Son las 5:30 am la alarma sonaba mientras la luz titilante del marcador se encendía y apagaba aumentando minuto a minuto el molesto Bip, Bip, un peli negro da un pesado golpe al aparato mientras va emergiendo de entre la sabanas.
Se dispone a tomar una ducha mientras se rasca la cabeza con enfado y algo de desgano, un día más decía el, un día más sin poder regresar a su nación, con su familia, con su hija, con su… los pensamientos son bloqueados por un fuerte golpe en la cara, la puerta de su habitación de abre de golpe entrando una bella mujer de cabellera y ojos castaño.
---Yuu-chan, es hora de ponerse en pie hijo hoy entras a la Universidad, deja de estar tirado en el piso----
--Atetetetetetetete… Madre, tú has sido quien me ha tirado al piso, además ya te dije que yo, tengo que regresar a Shin Makoku, así que entrar a la Universidad no es importante ¡¡¡mi pueblo me necesita!!
--- ¡¡Yuu-chan!! Eso fue un bonito sueño pero debemos avanzar, tienes 30 minutos para alistarte Yuu-chan----
-----¡¡No, me niego que sea así, yo debo regresar!! Algo me dice que debo regresar, todos me esperan Conrad, Greta, Gwendal, Gunter y en especial el, me necesita lo se, lo siento en mi corazón----
--- Yuu-chan, pues si es esto tan fuerte lo que sientes inténtalo una vez más, Shiori vendrá a casa hoy por la noche, veremos si Bob nos puede ayudar----
---¡¡Gracias madre, sabía que tú me entenderías!!---
--- Es mamá, Yuu-chan ^_^ ----
Sale de la habitación Miko-san dejando solo a su hijo, Yuuri ha crecido ya con 18 años su rostro ha cambiado un poco ya no están dulce e infantil aunque sigue teniendo esa mirada clara y limpia ahora mide 1.79cm se ha convertido en un joven apuesto, gracias a su afición por el base ball se ha conseguido una beca deportiva en la universidad de Tokio, más aun hoy en día sigue buscando y anhelando regresar a su país con sus amigos.
Al ingresar a la universidad es un paso más para llegar a convertirse en un hombre de bien, estudia leyes pues su dedicación a resolver y proteger a los problemas de los demás le interesa su pasión por proteger a los más débiles lo ha llevado a tomar esta carrera, por su parte su hermano mayor Shiori se ha convertido en el sucesor del Bob, haciéndose cargo de todas sus empresas tomando las riendas de un imperio económico muy lucrativo, las constantes peticiones de Yuuri para que le ayude a regresar a Shin Makoku es constantes y agobiantes, su hermano mayor no sabe cómo ayudarle en su dilema, y después de la repentina muerte de Bob, las posibilidades para regresar a Pacto de Sangre se volvían cada vez más y más lejanas.
Paso el tiempo y Yuuri estaba por cumplir su decimonoveno cumpleaños, Miko-san preparo una gran fiesta e invito a los compañeros de Yuuri a la celebración en especial a una chica llamado Kaede, quien al parecer estaba muy interesada en Shibuya, de ojos jade y cabellera dorada de piel blanca y de complexión delgada, la bella joven causaba furor en toda la universidad pero para Yuuri parecía ser invisible, no le prestaba no el mas mínimo interés, por lo que con ayuda de Miko-san idearon un plan para que Yuuri se hiciera novio de esta joven e plan no resulto como pensaron pues solo paso que Yuuri reafirmara lo que sabia desde hace mucho en su corazón.
--- Yuu-chan, no seas tan grosero con Kaede, ella se a portado muy bien contigo deberías ser agradecido y salir al menos una vez con ella---
---¡¡Madre!! Pero es que no vez, yo no puedo salir ni con ella ni con nadie----
---- ¿Por qué? Por qué Shibuya, dime que es lo que me hace falta, porque no puedes aceptarme----
--- Lo siento Kaede, pero yo estoy comprometido…
--¡¡Mientes, mientes, eso solo lo dices por no herir mis sentimientos, pero yo sé que no sales con nadie, no sé qué pasa contigo, ¿¿o es que no te gustan las mujeres??----
---- Yo solo puedo tener ojos para mi pareja, lo siento Kaede pero cuando te veo, solo puedo ver en ti a la persona que más amo y con la que me he de casar un día----
---- ¡¡Yuu-chan, pero eso es imposible!! Tú mismo lo has intentado más de mil veces y no podes regresar a ese lugar, por favor hijo da te por vencido y vive una vida feliz aquí con nosotros---
--- Lo siento, pero… no puedo, no puedo---
Shibuya sale de la casa dejando a todos muy intrigados y confundidos llega hasta un parquecito cercas de donde vive, allí esta una hermosa fuente donde se refleja la luna en su cristalina agua
Yuuri llega hasta la fuente y se arrodilla al pie de esta llora desconsolado y desesperado realmente desea regresar a Shin Makoku, quiere reencontrarse con esa persona y con todos los demás, sabe que hizo algo terrible al dejarse engañar por Saralegui más aun y con todo aquello su único deseo es volver a Pacto de Sangre.
