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Hikari to Yami por Alinu

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Notas del fanfic:

¡Hola! está vez vengo con un nuevo fic espero les guste :3 dedicado a todas mis amigas queridas, mis amores platónicos y por supuesto a todos aquellos que se toman un tiempo para leer esta histotia.

 

Notas del capitulo:

HIKARI TO YAMI

El fic es un crossover de un mundo alterno, incluye YuurixWolfram, ShizuoxIzaya, KuroganexFye y KotetsuxBarnaby, xD les recuerdo que la historia es sin fines de lucro y cada personaje corresponde a su respectivo autor (TomoTakabashi, Ryohgo Narita, CLAMP y la MBS).

ADVERTENCIAS:

Puede contener palabras altisonantes y violencia (por parte del Shizaya)

Más adelante habrá R18.

Sí no les agrada alguna pareja de las antes mencionadas, por favor abstenganse de leer.

Aclaraciones de lectura:

-"diálogo"

-"pensamiento

-relato

*********** Cambio de escenario

 

Acto 1... White & Black

Shinjuku es uno de los 23 barrios especiales en Tokio, un lugar comercial donde viajan turistas y personas para distraerse o efectuar negociaciones importantes.

Esta zona era bien conocida por ser un gran emporio para empresas internacionales; pero también tenía su lado obscuro que era un secreto a voces para las personas que habitaban ese lugar.

Y ahí, precisamente es donde las dos caras de la moneda se mezclan, entrelazando los destinos de varias personas.

Así como la luz necesita la obscuridad, el bien y el mal coexisten en el equilibrio del universo.

Región de Kantou, Barrio de Shinjuku.

-"Ahh"- suspiraba aquel hombre castaño abriendo el periódico, mientras estaba sentado en un comedor pequeño de cristal, con una taza blanca humeante llena de café con leche.

De repente se escucha un estruendoso golpe proveniente de una de las habitaciones de ese cómodo y ostentoso departamento; sin causar ningúna reacción por parte del hombre, hasta que un joven apareció apresuradamente ante él, tomando un pan tostado que estaba servido en aquella mesa.

-"Me tengo que ir...¡Voy a llegar tarde!"- dijó rápidamente corriendo hacia la entrada; era un chico con unos ojos y cabello completamente negros al igual que el uniforme que portaba.

-"Eso te pasa por no hacer tus tareas antes de las prácticas de béisbol..."-por fin hablaba el castaño de forma relajada sin despegar los ojos de su periódico a la vez que daba un sorbo a su café.

-"Bien. Nos vemos, Kotetsu-san"- sin prestarle atención a sus palabras, saliendo del lugar a toda velocidad.

-"No llegues tarde"-mencionó casi en susurro pues el chico ya se habia ido. -"Mi nombre es Kaheiwashi Kotetsu, soy un hombre de 34 años de edad que estuvo casado alguna vez, pero por desgracia no fué como yo hubiera querido. Actualmente trabajo en la policía con la división de casos especiales; nos encargamos de investigar empresas o personas importantes inmiscuidas en manejos sucios. Por azares del destino ahora estoy cuidando de mis tres sobrinos, desde que mi hermana falleció hace apróximadamente 10 años, su marido siempre se la vive viajando sin poderse hacer responsable de sus hijos, así que decidí traerlos a vivir conmigo.

Cada uno de ellos es único pero todos son excelentes chicos. Yuuri es el más pequeño, le encanta jugar béisbol, es honesto, amable y justo con los demás, tan sólo tenía 7 años cuándo mi hermana nos dejó. Y de ahí, vienen las dos fieras..."- de pronto se escuchó un rugido inundando todo el lugar; sacando de sus pensamientos al hombre de barba. -"Ahí están otra vez..."- suspiró resignadamente con algo de pesadez.

-"¡Te dije que pusieras mi cepillo de dientes en su lugar!"- se escuchó aquel reclamo como un eco, seguido de un golpe seco.

-"Será mejor que te calmes Idiota, o tendrás que limpiar de nuevo tu sólo."- decía una segunda voz severamente y algo fastidiada.

