El instituto Sweet Amoris, conocido como uno de los institutos mas prestigiosos por su forma de tratamiento tanto para Alfas, betas y omegas, aquí lo mas importante es darles como un segundo hogar sin importar su nivel, igualdad ante todo era el lema de la Directora beta del Sweet Amoris, claro que siempre manteniendo el orden para la protección y seguridad de los omegas y que no hubiera ningún problema con los Alfas.
Tenían la estricta política de que todos los profesores de este instituto tenían que ser Betas ya que estos no reaccionan a las hormonas omega que estos expulsan en su época de celo y así por cualquier accidente puedan mantener la cordura sobre todo.
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-Nathaniel no debiste venir hoy- dijo una chica de cabello blanquecino con destellos plateados que venía a la par de un hermoso omega rubio que negaba con la cabeza
-no Rosalya, tu sabes que hoy tenemos ese examen y si lo perdemos sea cual sea la razón no habrá reposición-
-claro que sí! si es por tu situación claro que habrá una excusa valida- le discutía la chica a su testarudo amigo
-claro pero tú sabes que no estoy en esas condiciones así que no tengo excusa- le dice el finalmente mientras la chica suspira resignada, sin duda hacer que Nathaniel cambie de opinión es muy difícil pero eso no le quitaba la preocupación que sentía, ambos llegaron al aula y se sentaron en sus sillas correspondientes esperando a que la clase comenzara ya.
Nathaniel es un omega que tiene un pequeño problema, de vez en cuando su celo se adelantaba o se atrasaba lo cual hacia muy difícil que el supiese la fecha exacta de cuando le llegaría no como los otros omegas que llevaban bien registrada esa fecha para evitar cualquier accidente y es que sin duda alguna, que te venga mientras estas en el colegio sería imposible calmar el instinto animal de todos esos Alfas.
Afortunadamente no había ocurrido nada cuando le llegaba ya que siempre se encontraba en su casa o en alguna biblioteca ya muy tarde y estaba solo, pero el problema ahora es que ya habían pasado casi 3 meses desde su última época y eso lo alertaba un poco, por eso su amiga Rosalya le había insistido tanto en no ir al instituto al menos unos cuantos días pero él no podía bajar sus calificaciones ni nada para no decepcionar más a su padre que ya lo tenía más que decepcionado porque ese señor siempre estuvo inconforme, el quería un hijo Alfa igual a el pero le había salido un hijo omega y una hija Beta.
-Muy bien, saquen solo lo necesario para comenzar el examen- decía el profesor entrando apresurado y Nathaniel izo lo que ordenaron, sentía un revoltijo en su estómago que lo hacía ponerse un poco nervioso así que decidió apresurarse ha hacer el examen aunque maldiciendo todo eso a penas era la primera hora de clase y luego recordó que no podía marcharse porque a la tercera hora tenían una prueba de puntos en la clase de Educación Física.
Pasaron un par de horas en tranquilidad, ya había hecho el examen de la primera hora y ahora se dirigía hacia el gimnasio para hacer la prueba y una vez echo eso por fin podría largarse del instituto
-Por favor solo un poco más- susurra el rubio ojos miel bajo, se daba ánimos para que de verdad no ocurriese lo peor en ese momento –solo unos minutos más…-
Pasaron unos cuantos minutos más mientras iban por orden de lista asiendo la prueba uno por uno, Nathaniel se encontraba cada vez más y más nervioso, se siente como si hubiesen metido a un gato entre medio de una jaula de leones y quería deshacerse de eso ya y volver hacer el mismo orgulloso y tranquilo chico de siempre.
-Porque mis padres no me pusieron un nombre con A B o C- masculló enojado el rubio que fue escuchado por uno de sus compañeros de salón Armin
-¿te sucede algo Nath?- le sonrío el chico que estaba rojo y agitado por la reciente prueba ya que era el segundo de la lista después de su hermano gemelo Alexy. El rubio niega con la cabeza
-No, descuida Armin, solo quiero que esto termine ya-
-¿Por qué?-
-Pues…porque creo que…n-no nada, solo olvídalo ¿si?- Armin decidió tampoco insistir pero su actitud le traía muy mala espina
Pasaron unos cuantos minutos más y al fin llegó el turno del rubio omega quien se preparaba para los siguientes ejercicios que le indicaba el profesor Boris, pasaba cada uno de los obstáculos mejor que cualquier otro omega inclusive podría decirse que mejor que algunos Alfas.