Las lágrimas del Maou caen y se mesclan en el agua de aquella fuente y el milagro se realiza Yuuri logra apreciar como el Agua de esa fuente empieza a brillar, su corazón late estrepitosamente, se levanta con algo de temor más con el gran anhelo de regresar, Miko-San y Kaede que salieron en su busca, lo encuentran momentos antes de que este ingrese a el agua, Yuuri no lo duda ni un momento y sumerge una mano en el agua cristalina siente aquella fuerza que lo arrastra, sonríe feliz, por fin regresara a Shin Makoku cuando escucha a lo lejos la voz de Miko-san y Kaede que le llaman Yuuri voltea a ver a su madre y sonríe como hacia tanto no lo hacia Miko-san detiene sus pasos y regresa ese mismo gesto.
--- ¿¿Yuu-chan, estas seguro que esto es lo que deseas??—
--- Si, regreso a casa, mamá regresare con mi familia---
Miko-san no puede evitar derramar un par de lágrimas sabe que quizás sea la última vez que lo vea y que solo tiene esa oportunidad para que regrese a Pacto de Sangre, sonríe con algo de tristeza en su mirar pero sabe que es lo mejor.
--- Buen viaje Yuu-chan---
--- YUURI…. YUURI—
Grita la chica desesperada al ver como el agua de aquella fuente se va tragando a Shibuya corre a donde la fuente para tomarlo de la mano y sacarlo cuando Miko-san la detiene de la mano y con un movimiento de su cabeza le indica que no, Kaede se queda consternada por lo que acaba de ver y cae rendida al piso, Miko-san sonríe entre lágrimas y le grita a Yuuri.
--- ¡¡YUU-CHAN, SALUDA DE MI PARTE A WOLFY-CHAN!!----
--- ¿Quién es ese Wolfy-chan? ¿A dónde es que se ha ido Yuuri?----
--- Wolfram es el nombre del prometido de Yuu-chan, y ahora el regresa a con él, a un mundo fuera de nuestra comprensión un mundo donde no debió salir, en donde lo espera su familia---
--- ¡¡Miko-san!! ¿Acaso está loca? Es imposible cruzar de un mundo a otro por medio del agua déjame debo sacar del agua a Yuuri---
Se levanta y se suelta del agarre de la madre del Maou entra en la fuente y busca desesperada el cuerpo de Shibuya del cual no hay ni rastros sale del agua y llora por su derrota.
--- Su excelencia, su excelencia, por amor al Shinou, deje de caminar tan deprisa----
--- No tengo tiempo para tus reniegos, anda y date prisa o si no, sabes bien lo que te espera—
--- Su excelencia, ¿en verdad debemos ir? ¿No sería mejor si los dejamos así y ya?---
--¿Qué clase de persona crees que soy? Anda mueve tortuga y trae contigo lo que te pedí---
Un hombre con una capucha color verde pardo de tela muy desgastada con ropas largas y polvosas camina sujetando un callado en su mano derecha y en la otra una cesta con hierbas y raíces, le sigue un hombre ya algo viejo cargando en su espalda un haz de leña junto a un saco con cosas, el más viejo va de sirviente del más joven quien camina con rapidez por una tierra desierta, faltante de vegetación y agua, caminan por un sendero de rocas y pasto seco, entre un bosque petrificado estéril de vida natural.
Aquel par de seres caminan por una tierra convertida en ruinas, el viento sopla levantando el polvo, es frio y cortante al contacto con la piel, los pocos vestigios de una civilización prospera y llena de esperanzas se ven como pedazos rotos de una fotografía sin color.
