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En busca del destino por perfectgirl

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Notas del capitulo:

Espero les guste este nuevo desarrollo! un breve interludio antes de que se ponga mas emocionante!

 

 

Lucius Malfoy era sobre todo un hombre muy paciente, con excepción de dos personas, su hijo y su esposa, aunque debería ser lo contrario.

Sí, su bella esposa. Aquella que lo hartó hasta el cansancio durante dos semanas para que regresaran a Londres. Así que un día, hastiado de la situación, cogió las maletas y regresaron a su país. El ambiente en Rusia resulto asombroso, pero por otro lado extrañaba a su hijo.

Lucius Malfoy sabía que Draco no abandonaría Londres después de la guerra. Al principio creyó que era para ayudar al mundo mágico, a restaurar su honor, pero luego se dio cuenta que era por cierto mago ojos verdes. No, definitivamente en otros tiempos no aceptaría para nada esa situación, pero después de todo lo ocurrido había cambiado su forma de pensar. Draco sufrió mucho por su irresponsabilidad y ahora era tiempo de que sea feliz.

Claro está que Lucius no gustaba del todo del prospecto de su hijo. Primero, era hombre, segundo, era Harry Potter, el niño que sobrevivió y venció, un simple mago buscador de problemas y con demasiada suerte para salir de ellos, y tercero era Harry Potter, pero había accedido, después de mucha insistencia de Narcisa a consentir aquella relación.

Por otro lado, Narcisa estaba encantadísima. Siempre supo que la rivalidad que tenían su hijo y el niño Potter no era normal. Ahora era tiempo de que su hijo fuera feliz y quien mejor para ello que El salvador del mundo mágico. Harry Potter era la mejor opción, era un mago extremadamente poderoso, muy leal y guapo, además de ser Gryffindor con todas sus letras. Había tardado más tiempo de lo usual en convencer a su esposo de aquello.

Ahora Narcisa extrañaba a su hijo y quería verlo, es por eso que insistió en regresar a Londres. Había ido de compras, pues sabía que iba a acceder, recolectando una maleta completa de hermosas cosas para su hijo y yerno.

Aparicionaron en la mansión Malfoy luego de mucho tiempo de haberla abandonado. Estaba igual de imponente. Solo cambiarían sus ropas y acomodarían las cosas para salir a Hogwarts en busca de su hijo, pero sus planes cambiaron cuando escucharon el particular sonido del piano y la magia de Draco envolver la estancia. Apresuraron el paso, todo lo que su elegancia accedió y entraron en el salón.

Su sorpresa fue grande, un hermoso fénix blanco parado sobre el elegante piano negro, una serpiente blanca con detalles verde alzada imperiosamente, protegiendo a un pequeño mago de ojos verdes y un rubio cuyos ojos plata brillaban de alegría.

-madre, padre, bienvenidos a casa- los había extrañado tanto.

Draco se paró a abrazar a su madre, Thrysther siseó amenazadoramente -no tocaras a la pareja de mi amo-

-tranquila Thrysther, ellos son los padres de Draco. No lo lastimaran, la rubia es Narcisa, el hombre es Lucius. No nos harán daño-

-está bien, confío en su palabra- Thrysther se retiró acomodándose en las patas de Hyllian quien lo acogió bajo su ala. Ese par se llevaban muy bien, desde que se conocieron.

-Harry, cielo, te veo radiante, gracias por cuidar de mi Draco- Narcisa abrazó al moreno quien solo alcanzó a sonrojarse.

-Padre, ¿no estaban en Rusia como embajadores? ¿Acaso se presentó algún problema?-

-Hijo mío, pero que malos modales, debes saber que no es adecuado recibir a las visitas de pie, vamos a la sala de estar-

Una situación demasiada extraña, pensaba Harry. Se movieron a la “pequeña” sala de estar del primer piso. Narcisa apareció un servicio de té y lo sirvió con galletas. Harry se sentía nervioso. A pesar de que había tratado con los padres de Draco, eran simple conversaciones de no más de dos minutos, y ahora estaba allí, sin escapatoria alguna.

-Entonces Padre, ¿hubo algún problema?- preguntó Draco.

-No hijo, todo está saliendo de maravilla. Las personas son fabulosas y las negociaciones van viento en popa- respondió su madre.

