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¿Sweet Romance? por Ayumi Kuran

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Notas del capitulo:

Hola me alegro de volver a veros. Tal vez hayais leido algunos de mis fics y si es así os lo agradezco y ahora os invito a leer mi nueva creacion.

Espero que la disfruteis :)

Steve se encontraba en su apartamento pensando en todo lo que le había pasado en su vida hasta ese momento. El ejército, el experimento, la lucha, la nave siendo destruida y su llegada a esa época. Después habían pasado cosas que nunca se hubiera esperado pero la que más espero que nunca se cumpliera fue su mayor sueño, y su mayor sueño tiene nombre y apellido: Tony Stark.

Steve se había enamorado de él y a pesar de que siempre pensó que este nunca le correspondía se equivoco y comprobó cuando ocurrió “eso”.

Flash Back

Se encontraba en la torre Stark donde Tony le había citado junto al resto de los vengadores para hablar de algo que no le quiso mencionar. Le resultaba extraño que le citara y que no le dijera para qué, pero ahora lo más importante era encontrarse con Tony y discutirlo… aunque si era sincero consigo mismo la mayor razón para ir hasta la torre Stark era para ver a Tony, al hombre al que amaba.

¿Qué cómo se había enamorado de él? No lo sabía. Tal vez fuera esa sonrisa ladina, esos hermosos ojos chocolate que desprendían coquetería y eran indomables al igual que su dueño, o esa personalidad arrogante que lo volvía loco de la misma forma en la que lo exasperaba o simplemente ese aire que tenía escrito “rebeldía”  por todo su cuerpo.

Realmente no lo sabía, pero admitía que estaba loca e irremediablemente enamorado de Tony. Le había costado admitir sus sentimientos, pero ahí estaba admitiéndolo y sufriendo por ello.

¿Por qué sufría? Porque sabía que Tony no se había fijado en él y que no lo haría. Que él era heterosexual o que simplemente no le parecía lo suficiente ni siquiera para poder pasar una sola noche de sexo y en algunas ocasiones se pregunta a sí mismo. ¿Qué sería mejor? ¿El dolor de saber que realmente no seré nunca de él o pasar una noche juntos como él deseaba y que luego haga lo mismo que ha hecho con tantas mujeres? A veces prefería la segunda opción y otras la primera pero de todas formas el dolor seguía presente por ello desecho esos pensamientos y se propuso una meta que le resultaba realmente difícil: olvidar a Tony.

Le iba a costar cuando lo veía prácticamente todos los días, pero no podía seguir con ese dolor que le atravesaba el corazón, que le destrozaba y a cada momento se hacía más fuerte, más intenso y mucho más doloroso.

Estaba pensando en eso cuando llego hasta la sala donde se llevaría a cabo la reunión, y sin pensarlo mucho entro pero solo encontró a Tony.

- Bienvenido Sr. Rogers.

Steve pudo oír la computarizada voz de JARVIS pero apenas le hizo caso porque su vista estaba puesta en Tony, en el hombre que le volvía loco en todos los sentidos de la palabra y que ahora se encontraba enfrente de él.

- Gracias JARVIS

Esa fue su automática respuesta en cuanto se dio cuenta de que Tony se giraba hacía él y entonces deseo más que nunca poder tener algo más que “amistad” con el playboy.

Llevaba puesta una camiseta de tirantes que se le ajustaba exquisitamente a los músculos de su cuerpo dándole un toque más varonil, junto con unos pantalones cortos que le llegaban hasta las rodillas y por último… iba descalzo.

Con solo esa imagen sus deseos más lujuriosos salían a flote y era algo que le sorprendía porque él nunca fue una persona lujuriosa, pero claro todo eso cambio cuando conoció sus verdaderos sentimientos por el playboy que estaba ahora enfrente de él.

- ¡Capi-paleta no esperaba que llegaras tan pronto!¡Pero como no teniendo en cuenta de que siempre has sido muy recto y puntual!