En lo que alguna vez fuese el templo del Shinou solo se ve desolación, las ruinas de un imponente palacio se caen día a día, desmoronándose como puñados de tierra sin una amalgama que afiance y solidifique su estructura, de los que habitaban allí no hay más nadie, desolado y aun elegido el santuario al rey original permanece como constante recuerdo de la gloria que alguna vez tuviese el pueblo Mazoku.
Es allí que van nuestros viajeros, a un templo en ruinas para refugiarse de una tormenta que se avecina, el hombre con el callado en su mano apresura el paso, más al ya no escuchar los pasos de su acompañante se detiene gira y extiende su mano, el más viejo le toma tembloroso mas con firmeza se apoyan uno en el otro para llegar por fin a las ruinas.
--- ¿Que no te advertí que te quedaras y me dejaras seguir solo? Ya han pasado muchos años y ya no estás en condiciones de acompañarme a todos lados cual perro fiel.-----
--- ¡Pero mi señor! Yo jamás podría dejarle solo nunca, mi honor está en juego y además yo, yo siempre voy a serviros—
El más joven simula una leve sonrisa y acaricia la ya avejentada cara del otro, apoya su mano en su hombro y se acerca a este y besa su frente como agradecimientos por sus años de servicio fiel a su familia, y al pueblo Mazoku.
--- Has sido un buen soldado, siempre leal y servicial. Nunca tendré lo suficiente para retribuir tus sacrificios, eres un buen amigo, gracias, muchas gracias por seguir a mi lado a pesar que ya muchos me han olvidado, y han olvidado su lealtad al Maou----
--- Excelencia, siempre le seré fiel a usted y al Maou---
--- ¡Gracias! Vamos, ya casi llegamos a las ruinas del templo allí podrás descansar mi buen amigo---
--- ¡¡Excelencia!!---
El viejo hombre se tiende en sus brazos a llorar mientras lo recibe con ternura el otro, le consuela pasando su mano por su calva cabeza y dando un par de palmaditas en su espalda para confortar al envejecido hombre.
--- ¡Ya, Ya, Ya, calma, calma! ¡No llores más, hazlo por mi vale!---
El hombre contiene sus lágrimas y se pone en marcha apoyándose en el más joven quien le brinda su cayado para que se apoye mejor y le coloca su capa, protegiéndole así del frio, mientras toma las cosas que cargaba el mas anciano en su espalda y con lo que él llevaba también inician el recorrido hasta el que alguna vez se alzara majestuoso templo de Shinou.
En la desolada ciudad que alguna vez fuera Nuevo Makoku las calles frías y deshabitadas son testigo fiel de un milagro, un milagro que les traerá un aliento de esperanza, un rayo de luz que iluminara su sombrías penumbras en las que viven día a día los pocos moradores de Nuevo Makoku.
Una fuente abandonada empieza a reverberar agua de sus viejos grifos oxidados, emanando cristalina y pura, lleno de total vitalidad aquel liquido cristalino, aquella fuente se llena hasta su borde y de sus aguas va emergiendo un hombre de cabellera negra, termina de salir del agua con gran emoción exhalando e inhalando grandes bocanadas de aire, cuando por fin recobra el aliento sus orbes negras vislumbran el desolado panorama que se presenta ante él.
Sale despacio de la fuente y siente el helado abrazo de la devastación pasando por su cuerpo un potente viento helado, congelándole hasta los huesos, el Maou ha llegado a tierras Mazoku mas su bienvenida no es tan cálida y grata como imagino, camina por aquellas solitarias callejuelas mirando con gran pesar en lo que termino su muy amado reino, siente el frio que le cala hasta el hueso y le corta la piel, un pedazo de tela sale despedida por entre las calles y le golpea la cara, no teniendo más con que cubrirse toma aquel polvoriento trozo de tela y lo enreda en su cuello, mira las casas que abandonadas están, la risa que llenaba de alegría a la plaza ya no está el correr y jugar de los niño ha desaparecido, aquel grupo de comerciantes que diariamente ofrecían sus frutos y vegetales a los de ambulantes han abandonado sus puestos dejando solo cajas bacías y puestos cayéndose a pedazos.
El Maou siente como su corazón es cercenado por el dolor de saber que todo su amado pueblo ha caído en ruinas, imaginando el peor de los escenarios escuchando el retumbar de cañones y los estridentes gritos de los habitantes al sentir el pánico por un terrible holocausto.
