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Susurros del Alma por 5kn_akatsuki

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Notas del fanfic:

Inicialmente iba a ser un 2Min con una idea de la cinta adeshiva, pero pensé que sería mejor hacer un MinTeuk ya que el otro murio por la patria (?)

Notas del capitulo:

Yei, algun día hare un oneshot o un fic con el titulo de este cap, yei, tambien esde Shinoflow. 

El maestro Shinoflow T^T me encanta él <3 sus dibujos y todo aslndans ammm bueno, hablemos de MinTeuk.

A leer!

La cadera de Minsoo no dejaba de chocar contra la espalda baja de JungSoo.

El último comprimía su entrecejo por tales sensaciones. Sus manos se aferraban a las sábanas bajo su cuerpo, el miembro de Minsoo se abría paso entre sus paredes anales y eso, eso le gustaba.

¿Cómo había llegado de nuevo a esa posición?

Tal vez fue porque le había pedido hablar serio a Minsoo, tenían un tema pendiente que aclarar y entre más rápido mejor sería para él. “La impuntualidad de los sentimentales” seguía resonando en los oídos de JungSoo, y no sólo eso, sino las falsas o dobles señales que enviaba Minsoo contra su persona.

Es que uno no se puede ir silenciosamente a la friendzone cuando le dicen tantas veces que lo ama. Cuando incluso le había dicho que era su antídoto, que con él todo estaría bien.

Así fue como terminaron solos en Frosty Ice, la heladería de Minsoo.

JungSoo comenzó preguntándole por su novia, DamBi. Continúo explicándole que Sora y él se habían dado un tiempo, justo ahora querían enfocarse más en sus estudios pues venía la época de parciales. Terminó tocando el tema del otro día, cuando le había confesado (según el cerebro de JungSoo) que también sentía algo potente por él.

Recordaba los segundos eternos en los que Minsoo lo miró.

Sus penetrantes ojos oscuros los podía percibir aunque el rasgado de los mismos fuera más marcado que en los suyos.

-Está bien, ¿qué quieres saber?- había dicho Minsoo tan relajado que continúo limpiando sus mesas para cerrar el local.

-De la impuntualidad de tus sentimientos.- contestó JungSoo guardando en los refrigeradores la fruta que a diario Minsoo cortaba en trozos para los vasos de yogur que también vendía su heladería.

Hubiera sido más fácil siendo directo con él y preguntarle “¿Te declaraste?” porque el mundo de la subjetividad no era su fuerte y menos, cuando se ponía tan nervioso por las miradas que Minsoo le dedicaba.

¿Amor?

Mañana.

Miradas incrédulas y hasta burlescas.

Eres sólo mi amigo. El mejor. Te amo mejor amigo.

Y un boleto exprés directo a esa zona que últimamente había pensado que dejaba.

-No te confundas, Teuki.- dijo Minsoo caminando hacia la salida del local, abrió la puerta y le indicó que saliera. –Lo que dije fue lo que escuchaste, no quieras componer de otra manera. Tú sabes que amo a DamBi y tú a Sora.-

Justo en ese momento sintió una mentira en la voz de Minsoo. Y no precisamente sobre amar a Sora.

-Sólo quiero que me expliques la impuntualidad…-

-Es cuando llegas tarde.- dijo saliendo del local pues no veía con ánimos de hacerlo a Leeteuk. Este tuvo que seguirlo a la calle para seguir charlado de tan importante tema. –Como tú ahora.- Minsoo terminó por cerrar con llave ambas puertas.

-¿Y hablando de tus sentimientos? De lo que dijiste cuando me arrastraste a tu oficina.-

-El que entendió entendió, y el que no, que ponga más atención.- contestó Minsoo riendo mientras se dirigía al estacionamiento en donde había dejado el auto. Sintió los pasos de Leeteuk y una vez en la puerta del piloto también vio su reflejo en el cristal.

-Minsoo.- susurró mirándolo.

