Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

REVENGE por LUCI

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

El primer capitulo es corto pero los siguientes va hacer largos.

En la historia van haber donceles, entonces va haber emarazo masculino.

Notas del capitulo:

Hola, aqui con una nueva historia, esta historia hace tiempo queria subirla solo que eh podido, me hispiro hacerla despues de que mire una pelicula de la era media, busque la historia y encontre un libro muy parecido, me guia a princio porque no sabia como empezar pero toda la historia es mia.

Descripcion de personajes.

Alexander Devonshire: Pelo rubio, mide 1,75 m, buen cuerpo, vivia en la corte francesa pero regreso a españa, siempre tuvo envidia de su hermano mellizo.

George Devonshire: Pelo castaño, mide 1,76, es esposo de charles, pero termina como amante del rey terminando enemorandose al final de el y teniendo dos hijos.

Errique ll: Pelo negro de largo intermedio, barba negra, gran cuerpo varonil, mide 1,92, se enamora de george pero termina dominado por su hermano alexander.

Jorge Devonshire: Hermano mayor de los mellizos, pero castaño, mide 1,87, gran cuerpo atribuido por su ejercicio de la caza, esta enamorado secretamnte de alexander. 

Capitulo Uno.

Podía oír un redoble apagado de tambores. Pero no veía nada aparte de los cordones del vestido de la mujer que estaba delante de mí y que me impedía ver el patíbulo. Yo llevaba más de un año en la corte y había acudido a cientos de celebraciones fiestas, bodas pero nunca en una ejecución de alguna persona, aunque a esto se le podría entablar como una celebración.  Haciéndome a un lado de la mujer y alargando el cuello, pude ver al condenado por las ropas se puede deducir que pertenecía a lo más alto de la sociedad; me pregunto porque será condenado, deduzco que por robo ya que un noble no sería condenado por robo, a su lado estaba acompañado por un sacerdote, caminando lentamente, desde la Torre, hacia el prado donde esperaba la plataforma de madera, el bloque de madera situado en el centro de la plataforma, el verdugo en mangas de camisa, con un capuchón negro sobre la cabeza. Más que un acontecimiento real, parecía un espectáculo y yo lo observaba como si fuera un entretenimiento de la corte. Muchas veces me pregunto cómo sería estar en esa situación, saber que en unos minutos tu cabeza será cortada por un hacha debe de ser algo horrible.

 

El rey, sentado en el trono, imponente y tan apuesto como siempre, se dice que era un hombre muy distintivo,  se casó con una joven hace años, más exactamente con catalina heredera al trono de Ingles.  Parecía distraído, como si repasara mentalmente el discurso de absolución. Tras él se erguía mi marido desde hacía un año Charles Grey, mi hermano, Jorge, y mi padre, sir Thomas Devonshire, todos con semblante grave. Moví los dedos de los pies dentro de los zapatos de seda y deseé que el rey se apresurara a otorgar su clemencia para que todos pudiéramos ir a desayunar. Sólo tenía 16 años, siempre tenía hambre.

 

Alejado del patíbulo y el espectáculo que en mi opinión tan deprimente que se daba, eh sabido que para algunas personas les gusta observas tales cosas, se quitó la gruesa capa en ese momento me sorprendí. Nuestro parentesco era lo suficientemente cercano como para que reconociera a mi tío, Había venido a mi boda hacia un año y me había regalado un brazalete dorado, aún recuerdo en el momento que me lo dio era como si estuviera compensadme que me estuvieran vendiendo a un rico Duque. Mi padre me comento hace un rao atrás que la persona que sería ejecutada había ofendido al rey de varias maneras: tenía sangre real en las venas y mantenía un séquito de hombres armados demasiado numeroso para la tranquilidad de un rey aún inseguro en el trono. Lo peor de todo es que se suponía que había dicho que el rey carecía de heredero al parecer la Reina catalina no había podido darle un hijo barón, que no podría conseguirlo y que probablemente moriría sin un hijo que le sucediera en el trono.

 

Un comentario así no debe decirse en voz alta además de que pones tu vida en riesgo al poder hacer enojar a rey, además no es necesario; es un suceso que se mantiene en bocas de todos. El rey, la corte, todo el país sabía que la reina debía dar a luz un niño, y pronto. Sugerir otra cosa era dar el primer paso por un camino que conducía a la escalera del patíbulo, por la cual el duque, mi tío, subía ahora con firmeza y sin temor. Un buen cortesano nunca comenta ninguna verdad desagradable y mucho menos que sea de la familia real. La vida de la corte siempre debe ser feliz aunque no lo parezca.