En eso su corazón se detiene al pasar por su mente una espantosa imagen, su hija, su muy amada hija, ¿Dónde está?¿que ha sido de todos los demás?¿ Y Conrad, Gunter, Gwendal, Lady Chery, Gisela, Dacascos, Asinina, sus doncellas Lasaña, Sangría, Doria y las demás? ¿Y él… donde esta él?
La desesperación inunda su pecho y corre a toda prisa a pacto de sangre más empieza a caer una terrible tormenta, obligándolo a refugiarse en una de las viviendas abandonadas, entra en ella y espera a que pase la tempestad, no sabiendo muy bien que hacer o que pensar, busca entre los vestigios de aquella casona algo que le cubra del frio y también le oculte de cualquier que pudiera reconocerlo, pues si esto paso quiere decir que los Mazoku nuevamente son vistos como conscriptos de la justicia.
Yuuri encuentra entre trastos viejos y arrumbados muebles atestados de polvo unas viejas mantas que usa como capa cubriéndole de pies a cabeza, indaga un poco más y encuentra una oxidada espada que empieza a pulir con un poco de tela y una roca para quitarle el óxido y usarle como herramienta, ya sea para salvar su vida llegado el momento o para cortar con esta alguna cosa que le pudiera servir.
--- ¿Qué paso aquí? ¿Acaso yo propósito todo esto? Conrad, Greta, Wolf… no, no, no, no él, por favor Shinou, él no…----
El Maou se tira en el suelo abrazando sus piernas mientras llora desconsoladamente por la pérdida de sus seres amados, el dolor es grande que hace pedazos su corazón y alma, la tormenta sigue con furia arrancando puertas y ventanas viejas y azotando la devastada ciudad, el Maou ha caído dormido, con terribles sueños donde el protagonista es el, arrasando y destruyéndolo todo a su paso, presentándole una serie de imágenes donde sus amigos y familiares sucumbían a su furia, partiendo con relámpagos y truenos las vastas tierras Mazoku, partiendo el mar con potentes vientos y arrasando con todo lo puro que alguna vez existió en Nuevo Makoku, la imagen de un rubio protegiendo a su hija abrazados ambos en la alcoba real soportando el bestial viento que soplaba amenazando con arrasar con todo y después de un estruendoso estallido todos los ventanales se rompen en mil pedazos lanzando los fragmentos de cristal con potencia atravesando paredes y estrellándose unos en los muros de palacio, otros tantos más impactando el grácil cuerpo de un demonio de fuego que se interpone entre ellos y su muy amada hija cayendo este de rodillas al piso y después desplomándose por completo con una mirada perdida, con un par de gemas apagadas, su cuerpo bañado en sangre y junto a él una bella niña humana, que a pesar del fallido intento del Mazoku; también cae víctima de los filos de aquellos cristales rotos, dejando inertes un par de cuerpos sin vida de los que fueran la muy amada familia del Maou.
Yuuri se levanta de golpe tras aquella terrible pesadilla, su respirar es acelerado y su cuerpo suda frio, le aterra pensar aquello, le duele el pecho de solo imaginar de esta manera a sus seres amados. La tormenta ha cesado e inicia su camino al palacio. A cada paso que da, contempla más y más destrucción y desolación solo sus pasos se escuchan haciendo eco en las casonas alrededor suyo. El viento potente sopla y lo cubre por completo de polvo dejando su cabello completamente gris y tras tratar de abrir los ojos logra apreciar a lo lejos un par de figuras que se desplazan de lo que fuera el templo de Shinou a Pacto de Sangre, Yuuri apresura su paso, mas su camino es truncado por unas rocas sueltas que lo hacen caer, se levanta y pierde de vista aquellas figuras. Se pregunta si acaso fueran fantasmas o una visión causada por su desolación.
Más manteniendo un poco de fe, decide seguir adelante y espera encontrarse con aquellos que vio a lo lejos con su cabello todo cubierto de polvo pareciera lo tuviese gris y con su rostro tapado solo dejando se ver sus hermosas orbes negras el Maou emprende el camino.
Un camino sinuoso y deteriorado es el que pisan un par de viajeros llevando consigo leña, hierbas, raíces y con unas cantimploras. Van avanzando a paso lento pero firme con la única misión de llegar al palacio donde alguna vez habitara el Maou.
El hombre joven se detiene y toma del hombro al más viejo, el siervo que le acompañaba se preocupa por la reacción de su señor, sabe bien cuando el presiente algo extraño en el aire, el anciano cubre a su señor poniéndose al frente y desenvainando su espada.
