La Maldad que se aloja en ti...
James no entendía. Sirius había sido un idiota con Remus antes de la Luna Llena y cuando Moony apareció le hizo pagar todas a Padfoot como bien se lo merecía pero no sabía porque ahora ÉL tenía que cuidar de Black siendo que apoyaba a Remus.
—Vamos Jimmy… no te enojes— mala elección de palabras para Black.
SI James pudiera atravesarlo con la mirada lo habría hecho en ese momento. Sirius tenía herida las piernas por lo que no podía caminar y James lo tenía cual damisela en sus brazos, para trasladarlo y ayudarle con cualquier asunto que fuese necesario. Peter no podría y no mencionaremos a Remus.
—Cállate y vístete— lo soltó sobre la cama, a lo que Black se quejo. Sin más salió de la habitación.
Esta dinámica se venía repitiendo el último tiempo entre Potter y Black, lo que causaba que el segundo se preocupara de sobremanera. Si bien James apoyaba a Remus no había ningún problema pero que llegue a gritarle por defenderlo, dejarlo a él, Sirius Black, votado para ir por Remus y verlos hablar el último tiempo tan augustos le carcomía la conciencia y hacia que su sangre hirviera de celos.
No querría ni imaginarse una escena entre Remus y James. Aunque no fuera creíble. Jimmy llevaba tras Evans varios años y Remus… bueno, no se sabía que saliera con nadie y menos que le gustara alguien, para desilusión de Black.
Ya al anochecer volvió Peter.
—¿James?— pregunto Sirius, no podía salir de la cama y estaba sumamente aburrido.
—Se iba hacia las cocinas— informo para tomar su pijama e ir al baño.
Sirius sin más que hacer lo dejo pasar y se dispuso a dormir, lo único que podía hacer durante el mes que estuviera en cama, cabe mencionar que solo llevaba dos.
Escucho como Peter salía del baño y se dirigía a su cama para acostarse y dormir. El pequeño el último tiempo se esforzaba por estudiar y subir sus notas.
No paso mucho (o eso creyó) cuando escucho nuevamente la puerta. Giro su cabeza disimuladamente para observar, James traía a Remus prácticamente a rastras. Al parecer ambos estaban bebidos, lo que significaba que estuvieron juntos.
James quería llevar a Remus a su cama (la cual estaba entre la pared y Sirius) pero este se quejo por lo que ambos se dirigieron a la de James.
Remus cayó en el colchón y empezó a desabrocharse las camisa y arrojo la corbata lejos. Por la posición no podía ver a James y que además le dio la espalda. Remus se saco los pantalones y después de pelear con otras prendas, quedo solo en bóxer. Gateo sobre la cama y se dejo caer entre las sabanas a lo que miro a James y palmeo su lugar.
James se saco rápidamente toda la ropa y se refugió en los brazos de su amigo, corrieron las cortinas y lo último que escucho Sirius fue el susurro de un hechizo insonorizador.
Quizás no se estaba calentando la mente por nada. Tendría que estar atento no podía llegar y hacer otra estupidez. Ya la mirada de Remus le había advertido que era la última, no podía con lo de quinto y ahora con esto.
Sirius despertó temprano, con un accio atrajo un pergamino, un tintero y una pluma, quería escribirle a Evans para que le trajera pócimas y así recuperarse más rápido.
Peter salió del baño justo en el momento que Sirius se debatía como enviarle el mensaje sin que pasara por las manos de James y Remus.
—Peter— llamo la atención de su amigo —¿podrías enviarle esto a Evans?—
—De acuerdo…— asintió. Tomo la nota y termino de arreglarse para salir de la habitación.
Tan pendiente había estado de la nota y Evans que al girarse para dormir un poco, los vio.
Remus estaba atravesado en la cama de James, solo las cubres le cubrían su anatomía y una pierna, Potter en cambio estaba con la cabeza sobre el pecho de Remus y lo tenía abrazado de la cintura. Black se irguió para observar y vio una mano de Remus reteniendo a James en su espalda.
Se quedo congelado mirando al par quien sabe por cuánto tiempo. Cuando Remus empezó a dar signos de despertar, Black con un movimiento se recostó para parecer dormido.