-Veo que te sorprendió encontrarnos aquí. Verás, tu madre te extrañaba y luego de una discusión muy explicativa accedí a venir por dos días- Draco no quería ni imaginar qué clase de “discusión explicativa” habían tenido sus padres –Me sorprende sin embargo, encontrarlos a ustedes en nuestra Mansión-

-Es mi culpa- respondió Harry, nunca pensó que se encontrarían cara a cara con los mismísimos padres de Draco –ayer tuve una discusión fuerte y no me sentía del todo bien. No quería ser interrogado por mis amigos, así que le pedí a Draco que me llevara a otro lugar-

-Y no tuvieron más opción que venir aquí, una mansión sola sin nadie más, donde podían hacer lo que quisieran sin ser escuchados- acotó Malfoy padre con malas intenciones.

El comentario logró su cometido, un Harry Potter avergonzado, mas rojo que un tomate, y su hijo mirando detalladamente un trozo de alfombra en el piso.

-En realidad, me sorprende que Severus no esté por aquí, Es demasiado cuidadoso cuando del niño que sobrevivió se trata-

Draco se puso nervioso, a su padre no le iba gustar nadita lo que le iba a decir: -Padre, el no sabe donde…- pero no pudo completar la frase.

El patronus de un gran perro negro apareció en medio de la sala y una voz se escuchó:

-HARRY JAMES POTTER, ¿Dónde demonios estas? Te hemos buscado como locos toda la mañana, sabes que no debes salir sin protección, podría ser peligroso, no puedes utilizar medios mágicos, pero aún así utilizaste al fénix para desaparecer y te fuiste con ese oxigenado de Malfoy. Te desapareces cuando te da la gana, no dices a dónde vas ni lo que haces, y ni siquiera sigues las instrucciones que son muy importantes para que puedas mejorarte. ¿Acaso te ha entrado la edad de la rebeldía? Te quiero en Hogwarts ahora mismo o no tendré problemas al ponerte yo mismo una barrera que impida que salgas del colegio y un hechizo rastreador que no podrás quitarte jamás- la voz de Sirius se escuchó retumbar hasta el final.

Harry por otro lado se había puesto pálido y comenzó a temblar. Su padrino nunca se había enojado con él de esa manera, pero ¿tratar de encerrarlo cuando él sabía que no le gustaba? Estaba muy enojado, no podían controlarlo como que si fuera un niño de escuela primaria, peor después de haber sobrevivido SOLO tanto tiempo. Por otra parte, se sentía culpable, sabía que sus amigos estaban preocupados por él, ya que se fue sin explicación alguna.

Se levantó presuroso del asiento, dispuesto a ir a Hogwarts a arreglar las cosas con su padrino, cuando algo lo interrumpió.

-Todo arreglado, señor Potter, su padrino ha accedido a que le ponga un hechizo rastreador. Pero tranquilo, que no estará solo. Draco Malfoy también será acreedor de uno. Si no están frente a mí en 15 minutos, les pondré un hechizo de por vida. Tic, Tac señor Potter, apresure al señor Malfoy- la cierva desapareció después de entregar el mensaje. La voz de Snape, tan cantarina, tan llena de maldad que helo la sangre de ambos chicos.

-No, no, no. No dejare que me encierren- Harry comenzaba a entrar en shock. Se apresuró a buscar a Draco para volver a Hogwarts, allá arreglarían todo. Cogieron a los animales y se dispusieron a salir, olvidándose completamente de las visitas.

-Hijo- solo una palabra bastó para que ambos chicos se paralizaran cerca de la puerta.

-Lo siento padre, tendrán que acompañarnos a Hogwarts. Debemos resolver un problema urgente- Draco Malfoy no estaba asustado. Su padrino era un hombre de palabra, pero él no creía que llegara tan lejos como ponerle un hechizo rastreador permanente, ¿o sí? Mejor no probar.

-tenemos que conversar de algunos asuntos importantes, y no creo que Hogwarts sea el lugar más indicado. Imagino que no accederás a enviar solo al señor Potter a la escuela, así que tendrá que acompañarnos en el recorrido de hoy-

Dicho esto sacó su varita y convocó a su patronus. Un águila real, apareció con las alas majestuosamente abiertas. Una sonrisa desafiante surcaba su rostro, o si, aquello sería divertido.

 

 

 

Hermione estaba sentada en una silla mordiéndose las uñas, nerviosa, Ron comía como si su vida dependiera de ello, mientras Sirius y Remus caminaban en círculos por la enfermería. Snape estaba mirando a la ventana sonriendo maliciosamente.

-Sirius esta vez te pasaste. Harry seguro vendrá hecho una furia porque lo amenazaste y nosotros no queremos estar aquí cuando explote. El que seas su padrino no te salva de su mal carácter, es mas hasta Snape, si no mal recuerdo, tuvo problemas cuando hizo enojar a Harry- acotó Ron después de tragar la comida. El pelirrojo aun  recordaba cuando, después de una pelea particularmente intensa, Snape había salido del despacho de Sirius lleno de plumas, procedencia de un hechizo que Harry le envió al estar de muy mal humor.