El más joven solo se queda detrás suyo y toma con fuerza su cayado, extiende su mano al frente y busca con esta el hombro de su fiel sirviente, al sentir su hombro lo presiona con fuerza y lo detiene antes de que haga una locura.
Unos pasos se acercan a ellos y el hombre joven guarda silencio sujetando a su siervo para que no ataque y también no se agite pues sabe bien que no tiene la condición para enfrentar un reto, fuese cual fuese pues su años ya le pesan en la espalda.
---- Tranquilo mi fiel amigo, tranquilo, no es necesario usar la violencia, conserva por favor la calma y solo mantente al lado mío----
--- ¡¡Pero su excelencia!! Podría tratarse de un carroñero, es mí deber…----
--- Es tu deber obedecerme y no ser un cabezota, deja que sea quien tenga que ser, si es o no carroñero, un predador o uno del ejercito de Shimarron, si esta en Nuevo Makoku es porque está buscando ayuda---
--- Pero mi señor, yo debo impedir que lo lastimen---
--- Mi buen amigo, ya no hay nada que puedan lastimar en mi… pero, me dolería más perder otro compañero. Así que guarda tu espada y sigue caminando-----
El joven amo convence al anciano a que enfunde la espada, y justo en ese momento los pasos que se acercaban a ellos se detienen justo en frente de estos, el joven amo gira su rostro en dirección del que está en frente suyo y le regala una gentil sonrisa, el anciano de ojos oliva mira con recelo al hombre que esté al frente suyo, mas este le regala una sincera sonrisa mientras de sus ojos empiezan a verter lágrimas al ver al joven amo, no sabe cómo empezar a hablar o que decir solo atina a abrazar a ambos sujetos estrechándolos con fuerza en sus brazos.
---¡¡Oye, oye, chico!! ¿Pero qué crees que estás haciendo?? Suelta a mi señor---
Yuuri soltó al más viejo y estrechaba con fuerza en su pecho al joven amo mientras seguía llorando dando gracias a Shinou por volverlo a ver.
---¡¡ Lo sabía, lo sabía, sabía que te encontraría, y estas aquí!!---
--- Clama, tranquilízate, que tu inquietante temor no aflija más a tu corazón… ¿dices que me buscabas? ¿Quién te hablo de mí? ¿También llegaste huyendo de la podredumbre de Shimarron como los otros??----
Yuuri se separa del hombre joven y lo voltea a ver con detenimiento, sus ojos se abren ampliamente, no lo puede aún creer su amado no lo reconoce, entonces mira con más detalle al hombre que tiene en frente suyo y cae de rodillas con un terrible dolor en el pecho, se abraza a sus piernas y llora implorando su perdón.
--- ¡¡Perdona me, por favor, perdona me, perdona me!!---
El joven hombre toma con delicadeza la cabeza de Yuuri y sin soltar su cayado va bajando hasta la altura del Maou, con la llena de sus dedos recorre la cara de Yuuri, este cierra los ojos mientras siente aquellas delgadas y blancas manos acariciar su rostro y enjugar sus lágrimas, después lo acerca a su pecho y lo conforta con gran amor.
--- Tranquilo, ya paso… ahora estarás bajo mi resguardo, ven con nosotros no tengas miedo, no hay nada de que culparte, no hay nadie aquí quien te persiga, anda muchacho levanta y síguenos—
Dice con tranquilidad el joven hombre mientras se va poniendo de pie, busca con su mano a su siervo, el cual le toma la mano para ayudarle a iniciar la marcha Yuuri aún no puede creer lo que ve, lo que escucha, no quiere aceptar lo que está pasando, sigue hincado de rodillas en la tierra árida de Nuevo Makoku, tratando de entender o explicarse que es lo que a pasado mas no logra entender nada, el joven amo y su siervo se detienen al notar que el Yuuri no los sigue, el hombre del cayado gira y le extiende la mano al viento esperando para que la coja mientras le regala una amable y gentil sonrisa y lo llama a su lado.
---- Muchacho, ¿Qué es lo que esperas? Ven vamos, como te dije no temas más ya nadie te perseguirá aquí----
Yuuri se levanta y a paso lento llega al lado del joven amo, le mira con absoluta tristeza y dolor le toma de la mano y le da un beso a esta, el hombre que recibe el beso sonríe algo apenado y aprieta con fuerza su mano a la de Yuuri, es entonces que el hombre más anciano lo mira con atención, sus ojos se abren como platos y sus piernas y está a punto de caer de la impresión, Yuuri le hace una señal con el dedo para que no diga nada, no hasta que él hable con su joven amo.