Remus abrió los ojos y estiro todo sus músculos o eso intento hasta que recordó a James y lo sacudió suavemente para despertarlo.
—James…— empezó con unos leves susurros —James…—
Al parecer Potter no quería despertar por lo que Remus le susurro algunas cosas al oído.
—¿Si?— se escucho para luego ver a James separándose de Remus.
Remus negó con una sonrisa y se sentó en el borde de la cama, nuevamente estiro sus músculos y se levanto, iba a dirigirse al baño pero observo a James. Rodeo la cama y se arrodillo frente a Potter.
—¿No estabas mejor?— le acaricio el rostro. James asintió —no se nota— reprocho con un puchero.
James golpeo con su dedo índice el labio inferior de Remus.
—Tranquilo… pero…
—Si— asintió Remus. Se paro y tomo a James de la mano —hay que levantarse—
Lo último que vio Sirius fue a ese par desapareciendo entre risas por la puerta y luego se quedo con la incertidumbre de lo que había escuchado.
A la hora de almuerzo llego Lily con algunos frascos.
—¿Cómo estás?— le pregunto amablemente.
—Igual…
—¿Necesito enterarme de algo?— Sirius negó —entonces…— empezó a poner en orden las pócimas —aquí está tu pedido—
—Gracias, Evans— Lily le quito importancia.
—Sé que es tu culpa pero pese a todo, Remus se siente bastante mal…— se perdió en sus recuerdos, algo le dio mala espina a Sirius por lo que apretándole cariñosamente la mano le pidió continuar —últimamente se pierde en las cocinas y solo James puede sacarlo—
—¿Las cocinas?
—Bueno…— dudo —no solo las cocinas—
Conversaron un poco más de las clases para que Sirius estuviera al día y repasara de los libros, siendo un Black, él sabía algunos mejor algunos temas.
En un momento se abrió la puerta dando paso a James que entro, ambos pensaron que iría hacia su baúl pero no, fue al baúl de Remus y saco unos abrigos. Sin más salió de la habitación ignorando a ambos pero estos vieron la cara de preocupación de James.
—¿Qué pasa?— pregunto Sirius refiriéndose a lo que acababan de ver.
—Peleamos… y bueno… estoy saliendo con alguien más— Sirius sintió como le caía un balde con agua fría. No estaba enterado de eso.
—Pero…
—Si…— concordó Lily —es extraño pero el último tiempo, James… James a estado distante y bueno, con esto se nota que tiene la cabeza en otra parte— hizo un amago de sonrisa que no funciono.
—¿Algo más? Lo que sea— pidió, sentía que le daría algún ataque en cualquier momento.
Lily negó.
Prometiendo que vendría a ayudarle cada día con las pócimas y para que se recuperara antes, Evans se fue. Sirius quedo sumido en sus pensamientos, definitivamente la situación que ocurría frente a sus narices no era normal y si no se enteraba de todo, empezaba a creer que perdería dos amigos y uno de ellos se llevaría consigo, además, el amor que sentía Black por alguien más.
Las constantes visitas de Lily, que Black sea consciente de su estado y se cuide para levantarse rápido, además de las salidas de Lupin y Potter, lograron que una semana antes del mes, Sirius estuviera como nuevo.
—Peter— llamo a la rata. Tenía un trato que no podría rechazar.
Remus entro a la habitación y vio a Sirius acostado repasando una materia con Peter, lo cual era inaudito, debía estar muy aburrido encerrado allí para ayudarle a Peter y no matarlo en el intento.
Una parte de él sonrió por ver la escena, definitivamente no podía seguir enojado con Black pero… Remus estaba al tanto de los sentimientos de Sirius para con él pero en este momento de su vida no podía corresponderle, se lo debía a James.
Se dirigió al baúl de James, saco unos abrigos y la capa de invisibilidad. Todo sin percatarse de la atenta mirada de Peter y la sonrisa de Sirius.
Peter iba siguiendo a Remus. Ambos sabían que no era bueno que Sirius saliera antes si no quería que los otros sospecharan por lo que Peter estaba siguiendo a Remus para saber que ocultaban. Desde que Lily le comento de su ruptura con James, en verdad noto el cambio en la actitud de James.