Esas palabras llevaron a Steve de nuevo a la Tierra y veía como Tony sonreía para segundos después dirigirse al ver que había en la habitación.

“En verdad este hombre hace que me olvide de todo”

Esos eran los pensamientos de Steve antes de ser interrumpido por el playboy.

-¿Quieres tomar algo Capi-paleta?- Pregunto Tony mientras se servía una copa.

- Me gustaría saber que hago aquí Stark.

Steve le habló con ese tono frío mientras se cruzaba de brazos y aunque él no fuera una persona fría, tenía que hacerlo, tenía que mantener las distancias para olvidar ese amor que le quemaba hasta las entrañas y  no estar demasiado cerca para poder oler su aroma y hacer que se vuelva completamente loco y deseoso de ser suyo.

- ¡Ow! Tranquilo Capi no es para ponerse así. Además lo sabrás dentro de muy poco.- Dijo Tony mientras se sentaba en el sillón.

-¿A qué te refieres? ¿Y el resto de los vengadores?

Esas preguntas se apretaban en la cabeza de Steve, deseosas de saber las respuestas y poder saber qué es lo qué pasaba ahí y mucho más porque sus compañeros no estaban. De verdad que los quería pero cuando no se los necesita siempre aparecen y cuando realmente se los necesita no estaban por ningún lado.

- ¿Por qué no tomas asiento?- Dijo mientras evitaba las preguntas y palmeaba un asiento la lado del suyo.

Steve se dirigió al asiento que había enfrente de Tony. No podía estar tan cerca de él, tenía que mantener las distancias fuera como fuera porque si se acercaba mucho no se podría seguir conteniendo y eso solo sería peor para él y su corazón.

- ¿Qué pasa Capi, me tienes miedo?- Dijo Tony con sorna sacando esa sonrisa que lo volvía loco.

- ¿Dónde están los demás?

Volvió a hacer la misma pregunta pero sentía y no sabía por qué que se acababa de meter en un gran problema. Que no hubiera ningún vengador y prácticamente nadie a su alrededor ya era malo pero es que encima se le sumamos de que todo parecía como… planeado. Preparado, y no le gustaba nada se sentía como un ratón que estaba entre la pared y un depredador.

- Ellos no vendrán.- Dijo Tony mientras cruzaba las piernas y le daba un sorbo a su bebida.

- ¿Cómo que no vendrán?- Pregunto Steve muy sorprendido.

- lo que has oído Capi, deberías ir a que te miren el oído te estás quedando sordo.

Steve no le hizo ningún caso al tono de burla que había en su voz y como no le gustaba nada de esa situación y sentía de que iba a acabar muy mal se iba a levantar dispuesto a marcharse pero antes de que lo consiguiera unos grilletes apresaron sus manos y pies dejándolo inmóvil y por mucho que intentaba quitárselos no podía.

- ¡¿Qué significa esto?!- Pregunto muy enfadado y en cierto modo asustado por lo que pudiera hacerle el playboy.

Tony no le hizo caso y se levanto del sillón en el que estaba sentado para acercarse a Steve de una manera gatuna y muy sensual, haciendo que un estremecimiento le recorriera todo el cuerpo.

Cuando Tony llego a su altura pensó que le besaría pero ese pensamiento pronto quedó evaporado al sentir la cercanía, el calor y el olor de Tony, que estaba haciendo que se volviera loco.

- ¿Sabes Capi? Llevaba mucho tiempo esperando esto.- Le susurro Tony al oído.

Steve no pudo procesar esas palabras cuando sintió unos labios apresar los suyos. Abrió los ojos hasta límites insospechados pero al pasar los segundos fue cerrando los ojos y fue correspondiendo ese beso.

El beso era único. Los labios de Tony eran dulces y su sabor embriagante. Sus dientes le mordían los labios para pedirle que le dejaran entrar a su boca y él les concedió el permiso abriendo la suya y enredándose con Tony en una lucha de lenguas, una que mezclaba la pasión y la lujuria haciendo que su cuerpo empezara a reaccionar.