-"Sí, así es, ellos... dos chicos con un carácter explosivo que han hecho reconstruir partes del departamento varias veces. A pesar de ser ya hombres mayores que trabajan por su cuenta, por alguna razón siguen viviendo aquí y ningúno de los dos tiene novia, de verdad que no entiendo a la juventud de ahora... Ahaa... a decir verdad, esto parece más un departamento de solterones."

-"¡Molesto, Molesto, Molesto!"- pronunciaba entre dientes un chico rubio que traía puestos unos lentes de sol azules, mientras entraba al comedor con pasos fuertes, deteniéndose frente a la mesa para beber de un envase de leche que lo hizo calmarse de inmediato.

-"Shizuo, espero que está vez no hayas roto de nuevo la pared."- dirigiendole una mirada fugaz, al tiempo que volvía a dar un sorbo a su café.

-"No te preocupes Kotetsu, detuve al mocoso antes que hiciera un daño."- interrumpió está vez un chico que parecía el mayor de los hermanos con un pelo negro y ojos rojos, que tenía al contrarío del rubio un cuerpo bronceado con los musculos más torneados, el cual iba entrando al comedor.

-"Tsk..."- chasqueo la lengua al momento que lo veía con algo de molestia por ser llamado de esa forma. -"Me voy..."- de manera cortante.

-"¿De nuevo a la agencia?"- preguntaba el oji avellana dejando de lado esta vez su periódico.

-"Sí. Al parecer Tom-san tiene trabajo para mí"- ya con una voz más relajada, dirigiéndose hacia la puerta.

-"En ese caso yo también me voy..."- decía el pelinegro mientras se colocaba su chaqueta de cuero negro.

-"¿Te vas? ¿No dijiste que habias dejado tu trabajo?"

-"Sí. Tengo que ir a ver a Tomoyo..."

-"Oh, ¿Tomoyo-chan? ¿Tu amiga de la infancia? Supongo que por fin te decidiste a salir con ella..."- de forma pícara.

-"¡Te equivocas! Iré a ver lo de un trabajo."- hablándole severamente.

-"No es para que te lo tomes enserio, jejeje"- haciendo un pequeño puchero.

Minutos después el pelinegro salio de igual forma dejando al castaño solo.

-"Bueno, creo que es hora de salir al trabajo también"- dejando la taza vacía en el fregadero y colocandose su boina beish con una franja café en el centro, para después salir del departamento hacia su trabajo.

Sin embargo, como en todo no sólo hay una vida color de rosa. Existe una parte de la ciudad, aquella que nunca es nombrada pero a su vez, saben que existe al noreste de Shinjuku, llamado Kabukichou mejor conocido como el barrio rojo.

-"Voy a salir por un rato. Será mejor que no se metan en problemas mientras no estoy, y sigan con lo planeado."- un joven rubio de piel blanca, cabello ondulado y lentes, hablaba severamente, al momento que se colocaba una corbata, que combinaba totalmente con su traje rojo.

-"Barnaby-kun, ¿A dónde piensas ir?"- preguntaba de forma curiosa con una sonrisa en sus labios; un hombre delgado, de piel aún más blanca y una figura totalmente estilizada, que hacía juego con sus ojos color zafiro y un cabello rubio un poco más pálido.

-"Maverick-san me ha conseguido un trabajo nuevo en la policía de casos especiales, así que iré a presentarme como es debido."- contestando de manera formal e inmutable.

-"Jajajaja. No cabe duda que los humanos son muy divertidos"-una risa burlona interrumpió a los dos rubios, haciéndolos voltear hacia un pequeño sofá desgastado color marrón donde reposaba un joven pelinegro, con unos intensos ojos rojos que reflejaban una mueca jovial; era de complexión delgada, con una piel blanca y estaba totalmente desparramado en aquel sillón. -"Esto se pone cada vez más interesante, ¿No les parece?"

-"No tienes porque hablar de esa forma, Izaya-san. Espero que no hagas nada innecesario, sería una molestia"- reprende firmemente el chico de lentes, mientras lo ve seriamente sin rastro de estar bromenado.