—¿Peter?— pregunto Remus cuando lo vio caminar a su lado. Al parecer el pequeño se perdió en su mundo y no se dio cuenta.
—Remus… hola— saludo.
—¿A dónde vas?
—A las cocinas… tengo un hambre— se froto el estomago. Remus asintió a lo que los dos emprendieron el mismo camino —¿también tienes hambre?— pregunto luego de un momento.
—No Peter… pero necesito comida— informo al llegar al pasillo y buscar con la mirada a alguien.
Cosquillas y una pera, lo necesario para entrar a las cocinas. Peter vio a James adentro guardando un poco.
—Remus… te estaba esperando— sonrió —hola Peter— le saludo en cuanto le vio.
—James…— dijo pero luego se perdió con algunos postres que estaban a su derecha.
—Nunca cambiara…— opino Remus.
—Mejor así… ¿vamos?— sin esperar respuesta empujo a Remus fuera de las cocinas, una vez que guardo la comida que le entregaron los elfos.
Peter mientras comía observo la manera de irse de ese par, no parecían solo amigos.
Las situaciones durante esa semana se repitieron. Remus y James desapareciendo en algunas ocasiones, volviendo tarde, charlas, hechizos insonorizadores, desvelos, etc…
Para el final, no fue necesario atar cabos. Peter estaba caminando cuando se encuentra a Remus salir de un aula vacía. Se arreglaba la ropa y el pelo, observo que tenía el rostro triste y… ¿culpable? Pero cambio en el minuto que James se asomo, ahora ambos portaban unas sonrisas en el rostro.
James salió de la misma forma que Remus pero los ojos del segundo aun demostraban esos sentimientos ocultos a James.
Al parecer algo más ocurría aparte de solo sexo.
Nueva semana y Sirius poniéndose al día con los exámenes, trabajos y demás. Lo que notaron sus amigos es que estaba de mal humor, el trió creyó que estaría contento de salir de la habitación pero solo empeoro su estado de ánimo.
—¿Sirius?— le llamo Remus, extrañaba a su amigo de más de una forma y quería que sonriera. Toda la semana y Sirius no se digno en sonreír o mostrar mejorías.
—¿Me hablas a mi?— pregunto mordaz. Remus asintió —discúlpame pero no tengo tiempo para ti ni para nadie— sin más se alejo rumbo a las cocinas.
Un mal presentimiento. Eso tenía Remus, por lo que lo siguió. Sirius salió tan rápido como entro a las cocinas ocultando algo entre su capa. Quería seguirlo pero a diferencia de Sirius, él tenía clases ahora.
La semana que empezó fue igual. Sirius no los quería cerca, con suerte soportaba a Peter y se perdía algunas veces con Evans, lo que alteraba a Remus. Si bien sabia lo de su amigo y el también lo sentía por Sirius, de todas formas era celoso aun sin estar en una relación y pese a que no debiera.
Y por el lado de James, las cosas se estaban complicando un poco.
—Remus— dijo en su oído, no se dio cuenta en qué momento llego a la biblioteca —quiero ir hoy— Remus trago saliva, al fin había quedado en charlar con Black.
—¿Tiene que ser hoy?— la mirada que le mando James no aceptaba un no como respuesta —de acuerdo— sin más Potter se levanto.
Remus sabía que a estas alturas, la relación con James era más perjudicial que beneficiosa pero es que si Potter no hacia algo, no ocurriría nada y Remus jamás se lo sacaría de encima y a eso debe sumar la cancelación de la cita… ¡charla! Con Sirius.
Todo el alumnado pudo notar como este día Sirius se veía… feliz. No lanzaba avadas por los ojos y hasta le hizo una broma a los Sly. Snape, Zabini y Bloom no alcanzaron ni a pensar en tomar sus varitas. Todos pensaban que la buena actitud (en cierta forma) de Sirius duraría de ahora en adelante… pero no…
Sirius iba caminando por uno de los pasillos cuando ve a otro alumno al parecer de cuarto que al verlo sonrió. El pequeño se acerco.
—¿Black?— pregunto a lo que Sirius le miro escéptico, todos le conocían pero bueno. Asintió —el prefecto Lupin le busca, dice que se junte en la sala común lo más pronto posible— dicho esto se marcho.
