Capitulo 1: Te quiero mucho papá Seung
Estaba en completo shock, jamás en mi vida me imagine que pasaría por algo así, por lo menos no con mi condición sexual. Ahora me encontraba enfrente de ella, esa maldita demonio que me envolvió en sus redes y que quiere responsabilizarme por algo que yo NO quería.
- ¡Tienes que hacerte responsable Seung Hyun! – exclamo con autoridad la chica –
- ¡No! ¡No puedo Dami! Tú lo sabias muy bien – responde con irritación y clara muestra de enfado –
- No me importa que no quieras Seung Hyun, tú eres tan responsable como yo en esto.
- ¿Responsable? ¿Estás jugando conmigo? ¿Quién fue la loca que me acoso hasta el cansancio para tener sexo conmigo? ¿Quién fue la urgida que no le importo meterse con un homosexual? ¿Eh? Tu sabias perfectamente que me gustan los hombres y me obligaste a acostarme contigo diciendo que “es solo un juego para saciar la curiosidad, no pasara nada más entre nosotros” – imita el tono agudo de voz de la chica –
- ¡No pasaría nada entre nosotros si TU estúpido babo, te hubieras cui-da-do! ¿Acaso los malditos homosexuales no se cuidan cuando tienen sexo? ¡Qué asco!
- ¿Así que la culpa es solo mía? ¡Que te jodan! ¡Perra!
- ¿A mí? Que te jodan a ti, estúpido enfermo. Solo mira esto como una oportunidad de dejar tus enfermizos y asquerosos deseos por los hombres. ¡Me importa un carajo que no te quieras casar conmigo pero hazte cargo de TU hijo!
- No tengo porque hacerlo y no quiero. Así que largo de mi departamento.
- Nuestro departamento cariño, porque cuando mis padres se enteren de que tu estúpido espermatozoide ganador logro penetrar mi ovulo y tú no quieres hacerte cargo, me mandaran directo al diablo y yo te arrastrare conmigo. Así que salúdame apropiadamente porque a partir de mañana viviré contigo – se dio la vuelta y se marchó dejando al chico totalmente impactado –
- ¡Maldita puta! – grito antes de cerrar la puerta de un azote – mierda… mierda… ¡mierda!
Tal y como lo dijo esa bruja, en la tarde del día siguiente apareció en mi puerta con sus maletas. En ese momento quería mandarla a la mierda y azotarle la puerta en la cara para que se rompa la nariz o algo, pero ese demonio me amenazó con denunciarme. Definitivamente era el mal encarnado, mi pesadilla DAMI KWON.
~~~ 9 meses después ~~~
Estos han sido los nueve meses más horribles de mi vida, cada día fue una pesadilla. La bruja endemoniada dejo su puesto de trabajo y yo tuve que estar como perro trabajando para mantenerla a ella y a esa semilla de maleza en su vientre. Todos los días me hacía correr buscando sus benditos “antojos” porque si no lo conseguía me amenazaba con clavarse un cuchillo y luego denunciarme de violencia familiar ¿Violencia familiar? ¿Esta idiota? ¡No estamos casados! Y peor… ¡Me daba asco! El haberme acostado con ella fue lo más asqueroso que había hecho. Porque NO me gustan las mujeres… soy HOMOSEXUAL
¿Y ahora? Me encuentro en la sala de espera… contando los segundos para que la bruja mal parida de Dami tuviera un parto exitoso y que la bola de carne que llevaría mi apellido llore de felicidad porque al fin dejara de estar dentro de esa rata, y ¿Quién no lo estaría? Si yo sufri de estar a su lado estos meses, el o la bebe se la ha de haber pasado peor ya que no podía alejarse de… de… de… del ¡diablo!
- ¿Usted es el señor Choi? ¿El esposo de Dami kwon? – pregunto el doctor saliendo de una habitación –
- Que no soy el esposo de esa bru… quiero decir de Dami, no estamos casados. Pero él bebé que acaba de tener es mío – respondió con desgano –
- Oh ya veo… bien, ya puede pasar a ver a su pequeña. Ha sido una niña y está muy saludable.