Termino de escalar la soga y bajarla para luego un corto pique de velocidad hacia lo que era la meta yá, la cual era el mismo punto de partida y ahí fue donde lo sintió, el detonante del caos, el rubio se inclinó sobre si mismo sintiendo un enorme calor que emanaba de su cuerpo, y lastimosamente no era por los ejercicios de recién sino porque había entrado en su época de calor, su corazón comenzó a latir mucho más rápido y nervioso, todos los alfas de la clase de repente voltearon a ver a Nathaniel que con solo ver su mirada se reflejaba hambre, excitación y ganas de solo una cosa, el rubio que se encontraba medio hincado frente a ellos
-Nathaniel!- gritaron tres personas al unísono, dos de ellas masculinas y una de ellas femenina y sin más corrieron rápidamente donde se encontraba su compañero y amigo, sin que se dieran cuenta los alfas comenzaban a gruñir y a acercarse depredadoramente hacia el omega rubio, unos de ellos ya comenzaban a abalanzarse y a pelear entre ellos para ser quien poseyera al joven de cabellos rubios y ahora con mirada asustada
-Llévense al señor Nathaniel ahora!!- Gritó el profesor Boris quien intentaba calmar a todos y proteger a Nathaniel de los que trataban de acercársele bestialmente
-Alexy! Rosalya! Lárguense ahora!- gritó Armin que se levantó para poder interceptar a unos cuantos alfas que se le escaparon al profesor pero claro, su fuerza era increíblemente más desarrollada que la de un beta como Armin
-Está bien!- Rosalya y Alexy agarraron de la mano a Nathaniel quien miraba horrorizado la escena de esos alfas tratando de acercársele destruyendo todo lo que estaba en su camino, incluso notó como uno le daba un gran rasguño a su amigo quien trataba de defenderlo de esas bestias, sintió como Rosalya lo agarraba de la mano y comenzaron a correr fuera del gimnasio, que, hasta fuera de el se podía escuchar todo el relajo que se formaba.
Corrieron como si de eso dependiera su vida, incluso jamás en su vida vio a Rosalya correr tanto, solo daba unos cuantos pasos en la clase de educación física
-¿Dónde vamos!?- preguntó una agitada Rosalya
-No sé! Fuera del colegio! Esa es la prioridad! Los de segundo año están del otro lado y los de la clase B están muy cerca de aquí así que tenemos que apresurarnos antes de que noten su aroma!- decía un exaltado Alexy
-Ch-chicos..yo…lo siento- dijo el rubio quien se encontraba son sus mejillas sonrojadas y a leguas se miraba que su temperatura corporal estaba mas que caliente ya que de su aliento salía un poco de vapor
-T-te vez violable Nathaniel-
-Alexy cállate!-
-Ya ya jaja solo bromeaba-
-continuemos!!- dijo Rosalya con el ceño fruncido mientras seguían corriendo como almas que se las llevaba el diablo
-Mira!! Rosa! Ahí está la entrada!- Alexy sonrío y Rosalya asintió feliz también, podían sacar a su amigo ya de esto, luego solo tenían que tomar un taxi que los llevara directo a su casa ya que por obvias razones ni caminar ni tomar el bus era una opción cuerda.