Eso era extraño, faltaban dos horas para la “charla” y Remus le buscaba, quizás paso algo malo. Sin pensarlo dos veces se devolvió para ir a la sala común.
Al entrar recorrió el lugar con la mirada y vio a Remus apoyado en la ventana.
—Remus— dijo a lo que el mencionado salto.
—Sirius— sonrió pero la sonrisa no duro mucho —yo… bueno…— sin percatarse alguien entro en la sala —no podremos vernos hoy, me… surgió un asunto— explico.
—¿Estudios? ¿Deberes de prefecto?— si Black no encontraba una razón válida no le permitiría escabullirse, no ahora que lo tenía tan cerca.
—Los deberes…— medio sonrió. Sirius iba a responder algo cuando alguien apareció.
—No es necesario mentir Moony— dijo James. Si Black fuese un gato se habría erizado entero —no creo que Sirius se moleste si te rapto hoy nuevamente— se acerco al oído de Lupin y le mordió el lóbulo —creo que nuestro amigo debe enterarse— algo en el tono de James advirtió a Lupin que esto no era algo así por… sin ningún motivo, había algo oculto.
Lo que vio Remus en la mirada de Sirius, le advirtió que las palabras de James traspasaron la coraza de “Black” por lo que el daño estaba hecho.
Sin más Sirius asintió y se marcho a lo que James advirtió con una mirada a Remus de no acercarse a Black. ¿Qué estaba pasando?
Para la noche, Sirius estaba en el baño, necesitaba relajarse y nada mejor como una ducha con agua bien caliente para relajar sus músculos. Cerró la llave y se acerco a la puerta cuando escucho a James.
—Peter… me castigaron y Remus debe estar esperándome en la Casa de los Gritos… ¿puedes avisarle?— probablemente Peter asintió —en unos minutos baja. Al venir, vi a Filch dando vueltas por aquí— con eso Potter salió por la puerta.
Sirius espero un momento y entro a la habitación.
—¿James quiere que vayas donde Remus?— el pequeño asintió —yo voy— dijo tajantemente.
Sirius se vistió y arreglo rápidamente para emprender el camino a la Casa de los Gritos, en verdad Filch daba vueltas por lo que se atraso mientras le hacia el quite. El camino por los terrenos fue tranquilo.
Sirius entro en la Casa, iba a llamar a Remus cuando escucha unos gemidos. Algo no estaba bien. Con mucha cautela y transformado en Padfoot, se dirigió a la habitación de donde provenían.
Sirius podía ver a Remus apoyado en una esquina afirmando a James de las caderas mientras aumentaba el ritmo. Por la apariencia de la habitación ya llevaban un buen rato.
En un momento James obligo a Remus a recostarse para agacharse y tomándolo del rostro lo beso a lo que Remus gimió y dio una estocada mas fuerte haciendo que James llegara a arquearse.
James miro a Remus y lo regaño mientras negaba, se dejo caer y ahora Remus estaba arriba. Remus apoyo las rodillas en el suelo y empujo a James contra su miembro para llegar más adentro, se agacho y paso los brazos por debajo de los de James, de forma que quedo afirmando de los hombros de Potter para empezar con un rápido mete y saca.
James gemía como poseso mientras dejaba huellas visibles del encuentro en la espalda de Lupin. Un certero empuje y James nuevamente se arquero mientras se venía. Sirius se dio cuenta que lo observaba, sabía que estaba allí, todo fue un plan de James desde el principio.
La mirada de odio de Potter le dijo que era por venganza pero lo que articularon sus labios... lo rompieron aun más de lo que ya estaba. “Ahora es mío… piérdete Black”. Lo ignoro y con un movimiento Remus quedo recostado en el suelo a lo que James se agacho para empezar a chupar el miembro de Lupin. Ambos escucharon un ruido en la casa, solo uno sabia el motivo.
Los siguientes días Remus quería hablar con Sirius pero este lo evitaba. Ni en Luna Llena apareció. El ciervo trato de acercarse al Lobo pero este con un golpe le dejo en claro lo que pensaba. Nuevamente la ira se apodero de Potter. Moony quería a Paddy y no un intento de reno de santa.