Cuando se separaron del beso su respiración era rápida al igual que la de Tony, quien seguía mordiéndole los labios y haciendo que varios gemidos escaparan de su boca. Tony no tardó mucho en volver a besar los labios de Steve con ¿amor? Esa era la sensación que le daba, pero de pronto abrió los ojos.

¡Estaba besando a Tony!¡Le estaba besando y haciendo que todo su cuerpo se estremeciera y él no lo estaba deteniendo! ¡¿Pero por qué Tony le hacía aquello?!

Esta vez fue Steve quien rompió el beso y noto que Tony no estaba muy contento con esa acción cuando frunció el ceño.

- ¿Qué estás haciendo?- pregunto Steve con la respiración todavía agitada.

- Besarte.

Esa fue la simple respuesta de Tony antes de volver a besarle, solo que esta vez fue hasta su cuello. Steve no pudo evitar gemir cuando sintió el cálido aliento de Tony en él, para segundos después que pasara su lengua por su cuello, haciendo que Steve soltara un gemido un poco más fuerte mientras que su respiración se agitaba y poco a poco su cuerpo despertaba todavía más.

- Stark.. de…detente- Gimió.

Tony se detuvo y poco a poco se fue separando del cuello de Steve para verlo a los ojos. Estaba agitado, sonrojado y eso solo hacía que Tony tuviera más ganas de tener a Steve.

- No inventes Steve. Se nota que te gusta lo que te estoy haciendo.

Al terminar de hablar Tony llevo su mano a la entrepierna de Steve y movió su mano en una caricia por ese lugar tan delicado haciendo que Steve soltara un gemido más fuerte que los demás.

- Por… por fa…favor de…. Detente…

Steve intentaba hacer que parara ya que no estaba dispuesto a ser solo uno más en su lista, pero parecía que Tony no estaba dispuesto a parar porque siguió tocando esa parte de su anatomía mientras le miraba a los ojos para después parar esa caricia.

- No te mientas Steve. Sé que quieres esto.- Le susurro en el oído de forma ronca.

- No…no es verdad.- Dijo nervioso.

- Pues tu amiguito no dice eso.

Lo último lo dijo mientras cogía su miembro por encima de los pantalones y lo apretaba haciendo que gimiera y todo razonamiento se fuera a otra parte para poder sentir las dulces caricias que le proporcionaba “su amante”.

Tony dejo de acariciar el miembro de Steve ganando un gruñido por parte de este pero pronto toda replica quedo ahogada por el demandante beso que le daba, mientras le iba quitando la camisa hasta que no pudo terminar de salir por culpa de los grilletes.

Abandono los dulces labios de Steve para pasar a su clavícula y después al cuello mientras que con sus manos iba estimulando los rosados montes. Mientras lamia, succionaba y mordía el cuello dejando pequeños moratones que al día siguiente serian claras marcas, mientras que recibía gemidos por parte de Steve, animándole a seguir con sus caricias.

Después de asegurarse de dejar marcas que serían más que visibles fue bajando por el cuello hasta llegar al pecho donde fue repartiendo besos húmedos y lo lamia hasta llegar a uno de sus pezones que a pesar de estar lo bastante estimulado, lo “devoro” sacando más gemidos del propietario de dicho pezón. Cuando lo vio lo suficiente estimulado y erecto se dirigió al otro donde hizo el mismo proceso que en el otro mientras Steve solo podía sacar gemidos de placer.

- ¡Ahhhh! ¡Tony!

Sentir su nombre en la voz ronca de Steve hizo que su hinchado miembro creciera más de lo que ya estaba.

- Mierda. Y yo que pretendía hacer esto con calma.- Masculló Tony.

Antes de que Steve pudiera decir o hacer algo Tony hizo que JARVIS lo liberara y Steve en vez de marcharse se bajo del lugar donde estaba sentado y se abrazo a Tony mientras ambos caían al suelo. Tony dio la vuelta quedando Steve a bajo de su cuerpo mientras que sin poderlo aguantar más le iba sacando a Steve su pantalón y ropa interior, mientras que Steve le sacaba la ropa a Tony sin pensar en nada más que sentir la piel del contrario con la suya propia.

