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corazon de sombra y luz (RESUBIDO) por Snape Prince

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Notas del capitulo:

el segundo capitulo de este dia,  nos vemos mañana con el siguiente, como siempre los personajes pertenecen su autora J. K Rowling. 

CORAZÓN DE SOMBRA Y LUZ.

 

Capitulo 2: Viaje tiempo atrás II.

 

Paso a paso voy

Contra la corriente

En un mundo cruel

Sembrando esperanza...

 

En un viaje tiempo atrás

Para así descubrir mi hogar.

 

(Thalía, viaje tiempo atrás)

 

**Flash back II**

 

Después de aquello envió la carta con Hedwig pero conforme pasaban los días, seguía sin recibir contestación de su pelirrojo amigo por lo que un día mando su respuesta a la castaña, en donde le decía que serian novios tal como deseaba aunque siendo honesto y diciéndole que la quería pues todavía no la amaba pero que quizás su relación podría mejorar y si mantenían el contacto tal vez se diera el amor entre ambos y así quedo establecido su noviazgo y entonces sucedió que... su destino fue sellado para bien o para mal pero aun así quedo sellado y solo el habría de saber que le depararía en el futuro pues a los pocos días de haber cumplido 16 años recibió una carta de Draco, donde le advertía que tuviese mucho cuidado puesto que Voldemort iba detrás de él y esta vez en serio.

 

-¿Una advertencia de Draco? Esto es algo que jamás me hubiera imaginado, después de todo no somos tan grandes amigos como para que me advirtiera pero y ¿si fuera una trampa? ¿Si quisiera asustarme para que salga de Privet Drive y así les sea más fácil capturarme? Pero que estoy pensando: quizás no hemos sido buenos amigos antes, mas ahora con lo que nos ha venido pasando lo estamos empezando a ser y si me advierte será porque algo de cierto hay en todo esto, así que es mejor que me mantenga alerta; no le permitiré a Voldemort atraparme sin luchar-pensaba Harry mientras guardaba la carta de Draco junto a las demás en un pequeño cofre que había logrado encantar sin necesidad de utilizar su varita, de tal forma que el ministerio ni siquiera había notado el hecho de que había usado magia.

 

Y a partir de esa advertencia el ojiverde se mantenía constantemente en alerta, esperando el momento en que Voldemort y sus secuaces decidieran atacar pero aun cuando así lo hacia, no podía evitar preguntarse si es que la Orden del Fénix estaba al tanto de aquello y no saberlo incomodaba a cada instante llegando a estar tentado de escribirles a Ron y Hermione pero cada vez que tomaba algún pergamino desistía de idea puesto que no deseaba involucrarlos en ese enfrentamiento, del cual estaba-por cada día que pasaba-mas convencido de que sucedería y en los primeros días de agosto, tal ataque ocurrió y una fuerte explosión se dejo escuchar durante la madrugada de aquel fatídico día...

 

-¿Qué esta sucediendo?-pregunto asustado Dudley mientras entraba con rapidez a la habitación de sus padres, quienes tampoco parecían saber que era lo que estaba ocurriendo.

 

Más antes de que alguno de ellos hiciera algo al respecto, una segunda explosión se escucho y con la cual la puerta principal fue destruida, dando paso a Voldemort y sus secuaces.

 

-¿Quiénes son ustedes? ¿Qué buscan en esta casa?-dijo Vernon con molestia pero también con algo de miedo ante la presencia de aquellos enmascarados.

 

-¡Buenas noches! ¿Dónde esta Harry Potter?-pregunto suave y siseantemente Voldemort, mientras veía complacido como aquellos muggles temblaban ante su tono de voz.

 

-¿Esta buscando a mi sobrino? Eso significa que también son: ¡Unos anormales fenómenos!-exclamo indignado Vernon, sin percatarse de que sus palabras no fueron bien recibidas sino todo lo contrario.

 

-Si fuera usted muggle, no me mostraría tan altanero especialmente si sabe lo que le conviene y mejor diga de una vez ¿Dónde esta Harry Potter?-siseo Voldemort con frialdad a la vez que clavaba sus rojos ojos en Vernon, quien se estremeció de terror ante aquella profunda mirada.