Por lo que sin esperar se alejo del ciervo y la rata.
Conocía bien al perro para saber que aunque no estuviera allí no tardaría mucho en aparecer. Llego al otro extremo del bosque prohibido cuando lo olio. El perro estaba cerca.
Una mata de pelo negra se encontraba en el suelo absorto en sus pensamientos cuando siente algo peludo, caliente y pesado sobre él, asustado intento moverse pero una lamida le calmo.
Moony estaba con Paddy. Después de unos gruñidos de queja el lobo se recostó al lado del perro para empezar a mimarlo, estuvieron así unas horas cuando escucharon unos pasos pero el olor les advirtió de la presencia.
El ciervo estaba cerca.
El perro quería marcharse pero el lobo se paro imponente esperando al ciervo, el perro quedo detrás del lobo esperando cuando apareció. Inmediatamente se dirigió contra el perro pero un movimiento y el ciervo estaba contra un árbol acorralado por los dientes del lobo en su garganta. El ciervo tenía miedo, había dañado al perro, el cual pertenecía al lobo y este quería hacérselo pagar en carne y sangre.
El lobo apretó el agarre a lo que el ciervo se movía desesperado, un movimiento y estaba en el piso. La mirada que le dirigió el lobo era clara. “No lo hago por ti, el no quiere que te mate, agradéceselo… además de tocarle nuevamente un pelo y te mato”
Remus al despertar se encontró solo junto a Sirius.
Sin esperar más le reprocho el alejarse a que lo que Sirius tuvo que contarle la verdad. Remus no lo creía, este no era el James que conocían.
—¿Puedes… puedes decirme porque?— pidió Sirius.
—James… en un… principio era para ayudarle a decidir si, bueno, le gustaban los chicos— la mirada de Black era todo un poema —pero… con el tiempo las cosas se me salieron de las manos…—
—Y el… te exigía…— Remus asintió —no es por ser pero… ¿Quién se lo hacía a quien?— Remus no sabía si quería reír o llorar.
—Yo… el lobo no iba a permitir que por un capricho de James no… bueno… eso… tú sabes— término por decir con su rostro del color del escudo de Gryffindor.
—¿Esperaba a la persona indicada?— por un momento quiso hacerse falsas esperanzas.
Remus le observo y asintió para posteriormente acercarle y besarle en la frente. No creía poder besarlo en donde años ha añorado hacerlo despues de esto.
—Lo que quiero saber…— dijo una vez que se separaron —es el motivo de James…— miro a Sirius.
—Me viste… todo el tiempo ha sido igual… excepto ayer, estaba de buen humor, hice unas bromas, no fui a clases… ya sabes, lo normal.
—¿Bromas?— Remus cerró los ojos —dime que no fue a Severus— Sirius quería protestar pero abrió los ojos.
—¿EL?
Remus asintió.
—No es por ser… pero como está ahora, nadie debería— comento a lo que Remus asintió —ahora entiendo lo de Lily—
—¿Sabias?— pregunto incrédulo, los celos aparecieron nuevamente.
—Sí, me comento cuando me fue a dejar unas pócimas— Sirius se perdió en sus recuerdos —creo que esta mejor así— miro a Remus pero este le miraba amenazante.
—¿Pócimas?
—Si… bueno… ¿recuerdas que al estar bien no quería estar cerca de ustedes?— pregunto achicándose en su lugar.
—Te enteraste antes… pero... un momento— le miro seriamente —solo Peter estaba cerca nuestro—
—Al menos le sirvió para subir sus notas— comento. Remus negó y tomo el mentón de Sirius para acercarlo.
Pero la impulsividad de Sirius pudo más y lo abrazo.
—Aléjate de el, Black— escucharon a James.
Ambos se alejaron sin soltarse.
—James…— un hechizo y Sirius supo que era mejor callar.
—No me provoques…— advirtió —aléjate de Remus— nuevamente le apunto con la varita.
Sirius miro a Remus, no quería que se fuera con James pero un siseo le distrajo. James levitaba una pulsera de plata a una distancia relativamente corta de Remus.
Sirius quería lanzarse sobre James pero una mano y un siseo le obligaron a quedarse allí.