Cuando los dos estuvieron completamente desnudos se abrazaron y besaron para después Tony enseñarle tres de dos a Steve ya que sabía que este era virgen. Pudo ver que Steve nos sabía que hacer con los dedos así que Tony se llevo los dedos a su boca bajo la atenta mirada de Steve mostrándole lo que tenía que hacer. Después de unos segundos se retiro los dedos para que lo hiciera Steve que sonrojado como un tomate tomo los dedos y empezó a lamerlos y lubricarlos. Los dedos entraban y salían de la boca del soldado haciendo que Iron man solo tuviera más ganas de estar en su interior, y cuando los creyó lo suficientemente lubricados los saco de la cálida boca de Steve para dirigirlos a su entrada.

Poco a poco fue sintiendo como ese dulce anillo de carne que era la entrada de Steve se iba abriendo para darle paso a su dedo dejando que sintiera lo cálido que era su interior. Fue moviéndolo poco a poco sintiendo como Steve empezaba a gemir y sin poder contenerse metió otro dedo que fue recibido en esa estrecha y cálida entrada, pero en esa ocasión sintió la molestia de Steve por su rostro, pero pronto la molestia cedió pasa al placer para empezar a gemir nuevamente y consiguiendo que Tony metiera un tercer dedo. Después de unos minutos lubricándolo y sin poder aguantarlo más saco sus dedos para estimular su miembro durante unos segundos antes de colocarlo en la entrada de Steve y penetrarlo de una sola estocada.

- ¡Ahhhhhhh!- Gimió Steve de dolor mientras arqueaba su espalda.

- ¡Sí! ¡Es mejor de lo que pensaba!

Steve no escucho esas palabras ya que solo sentía el dolor de la intromisión en su cuerpo. Tony no se movió esperando que Steve estuviera listo antes de empezar a moverse en su interior. Los minutos pasaban y cuando Tony no podía aguantar más es cuando sintió como el cuerpo de Steve se relajaba y movía las caderas buscando más contacto.

Sin pensarlo dos veces Tony empezó a embestir a Steve, buscando el punto exacto donde perdería todo atisbo de cordura. Con cada estocada que Steve gemía de placer haciendo que Tony se olvidara de todo para concentrarse únicamente en la música de gemidos que le estaba regalando SU rubio capitán.

- ¡¡¡SÍ!!! ¡¡¡AHÍ, DAME OTRA VEZ!!!

Y ahí estaba. Tony había encontrado el punto exacto donde su capitán se perdía en la locura y sin pensarlo dos veces empezó a explotar ese dulce punto.

- ¡¡Ahhhhhhhhhhh, Tony!!

- ¡¡Ummmm, Steve!!

La habitación estaba llena de gemidos de ambos y de los movimientos y choques que hacían sus cuerpos. Estaban muy excitados y nada les importaba en ese momento más que sentir el cuerpo del otro contra el suyo, y así estuvieron hasta que el placer fue máximo y no lo pudieron retener en su cuerpo.

- ¡¡¡Tony, me voy a… a…. ahhhhh… y… yo…!!!

- ¡¡¡Yo tampoco aguanto… ahhhhh!!!

Tony llevo su mano al olvidado miembro de Steve y empezó a bombearlo al ritmo de sus embestidas hasta que Steve no pudo más.

- ¡¡¡¡¡TONY!!!!!- Gimió Steve mientras se arqueaba su espalda y expulsaba su esencia y manchaba los abdómenes de ambos.

- ¡¡¡STEVE!!!- Gimió Tony cuando sintió que la estrecha entrada de Steve se apretaba en torno su miembro hasta que en un par de embestidas se corrió en su interior.

Y al terminar se dieron un último beso que fue empezado por Tony antes de quedarse ambos profundamente dormidos en el suelo de la sala de la torre Stark.