 

-¡Dios santo, llego el momento! Y ni siquiera puedo salir de esta habitación; ahora si, Voldemort no me mata, tío Vernon lo hará una vez que todo esto acabe-pensaba Harry sarcástico mientras escuchaba desde su habitación, las voces cada vez mas altas provenientes del cuarto de sus tíos, quienes parecían no darse cuenta del peligro en que se encontraban.

 

-¡Ya estoy harto con sus impertinencias, estúpidos muggles! Quiero a Harry Potter en este instante o deberán atenerse a las consecuencias-dijo Voldemort con tanta furia que las cosas a su alrededor comenzaron a estallar reduciéndose a miles de fragmentos.

 

-¿Quién se cree que es? Nadie puede venir amenazarme a mi familia y a mí, y mucho menos en mi casa, no me importa que sea un anormal fenómeno como usted-dijo Vernon molesto.

 

-¡Estúpido muggle, realmente no sabe con quien sé esta metiendo! McNair, Goyle y Crabbe llévense a ese chico-señalando a Dudley- y denle un escarmiento, veremos si cuando lo escuchen gritar, continúan con su idiotez-decía Voldemort con frialdad, dirigiéndose hacia tres de sus mortifagos ahí presentes, los cuales de inmediato asintieron y agarrando al chico, quien de inmediato se resistió ante aquel fuerte y brusco agarre, se lo llevaron a una habitación cercana de donde no tardaron en escucharse gritos de dolor, y suplicas desgarradas que provenían de Dudley, el cual estaba siendo ultrajado por aquellos mortifagos, quienes disfrutaban por primera vez del cuerpo del muchacho y eso si que los hacia comportarse de manera cruel y despiadada con el chico, además de que no solo lo mancillaban brutalmente sino que también le dirigían uno que otro cruciatus, haciéndolo gritar de dolor hasta enloquecerlo.

 

-¡Malditos! ¿Qué le están haciendo a mi hijo?-dijo indignada Petunia mientras intentaba abandonar la habitación, para ir en rescate de su querido hijo pero antes de que pudiese dar un paso fuera del cuarto, un rayo verde brillante termino con su vida para la consternación de Vernon, quien veía enloquecido lo que estaba ocurriendo.

 

-Y bien, muggle: me dirás ¿Dónde esta Harry Potter o tendré que matarte como a la tonta esa?-dijo Voldemort mientras lanzaba un cruciatus hacia el hombre, quien de inmediato comenzó a gritar de dolor, mezclándose sus gritos con los de Dudley para la desesperación de Harry.

 

-¡Ya basta por favor, detente, por favor!-no dejaba de rogar el ojiverde golpeando con rabia la puerta de su habitación en un intento por distraer la atención de Voldemort hacia donde se encontraba pues sabia perfectamente bien que sus tíos jamás dirían nada sobre él y menos si consideraban que con eso lo harían feliz, aunque claro que no podían estar mas equivocados, algo que lamentablemente estaban aprendiendo de mala manera.

 

-¡Así que ahí se encuentra, Harry Potter!-dijo el lord mientras abandonaba a Vernon por completo trastornado por los efectos del cruciatus, así como por la muerte de Petunia, encaminándose hacia la habitación de donde provenían aquellos desesperados golpes.

 

-¡Alojomora!-susurro Voldemort abriendo los candados en la puerta para luego entrar en la habitación del ojiverde, quien le esperaba, mostrando en su rostro una resolución así como una determinación para acabar con él, algo que momentáneamente desconcertó al lord pero no lo dejo entrever.

 

-¿Cómo te has atrevido a herir a los Dursley's? Me quieres a mí, no tenias porque lastimar a nadie mas-dijo Harry con rabia pero también con dolor en la voz.

 

-¡Sinceramente se lo merecían! Si no se hubiesen interpuesto en mi camino, nada malo les habría sucedido pero así lo hicieron ¿Qué esperabas que ocurriera?-dijo el lord con cinismo y a la vez con diversión notando el malestar del chico por lo que había sucedido con sus parientes.