-Si subes al auto no habrá marcha atrás.- la voz de Minsoo sonó incluso más seria. –Como la otra vez.- un escalofrió macabro recorrió la espina de Leeteuk.

¿Ir? ¿Ir y hacer…?

La mejor pregunta sería ¿aprovechar el momento?

-Sólo iré contigo para que me aclares lo de tu oficina.- dijo Leeteuk rodeando el auto por la parte trasera para entrar por el lado del copiloto. Minsoo naturalmente entró de piloto. Ambos fijaron sus cinturones y el auto salió del estacionamiento.

-Estarás en mi casa, con mis reglas, ¿qué te hace pensar que sólo hablaremos?- preguntó Minsoo riendo al final, la mueca que había puesto JungSoo le había divertido.

-El hecho de que soy una persona y tengo derechos.-

-Por esos mismos derechos, pero conmigo, es por lo que subiste al auto.- las palabras de Minsoo sonaron tan confiadas que JungSoo tuvo ganas de darle un fuerte puñetazo.

Pero se aguantó. Respiró hondo y luego sonrió.

-¿Qué acaso tanto te gustó lo que ocurrió entre los dos que ahora tendrás que obligarme?- preguntó un JungSoo coqueto.

-No te creas tan importante.-

“Maldito”.

Apenas estacionaron Minsoo salió sin cruzar palabras con él, lo siguió entrando a su casa, la que usaba su difunto suegro ocasional cuando estaba en operativos, en el cuerpo policiaco.

Como era la costumbre le sirvió un vaso de soda de lima pese a que era ya muy tarde para beber gaseosas. Y justo como la última vez, entre bromas sexuales llegaron al acto. De nuevo Minsoo lo había llevado a su cama y él no quería hacer nada, pensaba que estaba bien hacerlo así, era su manera de tenerlo.

Veinte minutos o cuarenta, pero lo tenía.

Era totalmente suyo, no de DamBi ni de cualquiera que lo mirara en la heladería.

Es así como llegó a estar con Minsoo entre sus piernas.

Embistiéndole una y otra vez, cada vez con más fuerza, con un ritmo rápido que reproducía los chasquidos y estos hacían ecos en la habitación.

Presionaba sus ojos, mordía sus labios para no gemir el nombre ajeno. No lo haría hasta escuchar el suyo. Pero ni fu ni fa. Tanto Minsoo como JungSoo eran cajas herméticas en cuanto al sonido.

Las manos claro que las movían, recorrían los cuerpos de ambos, las piernas de igual manera se hacían espacio de un lado o de otro en la cama. Los labios sólo besaban sus pieles, no los contrarios. Pero ninguno dejó escuchar sus gemidos.

No fue hasta el preámbulo al orgasmo que inevitablemente sus labios se separaron y emitieron los últimos gemidos de la noche.

Dos segundos antes de que Minsoo llegara al orgasmo salió del cuerpo de Leeteuk, este se dejó caer hacia adelante para quedar recostado sobre su pecho, bocabajo. Sintió el semen caliente caer sobre su espalda y glúteos.

-Teuki.- escuchó la voz cansada de Minsoo. –La impuntualidad… también te amo.-

Abrió los ojos de repente y en lo que dura un parpadeo estaba sentado en su habitación en los dormitorios de la Universidad. Su pecho subía y bajaba, en su frente había sudor y semen en su entrepierna.

Cayó en cuenta de que todo había sido un sueño.

Uno estúpido que deseaba se materializara.

Contrajo sus piernas para recargar sus codos sobre las rodillas y mirar hacia las cobijas. Vio dos gotas de agua caer sobre ellas, marcando de un color más oscuro en dónde se absorbían.

-Tonto.- susurró. –¿Por qué no me amas?- 

Notas finales:

Buenas noches~~~ o depende de dónde esté el sol cuando lo leas, en mi casa ya hace luna, soyun wampiro :E xDDDD

Gracias por leer~~~


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