-Acepto que no fue adecuada la forma en la que Harry se fue, sin explicaciones y sin decir donde, pero estaba con Draco. El iba a cuidarlo, y por último, si hubiera pasado algo tenían al fénix para avisarnos. No debiste enviarle ese mensaje tan amenazador sabiendo que a Harry no le gusta que lo encierren. Solo estas buscando que crezca resentimiento porque no confías en él- añadió Remus conciliador.

-además Harry ya es un mago adulto, sin mencionar que el siempre ha estado solo, el sabe cuidarse- Hermione estaba preocupada, pero no estaba nada de acuerdo con el mensaje.

Sirius frunció el ceño. ¿Será que se excedió? Era verdad que Harry sabía cuidarse solo, pero eso fue porque él no estuvo para ayudarlo. Así que ahora que él era un hombre libre podría ejercer su rol de padre sustituto. Si, la decisión que tomó fue la correcta.

-Potter merece eso y más, se le advirtió que no debía usar medios mágicos, se ha escapado otras veces, fue atacado por algo desconocido que no sabemos cómo combatir y ni siquiera puede usar magia. Qué bien que se cuida solo- soltó Snape irónico.

-pero...- Hermione iba a replicar cuando una águila real se poso en medio de la enfermería.

-Qué lindo mensaje, Black, se nota cuanta clase tienes. Primero, el Señor Potter es un mago adulto, puede hacer lo que se dé le gana con quien quiera. Segundo, es mi hijo con el que esta. Draco puede cuidar muy bien de ambos, es un mago muy fuerte. Tercero, tú NO eres su padre, eres su PADRINO, tu trabajo es guiarlo, no amenazarlo con encerrarlo como un animal. Potter tiene demasiado corazón para decirlo, pero yo no soy nada tuyo. Cuarto, si el muchacho escapo fue porque ustedes son intensos, exasperantes, pesados, ustedes están para apoyarlo y no para ser un problema más. Ahora Potter no volverá porque estará con mi familia, el día será ocupado, así que regresará en la noche, y no, no les estoy pidiendo permiso. Es más, si fuera por mí, ni siquiera les avisaría, pero como San Potter es tan noble tuve que hacerlo. Ah Snape, no creo que el heredero de Gryffindor te deje ponerle un hechizo de rastreo tan simple, por lo que te deseo buena suerte, y procura que esta vez no te salgan plumas- la voz de Lucius Malfoy desapareció en el aire.

Todos estaban en shock, el mensaje, lleno de ironía, defendía a Harry. ¿Desde cuándo Lucius Malfoy defendía a Harry Potter? Sin duda tenían que pensar en todo aquello que dijo el mago aristocrático.



 

 

Ahora Harry se paseaba por una tienda con un sinfín de elegantes trajes. Cuando escuchó el mensaje de Lucius Malfoy quedó estático. El mago que tanto detesto, aquel que lo trataba a la patada, lo defendió, le hizo frente a su padrino y a Snape. ¿Cuándo rayos cambio su forma de pensar hacia su persona? ¿Tenía que ver su relación con Draco en su cambio? No importa, qué más da.

Ahora esta allí, en una tienda muggle, en el mundo muggle, comprando ropa muggle. Resulta que los Malfoy eran ricos por sus negocios tanto en el mundo mágico como en el muggle. Lucius Malfoy tenía una reunión de negocios esa noche con un empresario muy importante, una fiesta de mascaras y no podía faltar. Si, una fiesta de mascaras al estilo colonial, y a Harry lo habían arrastrado sin su consentimiento a aquel lugar.

Realmente se sorprendió al ver a los Malfoy moverse tan bien en el mundo muggle. Estaban en una tienda muy exclusiva de un famoso diseñador. Necesitaban trajes al estilo colonial y mascaras para la fiesta. Narcisa resultó tener muy buen gusto para escoger ropa, no era sorprendente, pero en 15 minutos había escogido el traje para Malfoy padre como para hijo, pero llevaban una hora rodeando la tienda tratando de encontrar algo "adecuado" para él.

Narcisa, si, aquella mujer sí que era extraña. En el buen sentido, claro. Después de que Lucius envió el mensaje, ella desempacó un monto de cosas que compró para Draco y el. Ropa exclusiva, realmente espectacular, pero siempre respetando los estilos de cada uno. Draco, elegante y conservador, y Harry, informal  y rebelde. El moreno no sabía desde cuando Narcisa sabia sus gustos y peor, la ropa le quedaba de maravilla. No conforme con eso, trajo sabanas de seda, pijamas, zapatos y hasta platería. Harry quiso negarse y luego de discutir por media hora, aceptó renuente. Sin embargo, lo que más le gusto a Harry fue el set completo de baño con olor a canela que tanto adoraba. Incluía jabón, cremas, gel de burbujas y hasta un perfume, estaba maravillado. Draco, solo rumiada diciendo que lo consentía demasiado.