 

-Además no sé porque haces tanto escándalo por nada, sobretodo porque hasta donde sé, todos ellos te hacían la vida miserable solo por ser mago, así que dime ¿Por qué té condueles por ellos?-dijo Voldemort interesado.

 

-¡Eso no te importa, no entenderías mis razones! Un ser sin corazón como tú, jamás comprendería nada en absoluto y mejor ponte en posición y acabemos con esto de una buena vez-dijo Harry decidido mientras empuñaba su varita, dirigiéndola hacia donde se encontraba el lord.

 

-¡Tienes mucho espíritu, Harry Potter! Alguien como tú seria muy útil en mis filas; no has considerado la posibilidad de unirte a mí, en lugar de enfrentarme así ninguno de los dos se vería afectado por esa estúpida profecía-dijo Voldemort con seriedad, también apuntando su varita hacia el chico.

 

-¡Olvídalo, nunca me uniré a ti, antes muerto!-dijo Harry con fuerza y determinación a pesar de que por dentro temblara de miedo ante lo que sabia ocurriría.

 

Pero antes de que alguno de los dos pudiera realizar movimiento alguno... una preciosa lechuza se poso sobre el escritorio del ojiverde, quien al verla palideció considerablemente lo cual se le hizo muy interesante al lord, en especial porque estaba seguro de que no pertenecía al chico, así como tampoco era de ninguno de sus amigos y dada su reacción era obvio que aquel animal debía de ser de alguien muy especial para Harry, solo que no podía saber a quien le pertenecía.

 

-¡Maldición! ¿Por qué ahora? Draco no ha podido ser más inoportuno, al enviar a su lechuza-pensaba Harry mientras veía de reojo hacia donde se encontraba la lechuza.

 

-¡Es un bello animal, Harry! Pero tengo curiosidad por saber ¿Quién te lo envía? Sobretodo porque veo que te trae una carta ¿Quién podría estar tan interesado en comunicarse contigo? Creo que eso pronto lo averiguare-dijo Voldemort avanzando un paso hacia donde se encontraba la lechuza, que observaba altiva toda la escena, sin moverse en lo absoluto.

 

-¡No te atrevas a seguir avanzando, Tom!-dijo Harry mientras se colocaba con rapidez enfrente de la lechuza, evitando así que el lord se acercara a la misma.

 

-Realmente debe ser alguien muy especial para ti, por que de no serlo jamás te atreverías a enfrentarme tan abiertamente, así que mejor dime: ¿Quién te escribe? ¿Quién es tan importante como para arriesgar de manera tan tonta tu vida?-pregunto el lord intrigado.

 

-¡Eso es algo que no te interesa, Tom!-replico Harry tomando con rapidez el sobre que la lechuza llevaba para de inmediato guardarla en el bolsillo de su chaqueta, ocultándola así de la vista del lord oscuro al mismo tiempo que daba a la lechuza un sobre y la orden de llevarlo a casa.

 

-¡Petrificus totalis!-exclamo Harry petrificando momentáneamente al lord y sus mortifagos para que ninguno de ellos pudiese lastimar a la lechuza, que en ese momento se perdía en la lejanía.

 

-¿Quién te has creído que eres? Nadie le hace algo así al lord oscuro-dijo Voldemort mientras se deshacía del hechizo y lanzaba contra el chico un cruciatus, haciendo gritar de dolor a Harry, quien al momento mordió con fuerza su labio inferior para así evitar seguir gritando, con tan buena suerte que solo consiguió hacerse sangre.

 

-¡No me salgas con esas! Si tu eres el lord, entonces yo soy el niño que vivió y por lo mismo tengo derecho hacer lo que se me de la gana-dijo sarcásticamente Harry, limpiando la sangre que corría por la comisura de su labio.

 

Y así...

Continuara...

Notas finales:

Notas de la autora: Hola de nuevo, como lo prometido es deuda aquí esta el segundo capitulo, que espero les agrade tanto como el anterior


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