Fin Flash Back

Nunca lo olvidaría. Ese mismo día había perdido la virginidad en manos de su amor, en manos de Tony. Después de eso pensó que sería algo más para el playboy ya que empezaron a reunirse para seguir teniendo sexo.

Para él era como estar en un sueño, estar con la persona amada y que esta aceptara estar con él. Y ahora tenía una noticia que creía que haría a Tony muy feliz.

Durante un par de semanas había estado con nauseas y cada vez se sentía peor y no podía estar cerca de algunos alimentos sin tener ganas de vomitar todo el desayuno. Cuando había ido al hospital siendo obligado por Furi es cuando se había enterado de que estaba embarazado.

En ese momento sintió varias cosas a la vez. Sintió duda de cómo había podido quedarse embarazado siendo un hombre, después felicidad por poder compartir una familia con el hombre al que amaba, luego sintió miedo de que Tony no quisiera al bebé y lo último que sintió en ese momento fue esperanza, esperanza para poder estar con su hombre y su bebé, viéndolo o viéndola crecer  y darle una vida realmente feliz al lado de ambos.

Pero todo eso fue destruido en cuestión de segundos. Aun recuerda con dolor como fue que se entero de lo que realmente sentía Tony por él.

Flash Back

Steve iba de camina a Industrias Stark. Habían quedado a la noche pero no podía esperar para darle la noticia de que serían padres, de que un pedacito de su amor crecía en su interior.

Estaba tan feliz y emocionado que estaba seguro que Tony compartiría sus mismos sentimientos y que estaría tan emocionado o más por ver crecer a su pequeño o pequeña en su interior y luego poder cargar al bebé.

De solo imaginarse a Tony con un bebé en brazos mientras él los observaba le hacía sentir un calor y una paz que no podía dejar de transmitir de su cuerpo a todo aquel que estaba cerca.

- Steve ¿qué haces aquí?- Preguntó una sorprendida Pepper.

Steve se giró para verla mostrándole una gran sonrisa, una llena de amor que mostraba que en ese momento era la persona más feliz del mundo.

- Hola señorita Potts. He venido a ver a Tony, ¿está aquí?

Pepper se quedó de piedra por lo que había dicho Steve. Normalmente él no se acercaba a Industrias Stark a menos que fuera algo grave, lo que no era el caso ya que si no, no estaría tan contento.

- ¿Señorita Potts?- Pregunto Steve preocupado.

Pepper en ese momento dejo de lado sus pensamientos para mirar a Steve y la verdad no estaba preparada para esto, lo que solo le dejaría con más problemas de los que ya tenía.

- Dime Pepper, Steve. Sabes que no me gusta que me digas “Señorita Potts”.- Dijo para desviar el tema.

Steve soltó una ligera y musical risa lo que hizo que Pepper se sorprendiera. Normalmente el era así, feliz pero hoy estaba especialmente contento y no quería borrarle la sonrisa de la cara además parecía que se había olvidado del por qué estaba ahí.

- De acuerdo Pepper. Bueno ¿dónde está Tony?

De acuerdo no había conseguido que se olvidara de lo que había ido a hacer ahí, así que solo le quedaba una opción: entretenerlo.

- Bueno Steve, Tony en este momento está ocupado así que…

- No te preocupes no le molestare mucho.

- Pero lo mejor es que esperes. De hecho ¿no quedasteis esta noche? Deberías esperar para hablar con él para después.

- Está en su despacho ¿Verdad?

Esa afirmación dejo a Pepper con la boca abierta. Pero ¿cómo….?

- ¿Cómo lo sabes?- Pregunto desconcertada.

- Solo lo dije por probar.- Dijo con una sonrisa mientras se dirigía al despacho de Tony.

- ¡Steve! ¡Espera!

Pepper tuvo que correr para alcanzar a Steve mientras que su mente trabajaba a todo gas para pensar en una manera de evitar de que Steve viera a Tony.