- ¿Otra bruja? Digo… chica.
- ¿Sabe? ser padre es un privilegio que no todos los hombres pueden tener. Si usted no ama a esa chica con la cual acaba de tener una hija, está bien. Pero no juzgue a esa criatura que solo ha sido producto de su irresponsabilidad, y con “su” irresponsabilidad me refiero al de la señorita Kwon y usted. La pequeña necesita el amor de sus padres y crecer en una familia unida, no en una disfuncional. Hay parejas como mi esposa y yo, que realmente quisiéramos tener un hijo pero que Dios no nos concibió ese privilegio. Ahora si me disculpa, tengo trabajo. La señorita Kwon y su hija están en la habitación 36 – se dio la vuelta y se marchó –
Vi como aquel hombre se marchaba, en realidad era bastante apuesto, pero ese no era el caso. Al verlo hablar con tanto empeño y fijarme en su mirada profunda, me di cuenta que estaba tomando todo este asunto de una manera muy infantil e inmadura. Tenía razón, había sido testigo de cómo Dong Wook hyung y su esposa Han Byul sufrían al no poder concebir vida. Y ahora yo tenía un pedazo de mi ser en los brazos de Dami, tal vez ella no sea la persona con quien quiero compartir mi vida, pero esa no era la razón para embarrar a mi hija en la mierda que provoco Dami.
Entre a la habitación y la vi abrazando a mi bebita. Me acerque a ella y observe ese pequeño y… adorable rostro.
- Es… hermosa.
- ¿Ahora es hermosa? Realmente eres hipócrita Seung Hyun. Pero no te lo negare, esta mocosa es bonita.
- ¿No puedes tratarla un poco mejor?
- ¿A ella? Es tu hija, pedazo de animal ¿Cómo puedo tratarla mejor teniéndote a ti como padre?
- Eres una enferma – se acercó y aparto a la bebé de los brazos de su madre –
- Si yo soy una enferma entonces no sé cómo llamarte a ti.
- ¿Cómo la llamaremos? – ignora las palabras de la mujer y arrulla con ternura a la bebé –
- Llámale como quieras, no se me ocurre ni un nombre – pronuncio en tono cortante –
- Qué pesada – mira a la niña y sonríe por inercia – entonces te llamaré… Hye Yoon, como tu tía, aunque… nunca la conozcas porque ella se ha ido de este mundo – habla con tono de tristeza –
- Oww que tierno y sentimental me saliste Seung – rio con burla la mujer –
- ¿Quieres cerrar el hocico? Por dios eres tan insoportable…
- Lo que digas… por cierto, mi hermano llegará en un mes. Vivirá con nosotros ya que la casa de mis padres es pequeña y no puede quedarse allí.
- ¿Qué? ¿Esperas que mantenga otra boca? Realmente no estás bien Dami.
- Ah vamos, Ji es un chico muy lindo, no te importara tenerlo en casa. Es decir, eres un maldito homsexual, no sé a lo mejor es de tu agrado – ríe nuevamente con sorna –
- ¿Estas vendiendo a tu hermano?
- ¿Vendiendo? No, más bien es un incentivo para que lo mantengas. No importa que pague con su cuerpo ¿verdad?