-Espera aquí Rosa, Nath, iré a conseguir un taxi- Dijo el peli azul mientras se iba a la cera a vigilar un auto que los transportara
Rosa y Nath trataban de tranquilizarse y normalizar sus respiraciones, afortunadamente no había gente que pasara a esta hora de trabajo y así podían relajarse un poco pero, se relajaron demás y no se dieron cuenta cuando alguien se posiciono atrás de ellos y agarró a Nathaniel por la cintura
-¿He!?- lo único que sintió Nathaniel fue cuando lo elevaron y lo ponían en posición de carga como si fuera un costal de papas o algo así, volteo a ver de quien se trataba y todo el color de su piel se puso pálida y tragando saliva –S-suéltame! Inútil!-
-Cállate delegado de mierda, no estás en posición para hablar- dijo el peli rojo Alfa en tono de burla
-Castiel! ¿no estabas en el gimnasio!?- Alexy se acercó a ellos al sentir un mal presentimiento
-Naa, me escapé antes de que comenzara la clase, no tenía ganas de sudar hoy a menos que fuera por otros motivos- dijo el tranquilo y prepotentemente como es usual en el, se disponía a caminar con el rubio en uno de sus hombros a un lugar mucho mas tranquilo
-¿A dónde me llevas?! Suéltame idiota!- Castiel chasqueo los dientes ignorando por completo al omega que se retorcía de desesperación encima de el
-Castiel! Suéltalo!- ordenó Rosalya mientras le agarra del brazo junto con Alexy, Castiel frunció su ceño ya hastiado de esta situación de mierda
-Suéltenme o les juro que me lo follo aquí mismo sin importar nada- los dos betas y el omega se tensaron a sus palabras ya que se podía notar que no mentía
-Q-que estás diciendo!? Suéltame de una maldita vez! Animal! Bestia!- por alguna razón todas las palabras de Nathaniel le causaban cierta risa al peli rojo
-Realmente quieres que te folle mientras tus amigos te están viendo?- río y pudo sentir que el rubio se calmaba con miedo dentro de él, lo olía –no es personal, es solo cuestión de vida, tu eres el idiota que vino al instituto sabiendo que sin importar qué, te comeríamos en cuestión de segundos al oler tu celo-
-Nathaniel!- gritaba Rosalya preocupada junto Alexy caminando atrás de ellos –Castiel! ¿Dónde lo llevas!?- no hubo respuesta de ninguno de los dos que estaban al frente –maldita sea! No me ignores!- Castiel paró y se volteo a verla
-Sino querían que esto pasara hubieran sido más cautelosos, tu Rosalya como beta tienes que entender que Nathaniel es un omega y yo un Alfa así que esto es algo que no pueden evitar- Rosalya se quedó callada porque lo que decía Castiel era la realidad y también porque aunque su vos estuviese tranquila sabía que Castiel no tendría mas paciencia de estar aguantando escucharla más –Así que…-
-No! espera!- le gritó Rosalya quien fue detenida por Alexy al mirar como Castiel entraba a una de las bodegas y ponía seguro dentro de ella.
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Después de unos minutos podía verse en la cara de Rosalya la tremenda decepción que sentía y Alexy se encargaba de consolarla lo mejor que podía
-Oi! Alexy! Rosalya! ¿Dónde está Nath?- Armin por fin los encontraba y Alexy se acercó a su hermano y lo abrazó observando todos los golpes que tenía este. No recibió respuesta de ninguno y eso no fue una buena señal, solo se limitaron a negar con la cabeza y Armin palmeo la cabeza de Alexy suavemente y la de Rosa también con su otra mano –Así que no lo logramos he?....- dijo completamente decepcionado el peli Negro beta
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-Ay…n-no, Cas-Castiel- gemía del otro lado de la puerta el rubio omega quien se retorcía y con sus manos agarraba los cabellos rojizos del Alfa quien se dedicaba a lamer y chupar cada zona de su cuerpo
-Sabes delegado, cuento me enteré que en este instituto el delegado principal era un omega y no un Alfa como todos dije que tarde o temprano terminaría por follarmelo y ¿sabes? Tenía razón- dijo divertido el Alfa mientras mordía su cuello, esa piel tan blanca y fácil de marcar como ninguna otra, era la primera vez que se sentía tan excitado cuando poseía a un omega, quizá porque este no le pedía que lo partiera por mitad, o que se la metiera bien al fondo y todo eso, no es que no le gustase, es más, le hinchaba el ego alfa cada vez que sucedía eso pero Nathaniel era diferente, el se resistía y maldecía por todo a pesar de que su cuerpo le dijese todo lo contrario, solo con mirar su excitación y lo mojado que estaba lo decía todo
-Castiel…d-de verdad, ya no…- decía el rubio aunque lo que en verdad deseaba era que no parase ni un segundo su toque, sentía los dientes del mayor clavarse en su piel y sin esfuerzo alguno marcándola como si fuese suyo, una corriente le recorrió de abajo hacia arriba al sentir como los dedos de Castiel merodeaban su entrada juguetonamente hasta que sintió uno de ellos adentrarse en su interior –A-auch…i-idiota, detente…- dijo con unas cuantas lágrimas en sus ojos al sentir el segundo dentro de el