--- Y dime, ¿Cuál es tu nombre?—
--- A.. Pues…sss…. Esto yo… yo, me llamo. Yuu…----
No termina de decir su nombre se tapa la boca y vuelven a él las lágrimas, el hombre que sujetaba su mano le suelta y le caricia la cabeza le sonríe con dulzura y empieza a caminar delante de él.
--- Encantado en conocerte Yuu, ven con nosotros a Pacto de Sangre allá te ayudaremos para que recuperes la esperanza y dejes por fin de sufrir, hace mucho era un hermoso lugar, pero con el paso del ejercito de Shimarron y su aplastante ambición de poder forzaron a los nuestros a huir, pero no todos nos fuimos, aun algunos seguimos aquí esperando---
--- ¿Es…esperando? Y… y… ¿qué esperan?---
--- Un sueño, un milagro, un rayo de esperanza… esperamos al Maou---
Yuuri escucha aquellas palabras y siente como le parten el alma cae de rodillas una vez más y se tapa la cara con ambas manos, la impotencia y el dolor que siente son grandes, la tristeza que lo embriaga es demasiada, la persona que más deseaba ver, la persona que sabía estaría allí para cuando regresara, es esta que ahora camina a su lado, mas no sabe quién es él, no puede reconocerlo, ya no puede ver su reflejo en sus ojos pues estos están apagados, sus ojos están sin luz, aquellas gemas preciosas que portara un orgulloso y valeroso Mazoku, el tercer hijo de la vigésima sexta Maou, están opacos con un velo que le imposibilita la visión dejándolo en la más onda de las penumbras, ha quedado ciego, aquel bello demonio de fuego es prisionero de las tinieblas, cautivo en un mundo sumergido en la total y absoluta obscuridad, más lo que le duele hasta lo más hondo de su ser al Maou es que sea por su culpa, o al menos eso piensa.
Wolfram detiene su caminar una vez más esperando a que se una a él, el joven que acaba de encontrar en su camino, para el Mazoku que conoce sus tierras de arriba abajo no le es difícil saber en qué punto está del recorrido por lo que regresa sus pasos buscando con su mano al nuevo integrante del grupo ahora de viajeros, lo encuentra de nueva cuanta de rodillas y una vez más se hinca junto a él coloca una mano en su cabeza y otra en su corazón el Maou le mira atento a cada movimiento que ejecuta su amado rubio.
El demonio de fuego ejecuta un hechizo de sanación, reconfortando al Maou, liberando un poco de su Mayorku, un flama dorada se presenta en el pecho del Maou y otra está en su cabeza más, esta no le quema al contrario le hace sentir tranquilo y sereno, haciéndolo caer en una infinita paz, ya logrando recuperar la calma Wolfram retira sus manos de Yuuri y vuelve a levantarse.
--- ¿te sientes mejor Yuu?---
--- Yo… si, si g-gra…gracias----
---Bueno en ese caso sigamos adelante, no te preocupes cuando estés en Pacto de Sangre te sentirás mejor----
---Si---
Empieza a caminar Wolfram cuando siente un mareo terrible, el usar su poder le a causado un terrible malestar su piel pálida por la desnutrición y se muestra aún más pálida, se sujeta con fuerza de su cayado mientras es auxiliado por su fiel sirviente Dacascos.
--¡¡¡EXCELENCIA!!---
--- Calma, no pasa nada solo es un leve mareo, ya estoy bien continuemos---
Sacando fuerza de flaqueza de su mermado cuerpo inicia el camino aun que es notorio que se esfuerza demasiado por mantenerse en pie y seguir con aquella larga caminata, Yuuri voltea a ver Dacascos preocupado por su demonio y el fiel soldado solo mueve la cabeza con resignación, Yuuri empuña sus manos y sigue su camino toma el Haz de leña y lo lleva a cuestas junto con demás cosas que llevara el demonio para aligerar su carga y pueda seguir adelante.
El camino es largo yendo a pie por aquel sendero, mas sigue de frente al lado de su demonio esperando por saber que fue o que paso con Nuevo Makoku y con todos los demás, ¿porque está ciego Wolfram y por qué todo mundo parece desaparecido?