- Me das asco… ¿Ves a esa desquiciada Hye Yoon? Nunca te parezcas a ella ¿Entendido? – la mujer roda los ojos y pide que se largue de la habitación para que la deje dormir –
~~~ Un mes después ~~~
Llegue a casa cansado del trabajo, últimamente he estado haciendo horas extra para poder tener dinero y comprarle un medicamento especial a Hye Yoon que está teniendo problemas para respirar. Estaba a punto de abrir la puerta y escuche sus llantos, me desespere y abrí la puerta. Realmente me había encariñado con ella, el solo hecho de ver su gracioso rostro me aliviaba me hacía pensar que tal vez no era tan malo haberla tenido, aunque Dami era un monstruo que se la pasaba gritándole a mi hija para que se callase, a veces dudo que Dami sea humana. Ella tenía 0 paciencia con mi niña. Subí corriendo a la habitación y al entrar me di cuenta de que esa bruja se había marchado. El armario estaba abierto y vacío, los cajones estaban de igual modo. Corrí a mi gaveta y vi la cerradura forzada y abierta.
- ¡Maldición esa perra huyo con mis ahorros!
Me senté al pie de la cama y revolví mis cabellos con frustración, ella se había ido… me había abandonado, se había robado MI dinero, y me había dejado toda la carga de la niña. Trate de calmarme y no cometer una locura, el llanto de Hye Yoon no me dejaba pensar. Tenía un gran dolor de cabeza y solo quería que ella se callara. Tome una almohada y estaba a punto de callar a la niña, callarla para siempre… de pronto las palabras del doctor golpean mi mente y con lágrimas en los ojos aviento la almohada a la pared y abrazo a mi hija…
La acomodo en mi pecho y con lágrimas fluyendo en mi rostro me siento al pie de la cama arrullándola y tratando de calmarla…
- Duerme mi niña… no llores mi amor… descansa en brazos de papito. Yo te cuidare así que duerme… prometo no dejarte como lo hizo tu madre. Estaré a tu lado siempre… y… perdona a tu tonto padre por querer callarte de esa forma… perdóname mi niña… perdóname Hye Yoon – susurra lo último mientras le da un beso en la frente y la niña se calma comenzando a dormir nuevamente –
Recosté a mi niña en su cuna y baje a la cocina por un poco de café, a decir verdad quería embriagarme, pero no podía. Le prometí a mi hija que la cuidaría y en estado de ebriedad eso sería imposible… Tome un poco de café y luego prepare la mamila de mi Hye, la alimente y sin querer apartarme de ella la recosté junto a mí en la cama y dormimos juntos…
Al amanecer escuche los insaciables timbres de la puerta. Acomode a mi niña en la cuna y con aspecto deplorable y los ojos hinchados por tanto llorar baje y abrí la puerta contestando como si fuera un ogro.
- ¿Qué mierda quiere?
Al levantar la mirada pude ver a un chico de cabello castaño, muy lindo, aunque sus facciones se parecían a los de la bruja esa. Casi podía jurar que era su versión masculina. Sus ojos estaban abiertos como platos, sus labios formaban una perfecta “o” y parecía algo atemorizado, baje la mirada y vi maletas junto a él… Mierda… es el hermano de la bruja…
- ¡TÚ! – el chico rubio se sobresaltó y retrocedió un poco – eres el hermano de la perra Kwon ¿cierto?
Pude ver claramente como mis palabras lo hicieron enojar y con el ceño fruncido me respondió con esa aguda y chillante voz… definitivamente era la versión masculina de la bruja… lo que me faltaba…
- ¿Quién te crees que eres? ¿crees que puedes ofender de esa manera a mi noona? ¡Seguramente embarazaste a mi noona por diversión y solo estas con ella porque te está obligando! ¿cierto?
- ¡Bravo! Un premio para la versión masculina de la perra Kwon.
- ¡Deja de insultarla! ¿Acaso no eres hombre?
- ¿Y esa perra qué? ¿Siquiera es humana? ¡Porque yo no lo sé!
Él estaba tan enojado que me dio una bofetada, me enoje y le tome de la muñeca metiéndolo a la casa y tirando sus maletas a un lado.
- No puedo llamar de otra forma a tu hermana. No después de lo que me hizo ¿entiendes? No tengo nada en tu contra, si quieres puedes quedarte aquí aunque la bruja de Dami se haya largado con todo mi dinero – se sentó en el sillón con la mirada del chico sobre el –
- ¿Da… Dami noona huyo? Pero… ¿Y la bebé?