Remus respiro profundamente y se levanto para acercarse a James. Sirius no lo podía creer, su… amigo, ¡hermano! Se transformo en un monstruo.
Los otros emprendieron el viaje de regreso cuando Remus le miro y le señalo el suelo. La varia de Peter estaba allí. El pequeño tuvo que haber visto todo.
Sin pensarlo más, ataco a James.
—¿Qué tiene?— pregunto Sirius.
Estaban en la enfermería, le tuvieron que comentar al Director la extraña actitud de James para con ellos.
Poppy lo reviso y se alejo con el Director no sin antes mandar a llamar a los que fuesen necesarios.
Remus fue por Severus, Peter por Lily y él se quedo allí.
—¿Qué ocurre?— pregunto cuando entro Severus a la enfermería.
—El problema con el joven Potter— empezó Albus —es que fue afectado por magia negra— todos se miraron preocupados entre ellos y luego a James —es raro que ocurra pero aun pasa en nuestros tiempos. Es como antes, cuando alguien bueno se hace malo, una especia de corriente se apodera del cuerpo y luego de la mente— Poppy negó —pero… requiere de un sacrificio— informo con pesar lo último.
—¿Qué tipo de sacrificio?— algo no le gustaba a Severus.
—Sacrificio del tiempo…— dijo Poppy. Todos la miraron como si le creciera otra cabeza.
—Lo que quiere decir— carraspeo Albus —es que podemos modificarle la memoria hasta el tiempo antes de que esto ocurriera, volvería a ser el mismo James que conocieron a principio de año—
—¿El que estaba enamorado de mi?— pregunto Lily mirando incomoda a Severus.
—Creo que sabemos lo que la magia negra en James significa.
—Por mi no hay problema que hagan lo que quieran— dijo con frialdad Severus pero Albus vio mas allá.
—¿Alguien tiene que decir algo?— pregunto Poppy.
—No recordara nada— más que pregunta fue una afirmación.
—Si joven Black. El joven Lupin me explico… el problema… es que no pueden, bueno… empezar algo que James no vio, quizás con el tiempo—
Entre más hablaba el Director, mas odiaban la situación los alumnos. Pese a todo a Severus le dolía porque lo tomo cariño a los intentos de James. Lily tenía algo estable con otra persona. Remus y Sirius no podían estar juntos y Peter lamentaba tener que parecer un idiota el último tiempo pese a que estudiara bastante.
James volvió a la normalidad sin saber que su odio hacia Severus era por otros motivos y que esto lo dañaba, sin saber que sus muestras de cariño entristecían a Lily. No tenía en conocimiento lo que alojo en Peter sin darse cuenta.
Menos tenía idea de que separo a las dos personas que más quería, aunque el lobo siempre tuvo ese instinto, un ojo pendiente de James y el otro en Sirius. El primero por precaución, el segundo porque le amaba. El lobo lo sabía, el perro lo sabía pero los humanos no entendían porque callaban ese hermoso sentimiento.
Si bien las cosas volvieron a la normalidad, no fue así para todos al final, no tuvieron el final que se merecían. Lily se alegro con su pequeño y recién aquí sonrió de verdad. La guerra alejo a Sirius y Remus. Peter se cambio de bando y Severus sufrió el doble con la muerte de los Potter.
Pero el tiempo pasó… y pasó lo que paso. Solo unos pocos tenían conocimiento de este hecho. Cuatro aun vivían y dos estaban de otro lado (supuestamente)
Todo esto lo recordó Remus después de la muerte de su amigo, hasta hace poco pareja y ahora muerto Sirius Black. Cuando Tom Riddle hablo a través de Harry con Albus.
Severus lo recordó cuando se lo contaron, recordando lo acontecido años atrás, debía proteger a este niño y evitar lo que paso, el dolor que él sufrió. Odiaba querer de manera distinta a otro Potter y que a este pudiera ocurrirle lo de James.
La rata lo recordó pero la conciencia no le permitió hablarlo.
Debían proteger a Harry. Severus por ciertos motivos que era mejor que otros no se enterasen y Remus porque lo consideraba su hijo y lo protegería hasta al final de todo esto, ya después se reencontraría con Sirius.
FIN...