-"Ahaa"- suspirando-"De verdad... ¿No querrás decir que mi sola presencia es una molestia?, Sabía que vivir con ustedes como una *bella familia*, no iba a funcionar..."- diciendo lo último de manera sarcástica, sin apartar la sonrisa sínica de su rostro.

-"Por favor, Barnaby-kun, Izaya-kun. Cálmense. No es momento de pelear"- intervino amablemente el ojiazul, tratando de calmar la tensión creada.

-"Jajaja. Yo no estoy tratando de pelear. Es más, esto parece demasiado divertido. Qué el hijo de la AMANTE de su padre viva con ustedes como uno más de la familia. Como sí nada pasará. ¿No es genial?"

-"Izaya-kun, no deberías hablar de esa forma"- esta vez el mayor de los rubios dejó aquella máscara sonriente mirándolo de forma severa y melancólica.

-"Sólo estaba bromeando. No tienes por qué poner esa cara Fye-niichan"- levantándose del pequeño sillón para acercarse a su hermano y tirarle un sobre color café en la pequeña mesa de madera desgastada.-"Aquí tienes mi parte de este mes. Será mejor que busquemos otro lugar. Estoy harto de vivir en este cuchitril"- mirándolo con algo de desdén.

-"Sabes perfectamente que no podemos salir de aquí"- reprende su otro hermano acomodándose los lentes.

-"Sólo estoy sugiriendo cambiar de departamento. Donde no haya goteras y los sillones no esten a punto de caerse en pedazos"- pronunciaba sin nada de interés. -"Sé muy bien que no podemos irnos de Kabukichou, después de todo debemos complacer a los clientes~~"-retandolo con la mirada.

-"Me ocuparé de eso antes de entrar al trabajo, a unas cuadras de aquí ví un conjunto de departamentos que se ven mucho mejor"- sonriendole a ambos de forma amable para calmar la tensión que se habia creado.

-"Entonces me voy llendo. Nos vemos por la noche"- dijó el ojiverde despidiéndose de manera formal.

-"Bien~~~"- estirando su delgado cuerpo al momento que dejaba ver una anillo plateado en cada mano- "Yo también voy a salir... Ah, cierto"- levantando un dedo- "No recordaba que hoy era el primer día de escuela del pequeño"

-"Hoy parecía entusiasmado, tenía el ceño fruncido y se fue muy temprano"- sonriendo al recordarlo.

-"La academia Maruma ¿Cierto? Me trae recuerdos..."- adquiriendo una mirada astuta, al momento que sacaba una navaja de su chamarra negra y la ponía sobre sus labios. -"Bueno ahora sólo son recuerdos~~ supongo."- diciéndolo casi en susurro.

-"¿Mmm?"- volteando a verlo algo extrañado.

-"Nos vemos ~~ Tal vez pasé al bar por unos tragos"- sonriendo y despidiéndose de espaldas levantando la mano.

-"Que te vaya bien.."- brindandole una sonrisa; cuando se aseguro que ya estaba completente solo, hecho un vistazo al pequeño cuarto, de verdad todo estaba casi en ruinas. Se coloco un pequeño mandil blanco y comenzó a limpiar los muebles que tenían, que en realidad eran muy pocos, para ser cuatro chicos jovenes que dormían en futones en una sola habitación. -"Bien, supongo que hoy voy a preparar su comida favorita"- soltó de forma cantarina al momento que se dirigía a una esquina del cuarto, donde se suponía estaba la cocina.

Hoy comenzaría a cambiar su destino...

CONTINUARÁ...

 

Notas finales:

Nota: Disculpen la molestia, hubo un accidente y se borro el fic -.- así que tuve que resubirlo D: se borrarón sus amables comentarios, espero lo comprendan y me perdonen, gracias.

 

Hasta aquí nos quedamos con el fic, espero les haya gustado y comenten. Recuerden que por cada review Izaya le lanza una navaja a Shizuo *w* jajaja ok, no. Saben que un comentario es nuestro alimento y mientras más, pues más rápido estará la actualización.

Matta ne! :3

suki fuera~

 


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