- Steve vamos a esperar en la cafetería que hay en frente del edificio. Así tomamos algo y hablamos mientras Tony sale.- Sugirió Pepper.

Pero Steve no la escucho ya que estaba pensando en la reacción de Tony cuando le dijera la noticia tan especial que tenía. Estaba seguro de que estaría tan feliz como él, y cuando llegó al despacho de Tony Pepper hizo el último intento por detenerlo, intento que fue fallido.

Cuando Steve abrió la puerta la imagen que lo recibió lo dejo de piedra. Tony estaba besando a una chica, aunque no era lo único que estaba haciendo.

Le recorría el cuerpo con las manos mientras ella le empezaba a quitar la chaqueta y a acariciar su cuerpo, mientras Tony la tumbaba en el sofá del despacho y ambos empezaban a soltar gemidos entre beso y beso.

Steve sintió en ese momento como algo en su interior se rompía. No podía decir exactamente que era pero estaba casi seguro de que era su corazón. Esa imagen le estaba destrozando y ahora todo, todo lo que había vivido con Tony y lo que le tenía que decirle se quedaron de lado para darle paso a una rabia que lo estaba carcomiendo por dentro.

- ¡¡Tony Stark!! ¡¡¿Qué estás haciendo?!!- Su grito mostro lo indignado que estaba y mucho más si escuchaste bien podías sentir el dolor que impregnaban esas palabras.

Tony se separo rápidamente de la chica y vio directamente a los ojos de Steve que le miraban entre decepcionado, dolido y algo más que no fue capaz de descifrar.

- ¿Steve qué haces aquí?- Pregunto con calma mientras se arreglaba la ropa y dejaba que la chica que estaba con él se fuera.

- ¡¿Qué que hago aquí?! ¡Eso ya no importa! ¡Tony, como has podido!- Pregunto dolido.

- ¿Podido? ¿Podido el qué? Tú y yo no éramos nada Steve. Si tu creíste que éramos algo es tu problema no él mío. Además yo no recuerdo haberte dado falsas esperanzas.- Dijo mientras se  sentaba en su escritorio.

Steve sintió como una gran herida se abría por lo que estaba diciendo Tony. ¿Qué no eran nada? ¿Entonces qué es lo que habían sido?

- ¿Nada? ¿No fui nada para ti? ¿Ni siquiera cuando me hacías el amor?- Pregunto con la voz ligeramente temblorosa.

- Yo nunca te hice el amor Steve. Aquello fue solamente sexo. Yo nunca te dije que serías el único con el que me acostara.

La herida siguió abriéndose después de esas palabras y sentía como sus ojos le picaban pero no estaba dispuesto dejar caer una sola lágrima delante de él.

- ¿Sexo? Bien pues déjame decirte que no voy a volver a ser eso para ti Tony. No lo voy a ser porque no vas a volver a tocarme.- Dijo con decisión pero con un pequeño deje de dolor que no pudo ocultar.

- Pues en ese caso ya te puedes marchar Steve. No quiero seguir perdiendo mi tiempo contigo.

Esas palabras fueron el detonante y Steve se marcho. No le hizo caso a nadie y estuvo caminando hasta llegar a su apartamento donde se dejo caer en la cama para liberar todo el dolor que sentía en ese momento.

Fin Flash Back

Aun recordaba todo lo que sufrió por las palabras que le dijo Tony y si no hubiera sido por su bebé lo más probable es que hubiera caído en depresión pero no podía hacerlo, no si quería que su bebé naciera sano y salvo y es por ellos que había tomado una decisión.

- Tú y yo nos iremos lejos de aquí y no volveremos a ver a Tony. Yo te protegeré de él.

Todo eso lo dijo mientras se acariciaba el vientre y se iba hacía la base de S.H.I.L.D. para comunicarle su decisión de marcharse a Furi.

Notas finales:

Espero que os haya gustado tanto como a mi y ahora...

¿Tomatazos, amenazas de muerte, criticas?... ¿Reviews?


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