-Pero Narcisa, cualquier traje está bien- si, Narcisa. También lo obligo a llamarla por su nombre.

-Claro que no, Harry, debes llevar el mejor traje de la tienda. Además nadie vendrá tu rostro sino tu cuerpo, seguro no pasaras desapercibido- Harry solo pudo sonrojarse ante el comentario de la mujer.

Draco apareció con su traje, se veía realmente apuesto. El pantalón y el chaleco eran grises, la camisa de lino blanco con volantes y una corbata plateada. Todo el conjunto resaltaba su figura y el color de sus ojos. Había hecho crecer su cabello, amarrándolo en una coleta baja con una sencilla cinta plata. Harry cerró la boca, seguro estaba babeando. Sin duda Draco se veía guapísimo.

-Madre, Padre dijo que tenemos que ir a realizar unos trámites en el Ministerio muggle. Por lo que veo no has terminado, así que iremos nosotros y regresaremos en una hora. Por favor termina en ese tiempo- besó a su madre en la mejilla y jaló a Harry a un costado.

-Harry no tardaré mucho, ten cuidado y no te alejes de mamá. Recuerda que no puedes desaparicionar ni llamar a Hyllian- le dio un beso rápido, pero muy suave. Se perdió en aquella mirada gris antes que Draco se fuera.

-Por lo que veo las cosas han avanzado bastante- Harry quería que la tierra lo tragara.

-No me malinterpretes, no es una recriminación, al contrario, estoy feliz de que Draco demuestre abiertamente sus sentimientos-

-No le molesta que sea con un hombre- susurró. De verdad no quería tener aquella conversación, pero ya que la mujer la había iniciado la terminaría.

-Harry, en el mundo mágico no hay discriminación para los homosexuales, es mas, aquí en Londres, en el lado muggle tampoco. Es verdad que fue un poco difícil aceptar la orientación sexual de mi hijo, pero lo importante es que encuentre a alguien que lo haga feliz. Muchas veces pensé que se quedaría solo, tú conoces su historia, no es nada fácil y los prejuicios de la guerra seguirán por muchos años. Por otro lado, es un mago con un carácter muy fuerte, independiente, que no se deja sublevar. Reuniendo todo aquello, es muy difícil encontrar a una mujer que lo acepte. Los hombres son otro caso, pero el que lleve la marca tenebrosa no ayuda. Así que quien mejor que Harry Potter para estar a su lado. Tú conoces su historia, las razones que lo impulsaron a tomar esa decisión, su verdadero carácter y personalidad, su familia y sus prejuicios. De verdad estoy muy feliz que le hayas dado la posibilidad de estar a tu lado-

Nunca había considerado esa posibilidad, y ahora Narcisa se lo estaba contando. Es m{as, si se ponía a pensar él no había hablado con Draco para definir su relación. Tal vez estaba apresurando las cosas, ¿o no? Esa noche encontraría la oportunidad de charlar con Draco.

-Si le soy sincero, aún no estoy seguro de algunas cosas. Nuestra relación es difícil, con personalidades diferentes y formas de pensar que no encajan. Pero hay algo que si tengo en claro, para Draco y para mí la familia es lo más importante. No hemos pasado lo mismo que los adolescentes de nuestra edad, tuvimos que madurar mucho antes y a la fuerza, pero por eso podemos entendernos mutuamente. Sé que comenzamos con el pie izquierdo y no pudimos arreglar nuestras diferencias hasta el año pasado, pero las cosas mejoraran. Cuidare a su hijo, tanto como el me cuida a mi, sere su apoyo, tanto como el me apoya a mi y sobre todo lo querré tal como es, con su historia y sus decisiones-

Narcisa solo pudo darle un beso en la frente de ese pequeño mago que la veía con mucha decisión. Sí, su hijo había hecho una buena elección.

-Oh, mira, encontramos tu traje-

 

 

Notas finales:

En el proximo capitulo Harry hablara con Draco, ¡que sucedera?

Slauditos a Shotaro y Prisci que dejaron reviews!

No se olviden de dejar review o algun comentario, lo que sea, que escribo mal, que de muerte a Snape(no lo hare), la ropa de Harry, lo que sea! 

sus comentarios alegran el alma de esta escritora!

Nos vemos mañana!


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