- Hye Yoon está durmiendo en la habitación – se cubrió el rostro y comenzó a masajear sus sienes – mira chico
- Ji Yong, me llamo Ji Yong.
- Mira JiYong, Hace un año conocí a tu hermana, era mi compañera de trabajo en el despacho de contabilidad. Ella se me declaro y yo la rechace porque soy homosexual y no tenía ni un interés en relacionarme con una mujer – el chico se sorprendió al punto de no poder responder – ella me acosaba día tras día, una y otra vez, al punto de proponerme tener sexo solo por diversión, dijo que sería solo una vez, yo no quería. Pero un día fuimos a beber solo como compañeros, y en un estado de total ebriedad accedí ¿el resultado? El resultado está durmiendo pacíficamente en un cunero.
- Pero… no puede ser.
- Acepte a esa bebé como mi hija, le di mi apellido y le di nombre porque Dami no quería darle uno. Le he dado alimento y cobijo, me he partido la espalda manteniendo a tu hermana y a mi hija. He detenido a tu hermana de muchos intentos de suicidio y homicidio contra mi niña. Y ahora esa rata que tienes como hermana se ha fugado con todo mi dinero ¿Sabes para que era ese dinero? – el menor niega con la cabeza conteniendo las lágrimas – era para los análisis de Hye Yoon, era para su medicina y tratamiento de ¡Mi hija!
De pronto no pude soportarlo más y comencé a llorar, me sentía patético pero un poco más liviano después de decir todo aquello que ocultaba en mi pecho. De pronto sentí unos brazos rodearme y darme palmaditas en la espalda para intentar calmarme…
Llore mucho en los brazos de ese chico, y en ese momento pensé que tal vez Dami tenía razón en algo… su hermano era realmente lindo. Gracias al cielo no era como ella…
~~~ Dos años después ~~~
- Feliz cumpleaños pequeña Hye… Feliz cumpleaños a ti… - cantaban en coro los dos hombres mientras el menor de ellos sostenía un pequeño pastel frente a la niña –
Han pasado dos años ya del nacimiento de mi niña, y casi dos desde que la bruja se fue y ese chico que ahora juega con mi hija llego a mi vida… aun le doy gracias al cielo que JiYong no sea como Dami, él le ha dado mucho amor y cuidado a mi pequeña Hye Yoon, más amor que cualquier persona podría darle. JiYong era un chico sencillo y trabajador, cariñoso, detallista y muy alegre. Aunque el fuera tres años menor que yo, y este terminando su último año de universidad, me ha ayudado mucho con su presencia, él estudia pediatría y eso es aún mejor para Hye Yoon y para mí…
Con estos dos años he logrado quererlo, apreciarlo y agradecer su existencia, debía admitirlo JiYong me encantaba, y aunque nunca me he mostrado tan cariñoso al punto de hacerle saber mis sentimientos, creo que he logrado formar un lazo con él ya que a veces nos tomamos de la mano o sonreímos como idiotas mientras jugamos juntos con mi hija…
Puedo decir con seguridad que Ji y mi niña son las dos personas que más amo en la vida. Ahora mismo vienen a mí con una rebanada de pastel, Hye Yoon lo sostiene un poco tambaleante y JiYong cuida que ella no tropiece o tire el pastel, sonrío y bajo a su nivel recibiendo el plato con pastel, mi hija sonríe y me besa la mejilla, de pronto habla claramente formando su primera oración larga…
- Te quiero mucho papá…
Sus palabras me calan hasta los huesos inundándome de una inmensa felicidad, mis ojos se cristalizan y abrazo a mi pequeña riendo en un tono bajo, pude sentir la mirada de Ji fijamente en nosotros y casi pude ver lágrimas de felicidad en sus ojos…
- También yo te quiero mi linda Hye Yoon, mi hermosa hija…