-¿Por qué te quejas tanto? Luego no pararas de pedir más y bien lo sabes- dijo siguiendo su trabajo preparándolo desesperadamente, no hallaba el tiempo de poderse hundir dentro del omega testarudo
-no! no lo sé! Nunca había estado en esta situación antes!- le dijo a lo que pudo notar una mirada anonadada del peli rojo y sentía sus mejillas arder cada vez más y mas
-una mierda eso! No es tu primer celo! No me creeré que eres virgen!-
-claro que no es mi primer celo! Pero nunca antes había recurrido a que alguien me la metiera idiota! Por eso siempre estaba en la casa- le dijo frunciendo su ceño y soltó un leve gemido al sentir a Castiel como sacaba sus dedos de dentro de él, por unos segundos pensó que se había apiadado de él lo cual lo hizo relajarse solo unos segundos pero lo que no supo fue que había sido todo lo contrario a eso, el Alfa elevo sus caderas y se posicionó para penetrarlo completamente esta vez soltando un grito ahogado y lleno de dolor del rubio –Agh!....-
-Ah…joder, está tan estrecho- se relamió los labios volteando su cabeza hacia atrás y disfrutar tan solo de las paredes interiores del omega que abrazaban su pene con una ruda gentileza en su piel, era delicioso, no sabía ni como expresarlo en palabras –oh mierda!- volteó a ver al rubio quien se mordía fuertemente una de sus manos hasta sacarse un poco de sangre, Castiel no era tan basura pero su instinto Alfa se apoderó de el sin que se diera cuenta hasta que ya estaba dentro de el con una sola estocada, apartó uno de los mechones dorados del omega y se acercó a su cara para secar las saladas lagrimas que salían de sus ojos con su lengua –lo siento…- le susurro y el omega se impresionó por sus palabras pero no le dio tiempo de decir algo o reaccionar tan siquiera cuando sintió a Castiel moverse dentro de él tan rápidamente
-Ah! mmg- Nathaniel apretaba sus dientes tratando de relajarse lo más posible para que el dolor disminuyera pero le era casi imposible hasta que sintió unos tibios labios apoderarse de su boca y sin saber porque se lo correspondió de la misma manera apasionada con la que se la ofrecía el peli rojo.
Pasaban los minutos y en ese frío y desolado almacén que presenciaba el acto de sexualidad tan desmesurado que se estaba dando, en el momento en que Nathaniel dejó de sentir tanto dolor y Castiel hallaba su punto G en el interior del rubio fue que toda esa atmosfera se volvió tan erótica y cada vez más excitable, los gemidos del rubio eran el son más armonioso que había escuchado Castiel, era tan jodidamente bueno que dentro de poco acabaría sin poder evitarlo aunque quisiera seguir sin parar todo el tiempo.
Al sentir correrse ya comenzó a masturbar el miembro del omega que comenzó a gemir mas y mas fuerte perdiendo la pena a mitad del acto ya, Castiel no dejaba de relamerse y gruñir placentero al sentirse dentro de esa cavidad ahora mas accesible que al principio, después de unos momentos sintió como el rubio se tensaba y llegaba al orgasmo aferrándose de su espalda y arañarla, Castiel seguía golpeando el interior del otro hasta que este también llego al final y con conciencia sacó su pene antes de correrse en el interior del omega para no dejarlo preñado ni nada aunque tanto era su morbo que acerco su orgasmo a la cara del rubio para terminarse de correrse ahí y sonreír satisfecho al final de todo….
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-Eres un maldito ¿sabes?- le decía un rubio a leguas cansado mientras se limpiaba la cara y todas las partes de su cuerpo manchadas con un pañuelo que andaba en su pantalón
-¿Por qué?, acaso no estabas gimiendo de placer hace poco?- río el joven que se encontraba recostado, Castiel solo tuvo que subirse el zipper y ya estaba listo para marcharse pero por alguna extraña razón no pudo dejar al omega así nada mas
-cállate, mira que correrte en mi cara….joder, eres un maldito-
-ya los has repetido como 50 veces hoy lo mismo- dijo este neutralmente pero divertido a la vez –creo que te hubiera sacado una foto con mi móvil porque no te mirabas para nada mal- pudo notar un tremendo rubor en las mejillas del rubio el cual se impresionó ya que su corazón latió un poco al verlo así. Para no seguir con esos extraños sentimientos que surgían se levantó de donde estaba de lo mas comodo recostado y le dio un fugaz beso en sus labios al rubio para después salir de ahí sin decir ni una sola palabra dejando a Nathaniel con el corazón agitado mientras le miraba salir y luego quedarse pensando un poco en lo que acababa de suceder.
Sin duda alguna a la próxima vez no vendría al instituto a pesar de todo, esos eran sus pensamientos
-Aunque….no fue tan malo después de todo- sonrío el rubio levemente para levantarse del suelo y dirigirse a la salida con tremendo dolor en su parte trasera pero aún manteniendo esa débil sonrisa en su rostro –Castiel ¿he?....puede ser interesante…-
FIN