 

Mi tío se dirigió al frente del patíbulo para decir sus últimas palabras al condenado. Estaba demasiado alejado de él para oírlo y, de todas maneras, yo miraba al rey, esperando el momento en que se adelantara y ofreciera el perdón real. Ese hombre que estaba en pie ante el patíbulo, a la luz del amanecer, había sido pareja del rey en el tenis, rival en el campo de justas, amigo durante innumerables rondas de bebida, juego y lucha durante la gran guerra que sucedió no hace muchos años, habían sido camaradas desde que el rey era niño. El rey le estaba dando una lección, una poderosa lección pública, luego le perdonaría y todos podríamos ir a desayunar, no sé por qué no dejan estas cosas después de la comida.

 

La pequeña figura remota se volvió hacia el confesor. Inclinó la cabeza para la bendición y besó el rosario. Se arrodilló ante el bloque y lo asió con ambas manos. Una vez más me pregunté cómo sería poner la mejilla sobre la madera pulida y encerada, oler el viento cálido que venía del río, oír en lo alto los gritos de las gaviotas. Incluso sabiendo, como sabía, que era una mascarada, para mi tío debía de ser raro poner ahí la cabeza, y para cualquier persona de la cual siempre halal tenido poder y riquezas, saber que el verdugo estaba detrás esperando cortar tu cabeza con hacha.

 

El verdugo alzó el hacha. Miré hacia el rey esperando su intervención. Volví a mirar el patíbulo. Mi tío, con la cabeza apoyada, extendió los brazos en señal de consentimiento y resignación, la señal para que el hacha cayera. Volví a mirar al rey, debía levantarse en ese momento. Pero seguía sentado, su apuesto semblante serio y varonil. En algún momento mientras aún seguía mirándolo sonó otro redoble de tambores, que paro repentinamente y después el ruido sordo del hacha, el primero, luego otra vez y una tercera: el sonido de la madera. Increíble, estaba horrorizado tres veces, tres cortadas y el triple de dolor, vi la cabeza de mi tío rebotando contra la paja y un chorro de sangre escarlata que salía de su cuello, extrañamente corto. El hombre con capucha negra apartó a un lado la enorme hacha, manchada de sangre, y alzó la cabeza sujetándola por el espeso cabello rizado, para que todos pudiéramos apreciar aquella cosa extraña parecida a una máscara: negra debido al antifaz y con los dientes al descubierto, en una última sonrisa desafiante, parecía la muertes en persona.

 

El rey se levantó del asiento con lentitud y pensé, infantilmente: «Dios mío, es tan guapo». No se mostraba sentimiento de culpa en su cara, se encontraba neutra como si no tuviera sentimientos y fuera una persona sin humanidad. Quería que mi tío muriera ante la corte para que todos reconocieran que sólo había un rey, y ése era Enrique. Sólo podía haber un rey, y ése era Enrique. Y nacería un hijo de ese rey. Muchos reyes han gobernado través de la de la violencia y el miedo, para que los las personas protestantes no se levanten y se unan para revocarlo, eh leído en libros que el miedo es la sensación más terrorífica que pueda existir, las personas se dejan contralar donde alguien superior a ellos les imponga y los aterroricen. Este tipo de sucesos se daban tan frecuentemente, el rey y a reina tenían mucha presión sobre ellos, al no tener un hijo barón, significaría no seguir a línea de sucesión de la familia, al no haber estos, los parientes cercanos de la familia real podrían reclamar el trono y destituir al rey y decapitarlo, al suceder esto podría haber una guerra civil por búsqueda del poder.

 

La corte volvió silenciosamente al palacio de Westminster en tres barcazas, remontando el río. Los hombres de las orillas se quitaron el sombrero y se arrodillaron mientras la barcaza real pasaba rápidamente, mirando de paso las banderas de la familia real y los lujosos carruajes. Yo iba en la segunda barcaza con las damas de la corte, la barcaza de la reina. Mi madre estaba sentada cerca. En uno de sus escasos momentos de interés por mí me echó un vistazo y dijo:

 

—Estáis muy pálido, George, ¿te encuentras mal?

 

—No pensé que sería ejecutado —contesté—. Creí que el rey lo perdonaría, tu sabes mama ellos fueron amigos desde pequeños, y al ver que aurita el rey le mando a cortar la cabeza es algo muy traumático.

 

Mi madre se inclinó hacia delante para que su boca estuviera junto a mi oreja y nadie pudiera oírnos, gracias a los crujidos de la embarcación y el batir del tambor de los remeros.

 

—Eres un necio —dijo bruscamente—Eres muy buena persona y muy ingenuo. Mira y aprende, George. En la corte no hay lugar para equivocaciones.

  

Notas finales:

Esperp sus reviews, publico cuando tengo por lo menos 5, lo siento chicas pero es necesario, al no tener reviews pienso que mi historia no les interesa nadie.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).