
Un silencio que desalienta al pelinaranja que ha esperado meses le diga lo que siente por él.
-¿y que ibas a decirme?
-… que me… bueno, es decir, tú también me agradas… me agradas mucho…
-¿Qué tanto?
-… mucho… como…-se pide ser fuerte, valiente y un hombre, rogándose un par de palabras-… si… la verdad-se odio por completo-… lo siento-echo la cabeza hacia atrás.
El otro suspiro, quizá pronto pudiera.
Resultado: incompleto.
Plan G: muerte cerebral (aún no se sabe).
-gracias por ayudarme con mi tarea, Grimmjow.
-de nada, Ichigo.
-deja bajo nada más por mi mochila.
Revisa con los ojos la habitación y la desesperación de una posibilidad de confesarse le lleva a desesperarse.
-como de otras cosas si puedo hablarle-pone su frente en la pared y cierra los ojos-es fácil… Ichigo, me gustas. Ichigo, te amo. Ichigo, quiero que seas mi novio. Ichigo, llevo meses enamorado. Ichigo, Ichigo, Ichigo, si supieras que tu nombre me tiene loco… ¡pinche Ichigo mierdero! ¡¿Por qué chingados yo debo decirte que estoy pendejo por ti?! ¡Me jodes…!-se golpeó contra la pared-… me jode y me gusta que te amé…-se dice resignado, enderezándose y sobándose la frente-Ichigo, te amo. Es fácil…
-Grimm…
-Ichigo…
Se miran, uno con la frente roja y el otro con la mochila en la mano.
-¡AAHHHHHHH!-gritaron al unísono.
-¿Por qué gritas?-pregunta el pelinaranja.
-¡¿Cuánto escuchaste?!
-¡sólo iba por mi mochila aquí abajo, no hasta el otro lado de la ciudad, idiota!
-¡olvídalo, bórralo de tu memoria AHORA!
-¡estás loco!
-¿Qué pasa allá arriba?-cuestiona el padre de Ichigo.
-nada-dice el hijo. Observa al peliazul con las mejillas rosas, la mirada baja y llena de vergüenza, recargado en la pared al parecer deseando morirse.
-¿ya lo borraste de tu memoria?
-eso no se puede, Grimmjow.
-entonces bésame-pide ya habiendo cumplido el primer punto.
-¿qu…?-le callaron la boca los labios del otro, a lo cual no se resistió, deseándolos desde hacía tanto tiempo-wow…-dijo al separarse-tan difícil fue.
-¿hubieras aceptado eso en vez de una confesión?
-pues… sí, no estuvo nada mal.
-mierda, Rukia dijo que mi plan de violarte no funcionaria.
-¡¿cómo?!
Resultado: en proceso…